Stormwind por zandaleesol

Título: “Stormwind”


Pareja: Harry/Draco


Disclaimer: Los personajes de esta historia pertenecen a J.K. Rowling. Sólo los tomo prestados para divertirme y espero que también para entretener a los lectores, no percibo ningún beneficio económico por este trabajo.




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Sólo fueron un par de segundos, pero a Harry le parecieron siglos los que transcurrieron entre el instante en que él se retiraba bruscamente de Draco y Ron con el rostro visiblemente rojo apartaba la mirada.


——¿Weasley, nadie te ha explicado nunca que antes de entrar a un sitio debes golpear la puerta? ——preguntó Draco sin contemplaciones.


El tono rojo de las mejillas de Ron se acrecentó, Draco comprendió que no era vergüenza, sino rabia.


Harry decidió intervenir de inmediato.


——Por favor, Malfoy aquí no…


Draco comprendió que Harry quería evitar un enfrentamiento que terminara en escándalo, y tenía razón, no era el momento ni el lugar para desafiar a ese Weasley.


——Esta bien Potter, te dejo en compañía de tu amigo, supongo que tienen cosas importantes que decirse ——respondió Draco y, sorprendiendo al moreno se le acercó y le plantó un beso en la boca.


Harry se había quedado de piedra, no pudo reaccionar.


——Luego continuamos ——dijo el rubio guiñándole un ojo, se apartó y con porte altanero se dirigió hacia la puerta.


Ron se apartó para dejarlo pasar, brevemente se miraron con mutuo desprecio.


El silencio se prolongó por unos segundos tras la salida de Draco. El pelirrojo miraba a su amigo con horror y éste miraba la alfombra. Luego Harry se pasó la mano por el desordenado pelo y sin atreverse a mirar aún a Ron se sentó en su silla tras el escritorio.


Ron se quedó de pie en el mismo lugar, en ese momento experimentaba más incomprensión que cualquier otra cosa, después de todo la mayor sorpresa la había experimentado el día anterior, aunque Harry no lo sabía aún.


——¿No vas a decir nada? ——preguntó Ron por fin.

——¿Qué esperas que diga? ——dijo Harry sin mirar al pelirrojo.

——Podrías empezar por explicar desde cuándo te volviste un marica o es que siempre fuiste así y decidiste ocultarlo.


La palabra “marica” resonó en los oídos de Harry cargada de ese tono ofensivo que llevaba implícita. Aquel vocablo era el más utilizado para insultar a los gays, jamás en su vida hubiese creído que alguna vez sería dirigida hacia él por un amigo a quien consideraba casi un hermano.


——No te debo ninguna explicación ——respondió Harry secamente.

——¿No? Vaya, engañaste a mi hermana, a mi familia, a todos, ¿y no tienes nada que explicar?

——Yo no he engañado a nadie.

——Ginny descubrió lo que eres realmente y por eso te dejó.

——¿De qué estás hablando? ——preguntó Harry enfrentando por fin la mirada de Ron.

——Ginny no quiso aceptarlo cuando se lo pregunté, pero sé que por eso te dejó.


Harry no pudo evitar palidecer.


——No entiendo nada, por que no eres más claro.

——Anoche Hermione insistió en visitarte en el hospital, cuando abrimos la puerta de tu cuarto estabas besuqueándote con Malfoy.


Harry se quedó sin habla por unos segundos. Luego poco a poco comenzó a entender.


——Creo que voy comprendiendo, y ahora quieres saber si siempre me han gustado los hombres.

——Exacto.

——Pues no, nunca me gustaron los hombres.

——¿Y entonces por qué te besas con ese imbécil de Malfoy?

——No creo que puedas entenderlo, ¿para qué voy a explicártelo? Y te agradecería que no lo llamaras de ese modo en frente de mí.

——¿Para qué? Se supone que eres mi amigo.


Harry dejó escapar un suspiro, Ron tenía razón aunque hubiesen dejado de ser cuñados aún eran amigos, o por lo menos eso era lo que el moreno deseaba creer.


——Ron, nunca me interesaron los hombres, no me atraen los hombres. Imagino que para ti es difícil entenderlo, pero te juro que es la verdad.

——Entonces cómo es posible que estés en esas con Malfoy. Eres el esposo de Ginny.

——Era ——corrigió Harry ——. Ginny terminó nuestro matrimonio.

——Esta bien, ¿entonces por eso haces esto?

——No, te equivocas.

——¿Cómo que no Harry? Por favor acepta que estás haciendo esto porque estás afectado por que Ginny terminó contigo de un día para otro.

——No niego que me afectó lo de Ginny, pero lo que me sucedió con Malfoy no tiene nada que ver con mi rompimiento con ella.

——Por favor Harry… Quieres hacerme creer que despertaste un día y descubriste que te gustaban los hombres.

——Ron ya te lo dije, no me gustan los hombres. Me gusta Malfoy, no sé cómo ni porque, pero así sucedió, yo no lo busqué.

——¿Y no has pensado que tal vez Malfoy te hizo algo?

——¿De qué hablas Ron?

——Estoy seguro que hizo algo para que te enamorarás de él, Harry piensa con la cabeza, tú siempre lo odiaste, no es lógico que ahora mueras de amor por ese idiota.

——Ya basta Ron, él no hizo nada de lo que estás insinuando. Sólo estuvo ahí en el momento en que me sentía más sólo que nunca, ha sido mi apoyo.

——Harry no tienes porque buscar a Malfoy, soy tu amigo, tienes a Hermione.

——No entiendes que a veces eso no es suficiente. Yo los quiero porque son mis amigos, pero no me basta con la amistad de ustedes, me he sentido solo Ron, y no sólo desde que Ginny se marchó, me he sentido así desde mucho antes. Mi matrimonio con tu hermana ha estado mal desde hace mucho, no sé porque, pero así ha sido, nos fuimos alejando de a poco, no sé cuando empezó a ocurrir, Ginny tuvo el valor de aceptarlo antes que yo.


Ron guardó silencio no sabía que decir para derribar este argumento de Harry. Después de todo él sabía que el matrimonio de su hermana había enfrentado una gran dificultad, aunque Harry no lo recordara.


——Me siento bien con Malfoy, te aseguro que ahora es muy diferente al muchacho arrogante que era en Hogwarts.

——Lo siento Harry, no confió en él. Creo que se aprovechó del momento vulnerable que estás viviendo, lo de Ginny, la desaparición de Teddy, ese loco que está tras de ti ahora.

——Ron, han pasado casi siete años desde el fin de la guerra, es mucho tiempo, es inevitable que las personas cambien, tú y yo lo hemos hecho.


Ron quería argumentar algo más para intentar disuadir a su amigo, pero veía a Harry tan seguro de aquella locura. Harry no era un adolescente, aunque estuviese según su criterio actuando como tal. De todos modos él no iba a quedarse tranquilo, estaba seguro que Malfoy había hecho algo, no podía ser que Harry se hubiese enamorado así de la noche a la mañana, de seguro que alguna poción de amor estaba en medio de aquello.


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Harry decidió revisar el Archivo una vez más. Malfoy lo había hecho antes, pero él quiso intentarlo otra vez. Por supuesto que no se avocó sólo a los delincuentes que en esos dos años había atrapado él, decidió analizarlos a todos. Desde lo más insignificantes hasta los más peligrosos, incluyendo Mortífagos que estaban encerrados en Azkaban.


También le dio una mirada a los archivos antiguos, de Mortifagos muertos en la guerra. Bien podía tratarse todo aquello de una venganza, tal vez de algún pariente resentido, una viuda, un hijo, todo era posible. Sin querer se encontró con el archivo de Lucius Malfoy, aunque había sido liberado al igual que su hijo, se conservaban archivos donde se describían todas las actividades que había realizado como Mortífago.


De pronto la puerta de la oficina se abrió, era Draco quien entraba. Harry quiso ocultar la carpeta que llevaba el nombre de Lucius Malfoy, pero no lo hizo a tiempo y Draco se dio cuenta.


El rubio sintió algo extraño, no era enojo pues comprendía que su padre formara parte de ese archivo, sus delitos habían sido muchos y graves, sólo cuestiones de negociaciones y estrategias varias le habían librado de Azkaban.


——¿Intentando encontrar alguna pista? ——preguntó el rubio, fingiendo no darse cuenta de que Harry había ocultado la carpeta que llevaba el nombre de su padre.

——Eh sí… Es que como no tenemos nada ——respondió Harry.

——¿Piensas que es cosa de un Mortífago cierto?

——La verdad ya no sé ni que pensar.

——Sería muy estúpido si así fuera ——dijo el muchacho rubio más para sí mismo que para Harry.

——No creo que sea estúpido, él que ha hecho esto lo planeó muy bien ——respondió Harry.


Draco lo miró extrañamente, pero luego se percató de que en realidad él había dicho aquello refiriéndose específicamente a su padre, pero Harry no lo había comprendido.


——No, es cierto tienes razón, esto es cosa de alguien inteligente, no estaríamos sin ni una pista si hubiese cometido un error ——agregó Draco.


Se formó un silencio en el que Draco observó atentamente a Harry, mientras éste seguía revisando otros archivos.


——¿Estás bien? ——preguntó el rubio de pronto.


Harry levantó la vista, comprendiendo por que Draco le hacía esa pregunta.


——Supongo que lo preguntas por lo de Ron.


El rubio asintió.


——Sí, a pesar de que él no comprende y tal vez nunca lo haga. Dijo que Hermione y él nos vieron… Me visitaron el sábado por la noche.

——Lo sabía.


Harry lo miró asombrado.


——¿Y cómo supiste?

——Después que dejé tu habitación me encontré a Weasley en el vestíbulo del hospital, esperándome.

——¿Hablaste con él?

——Él quiso hablar conmigo para reclamarme, por lo que había visto.

——Claro, pero que idiota soy, cómo no lo entendí antes. Me dijo que le había preguntado a Ginny si sabía que yo era gay y si ese era el motivo por el cual me había dejado.

——¿Qué harás?

——¿A qué te refieres?

——Hablo de Weasley, de tu ex esposa, ¿qué les dirás sobre lo que hay entre los dos?

——No creo que tenga que hacer nada, ya lo saben que más da.

——¿Eso le respondiste a Weasley?

——Ron cree que estoy resentido tras el abandono de Ginny, es difícil para él comprender, hasta llegó a decir que tal vez me habías hechizado con una poción.

——¡Tan imbécil como siempre!

——Por favor Malfoy, es mi amigo, respétalo.

——Claro Potter, tu amigo merece ser respetado, pero yo no, él puede decir de mí lo que se le de la gana ——le espetó Draco enojado.


Draco sabía que ese Weasley provocaría problemas entre ellos. No quería reconocerlo del todo, pero sentía que Harry le daba más importancia a su amigo que a él, se levantó bruscamente de la silla.


——Voy a la oficina ——dijo el rubio con sequedad.

——Espera ——dijo Harry poniéndose de pie también, pero Draco no se detuvo.


Harry rodeó la mesa y lo tomó del brazo para detenerlo.


——Espera, no te enojes.

——Déjame Potter.

——No ——dijo Harry mientras lo empujaba hacia el muro y luego deslizaba sus manos hacia las caderas del rubio.

——Potter ya basta, no quiero…

——Claro que quieres ——susurró Harry mientras comenzaba a besarle el cuello.

——Ya basta… dije que no… aaahhh…


Harry acababa de posar su mano sobre el miembro de Draco.


——Mentiroso, quieres, claro que quieres ——susurró Harry para luego morder el lóbulo de la oreja del muchacho rubio, que sin poder contenerse más tomó a Harry por el l trasero para apegarlo más a su entrepierna.

——Potter no deberíamos hacer esto aquí ——dijo Draco con voz entrecortada, pero sin dejar de amasar el trasero del moreno y restregar su erección sobre la de Harry que estaba tan dura como la suya ——, cualquiera podría entrar de un momento a otro.

——Ya lo sé, pero te deseo tanto que no puedo detenerme…


Sin embargo, pese a sus palabras sí se detuvo, escuchó una voz media chillona que preguntaba por él en el pasillo, luego los pasos precipitados que se acercaban. Alguien abriría la puerta en los próximos segundos.


**********


Cuando Brandon abrió la puerta de la sala de archivos, vio a Harry sentado en una silla delante de un montón de carpetas, tenía el rostro levemente rojo, a unos pasos de él su compañero Malfoy le daba la espalda y parecía ensimismado en la lectura de un archivo.


Harry levantó la vista y miró interrogante al muchacho, tenía el rostro levemente rosado.


——¡Harry! El jefe te llama…

——¿Qué sucede Brandon?

——Lo encontraron Harry…


El moreno se levantó de golpe, su rostro palideció, mientras Draco se volvía con brusquedad.


——Teddy apareció Harry, apareció hace unos minutos en la casa de la familia Weasley… Se encuentra bien.


Harry miró a Draco impactado por un segundo, luego se precipitó hacia la puerta mientras Brandon se hacía a un lado para dejarlo pasar, Draco salió tras él.


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Harry apenas tardó unos minutos llegar hasta la Madriguera, estaba tembloroso. Temía que al llegar ahí le dijesen que se habían equivocado, que todo eso sólo había sido un error, una broma. Cruzó el patio como una exhalación, tan rápido que Draco apenas podía seguirle el paso, de pronto el rubio aminoró la marcha justo cuando llegaban a la puerta de la cocina, Harry pese a su euforia no dejó de notarlo y se volteó.


——¿Vas a quedarte ahí?

——Sí, creo que es mejor que entres tú solo.

——Eres mi compañero y entras conmigo ——respondió Harry con un tono autoritario que no era propio en él.

——No quiero que haya problemas con Weasley.


Harry comprendía, y hasta aceptaba que era una actitud prudente por parte de Draco, pero lo cierto era que no soportaba la idea de dejarlo parado ahí afuera, significaba excluirlo de algo demasiado importante para él, no lo haría, aunque fuese más sensato hacerlo, quizá ya todos estaban enterados de lo que había entre ellos, pero no le importó.


Se acercó a Draco y le tomó la mano.


——Te necesito a mi lado… Siempre.


Se miraron intensamente a los ojos por un breve segundo. Draco asintió y caminó tras el moreno con una sensación de orgullo en el pecho. Se recriminó por pensar durante esa mañana que él no era más importante para Harry que Weasley, lo era, aunque no lo gritara a los cuatro vientos, al pedirle que entrara con él, Harry les estaría diciendo a todos que lo consideraba importante.


Entraron por la puerta de la cocina y Harry de inmediato se dirigió a la sala, oía murmullos ahí. Al entrar sus ojos de inmediato se fijaron en la mujer que estaba sentada en el sofá favorito de Arthur con un pequeño en los brazos, Teddy tenía el pelo color azul en ese momento. Harry sintió que el corazón se le apretaba.


Andrómeda reparó en su presencia antes que todos y le miró con ojos emocionados.


——Harry, nuestro pequeño está de regreso ——dijo la mujer con los ojos inundados de lágrimas.


Recién los demás se voltearon a mirar a Harry, que se acercó lentamente y se arrodilló junto a Andrómeda, le puso la mano en el hombro a modo de consuelo, luego miró al pequeño Teddy. Su ahijado dormía con la misma expresión angelical que Harry le conocía, cogió la mano del pequeño y la besó con infinita ternura.


Draco al ver aquel gesto sintió que su corazón se derretía de amor por Harry aunque no entendía por qué.


Entre las personas presentes estaban el jefe Larkin, Kingsley, todos los hermanos Weasley, también estaba Ginny que no apartaba su mirada de Harry.


Ron por su parte fijó su vista en Draco de manera insistente, el rubio se percató de aquello, sin embargo no le devolvió la mirada.


El jefe Larkin se sintió emocionado por Harry, había recuperado a su ahijado. Le sugirió a Kingsley y a Draco que salieran al patio, le parecía que el momento era demasiado íntimo como para quedarse.


Ninguno de los demás Weasley se movió. Harry de pronto se volteó y notó la ausencia de Draco y los demás, sus ojos se encontraron con los de su amigo; Ron le miraba con enojo, inevitablemente sus ojos se desviaron hacia Ginny, la muchacha a diferencia de su hermano no mostraba emoción alguna, algo extraño en ella que siempre había sido espontánea, por primera vez aquellos ojos castaños fueron insondables para Harry que finalmente retiró la mirada.


Harry se apartó del lado de Andrómeda y miró a la familia de pelirrojos.


——¿Cómo fue que Teddy apareció aquí, ¿alguien vio algo? ——preguntó Harry a nadie en particular.

——Fue Ginny quien lo encontró ——respondió Molly.


Harry miró a la muchacha.


——¿Dónde lo encontraste Ginny, viste algo extraño?

——Sí, desde la ventana me pareció ver algo en el huerto de las calabazas y fui hasta allí, creí ver que una persona que se movía con sigilo, me pareció extraño y decidí investigar. Pero cuando llegué ahí no había nada, la figura había desaparecido, pero aún así decidí mirar un poco más y entonces vi un bulto, me asuste mucho, saqué mi varita para descubrirlo y entonces vi que era Teddy, estaba dormido.


Harry asintió con la cabeza y se volvió a mirar a Andrómeda.


——Hay que llevarlo a San Mungo para asegurarnos de que realmente está bien.

——Sí, sí tienes razón Harry, aparentemente sólo duerme, pero creo que es mejor asegurarse. En realidad sólo comprobaremos su estado cuando haya despertado ——dijo la mujer mirando con preocupación el rostro de su nieto.

——Yo te acompañaré querida ——dijo Molly.

——Yo también puedo ir mamá ——ofreció Ginny.

——Ron, acompaña a tu madre y hermana ——terció Arthur.


El pelirrojo asintió en silencio. Luego Ginny se apresuró a lanzar polvos flu en la chimenea, las llamas verdes crepitaron con fuerza.


La primera en entrar fue Andrómeda cargando al pequeño Teddy.


Harry se acercó un poco más a la chimenea.


——Hablaré con el jefe Larkin y después iré a San Mungo ——le dijo Harry a la mujer.

——Gracias Harry, cuando Teddy despierte estará feliz de verte.


Harry vio luego desfilar tras Andrómeda a Molly, Ginny y por ultimo a Ron, éste último le dirigió una mirada resentida antes de girar entre las llamas.


Arthur, Bill y George se habían quedado mirando hacia la chimenea y se percataron de la mirada que le había dado Ron a Harry.


——Harry, ¿estás bien? ——preguntó Arthur ——. Hace días que tenía ganas de hablar contigo, pero con esto del pequeño Teddy me pareció inoportuno.

——No se preocupe señor Weasley, yo estoy perfectamente.

——Estamos preocupados por ti Harry ——repuso Bill.

——¿Por qué? ——preguntó Harry algo incomodo.

——Bueno por lo que hizo Ginny ——se adelantó a responder Arthur ——. No entiendo que le sucede a esa muchacha… Pero estoy seguro que ella recapacitara Harry.


Aunque Harry sabía que el momento no era apropiado para hablar de ese asunto no iba a permitir que su ex suegro y ex cuñados pensaran que las cosas iban a componerse entre Ginny y él. Por las palabras de ellos deducía que Ron no les había dicho nada de la relación que él había comenzado con Draco.


——Señor Weasley, lamento decirle que entre Ginny y yo todo ha terminado en forma definitiva, ella me dejó en libertad.

——Sí Harry, sabemos de la locura de esa niña ——dijo Arthur ——, pero yo sé que tú aún la amas y confió en que le darás una nueva oportunidad.

——Lo siento señor Weasley, pero eso es imposible.

——No puedes hablar en serio Harry, estás molesto y no es para menos, pero cuando lo pienses mejor…

——No hay nada que pensar ——le cortó Harry abruptamente ——, siento ser así de claro, pero no quiero que se hagan ilusiones pensando que lo mío con Ginny tiene arreglo, no sucederá, se acabó definitivamente.

——Harry estás herido y no es para menos ——repuso Bill con tono conciliador ——, pero todos sabemos lo mucho que amas a Ginny.

——Quise mucho a Ginny, aún siento afecto por ella, siempre lo sentiré porque ella fue muy especial para mí, compartimos muchas cosas, fueron muchos años… Pero el amor se acabó por parte de ambos, ella lo aceptó primero y por eso me dejó, yo… Tardé un poco más en comprenderlo.


Arthur y sus dos hijos se quedaron mirando a Harry con tristeza y algo de asombro, jamás esperaron oírle hablar de ese modo.


——Lo siento ——dijo Harry al ver los rostros decepcionados de los tres que tenía delante ——. Disculpen debo hablar con mi jefe.


Tras esas palabras Harry salió de la sala



**********


Harry llegó al patio donde se reunían su jefe, Draco y el Ministro.


——Andrómeda ha llevado al pequeño Teddy a San Mungo, me pareció oportuno, para estar seguros de que ese loco no le hizo daño en realidad ——anunció Harry.

——Muy acertado ——respondió Kingsley ——. Yo iré a hablar de inmediato con el Ministro de los muggles, para que se detenga la intervención de la policía.

——Yo volveré a la oficina ——repuso Larkin, luego miró a Harry ——. Potter, esto aún no termina supongo que lo sabe.

——Claro que lo sé jefe, no terminará mientras no agarré a ese loco.

——Potter ya se lo dije antes, comprendo sus sentimientos ya que ha sido el principal afectado, pero esto es trabajo de toda la oficina de Aurors, no es sólo responsabilidad suya.


Harry sólo asintió. Larkin continúo.


——El Ministro está de acuerdo conmigo en que debemos darle protección especial a todas la personas que tienen algún vínculo afectivo con usted.


Harry no pudo evitar darle una fugaz mirada al rubio.


——Se lo agradezco jefe, me sentiré más tranquilo.


——No me agradezca, no se puede hacer otra cosa.


Tras esas palabras Larkin junto con Kingsley se alejaron hacia la salida de la Madriguera.


Cuando los vio desaparecer Harry miró otra vez a Draco.


——De tu protección me encargaré personalmente ——dijo Harry.


Draco alzó una ceja con aire arrogante.


——Soy un Auror y muy bien entrado por cierto, así que no necesito que me cuides como si fuese un crío.

——Me moriré si te sucede algo ——fue la respuesta de Harry.

——No te morirás, porque no me sucederá nada malo.

——Ya te lo dije, ese loco sabe lo significas para mí.


Draco dejó su aire arrogante y miró a Harry con ternura.


——No me sucederá nada malo, tengo al héroe del mundo mágico para que me cuide.

——¿Me dejarás que te proteja entonces?

——No creo tener más opciones. Por cierto, me encantaría que fueses esta noche a protegerme.


Harry sonrió con malicia.


——Será un placer ——respondió Harry, luego agregó ——, ¿me acompañas a San Mungo? Voy a ver a Teddy.

——Claro.

——Estarán Ginny y Ron ——advirtió el moreno.

——No me preocupa para nada, pero no quiero que tengas problemas.

——Ron sabe lo nuestro y se lo dijo a Ginny, es mejor así, deberán acostumbrarse a verme contigo.


Después de estas palabras cruzaron en silencio el patio, al llegar al límite desaparecieron.