No puedes comprar mi amor por zandaleesol

Título: “No puedes comprar mi amor”


Personajes: Harry Potter/Draco Malfoy


Disclaimers: Los personajes no me pertenecen, son de propiedad de J.K. Rowling, sólo los tomo prestados para divertirme con ellos, no percibo ningún beneficio económico.


Advertencia: Post Deathly Hallows, sin Epílogo. Esta historia comienza a desarrollarse justo cuando faltan dos días para el primer aniversario del enfrentamiento final entre Harry y Voldemort.


Capítulo 12. Los Preparativos Secretos


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Harry en la mañana por más que lo intentó le resultó imposible dejar la cama para ir a desayunar con la familia Weasley. Su conversación con Malfoy había terminado pasada las dos de la madrugada, luego de eso y aunque estaba rendido de cansancio se había quedado hablando con Ron para explicarle en detalle lo que había resultado de esa entrevista con el rubio.


Ron dormía también pese a las muchas veces que vino Hermione a decirle que se levantara, el pelirrojo se negó en rotundo y finalmente la chica desistió. Era pasado el mediodía y Harry sabía que tenía poco tiempo para hacer todos los preparativos de esa boda, que aunque se tratara de una boda tan extraña por lo menos sabía que debían cumplirse ciertos ritos, a lo menos los legales. Tenía que ir en busca del hombre que había conocido en el Valle de Godric, y cómo no disponía de mucho tiempo debía hacerlo ese mismo día. Sacando ánimos de donde no los tenía finalmente se levantó.


Salió del cuarto vistiendo aún pijama, tomaría una ducha de agua fría, esa era la única forma de espantar el cansancio y el sueño que sentía. Con algo de envidia pensó en Ron que podía aún darse el lujo de dormir todo el día si le daba la gana.


*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~


——¿Harry qué harás hoy? ——esa fue la primera pregunta que hizo Ron cuando Harry regresó de tomar una ducha.

——Voy al Valle de Godric.

——¿Quieres que vaya contigo?


Harry sonrió.


——¿Serás el padrino de mi boda con Malfoy? ——preguntó el moreno con una sonrisa más bien triste.


El pelirrojo sintió algo de pena por su amigo, pero no lo demostró por supuesto, Harry no le gustaban las demostraciones de compasión.


——Sí quieres, creo que no hay nadie más disponible.

——Estaba bromeando Ron ——respondió Harry y luego dejó escapar un suspiro de resignación.

——Yo lo digo en serio.

——Sabes, nunca pensé en mi boda como algo tan cercano, pero por supuesto que siempre soñé con la idea de enamorarme, casarme y ser feliz para siempre como en el cuento de “La Cenicienta”.

——¿El cuento de la quién? ¿Cenicienta dijiste?


Harry volvió a reír.


——Es un cuento muggle… Cenicienta es una muchacha lastimada por su madrastra y hermanas, la tratan como una sirvienta, siempre estaba cubierta de cenizas por eso le llaman Cenicienta. Un día llega una invitación para que ellas asistan al baile del príncipe, Cenicienta por supuesto que no puede ir, se queda llorando al ver partir a sus hermanastras, entonces llega su Hada madrina y la convierte en una hermosa princesa y ella también asiste al baile, y ahí conoce al príncipe, éste baila con ella y se enamora enseguida, pero ella debe huir del baile pues ha olvidado que antes que el reloj de la tercera campanada de las doce el hechizo de su Hada madrina se romperá y ella volverá a ser sólo Cenicienta… en su huida pierde un zapato de cristal que recoge el príncipe…

——Es una historia triste ——interrumpió Ron.

——La verdad es que no, al final Cenicienta es encontrada por el príncipe al que ella también ama, ya sabes el final… Y fueron felices para siempre.

——¿Podría ser que Malfoy sea como el príncipe de ese cuento? ——preguntó Ron.


Harry miró a Ron por un segundo.


——¿Estás bromeando cierto? ——preguntó Harry.

——Por supuesto que bromeo, ¿Malfoy un príncipe? Creo que ni en mil años, es un cretino.

——Y presumido además, aunque está arruinado no deja de sentirse como si fuese lo más extraordinario del mundo.

——¡Demonios Harry! Por qué tuviste que oír esa conversación de Umbridge con Lucius Malfoy. Si no te hubieses enterado de nada ahora estarías pensando sólo en disfrutar la vida que mereces.

——Bueno eso prueba que soy un perfecto idiota ——respondió Harry.

——Aún no es demasiado tarde para que desistas Harry.

——No puedo hacerlo Ron y lo sabes, ya se lo propuse a Malfoy y él me aceptó. No puedo permitir que Umbridge triunfe.


Ron guardó silencio, comprendía demasiado bien ese sentido del deber que tenía Harry, sólo esperaba que esta fuese la última vez que su amigo se olvidaba de sí mismo para pensar en el “bien de todos”.


*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*


Cuando Ron y Harry bajaron de la habitación aún sus rostros evidenciaban que las horas de sueño no habían sido lo suficientemente reparadoras, estaban pálidos y tenían evidentes ojeras.


Molly que desde hacía rato preparaba el almuerzo los reprendió por no levantarse a desayunar, pese a eso de todos modos les sirvió un abundante desayuno que los dos muchachos devoraron felices.


Ron anunció a su madre que ese día iría con Harry al Valle de Godric, para ayudarle con algunos pendientes que tenía con la casa de sus padres que estaba en proceso de reconstrucción.


Molly aunque no dijo nada, de nuevo tuvo el pensamiento de que esos dos estaban en algo extraño.


Harry cargó con una mochila que contenía algunas cosas que estaba seguro que iba a necesitar y después de despedirse de Molly abandonaron la Madriguera asegurando que regresarían para la hora de la cena.


*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~


Harry ya se había habituado mucho más al paisaje del pequeño pueblo que en que habían vivido sus padres. La primera vez le resultó muy doloroso, pero luego de pasar varios días ahí durante ese verano se sentía más agradado, como sí realmente perteneciera a ese lugar, después de todo ahí hubiese crecido con sus padres si no se hubiese cruzado en su vida Voldemort.


Y era ese el lugar donde pretendía vivir. Lo había planeado antes de salir de Hogwarts, claro que las cosas habían tenido un extraño vuelco, jamás había pasado por su mente que se casaría tan pronto, había creído que viviría ahí como un joven soltero. Sin embargo, dentro de pocas horas, si sus planes resultaban estaría casado y lógicamente debía compartir la casa con el que sería su esposo, Draco Malfoy.


Harry dirigió sus pasos hacia el cementerio donde estaban las tumbas de sus padres y también la de la familia del director de Hogwarts, dejaría una ofrenda como lo había hecho en las ocasiones anteriores. Ron lo siguió bastante conmovido e impresionado de encontrarse por vez primera frente a la tumba de los padres de Harry. Le pareció al pelirrojo que por fin ellos eran reales, siempre había tenido una imagen un poco vaga de los padres de su amigo, ahora los sentía más cercanos con esa convicción de que ellos realmente habían existido.


Luego de salir del cementerio Harry caminó con su amigo hasta la calle donde estaba ubicada su casa. Ron quedó muy asombrado de ver que la propiedad tenía un aspecto bastante bonito, imaginó que eso se debía al trabajo que había realizado Harry.


——Se ve muy bien Harry, has hecho un buen trabajo ——comentó el pelirrojo.

——Sí, ahora está mucho mejor, arreglé el jardín, la maleza estaba muy crecida.

——¿Qué más te queda por hacer para que esté habitable?

——La verdad la mayor parte ya está arreglada, tenía un gran orificio en el techo y eso fue lo primero que le repararon.

——Pensé que lo habías hecho tú mismo.

——No, me temo que no soy tan hábil con esos hechizos vino un hombre que se dedica a hacer esas cosas, me quedé asombrado al saber que la gente del pueblo está feliz de que yo reconstruya la casa y quiera vivir en ella.

——Provoca algo muy especial estar aquí, es un poco raro pensar que en este lugar vas a vivir con Malfoy.

——Hay momentos en que pienso que tal vez no debería traer aquí a Malfoy. Él recibió la marca de Voldemort.

——Bueno aunque él no me agrada, no creo que debas verlo de ese modo, es un idiota eso nadie lo niega, pero realmente creo que lo pasó bastante mal siendo Mortífago, sobretodo ese año que falló una y otra vez en su intento por asesinar a Dumbledore.


Harry se quedó pensativo, tal vez su amigo tenía razón y por otra parte él ya le había hablado al rubio de aquella casa, si ahora cambiaba de idea de seguro que Malfoy pensaría que era por su causa. Además en qué otro sitio podían vivir, por nada del mundo iba a vivir en la mansión Malfoy, ese lugar le enfermaba, si por él hubiese sido la haría derrumbar; Voldemort había torturado y matado gente en aquella casa, además había tenido encerrado a Olivander por más de un año y también a la pobre Luna. Sólo alguien como Lucius podía sentirse a gusto viviendo en aquel sitio que había sido habitado por Voldemort, estaba seguro que su esposa no era muy feliz de seguir residiendo ese sitio.


Ron se sintió extraño, pero también fascinado por la casa donde había vivido su amigo, aunque fuese por tan poco tiempo. Por primera vez comenzaba a sentir ese pasado de Harry como algo más tangible, sobretodo después de estar en el cementerio.


A continuación de recorrer la casa y ayudarle a Harry a poner un poco de orden. Ron sintió hambre pese que antes de salir de la Madriguera había tomado un contundente desayuno. Por eso se alegró mucho cuando Harry lo invitó a una pequeña cafetería que había en la parte más central del pueblo. En el local llamaron de inmediato la atención pues les reconocieron como forasteros, la mayoría de la gente del lugar se conocía entre sí. Sin embargo Harry hizo todo lo posible por mantener bien oculta la cicatriz con forma de rayo, su historia era demasiado conocida en el pueblo y no quería comenzar a llamar la atención antes de instalarse ahí.


Después de terminar el almuerzo los dos muchachos se fueron en busca del hombre que Harry había conocido y que le pondría en contacto con la persona del Ministerio que tenía licencia para hacer bodas. Cuando estuvo frente a la casa de aquella persona sintió un repentino pánico, era extraño porque sabía que nada en el mundo le haría desistir de la decisión que había tomado, sin embargo no podía evitar esa sensación de angustia al saber que su destino quedaría ligado por toda la vida al de Draco Malfoy.


Jared Tyler era un hombre bastante amable y recibió a Harry con franca alegría. Eso sí no dejó resultarles algo extraño a Ron y a él estar sentado en la sala de la casa del hombre y con la esposa de éste mirándoles con franca curiosidad.


——Mi esposa está fascinada de saber que vivirás en el pueblo Harry ——dijo el hombre con una sonrisa ——. Me siento realmente honrado de que me hayas buscado para restaurar la casa de tus padres

——Es cierto Harry ——dijo la señora Tyler con tono cálido ——, me puso muy feliz saber que le habías pedido a mi esposo que te ayudara en esta tarea.

——Soy yo quien agradece la ayuda señora, realmente no soy muy hábil en este tipo de materias ——respondió Harry.

——Nadie podría criticarte por eso querido, no después de lo que has hecho ——repuso la mujer mirando con dulzura al chico, luego agregó ——, tu novio es un muchacho muy afortunado, no cabe duda que hacen una bellísima pareja.


Ron arrugó el ceño y miró medio preocupado a Harry, tal parecía que la señora Tyler pensaba que él era novio de Harry.


——Ron no es mi novio, es mi amigo ——dijo Harry con una sonrisa.

——Oh lo siento… Realmente pensé… Jared me dijo que te casarías por eso creía… Oh lo lamento ——dijo la mujer algo abochornada.

——No se preocupe señora ——respondió Ron algo incómodo.

——Ron es mi mejor amigo, nos conocimos en la escuela ——agregó Harry.

——Creíamos que tu prometido querría venir a ver como estaba quedando la casa ——dijo Jared Tyler ——, por eso supusimos que era él.

——No la verdad el no pudo, pero como la boda se hará pronto no tardará mucho en venir ——dijo Harry.

——Estaremos encantados de que nos lo presentes Harry ——respondió la señora Tyler.

——Sí, lo conocerán pronto, nos casaremos aquí ——declaró el muchacho de ojos verdes.

——¿De verdad? Pero eso es maravilloso ——dijo con entusiasmo la señora ——. Si me lo permites Harry, me encantaría ayudar con la decoración para la boda, soy muy buena con ese tipo de cosas.


Harry y Ron intercambiaron una mirada.


——Eh bueno… Yo le agradezco señora Tyler, pero la verdad es que no planeo ninguna celebración, sólo la ceremonia y ya ——dijo Harry.


La mujer miró a su esposo y este le devolvió una mirada de extrañeza.


——¿Y eso por qué Harry? ——preguntó esta vez Jared Tyler.

——Harry no quiere llamar la atención ——se adelantó a responder Ron.


Harry se limitó a asentir.


——Pero será la única vez que te cases Harry ——repuso la señora Tyler ——. ¿A caso no deseas guardar un bello recuerdo de una ocasión tan maravillosa?


Harry sintió algo de tristeza, sin duda que el día de su boda le hubiese gustado que fuera el más hermoso recuerdo de su vida, pero era imposible. No se casaba amando a Malfoy, más bien hacía un sacrificio al unirse al rubio y debería hacerlo a escondidas además.


——La verdad de las cosas es que Harry se casa en contra de la voluntad de los padres de su prometido ——declaró Ron de golpe.


Harry volvió el rostro hacia su amigo con algo de sorpresa, pero luego de ver la mirada de Ron, comprendió.


——Es cierto ——concedió Harry ——, los padres de mi prometido ni siquiera saben que planeamos casarnos.


Los esposos Tyler intercambiaron una mirada de asombro.

——Ah bueno Harry, eso es… Bueno un poco fuera de lo común ——dijo la mujer.


La señora Tyler moría de curiosidad de saber porque se casaban con tanto secreto y se preguntó quién sería el prometido del muchacho que era héroe del mundo mágico.


——La intención de Harry es no llamar la atención sobre este hecho, tiene derecho a tener un poco de privacidad en su vida ——repuso Ron.

——Y tiene toda la razón del mundo ——concordó Jared ——Bueno Harry, y supongo que por tal motivo has venido a verme, deseas que te contacte con mi amigo del Ministerio que tiene licencia para hacer bodas.

——La verdad es que sí, ese es mi deseo señor Tyler.

——No tienes nada de que preocuparte Harry, mi amigo vive aquí mismo en el pueblo y te prometo que se hará todo con la mayor discreción, me encargaré de eso ——dijo Jared.

——No sabe cuan agradecido le estaré ——respondió Harry sonriente.

——¿Cuándo planean realizar la boda? ——preguntó el hombre.

——Mañana ——respondió Harry.


Jared Tyler le miró con algo más que sorpresa.


——¿Mañana?

——Eh sí… Espero que no sea un inconveniente para su amigo ——dijo el muchacho de ojos verdes.

——Vaya, bueno la verdad no creo ——dijo mientras miraba a su esposa que estaba boquiabierta ——. Hablaré con él hoy mismo.

——Muchas gracias ——respondió Harry.

——Supongo que deberé enviarte una lechuza para que sepas la hora… De la boda ——dijo el hombre con tono algo confuso.

——¿Ya tienes a tus padrinos de boda Harry? ——preguntó de pronto la señora Tyler.


Harry la miró con sorpresa, no había pensado en tal detalle, pero Ron se encargó de responder por él.


——Sí, ya los tiene, mi novia y yo seremos sus padrinos.


Harry miró con agradecimiento a su amigo, le alegró saber que los tendría a su lado en ese día especialmente difícil.

——Eso es genial ——dijo la señora.


Harry de pronto pensó en Draco, también necesitaría unos padrinos y esos naturalmente no podrían ser sus propios padres.


——Señor y señora Tyler, me gustaría pedirles un favor muy especial ——dijo Harry.

——Por supuesto Harry, estaremos felices de ayudarte en todo lo que necesites ——se adelantó a responder la señora Tyler.

——¿Sería posible que usted y el señor Tyler fuesen los padrinos de mi prometido?


Los esposos sonrieron con franca alegría.


——Será un verdadero honor para nosotros Harry ——respondió Jared, mientras su esposa asentía con animación.


*~*~*~*~*~*~*~*~*~*


Harry quiso pasar por la casa de sus padres antes de dejar pueblo esa tarde. Estando frente a la casa una vez más, se instaló en su estómago una extraña sensación al pensar que al día siguiente estaría casándose en la misma cada donde había sobrevivido a la maldición Imperdonable.


Ron en un gesto algo torpe, pero que Harry comprendió como señal de apoyo, puso la mano en el hombro de su amigo.


——Animo amigo, estoy seguro que la vida te compensará este sacrificio.


Harry asintió con poco entusiasmo. Se preguntó de qué manera podía ser compensado cuando estaba atando su vida a alguien a quien no amaba y jamás amaría. Draco Malfoy de ningún modo cumplía con las características que tenía el ideal de amor con el que había soñado encontrar en su vida. Era un muchacho presumido, arrogante, totalmente insensible pensó Harry, pero luego se corrigió, Malfoy no era del todo insensible, había aceptado esa boda atendiendo los ruegos de su madre, al menos eso era una muestra de que era capaz de amar. En todo caso pensó Harry que hubiese sido el colmo que no sintiera amor por la mujer que le había dado la vida.


——¿Ron por qué no pasamos por Hogsmeade antes de ir a la Madriguera? ——propuso Harry de pronto.

——¿Hogsmeade? Claro, si tienes algo que comprar…

——No Ron, no necesito comprar nada, necesito unos cuantos Whisky de Fuego.

Ron en el primer momento le miró con extrañeza, pero enseguida comprendió.


——Claro Harry, ¿por qué no? Después de todo somos mayores de edad, y creo que la ocasión amerita unos buenos tragos ——respondió el pelirrojo.


Luego de unos segundos de mirar la casa, los dos chicos desaparecieron.


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Como sucedía siempre la presencia de Harry en Hogsmeade despertaba interés. Al entrar a la taberna “Las Tres Escobas” fue saludado con alegría por toda la gente que estaba en el lugar a esa hora.


Luego de verse liberado de toda la gente que por supuesto con la mejor intención del mundo se acercaba a los dos muchachos, éstos pudieron ocupar una mesa. Madame Rosmerta acudió solicita a ofrecerles unas cervezas de mantequilla que sabía eran las favoritas de los chicos desde la época en que estudiaban en Hogwarts. Por eso quedó muy sorprendida cuando Harry pidió Whisky de Fuego, sin embargo, les sonrió, ya no eran unos niños habían terminado la escuela.


El Whisky de Fuego fue la excusa perfecta para que el ánimo de Harry mejorara. Ron a diferencia de su amigo bebió sólo cerveza de mantequilla, había comprendido la necesidad que tenía Harry de beber para olvidarse un poco de su aflicción por un rato, pero él debía estar muy sobrio por si era necesario socorrer a su amigo. Pero no fue necesario, Harry se sintió contento, pero no hizo tonterías y Ron se alegró por ello, no se vería bien que el héroe del mundo mágico se emborrachara.


Pronto oscurecería por lo que Ron sugirió que regresaran a la Madriguera. Pero Harry quiso ir hasta Hogwarts, quería agradecerle a la profesora McGonagall la ayuda que le había prestado al facilitarle una botella con Veritaserum.


Hogwarts era un remanso de paz por aquellos días, faltando aún tres semanas para el inicio del nuevo curso. La profesora los recibió sorprendida y alegre, de inmediato notó que Harry estaba algo eufórico, cosa que le pareció extraña, conocía bastante bien al muchacho como para sospechar que algo raro le sucedía, sin embargo no hizo ninguna pregunta indiscreta una vez que tuvo a sus dos ex alumnos sentados en su despacho.


——Profesora McGonagall quería aprovechar de darle las gracias, me ayudó mucho el Veritaserum, utilicé muy poco y quería aprovechar de regresárselo, no creo que vuelva a necesitarlo otra vez ——dijo Harry depositando el pequeño frasco sobre el escritorio.

——Me alegro que te haya servido. El profesor Slughorn estará feliz, como sabes es una poción que da mucho trabajo prepararla, además que su uso es restringido.

——Por lo mismo se la regreso, no hay razón para quedarme con ella ——respondió Harry.

——Perdón Potter, no quiero parecer entrometida, pero te noto algo extraño ——dijo la profesora mirando al muchacho con ojos escrutadores.


Harry dio un suspiro. Pensó que después de la ayuda que le había dado la profesora sería bueno que supiera la verdad.


——Profesora mañana me caso ——declaró Harry.


La profesora le miró incrédula, luego miró a Ron.


——Potter ya me di cuenta de que has estado bebiendo Whisky de fuego.

——Es verdad lo que dice Harry, profesora ——intervino Ron.

——¿Casarte Potter? Me parece que eres demasiado joven para eso.

——Debo hacerlo profesora ——dijo Harry.


La profesora miró a Ron extrañada.


——No es con mi hermana ——dijo el pelirrojo.

——Ustedes dos están bromeando.

——Me caso mañana con Draco Malfoy.


La profesora miró a Harry con algo indefinible en la mirada.


——No puedes estar hablando en serio Potter.

——Muy en serio profesora.

——Ah ya veo y has venido a invitarme a la boda.


Harry se quedó sorprendido, ya no sabía si ella realmente le creía o se burlaba de él.


——Bueno me encantaría poder invitarla, pero me temo que debe mantenerse en secreto, porque Malfoy está comprometido con otro.


La profesora dejó la taza de té sobre el escritorio, comenzaba sospechar que aquello no era una broma de Harry.


——Potter, francamente no entiendo nada, lo que dices me suena como broma, pero me temo que no lo es, explícame por favor.

——Draco Malfoy debería casarse en tres semanas con el hermano de Dolores Umbridge.


El rostro de Minerva McGonagall cambió al instante al oír ese nombre.


——¿Malfoy casado con el hermano de esa mujer?


Harry asintió.


——Pero has dicho que te casas con él mañana.

——Así es y nadie lo sabe, bueno Ron y Hermione… Y ahora también usted.

——Potter, no entiendo.

——Profesora, no puedo permitir que Malfoy se case con el hermano de esa mujer.

——¿Quieres vengarte de ella Harry? ——preguntó la profesora consternada.

——No es por eso, se lo juro.

——¿Entonces estás enamorado de Malfoy?

——No, tampoco se trata de eso.

——Entonces no entiendo Potter.

——Profesora sé que puedo confiar en usted por eso se lo diré. Hasta ahora sólo Ron y Hermione lo saben. La profesora Trelawney hizo otra profecía.


La profesora McGonagall no puso cara de incredulidad ni nada por el estilo, había asumido que de vez en cuando la profesora de Adivinación realmente hacía profecías verdaderas.


——¡Oh por Merlín! ¿No me digas que se trata de otro señor oscuro Potter?

——Bueno algo así.

——¿No me digas que tú escuchaste la profecía de Sybill?

——Yo no, Umbridge.

——¿Cómo?

——Cuando Umbridge aún era Inquisidora en Hogwarts escuchó una profecía de la profesora Trelawney, sobre el nacimiento de un niño que será el mago más poderoso que existiría jamás, Draco Malfoy está destinado a concebirlo como mago fértil que es y el padre que lo engendre gobernará el mundo mágico.


McGonagall escuchó espantada aquello.


——Potter… A caso tú pretendes…

——No profesora, eso jamás. Draco está comprometido con el hermano de Umbridge, el lunes se anunciará el compromiso en el Profeta.


La mujer se quedó en silencio, enseguida comprendió que pretendía Dolores Umbridge y se alarmó en grande.


——Eso no puede suceder Potter.

——Claro que no, por eso seré yo quien se case con Draco Malfoy mañana.

——¿Ese muchacho sabe?

——No. Ni siquiera imagina lo que pretende Umbridge. Aceptó casarme conmigo, su familia está arruinada y le convencí de que le resultaba más ventajoso un matrimonio con el héroe del mundo mágico.


La profesora comprendió todo, en ese momento sintió admiración y tristeza por Harry a partes iguales.


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