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Notas del capitulo:

;-; Hoy no los aburrire tanto con mi vida como lo hice la nota pasada [xD] Solo dire q planeaba subir el cap cuando me inscribieran al sigiente grado, pero, no lo hicieron por problemas de... ¬¬ del estupido subdirector ¡¡QUE SE JODA EL SUBDIRECTOR!!

xD perdon, tenia que desahogarme, sin mas retrasos les dejo el cap ;D

Disfrutenlo...

 

 

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                                                                                              [Versión Mello]

-Meeeeeeelloooooo…-    Mmm…. ¿Qué…? ¿Qué quieres…? Espera ¿Qué es ese olor? Huele como a… chocolate… reconozco ese olor a kilómetros…    

-Meeellooo-    Vuelvo a escuchar que me hablan, y abro mis ojos pesadamente. Enfoco con dificultad mi vista hacia Matt; trae algo en las manos, pero no logro distinguir que es. 

-¿Qué quieres, Matt? Déjame dormir…-    Me arrope con las sabanas hasta la cabeza, para no ver la molesta luz del día.  

-Despierta. Hoy no podemos quedarnos hasta tarde-    Dijo, quitándome las cobijas de encima. 

-¿Por queee…?-   Pregunte, intentando arroparme de nuevo.

-Recuerda que el señor Haru nos dijo que debíamos llegar antes de las 12… y ya son las 11:35…-      Solté por completo las cobijas, y me cubrí la cara con los brazos.     

-Matt…-    Lo llame, mirándolo con un ojo por un espacio entre mis brazos    -Tengo frió… y no sé donde quedo mi ropa anoche…-    Sonreí. 

-Pues a mí me duele de la cintura hacia abajo y no me estoy quejando… mucho…-    Se sonrojo un poco… que lindo… 

-Matty… ¿te dolió mucho?-     Me incorpore un poco y lo abrace por el cuello. 

-N-No mucho… lo disfrute bastante…-    Susurro. 

-… Te amor, Mail Jeevas…-   Lo bese en los labios.

-…Mihael Keehl… te amo….-    Puso sus manos en mi cintura y sentí un escalofrió. Baje mi vista hacia sus manos y me di cuenta de que no traía nada de ropa.

-Mattt… ¿me traes mi ropa?-     Pregunte, ¨inocentemente¨

-Claro, cachorro-    Beso mi frente y salió a buscar mi ropa.

            … Matt llevaba fuera de la habitación mas de cinco minutos, así que me puse de pie y tome una de sus camisas; al parecer es mas alto que yo, (o usa ropa de unas 3 tallas mas grandes…) ya que su camisa me llega a la mitad de los muslos, cubriéndome bien…

Bah ¿importa si salgo de la habitación así? No me moleste en ponerme zapatos, y salí con la pura camisa de mi Matty puesta.

Busque a Matt con la vista, y lo encontré en la cocina. Me dirigí hacia el… parece que esta asiendo algo ¿el desayuno, tal vez…?

-Matt ¿Qué haces?-     Pregunto. El volteo hacia mí, sin prestarme atención…

-Mmmm… pues…-    No termino la frase al posar su vista en mí. Dejo caer un par de platos al piso; yo los vi caer confundido.

Noté como las mejillas de Matt iban tomando un color rojo mientras me observaba de arriba abajo, nada discreto. 

-Matt ¿Qué sucede?-    Pregunte. El tardo un poco en reaccionar, ya que subió su vista lentamente hasta mi cara, para posar sus ojos verdes esmeralda sobre los míos. 

-¿Qué... traes puesto…?-    Susurro.  

-Es tu camisa ¿te gusta cómo me queda?-    Dije seductoramente    -¿Desde cuándo eres más alto que yo?-    Dije viendo hasta donde me llega su camisa. 

-Soy más alto que tu desde que me acuerdo-    Dijo, aun observándome por completo    -Y sí, me encanta lo sexy que te ves así-     Empezó a acercarse a mí.

Antes de que me diera cuanta, el me tenia agarrado por la cintura, y sus labios se acercaban peligrosamente a los mío… yo solo me dejaba llevar… nuestros labios estaban a escasos milímetros de distancia… 

-Bip. Bip-    ¿Por qué tenían que enviarle un mensaje justo ahora? 

Matt se separo de mi con un notable gesto de fastidio y un gran suspiro; tomo su celular y vio de quien era el mensaje.

-¿Qué sucede?-   Dije, jalándolo amablemente del cuello de su camisa, hasta casi rozar nuestros labios.

-Mello, espera… es el Sr. Haru… tengo que contestar…-     Susurro sobre mis labios para luego alejarse y ver el mensaje.

Suspire algo fastidiado. Fui a buscar mi ropa para bañarme y cambiarme; camine hacia la habitación con mi ropa entre las manos.  

-Mello, debemos irnos ahora-    Dijo serio. 

-Espera a que me bañe-    

-No podemos-

-Matt… ¿acaso quieres que todos me vean así…?-     Dije, señalando la única prenda de ropa que tría; él se sonrojo un poco.  

-N-No… no te tardes mucho…-

                                                                                                                             [Versión narrador]

En menos de 20 minuto el rubio se baño y se arreglo; Matt ya lo había hecho, así que de dedico a mandarle mensajes a su jefe preguntándole cosas sobre la misión de este día. 

Cuando estuvieron listos, ambos chicos fueron al auto del pelirrojo, subieron a este y se dirigieron al edificio de reuniones; no tardaron más de 10 minutos en llegar, ya que Matt puso el auto a toda velocidad.  

Entrando al estacionamiento el pelirrojo no se molesto en estacionar bien el auto, solo lo dejo a media calle, impidiendo el paso; bajo apresurado del vehículo y le dijo a Mello que lo siguiera, este lo hizo sin preguntar, pero muy confundido aun.

Al llegar al cuarto de reuniones, Matt abrió apresurado la puerta y dijo:

 -Haru, ocupo hablar contigo-     El jefe de la mafia y sus subordinados se sorprendieron mucho ante eso, ya que era la primera vez en todo lo que llevan trabajando ahí, que el pelirrojo le habla tan directo y su jefe.

 -¿Sobre qué tema, Matt?-    Pregunto, sin tomarle mucha importancia al tono de vos de su nuevo perro.

-Es algo importante y privado, por favor escúcheme-    Dijo, volviendo a su noto reservado.  

Los dos hombres [Bueno, chico y hombre] pidieron a los presentes en esa habitación que salieran para poder hablar en privado; desde afuera del cuarto solo se podía escuchar algunos golpes y gritos, sin entenderse bien de que hablaban.  

Mello estaba exasperado. No le gusta no saber lo que sucede, y menos si se trata de algo importante. Estaba intentando escuchar lo que decían ahí dentro, pero solo lograba oír cosas como ´debe entenderlo´ ´¡Es que no puede ser!´ golpes hacia las paredes, o el escritorio y otras cosas que no lograban encajar con nada de eso.

Al cabo de unos 10 minutos abrieron la puerta y dejaron pasar a los que habían sacado. 

-Chicos, tengo que decirles algo muy importante el día de hoy-     Dijo el Sr. Haru    -La policía nos está buscando-    Sentencio    -Como no quiero meter a nadie en problemas, tendré que suspender para algunos las ¨misiones¨ u otorgarles unas más simples y sin riesgos- 

-¿Qué intenta decirnos Sr. Haru?-    Pregunto Hiroshi [el hombre encapuchado, como lo bautizo Mello]

-Que para las próximas misiones tendré a mi lado solo a 3 personas; las de mi toral confianza. Las demás, no podan enterarse de lo que pase aquí, al menos no por ahora, pero no se preocupen por nada, yo les mandare avisar cuando esto de los policías acabe-

-¿A quienes va a elegir?-    Pregunto Yuuki [la única mujer] 

-No te precipites Yuuki…-     Hablo calmado      -Mis 3 perros guardianes serán: Hiroshi, ya que lleva más tiempo conmigo que todos los demás; Yuuki, sin ti no podríamos descifrar las estrategias policíacas, además de que eres un gran elemento de mi total confianza; y por último, Matt, en tus únicos dos años aquí, has sabido ganarte mi confianza y aprecio, perro-     

Lógicamente, muchos de los que estaba ahí presentes, llevaban más tiempo trabajando con Haru que el joven Matt, pero el jefe sabe por qué eligió a esas 3 personas. 

-Los demás pueden irse; Hiroshi, Yuuki y Matt, ocupo hablar con ustedes 3, por favor, quédense-   

Antes de que Mello saliera de la habitación, el pelirrojo se acerco a él y le susurro al oído ¨Espérame en la azotea del edificio…yo llegare pronto…¨, el rubio se estremeció, asintió y salió del lugar en dirección donde dijo Matt. 

                                                                                                                             [Versión Mello]

¿Qué es lo que pasa? ¿Por qué ahora el viejo Haru dice que va suspendernos las ¨misiones¨? ¿Tan grave es el asunto? ¿Qué acaso no confía en nosotros? [¬¬] Pues no, ¿sino porque solo escogería 3 personas, y entre ellas a Matt? Mello, están suponiendo cosas apresuradamente. Pero… ¿Qué va a pasar? ¿Qué harán? ¿Qué tan importante será como para no querer decirnos? 

Joder, Mihael Keehl ¿desde cuándo te preocupas tanto por lo que valla o no a pasar con tu futuro? ¡Desde ahora! Bien, bien, pero no es para que te enojes contigo mismo, recuerda que yo soy tu, y yo eres yo… [(¿?)] Mello… ¿Qué? … Piensas estupideces… si, si, lo sé, creo que me estoy volviendo loco … pero, loco por amor… loco por Matt… loco por ese pelirrojo idiota… que también te está haciendo idiota…  

Sin darme cuenta de cómo ni cuándo ni a qué hora, ya estaba sentado en el piso de la azotea, viendo la nada, sumido por completo en mis pensamientos… 

Suspire…. -Matt… no te metas en problemas, por favor…- Susurre. Creo que es algo ridículo, en especial porque yo no soy muy religioso, solo llevo este rosario en el cuello porque es algo que me dio mi madre antes de quedar huérfano, pero…; tome el la cruz del rosario con mi mano derecha y la apreté ligeramente, intentando darme fuerzas con esta… -Matt, rezare por ti…-

                                                                                                                             [Versión Matt]

Salí antes que Hiroshi y Yuuki del cuarto, ya que lo que quería decirnos Hatu me lo había dicho a mi cuando estábamos hablando en privado; se que fui un poco irrespetuoso al principio, pero es que los mensajes que me había mandado eran confusos (no, no lo eran Matt; eran de lo mas entendible del mundo, otra cosa es que tu no lo hallas querido aceptar), en fin… no quiero que le pase nada malo a Mello, y menos ahora que somos novios, y aunque no lo fuéramos, no me perdonaría si le pasa algo... 

Saque un cigarro y un encendedor de mi bolsillo, encendí el cigarro. Empecé a fumar por el simple hecho de los nervios que me produce los que le voy a decir a Mello; obviamente no le voy a decir las cosas como son. Me duele mentirle, pero mientras no se entere, será mejor para todos. No quiero que solo por amor vaya a hacer una locura, sabiendo perfectamente que yo estaré bien en todo momento… (O al menos… eso espero…)

Cuando llegue a la azotea vi a Mello sentado en el piso, parecía perdido en la nada o en sus pensamientos… parece estar algo desesperado, ya que se llevo el dedo pulgar a la boca, como lo hace L; creo que ya le imito algunas manías.  

                                                                                                                             [Versión Narrador]

-Mello…-    Llamo el pelirrojo, acercándose al nombrado. 

El rubio volteo la vista lentamente, perdido aun en la nada, clavando su mirada que parecía vacía en los ojos de Matt. 

-¿Qué?-   Fue su corta y fría respuesta

-Sobre lo que dijo Haru… quiero explicarte algo…-    Dijo, mientras se sentaba en el piso al lado del rubio. 

-Explícame; quiero entender por completo esto…-

-Mello…-    Vio los ojos del nombrado y tomo sus manos    -En la misión que haremos solo nosotros cuatro… ocupamos salir de la cuidad por un par de días… como dijo Haru, aun no puedo decirte lo que tenemos planeado, perdón… saldremos hoy mismo- 

-¿A qué hora?-   Pregunto casi en un hilo de voz. 

-Lo más pronto que se pueda. Yo salí antes de la conversación, ya que yo supe antes esto…-      Mello inconscientemente apretó las manos de su pareja. 

-No me dejes…-   Susurro. 

-Volveré el día después de mañana, te lo prometo; pero tu prométeme que no harás ninguna locura, por favor…-    El rubio asintió y abrazo fuertemente al pelirrojo, quien correspondió al instante    -Te amor Mihael Keehl. Nunca lo olvides-  

-…Mail Jeevas, te amo, y nunca olvidare que nos amamos….-    

                Los dos chicos volvieron a la casa algo deprimidos por la triste noticia de separase, después de todo lo que pasaron para llegar aquí; Matt empaco sus cosas: solo ropa y algunos artículos personales. No era necesario llevar mucho, estaría aquí de vuelta el día después de mañana ¿verdad? Si, si lo estaría.

-Matt, quiero acompañarte hasta el auto-    Dijo el rubio, abrazando al pelirrojo.

-No, no puedes Mello-   

-¿Por qué no?-     Se notaba la fragilidad en su vos

-Si me acompañas hasta el auto, podrías ver hacia donde voy, y eso traería problemas para la misión…- 

-Prometo que no veré hacia dónde vas…-    Susurro.

-No estés triste, cachorro, ya te dije que volveré…-    Acaricio suavemente la mejilla del rubio.

Mello poso su mano sobre la del pelirrojo y dijo:

-Te voy a extrañar…-  

-Y yo a ti….-     Fue lo último que dijo Mail Jeevas antes de salir por la puerta del apartamento, para ir hacia su auto, a cumplir su deber con la mafia.

                Mello está deprimido, en verdad no quería que Matt se fuera, pero ¿Qué podría hacer el, un chico de escasos 17 años contra unos mafiosos para que su novio se quedase con él? Nada; con la mafia no se juega… una lección de vida que le dijo justamente el, su pelirrojo novio Matt. 

El rubio, Mihael Keehl, ya no quería hacer nada. No quería comer, no quería dormir, no quería ni siquiera comer chocolate; solo fue a la cama donde paso la noche anterior con su amado y se recostó en ella, para rezar por que no le pase nada a Matt.  

Se encontraba en posición fetal, abrazando la caja de chocolates que le había dado el pelirrojo el día anterior, mientras rezaba por este mismo. Por su mente pasaban recuerdos de todo lo que había sido de ellos dos desde que se conocen; lindos, trágicos, complicados, testarudos, aburridos, y miles de recuerdos más de él y el pelirrojo. 

Sin saber cuándo ni cómo, el chico se quedo dormido entre recuerdos, rezos y unas pocas lágrimas que salían al pensar en lo peor. 

Notas finales:

^^UU [*mentalmente esta riendo con una sadica y cruel risa de "muajajajaja"]

Por favor, no dejen criticas por separalos, yo se o que hago con mi Fic ;D [*de uevo el "muajajajaja" mental*]


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