Cuando Matt salió de su habitación yo ya me había cambiado de ropa y medio arreglado
-¿No te vas a bañar?- Pregunto, yendo a la cocina.
-Sí pero, tengo hambre y cuando tengo hambre lo único en lo que pienso es en comida- Le respondí.
Fui a la pequeñísima cocina y abrí el diminuto refrigerador. Observe todo lo que había dentro: una lata de atún… medio litro de leche… una par de… ¿¿Huevos verdes??... después de eso no quiero saber nada más… cerré la puerta del refrigerador.
Busque una alacena o algo así. Revise los cajones y repisas hasta que halle la ¨despensa¨: diminutas cajas de cereal (de quien sabe qué año…), mas atún… una… ¿Qué es eso? ¿Me importa? No, así que lo deje hay.
-Matt ¿Tienes algo que sea…¨comestible¨?- Le pregunte. El me vio.
-Sí, hay leche y cereal…- ¡Ho genio…! ¡No los había notado!
-¿Otra cosa?-
-Mmm…. También hay atún….-
-No hay nada, técnicamente- Dije. El chasqueo la lengua.
-¿Qué hora es?- Pregunto, cambiado el tema.
-No sé, pero, pasa de las 7:30…-
-Tengo que irme- Tomo su abrigo y llaves
-¡¿Qué?! ¡¿A dónde coño vas?!- No puede irse así porque sí.
-A trabajar-
-¡¿TRABAJAS?!- Sin duda su respuesta me sorprendió mucho
-Si, a diferencia de ti yo he hecho algo con mi tiempo-
-¿Que insinúas?- Lo mire a los ojos
-Que tengo trabajo y tu no- Lo mire amenazante. –Bien. Me voy-
-¡Espera!- Grite
-¿Ahora qué?- Me miro aparentando molestia
-¡¿Qué se supone que voy a comer si no tienes nada?!-
-Mmm….- Saco algo de su bolsillo -Ten- extendió su brazo con una considerable cantidad de billetes -Compra algo para comer, cómprate ropa y…. un pez-
-¿Un pez? ¿Para qué?-
-Mmm… cierto. Que sean 3 peces- Dijo eso salió del apartamento dejándome solo y confundido.
Me quede hay unos segundos. Luego Matt volvió
-Olvide darte esto. Atrápalo- Me lanzo un radio. Yo tarde un poco en reaccionar así que casi se me cae pero, por suerte lo atrape.
-¿Qué es?- Pregunte, una vez que reaccione por completo
-Un radio, para estar comunicados en todo momento. SIEMPRE llévalo contigo ¿Escuchaste? SI-EM-PRE.- Me miro serio -Y los peces tiene que estar vivos… de esos de diferentes colores… ¿Sabes cuales?- Yo asentí sin saber a qué exactamente. El se fue, dejándome más confundido que antes…
Cuando logre asimilar lo que me dijo, conté el dinero… ¡si que era mucho! Como sea, guarde el dinero en el bolsillo izquierdo de mi pantalón y el radio en el derecho.
Tome un abrigo de Mtt y me lo puse. Salí del apartamento algo apresurado… mire la puerta antes de irme… no tengo llave, así que Matt se friega si le roban algo… lo cual dudo porque lo único de valor para el son sus videojuegos…
Camine por las calles de la ciudad despreocupadamente hasta que mi estomago gruño ¡Tengo hambre!... hay un local de postres cerca de donde estoy, creo que iré por algo ligero.
Llegue al lugar, entre y me senté en una mesa. No paso mucho tiempo para que llegara una linda chica, no mayor que yo a atenderme.
-Hola chico lindo ¿En qué te puedo ayudar?- Valla que es aventada
-Hola ¿Podrías traerme algo que tenga chocolate, por favor?- Dije.
-Claro, guapo ¿algo de comer o una bebida?- Me dijo.
-Algo de comer-
-Bien, enseguida vuelvo- Me giño el ojo antes de irse.
Por Dios que zorra… con esa mini falda que no deja nada a la imaginación y ese escote que hace lo mismo… me pregunto si todas las mujeres son igual que esta.
A los pocos minutos volvió con una rebanada de pastel de chocolate…. Se me hizo agua la boca.
-Aquí tienes- Dejo el plato en la mesa y se fue.
No tarde mucho en acabar.
Le page la cuenta y la hermosa joven me dio su número de teléfono… valla que es aventada… no creo llamarle, no es mi tipo, es linda y toda la cosa pero, no me gusto.
Salí del lugar y fui a comprar de algo para no morir de hambre en por lo menos 2 días. Cuando acabe recordé que tengo que comprar 3 peces….
Llegue a la tienda de mascotas, donde estaba otra joven como encargada.
-Hola, muchachote ¿En qué te puedo ayudar?- Otra zorra.
-Hola ¿Podrías darme 3 peces peleadores de diferentes colores, por favor?- Le pedí. Matt nunca dijo que no fueran peleadores, además esos me gustan.
-Claro- Fue donde los peces y los tomo.
Eran de diferentes colores pero, los 3 eran hermosos. Uno color rojo sangre con algo de negro. Otro color azul marino. Y el último color lila.
Page los peces y me fui de ahí.
Cuando llegue al apartamento deje las bolsas con la despensa en la pequeña cocina y puse los peces en 3 tazones diferentes, para que no se cayeran ni se pelearan.
Me senté en el sillón y prendí la tv. No había nada interesante así que la apague.
Revise todo el lugar con la vista, sin concentrarme en un punto en específico. Hasta que llegue a la puerta de la habitación de Matt.
Me puse de pie y fui hasta halla. Abrí el cuarto y lo examine con la vista antes de entrar. Camine cuidadosamente hasta el centro de la habitación, donde la observe mejor. Nada interesante: lo que un chico normal debe tener.
Desilusionado, no sé por qué, camine para salir del lugar. Vi un bultito en la alfombra, no le tome importancia, de seguro no está bien extendida. Pise el bulto pero, este no desapareció, hay algo abajo.
Me arrodille para poder ver mejor que es ese objeto. Levante un poco la alfombra y pude ver algo metálico ¿Un encendedor, tal vez…?
Con cuidado agarre el objeto y lo saque de debajo de la alfombra.
Me sorprendí mucho al verlo. Sentí como la sangre dejaba mi cuerpo para regresar más débil y asustada…
¿Qué es esto? ¿Por qué Matt tiene esto aquí? ¿Para qué lo quiere? ¿Qué piensa hacer con ella?
Millones de dudas llegaron a mi mente. Dudas que el mismo Matt me responderá personalmente.
Efectivamente, lo que halle fue una pistola con 9 balas, le falta una…
Escuche un tipo de estática y como si alguien intentara hablar… ¿De dónde…? ¡El radio que me dio Matt! Tome el artefacto
-¿Bueno? ¿Matt?- Pregunte
-¿Mello?- pregunto
-Sí, sí, soy yo- Dije, apresurado.
-¿Ya compraste algo de despensa?- Dijo.
-Si- Respondí. -¿Ya vas a venir?- Pregunte.
-Ehh… s-si, al parecer si, ¿Qué ocupas?-
-Hablar contigo, por favor, vuelve pronto- Dije.
-Ehh… si, si… no te preocupes… ehh… ette… ¿Compraste los peces?-
-Si- Conteste.
-Bien. Nos vemos al rato. Adiós- Corto la llamada…
Paso media hora desde que hable con Matt por radio, todo ese tiempo me la pase recostado en su cama, con los ojos cerrados, meditando como debería preguntarle sobre la pistola.
Sin saber cuándo, me dormí.
[Versión normal. Con narrador]
El pelirrojo entro a la casa esperando ver al rubio viendo la Tv o en la sala pero, no fue así. Entro al apartamento y lo busco. Finalmente lo encontró en su propia habitación, recostado, durmiendo.
No lo pensó 2 veces y se acerco a él, mirándolo fijamente, esperando que Mello sintiera su mirada.
-Mello…- Le susurro al oído. El otro chico solo dio un leve quejido de molestia.
-Mello…- Dijo un poco más fuerte, picándole la cara.
-Mello…despierta….- Se acerco a su rostro.
El rubio abrió sus ojos pesadamente, para encontrarse con los del pelirrojo muy cerca de él.
-¡¿Qué haces aquí?!- Mello se sonrojo por la cercanía de sus rostros.
-Llegue y estabas dormido, así que te desperté- Le susurro casi sobre los labios.
-¿Podrías alejarte un poco? Me siento acosado- Dijo, empujando al pelirrojo con sus manos.
-¿Por qué? Somos amigos, no debería importante que tan juntos estemos- Se acerco mas al rostro del rubio
-Me incomoda estar así contigo…. me siento acosado por ti…- Susurro. Matt se alejo de él.
-¿Vamos a comer algo?- Pregunto
-¿He? ¿A dónde?-
-A un restaurant. Vamos, yo invito-
-E-Espera, tengo que preguntarte muchas cosas-
-Me preguntas halla. Vamos- Jalo a Mello del brazo poniéndolo de pie y lo arrastro hasta su auto
[Versión Mello, de nuevo]
Después de que Matt me arrastro a su auto, me subió a él casi por la fuerza. Técnicamente: secuestro.
El subió al otro lado y me dijo que me pusiera el cinturón. Lo obedecí.
Fuimos hasta un local al centro de la ciudad. Se veía lujoso pero, a la vez no, ya que había más gente de barrio que de clase alta.
Me sentí un poco intimidado ya que había guarias que me doblaban en peso, edad y tamaño. Quería retroceder pero Matt me lo impidió tomándome por la cintura y haciéndome seguir caminando.
-Camina…- Me susurro al oído. Yo me sonroje.
Caminamos así de juntos hasta que llegamos a la mesa. Donde me sentó en una silla ya acreció mi pierna por accidente… o al menos quiero creer que fue un accidente.
Matt pidió la comida por mí, dijo que era muy buena así que accedí...
Mientras comíamos el no dejaba de verme y sonreír cuando yo evitaba verlo…. Creo que estuve sonrojado toda la comida…
Cuando terminamos nos quedamos en la mesa platicando como 2 amigos…… yo me sonroje ante algunos de sus comentarios….
-Mello….- Me llamo. Yo voltee a verlo -¿Quieres bailar?- Sonrió.
-¿He? ¿Bailar?- No entendí que quería decirme.
-Sí. Vamos a pasarla bien un rato, divertirnos. Hay chicas muy bonitas y muy fáciles también- Dijo. ([¬¬] jaja, me basta la zorra de la cafetería de la mañana)
-Ehh… quiero hacerte unas preguntas antes, Matt…- Susurre.
-¿Después iremos a bailar?- Me miro serio. Asentí. –Bien. Te escucho-
-Yo quiero saber ¿en que trabajas?-
-Agente de negocios y relaciones públicas- ¿De verdad? [U¬¬] Esa ni el cabeza de cebolla te lo cree.
-¿Nada mas?- Pregunte
-Si ¿Por?- Dijo,
-Es que en la mañana me diste mucho dinero… eso me sorprendió…-
-¿Qué? ¿No puedo consentir a mi amigo?- Se puso de pie y me acaricio el pelo. -Vamos a bailar-
Me puse de pie y lo seguí (creo que será mejor preguntarle en casa sobre la pistola)
Llegamos la pista de baile, donde había muchas personas. Por un momento me arrepentí pero, Matt me tomo de la cintura y me llevo a bailar.
Me tenía muy pegado a él, como si creyera que si me soltaba saldría corriendo de ahí…. Solo quería sepárame un poco de él….
Su respiración me estaba dando en la oreja izquierda, justo por encima de mi pelo. Su entrepierna en ocasiones rozaba alguna parte de mis glúteos, eso me hacia sonrojar….
Se estaba aprovechando de lo que me dijo antes: ¨Somos amigos, no debería importante que tan juntos estamos¨
Cuando salimos del lugar fuimos directo a casa. No cruzamos palabras por todo el trayecto; solo miradas furtivas por parte de Matt hacia mi…
Llegamos al apartamento y lo primero que debía hacer era preguntarle sobre la pistola.
-No creo eso de las relaciones públicas, Matt- Le dije.
-¿He? ¿De qué hablas?- Parecía confundido.
-De tu ¨trabajo¨. No creo que sea verdad. Me estas mintiendo ¿Por qué no me dices donde trabajas?- Dije.
-Ya te dije la verdad… solo que… un poco distorsionada…-
-¿Distorsionada?-
-…- No dijo nada.
-¿Por qué tienes una pistola?- Solté de golpe. El me miro.
-Pues…. Tú también tienes una….-
-¿…?-
-…-
-¡AH! ¡Esa clase de ¨pistola¨ no, idiota!- Me sonrojé, ya entendí su comentario.
-¿Entonces a cual ¨pistola¨ te refieres?-
-¡A la que halle en tu cuarto! ¡La de 9 balas! ¡¿Para que la quieres?!- Grite
-Baja la vos…- Susurro. –Por favor, no grites sobre la pistola… es peligroso…-
-¡¿Por qué?! ¡¿Esa pis---¡?- Me cubrió la boca con su manos y me agarro fuerte la cintura para que callara.
-No grites eso…. Nunca… ¿Oíste? NUNCA vallas a gritar eso… las paredes tienen oídos… y si oyen algo que no deben…. Nos meteremos en problemas…- Me susurro al oído.
Tenía mis manos sobre las suyas, intentando quitarlas.
Me soltó. Di una bocanada de aire.
-Esa pistola es ilegal ¿Cierto?- Le dije.
-No se…- Contesto.
-¡¿Cómo que no sabes?!- Intente no subir mucho la vos, solo lo suficiente para que se diera cuenta que estaba enojado.
-A mí solo me la dieron…. No me preocupe por si era legal o no…-
-¿Quién te la dio?- Pregunte, viéndolo a los ojos.
-Mi jefe…- Dijo.
-¿Con quién trabajas, Matt?- Pregunte de nuevo, esperando que ahora si me dijera la verdad…
-…- No contestaba….
-¿….?- Yo solo esperaba su respuesta…
-…La mafia japonesa…- Susurro