Entró cojeando a la habitación con cara de pocos amigos como siempre, pero esta vez no dijo nada molesto sólo se acercó a Watson y suspiro alzando una ceja.
-Bien, realmente bien ¿Sabes que es lo que le pasó?- Preguntó mirando a Holmes fijamente.
Holmes sonrió sarcásticamente -¿Está de acuerdo en que si lo supiera no estaría aquí con usted, cierto? ¡Digo!, lo comento para ahorrarme sutiles ofensas en contra suya.- Dijo serio en realidad ya no tenía ganas de pelear con él ahora, su mente debilitada por la tristeza no era muy útil.
Eso lo hacía sentirse idiota ya que de alguna manera el nunca tuvo ataduras que le mantuvieran los tobillos encadenados a la tierra, el podía dejar ir su mente y encerrarse en su propia lógica sin que nada, absolutamente NADA importara, la gente no era necesaria, los vínculos familiares eran inútiles para quien intentara valerse de ellos, las necesidades fisiológicas como el comer y dormir eran perdida de tiempo e intentaba saltárselas a veces investigando que tanto podía soportar su inútil cuerpo humano sin ellas, los diálogos de las demás personas no eran más que tonterías...sólo los diálogos corporales de algunas parecían tener algún interés en él, se consideraba casado con su trabajo y con la nicotina. (Que claro, cabe mencionar tenía unos tres parches de nicotina en cada brazo para aguantar las ansias de no fumar dentro del hospital o cerca de su doctor favorito...)
Pero entonces apareció Watson y le mostró que el estar un poco en el mundo no tenía nada de malo, que a veces era necesario salir de uno mismo para distraerse dentro del mundo y que la vida material era vana por que finalmente era una distracción del espíritu que se encontraba dentro de cada uno, porque así debía de ser. Porque finalmente seguro que el alma a veces no debe de estar muy contenta de tener esta piel estorbosa consigo siendo que esta por si misma no está materializada...es lo mismo que pasaba con el, el no concordaba con su cuerpo porque su alma no quería estar allí dentro quería saber más pero sin tener aquellas estupidas limitaciones, su curiosidad tan grande le hacía odiarse como humano muchas de las veces que se encontraba sólo analizándose a sí mismo...su cuerpo se sentía igual dentro del mundo, aburrido y harto de tan desgastante banalidad. Desesperado por encontrar algo por lo cual vivir que no fuera simplemente él mismo...solo que nada de esto lo descubriría en si como ahora lo mecanizaba en su basta mente hasta que Watson se lo mostró y le enseñó a adaptarse un poco a la vida "terrenal" que el había estado evitando por no integrarse y sólo ser uno más sin destacar en nada, daba igual la posición en la que se mantuviera sabía que hay tantos hombres en el mundo que diariamente nacen y mueren que él quizá no era un caso aislado y quizá en la antigüedad vivió alguien con su mismo problema o varias personas igual y que murieron así sin resalto alguno...¿Porqué él siendo tan perfecto de mentalidad debía esforzarse por resaltar cuando finalmente dentro de si mismo se encontraba tan bien sabiendo que quizás en todo el país era la única persona que valía la pena? ¿Porqué?...No tenía caso alguno, era una idiotez ilógica con la que ni siquiera debía molestarse en intentar, o al menos eso pensaba...el nunca fue realmente él hasta que llego algo que encajó perfectamente con sus necesidades, con lo que el era, algo tan curioso que daba miedo analizar...algo que le hizo ser lo que era sin desesperarse tanto consigo mismo, por que ahora las respuestas que no tuviera las había en otra mente que trabajaba de una forma diferente al a suya pero que entre ellos se entendían.
Todo esto lo pensaba mientras House se volteó a revisar lo que le había hecho Wilson a su paciente en un acto de desesperación, después vio a Wilson con la duda reflejada en los ojos como diciéndole "¿Porqué lo has hecho?" Wilson entendió enseguida el mensaje y bajó la mirada, precisamente no había dicho nada porque sabía que seguro y House se enojaba por la acción.
-Lo siento, la morfina ya no le estaba haciendo efecto...me vi obligado a hacerlo...-
-Da igual eso, mi pregunta en realidad se refería al ¿Porqué salvarte a ti mismo sin dejar que yo te salve? ¿Acaso este pequeño y extraño hombrecillo te ha convencido para que dejes de confiar en mí?- Le dijo mientras analizaba signos vitales y las características de la enfermedad, sencillamente ya tenía la respuesta...lamentablemente aunque no quisiera aceptarlo la respuesta se la debía más al detective que a sí mismo.
-No saques conclusiones House si te estoy respondiendo a tu pregunta es por que es verdad lo que te digo, no soy como tu que sobre analiza las cosas, entiéndeme...- Le contestó intentando tener paciencia y colocando una mano en el hombro de Holmes para que se calmara.
-Bueno ya ¿Lo sabe o no?- Dijo impaciente el pelinegro.
-No me presione, es obvio que lo sé- Contestó con suficiencia mirandole con fingida indignación.
-Genial, pues atiéndale entonces- Le comentó alzandose de hombros para que Wilson le quitara la mano de encima y así lo hizo el castaño aunque algo inseguro de ello.
-Lo haré cuando se le pueda despertar, por ahora le pondremos la medicina que necesita en el suero y lo que no se le pueda dar así ya será cuando despierte...eran un montón de amibas rebeldes...realmente una idiotez-
-Idiotez que le hice ver...-
-Calle eso ya lo sé...-
-Oh, ¿entonces lo admite?-
-Si, la verdad admito que usted es un idiota- Le comentó volteando a mirarle a los ojos y torciendo una sonrisa muy a su estilo para el detective que sólo se quedó analizando la noticia comunicada.
Después de eso House y Wilson salieron de la habitación y se quedaron discutiendo algo en la entrada por un rato para después irse, Holmes no era tonto, sabía que aunque ya le habían dormido aún su Watson sentía dolor, podía sentirlo, para las sensaciones de su amigo era extremadamente sabio.
Se sentó a su lado a observarle ¿Cuánto duraría dormido? La verdad es que pensaba en un par de horas despertaría por lo que de repente se quedó dormido en medio de la profunda observación en la que se había sumergido respecto a su pobre Watson, no supo que es lo que sucedió pero algo le despertó de su sueño lleno de análisis complicados...
-¿Holmes?...- Le llamó una voz menos apesadumbrada.
-¿mh?...- Estaba sentado recargado contra una orilla del sillón con la cabeza hacia abajo pero en cuanto escuchó aquel llamado alzó la cabeza con algo de brusquedad y abrió ligeramente los ojos, vio a su Watson temblando un poco todavía ¿Qué el idiota de House no le había atendido ya?, sacudió ligeramente la cabeza para despertar y se levantó del sillón para abrazarle.
-¿Qué? ¿Qué pasa?- Le preguntó rápido besándole la frente, se sentía muy mal de verle sufrir así, le pegó contra él sobreprotectoramente.
-Duele un poco aún...Holmes...pero no deberías preocuparte...- Le musitó bajito temblando entre sus brazos aún, nunca había estado así de vulnerable con el pelinegro sin embargo había tenido una sorprendente buena reacción.
-Tranquilo, seguro que ahora que te duele menos no tardas en recuperarte del todo...el idiota de House hizo que su equipo viniera a administrarte unas medicinas pronto estarás bien...ya sabe lo que tienes- Le comentó sin soltarle, era como si una parte de su corazón ya estuviera con el rubio, no podía evitar portarse meloso con él por más que quisiera. Aquella fase en la vida de ambos había terminado de derretir el hielo de su corazón, y más que nada a comprender los lazos humanos, aunque sinceramente todos los demás humanos venían valiendo dentro de su mundo, si estaba Watson el ya estaba más que completo, y la verdad es que su relación era la que importaba dentro de su mundo por que los demás lazos humanos estaba claro que tenían su propio funcionamiento y sus propios mundos, y eran cosas que poco le importaban a menos que tuvieran que ver con algo de su trabajo, o claro para molestar a alguien también era útil ya que el se definía a si mismo como un simple espectador de la vida.
Miró hacia el ventanal y no vio que viniera nadie por lo que decidió aventurarse a mirar lo que pasó con el idiota doctor que no aparecía...
-Dame un segundo volveré enseguida...- Le musitó a Watson soltándole con algo de dificultad y caminando hacía el pasillo, era obvio que sabía ya donde estaba y no era su oficina sino la del doctor Wilson...
***
-Ahh...House basta...mghm...-
Se escuchaba...en una oficina oscura en la que solo se podía notar el letrero de "James Evan Wilson. Departamento de oncología" no se podía ver mucho por lo oscuro que estaba aquel lugar una vez se cerraban las cortinas del ventanal, el castaño estaba sentado en la silla de su escritorio y detrás de él estaba el nefrólogo que una vez había dado instrucciones a su equipo había corrido hasta donde el oncólogo, aquel juego apenas si empezaba a pesar de ya tener semidesnudo al oncólogo, este ladeaba la cabeza en busca de más contacto pero House alevosamente se lo negaba torturándole...
-oh...dios...mh...- Gemía Wilson que tenía al mayor contra su cuello mientras aquellas hábiles manos de pianista le recorrían desplazándole hasta su entrepierna, este cerró las piernas automáticamente a pesar de empezar a excitarse.
-Oh no...no House...-
-Esa actitud sabes que me pone más...- Le musitó al oído lamiéndolo y mordiéndolo después, Wilson se retorció sensualmente en aquella silla sin ceder a sus piernas cerradas, House a pesar de ello empezó a mover su mano a la fuerza sobre el miembro del castaño empezando a sentir como se ponía duro poco a poco, las piernas de Wilson temblaron claudicantes y finalmente comenzaron a ceder a las caricias placenteras.
-ahh...ah... ¡House! Mhm...- Gimoteaba medio lloriqueando bajito, excitando a House con cada sonido que emitía aquella garganta. Su lengua recorrió el cuello del oncólogo nuevamente al sentirle ceder poco a poco, finalmente Wilson abrió las piernas deseando más de aquello.
-...Ven...ahh...te necesito...- Le musitó con una mirada perdida y abandonada a la concupiscencia, los ojos de House destellaron ante aquella visión y es que cada que este tenía un caso no tenía tiempo para Wilson, aquellos días no habían podido hacer absolutamente nada y ahora que estaban libres ambos, el castaño estaba que ardía en deseos de poseer al nefrólogo. Este al escuchar sus súplicas finalmente cedió y caminó frente a él empujando la silla de modo que esta con las ruedecillas azotó a Wilson con el respaldo contra la pared y entonces se sentó contrario a él empezando a besarle con intensidad mientras dejaba un hueco pequeño entre ellos para meter la mano y seguir jugando con el miembro de Wilson de aquella manera, Wilson se puso tenso al sentirlo pero sin embargo al captar lo que sucedía enredó sus brazos en el cuello de House y siguió besándole explorando aquella cavidad con minuciosidad y jugueteando con la lengua de este en una lucha en la que siempre ganaba House de uno u otro modo.
-mhgh...- Se arqueó ligeramente contra él al sentir como colaba su mano entre su bóxer y se estremeció besándole con más ansias. De repente House alentó sus movimientos cuando a su mente le asaltó la imagen de Watson, se dio cuenta que incluso su excitación había aumentado extrañamente, eso lo hizo sentir muy raro, sin embargo cuando Wilson empezó a dudar de su actitud este continuó fingiendo muy bien que aquello había estado dentro de sus planes...
Exquisita debilidad era lo que sentía Wilson por House pero no estaba loco, sabía que esa reacción rara en él no era común por muy bien que supiera fingirla así, por lo que dejó de besarle empujandole para que se bajara de sus piernas lo cuál hizo sin mucho alboroto, Wilson se levantó y le abrazó pegandolo contra él escritorio besandole el cuello también y después le musitó al oído...
-Él nunca follaría contigo como yo House...- Pronunció amenazadoramente y después de aquello House abrió grandes los ojos mirandole sorprendido.
-¿Cómo dem...-
-Tu deducción se pega ¿sabes?- Le interrumpió rápidamente mirándole malicioso y subiendo las cejas travieso.
-Eres un hijo de...mghm...- Le dijo de repente pero no pudo terminar la frase al sentir a Wilson frotarse contra él provocativamente -¡nhn!...- Luchó contra sus sensaciones y le besó volteando las posiciones dejando a Wilson contra el escritorio, se separó de él y le sonrió del mismo modo malicioso que el del oncologo antes -Vamos a ver como deduces esto entonces...- Musitó desafiante volteandole de espaldas y doblandole contra él escritorio, Wilson estaba tan sumiso ya que no hizo más que seguir los movimientos que las manos de House indicaban y se recargó contra él escritorio deseando al ojiazul cada vez más, sus manos temblaron al sentir el roce del considerable miembro de House contra su trasero.
-nh...nno...no juegues House...voy a matarte...-
-No si yo te mato primero...- Le musitó con una penetrante mirada...
***
Holmes había llegado fuera de la oficina de Wilson y al notar por la rigidez de la perilla de la puerta que estaba cerrada se asomó por los cristales encontrándose con una escena que no hubiera querido ver...pero vaya que el mundo se empeñaba en que ya no conservara un sano juicio de las cosas...