Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Vampire por V chan

[Reviews - 14]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

-Necesito un tiempo, estoy empezando a perder la cabeza de nuevo.

 

Lisa Cuddy observó a House  perpleja. No era habitual que el doctor más brillante y antisocial de su hospital hablara de necesidades, y menos aún que admitiera que algo malo le estaba sucediendo. La situación debía de ser muy grave. Era por Wilson, Lisa lo sabía, aquel asunto estaba poniendo de patas al hospital, con los policías interrogando a todo el mundo, y todos haciendo sus propias “teorías” al respecto. La decana estaba también preocupada por el oncólogo, y al mismo tiempo sentía un extraño dejo de envidia hacia él, no por su situación trágica, por supuesto, sino por la preocupación que demostraba Gregory House al respecto. No era la primera vez que Cuddy sentía eso al ver la “relación” entre los dos médicos.

 

La jefa  esbozo un  gesto de duda mientras House perdía la mirada en el escritorio de su oficina.

 

-¿estás seguro de esto House?, es decir, ¿Cómo sé que no vas a ir a encerrarte a tu casa para atiborrarte de Vicodin y alcohol?, aquí al menos podrás despejarte. Nada va a cambiar porque te aísles aún más del mundo…

 

-escucha Cuddy- la interrumpió Greg  perdiendo los pocos estribos- ¿Cuántas veces he venido a pedirte una licencia antes?, hay algunos desgraciados en este hospital a los que les das días hasta para tirarse un pedo en comodidad, ¿y a mí me das tantos peros?

 

-bueno, mira, entre tiempo de desintoxicaciones fallidas, psiquiátrico, llegadas tardes y horas que  debes de clínica…

 

El nefrólogo la miro  con un muy sutil gesto de súplica en sus enormes ojos claros que Cuddy comprendió. No podía decirle que no. Finalmente Lisa hizo un gesto de resignación.

 

-está bien House, tienes unos días. Pero ni se te ocurra desconectar el teléfono, ni perderte en la nebulosa, quiero estar segura de que no vas a estar haciendo ninguna locura sin sentido… ¿me escuchas?

 

En realidad Gregory no la escuchaba, pero de todas formas asintió y se levantó para salir de allí.

 

-oh, y House, hazte un análisis, estas pálido, tienes la zona lagrimal blancuzca, ¿estas comiendo bien?, pareces anémico…

 

House puso los ojos en blanco, mientras salía todo lo rápido que podía, y respondía con voz burlona.

 

-está bien, mami, lo tendré en cuenta.

 

 

 

No lo tuvo en cuenta. Lo primero que hizo fue  irse a su depto.  y acostarse a dormir. Lo necesitaba. Era de día, pero no importaba.

 

Durmió bastante y tranquilo, sin ningún sueño perturbador ni nadie tratando de despertarlo, así que cuando despertó se sintió un tanto aliviado. Miro el reloj: 8.25 pm. ¡ya había anochecido!. Gregory lanzo una exclamación de sorpresa ante esto y se levantó  para prepararse un sándwich, tenía un hambre de mil demonios.

 

Una vez que tranquilizó a su estómago, prendió el equipo de música y puso un cd de blus de esos que lo relajaban tanto y loa ayudaban a pensar. Por supuesto, en su cabeza estaba Wilson todo el tiempo. ¿Dónde estaría en esos momentos?,¿lo habrían herido?, ¿Dónde demonios podría encontrar alguna pista para saber de él? Si esperaba a que la investigación de la policía avanzara se volvería abuelo, estaba seguro. De repente tomo una determinación. Se levantó como activado por un resorte, se puso su cazadora motera, un bote de vicodin extra, por si acaso, y salió.

 

Era un posibilidad remota la de encontrar algo que pudiera servirle en el condo de James, después de que la poli diera vuelta todo el lugar, pero no perdía nada con intentar, y además no se le ocurría otra cosa. House monto en su moto y llego en pocos minutos al departamento del oncólogo. Aparto las tiras de “no traspase” que estaban en la puerta de un manotazo y entro con la llave que no había devuelto nunca.

 

Encendió la luz y comenzó a recorrer el tan bien conocido lugar. Observo  las manchas de sangre repartidas en el piso, ya secas, pero bien visibles. Respiro profundamente y se dio cuenta de que podía percibir el olor al líquido vital. Esto lo descoloco. Se sintió fascinado con los rastros en el suelo. Cuando se dio cuenta de que se había quedado mirando las manchas estúpidamente, se apresuró a moverse, caminando hacia el dormitorio de Wilson.

 

Allí estaba todo revuelto, las sabanas de la cama (que también estaban manchadas) se encontraban desparramadas de cualquier manera, había una remera de James en el piso, y pedazos de satén blanco, que House pensó que debían pertenecer a la ropa de Samantha que llevaría puesta la noche del crimen. Gregory tomo la remera de su amigo del piso y la acercó a su nariz. Ahí estaba su perfume otra vez .Jimmy olía muy bien, cosa a la que el nefrólogo no había prestado especial atención antes, pero ahora cerro los ojos e inspiro profundamente para llenarse del aroma.

 

Pero entonces pego un salto. Alguien se estaba riendo y el sonido de la risita invadió la habitación imprevistamente. House miro a su alrededor, alarmado, pero no vio a nadie. Se asomó al pasillo y observo en todas las direcciones pero tampoco topo su vista con nadie más. Pensó en gritar el clásico “hola, ¿hay alguien ahí?”, pero analizándolo mejor  aquello era un tanto estúpido, es decir, si había alguien por allí  acechando  dudaba que el fulano quisiera acercarse a presentarse y darle un  apretón de manos, y si en cambio las intenciones eran buenas se haría ver solito. Como buen pesimista lo primero que pensó Greg fue que el asesino había vuelto a la escena de los hechos, y que él estaba absolutamente en la boca del lobo, ya que lo único que tenía a mano a modo de defensa era su bastón. Verdad era que él sabía usarlo como un  arma bastante potente. Recordando eso  comenzó a avanzar hacia el living, con el bastón en alto, tratando de no hacer mucho ruido.

 

No había dado ni dos pasos cuando la risa sonó otra vez, pero en esta oportunidad más fuerte  y más maliciosa. House se volteó rápidamente por que habría jurado que el sonido provenía de detrás suyo, pero  al mirar en esa dirección solo se encontró el pasillo vacío, y las puertas de las otras habitaciones cerradas, al igual que hacia tan solo unos segundos.

 

Entonces su instinto le dijo a gritos que saliera pitando de allí, y eso fue lo que hizo, o mejor dicho intento, porque ni bien estaba llegando al living algo se interpuso en su camino.

 

-¿te vas tan rápido Greg?- le dijo un sonriente James Wilson deteniéndolo por los antebrazos.

 

House parpadeo varias veces antes de hablar. El oncólogo se veía igual que en su sueño, pero ahora podía estar seguro de que estaba bien despierto.

 

-¿Wilson?, mierda,¡ me asustaste!

 

-perdón, cariño – respondió su amigo sin dejar de sonreír, ni de apretarlo en los brazos. ¿cariño?, aquello no estaba bien. Greg sintió los latidos de su corazón acelerarse en cuanto comenzó a sospechar que el mentado sueño no había sido tal cosa. Trato de sonar lo más normal posible al hablar.

 

-¿pero qué carajo paso?, ¿Qué te ha sucedido?

 

-mmmm, creo que este no es el lugar adecuado para hablar- dijo James posando su mirada distraídamente en las manchas del suelo- acompáñame, tengo un lugar para mostrarte que te va a encantar-agrego con descuidada suavidad, para luego liberar un brazo de House  y tomar la mano del otro, con fuerza, tironeándolo.

 

-¡espera!-dijo el mayor cada vez más confundido-¡dime qué demonios está pasando primero!, ¿Qué sucedió con  Sam?, ¿Qué paso esa noche Wilson?  

 

El oncólogo lo miro muy serio, y Gregory pudo notar cierto dejo de amenaza en sus ojos, su mirada entonces le recordaba a la propia.

 

-House, te he dicho que este no es el lugar, vamos, te llevare a mi nueva casa, tengo que presentarte a alguien- contesto James, y sin esperar respuesta arrastro a su compañero a la salida.

 

Greg estaba atónito. Sintió la fuerza y el frio de la mano de Wilson en la suya, y tuvo la desconcertante certeza de que  si seguía oponiéndose la reacción del oncólogo no sería agradable. Esto lo dejo sumamente perplejo. ¿Wilson resultando amenazante?. Tenía que estar en otra dimensión.

 

Llegaron al exterior y James diviso la moto de su amigo aparcada en l vereda. Sonrió. Camino con House, sin soltarlo un momento, lo que al mayor le hizo pensar que se verían muy raros, al notar la curiosa vista de los transeúntes sobre ellos. Cuando llegaron frente a la motocicleta Gregory escucho a Wilson decir con total tranquilidad.

 

-dame las llaves, yo conduzco.

 

¡Aquello sí que era un despropósito!, el nefrólogo respondió boquiabierto.

 

-¡pero si tu odias las motos!, ¿desde cuándo…?

 

-oh, vamos Greg, ¿tú no querías que lo intentara?, bueno, voy a hacerte caso – dijo James, obviamente divirtiéndose con sus reacciones, mientras extendía una mano hacia el bolsillo  interno de su cazadora, tomando las llaves de la moto, que sabía que llevaba ahí.

 

-vamos, House, nos esperan- agrego Jimmy luego, ya montado.

 

A Gregory no le quedó más remedio que subirse de acompañante y dejar que Wilson lo llevara a su misterioso “nuevo hogar”.

 

 

 

 

 

 

Notas finales:

espero que les haya gustado este!, en unas horas vuelvo a la facu, y ya no estare con tanto tiempo, pero prometo actualizar lo antes posible.

gracias por leer! ( y gracias extras a los q comentan XD )


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).