Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Dones por maxi anime

[Reviews - 48]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola a todos, como me lo esperaba en menos ed una semana actualice XDD, estoy con mucha actividad lo que si acabo de hacer un nuevo cambio.

Debido a lo que parece poco gusto por la pareja SagaxMu,  decidi cambiar a la pareja Saga x Kanon, quizas guste mas o eso espero.

Las cortinas de la habitación se movieron lentamente, impulsadas por el viento de la mañana fresca. El sonido de los pájaros revoloteando cerca no se hizo esperar, seguido por el bello canto y por sonido de  los arboles siendo mecidos por el viento. Todo parecía estar en paz, parecía que existir guerras ni odios en ese momento, pareciera como si el amor y la justicia que tanto profesaba Athena habían logrado llegar a cada persona en el mundo, aunque eso era la ilusión del momento tranquilo.

Milo despertó y se incorporó lentamente, desde que  habían llegado un mes atrás a Francia habían permanecido siempre en casa de la familia del de Acuario, por mero capricho de este y sus dos meses de embarazo.  Al santo de escorpio no le molestaba cumplir hasta con el más insignificante deseo de Camus, amaba verle la sonrisa, intentar que se expresara mediante actos y no usando el juguete que tenía que usar para hablar. Aunque cumplir con los caprichos era algo costoso para él, sacrifico su comodidad de dormir en una cama de dos plazas en la casa de acuario para dormir en una de plaza y media en la casa de los padres de este, pero para el su sacrificio tenía mucho valor, al ver que las depresiones del de acuario habían desaparecido como por arte de magia y sonreía con gran normalidad gran parte del día.

La Puerta de la habitación se abrió lentamente, Milo aparento dormir y miro aquella imagen que ya se había acostumbrado a ver diariamente, la madre de Camus quedándose mirándolos a los dos dormir,  sonreía de verlos juntos en la cama y dedicaba a observarlos hasta que de la nada aparecía su esposo detrás de ella, también se quedaba mirando hasta que su reloj sonaba.

- Ya me voy- beso Arthur a su mujer- Recuerda que esta noche es la reunión importante.

- Que tengas buen día- exclamo la dulce mujer sonriendo sin perder de vista a Camus- No te preocupes, me encargare de cada detalle, Camus se pondrá muy feliz.

- En ese caso puedo irme tranquilo, que tengan buen día los tres- exclamo sonriendo y luego se alejó a paso lento.

La mujer de ojos carmesí se quedó un rato mirando a los dos que parecían dormir tranquilamente, aunque claramente sabía que Milo no lo estaba y posiblemente Camus tampoco estaría del todo dormido. Después de contemplar a ambos santos dorados un momento salió dela habitación dejando la puerta entreabierta, si su instinto no le fallaba Milo se levantaría poco después aparentando acabando de amanecer.

Milo se levantó poco después de asegurarse de que la mujer se había ido, tenía interés en saber de qué se trataba la tal reunión importante y la razón por la que la misma pondría a Camus contento. Salió a la cama lo más sigiloso que pudo, su intención era averiguar lo más posible antes que Camus despertara de su dulce sueño. Cuando Milo se hubo ido de la habitación Camus hizo exactamente lo mismo, levantarse con sigilo y caminar en busca de su progenitora y Milo, aunque su caminar era más lento, debía ir con cuidado para no golpearse por su falta de vista, tocando las paredes para poder ubicarse.

La madre del santo de Acuario se encontraba en la cocina preparando el desayuno para los dos miembros de la familia que suponía venían bajando por las escaleras, no tardo en sentir a Milo entrando a la cocina y comenzó a preparar la mesa para el desayuno.

-Buenos días Milo, ¿Aun no te acostumbras a no hacerle el desayuno a Camus?

-Costumbre, solía levantarme a las cinco de la mañana para prepararle todo.

-Cinco de la mañana es muy temprano- exclamo sorprendida.

-No, era algo tarde en realidad, a Camus le gusta le gusta el pan recién hecho y esas cosas, pero él no puede comer nada caliente, mucho menos usar los cubiertos de cocina,  entonces me levantaba a hacerle su desayuno y hasta que se levantaba este ya se encontraba a una temperatura agradable para él, el pan cortado y con el dulce que el prefiriera- respondió mirando la mesa de desayuno.

- ¿En ese caso no crees que eres un poco sobreprotector con Camus?- pregunto mientras ponía  tres tazas de café con sus respectivos platos pequeños en la mesa- tengo entendido que ha pasado ya un año, al menos mi hijo ya debería poder manejar los cubiertos para comer, como mínimo.

-Camus ha estado muy depresivo desde que…todo paso- explico- temo dejarlo solo y que su depresión lo domine, él es el más sufrido de todos, imagínese poder escuchar y no hablar, ha de ser desesperante y lo último que vieron sus ojos fue la luz solar que destruyo el muro de los lamentos, y después de todo eso solo ha visto oscuridad…con Hyoga nos ha costado mucho poder animarlo.

-Me imagino lo desesperante que debe ser, pero una forma de ayudarlo es dejarlo que haga cosas por sí mismo- exclamo poniendo una charola con pan cortado.

-Era más que desesperante, los primeros meses fueron lo peor, con Hyoga lo escuchábamos llorar, mañana, tarde y noche, durante la noche hasta que se dormía, solía despertarse de madrugada y volver a llorar hasta dormirse nuevamente, no dejaba que nadie lo toque y hacia oídos sordos si uno le hablaba- dijo pensante- los primeros meses él se negaba a comer, Athena nos dijo que no lo obliguemos a comer pero el perdía peso y seguía perdiendo, con Hyoga estábamos desesperados.

-¿Cómo hicieron para que el comiera?- pregunto intrigada ante lo que le estaban contando.

-Hyoga le hacía cosquillas y yo le metía a la boca algo de comida, al principio me escupía en la cara pero algo lograba tragar, luego comenzó a comer, me hizo lo mismo con la leche una veintena de veces hasta que comenzó a beberla…era frustrante intentar ayudarlo y que él se negara… ¿desayunara con nosotros?

-No exactamente- exclamo  sonriendo.

Camus bajaba lentamente por las escaleras, sus manos casi pegadas a los barandales para no caerse, después de un mes por andar por aquella mansión ya se sabía el camino a cada lugar pero aun tomaba precauciones para no golpearse en el trayecto. Logro llegar a salvo al piso inferior y luego a donde estaba el gran sillón, el cual era su guía para ir a la cocina, pero no se percató de que alguien lo seguía desde que había salido de la habitación.

 A punto de entrar a la cocina alguien lo detuvo, tapándole los ojos, y todo fue silencio, su madre y Milo se quedaron callados, aunque segundos atrás los había escuchado hablar, lo primero que pensó el santo de Acuario es que no eran ellos quienes pudieron taparle los ojos, por la lejanía por donde los escuchaba, no podía ser su padre, porque este acababa de salir a trabajar y era posible que quien le tapara los ojos no supiera que él estaba ciego , aunque también se mantenía callado, si estaba seguro que era alguien conocido por Milo y su madre ya que estos guardaron silencio desde que le tapo los ojos. Camus comenzó a buscar en las manos de aquel algo que le diera indicios de quien era, pero no encontró nada, por lo que siguió explorando los brazos y llego hasta la cabeza, donde claramente logro reconocer una seña particular en el ojo izquierdo.

-Maestro- exclamo Hyoga destapándole los ojos  y luego lo abrazo.

-¿Qué haces aquí Hyoga?- pregunto Milo sonriendo al ver a Camus abrazarlo contento.

-Recibí una carta en el santuario que debía venir cuanto antes, pensé que algo malo les había pasado a ustedes y tan pronto como pude llegue- explico el rubio llevando a su maestro a sentarse.

-Cómo van a quedarse una buena temporada y sabiendo lo importante que es Hyoga para ti hijo decidimos invitarlo, a estas alturas muchos de tus compañeros debieron haber regresado ya al santuario- explico la madre del santo de acuario.

-No han regresado casi ninguno, solo el santo de Libra, Dohko y el patriarca Shion- Explico Hyoga- Athena pidió a los santos de plata no abandonar el santuario hasta el regreso de ustedes.

-¿Ninguno?- pregunto Milo consternado- Sera mejor regresar.

-No es necesario Milo, ustedes tienen permiso para quedarse, porque lo que tengo entendido en estas semana operaran a Shura para que recupere la audición- acoto Hyoga.

-¿Lo operan?- pregunto Camus a través de su máquina con una sonrisa en su rostro.

-Sí, cuando Athena regreso al santuario después de algo que fue a hacer a España, todos preguntamos por ustedes, Athena dijo que a Shura le estaban haciendo análisis en España y que si todo salía bien podrían ponerle un implante para que recupere la audición y tiene permiso para permanecer allá con Aioros, Shaka y Aioria están en la india buscando una solución- explico el rubio- de los demás, solo sé que Shion permitió que Saga, Kanon, Mu y Kiki permanezcan en Jamir, al parecer Saga está siendo sometido a un tratamiento de aguas curativas para recuperar sus sentidos, de Aldebarán, Death Mask y Afrodita no se ha sabido nada, pero Athena confía en que no tarden en regresar.

-¿Cuándo llegaste Hyoga?- pregunto Camus a través de su aparato.

-Esta madrugada.

-Por eso no sentiste a tu padre llegar del trabajo cielo, él lo fue a buscar- acoto su madre dándole el vaso de leche a Camus- toma

Hyoga rápidamente se acercó a tocar el vaso de leche tibia, al sentirlo en una temperatura optima regreso a sentarse con una sonrisa- disculpe que sea muy precavido, pero me preocupa mi maestro, no me gustaría que se quemara con una bebida.

-No hay problema Hyoga, lo que si necesitare que ayuden a Camus a comer con cubiertos para esta noche- dijo amablemente- Arthur tiene una reunión muy importante a la que la familia debe asistir, como Camus es único hijo tiene que estar presente y debe comer por sus propios medios.

-Pero…voy a verme extraño- dijo la voz robótica- prefiero no ir, pareceré un desvalido al no poder hablar ni ver.

-No se preocupe Maestro, no me separare de ustedes en toda la noche para que disfrute la velada.

-Yo no me separare de ti aunque me lo pidas- acoto Milo besando a Camus en la mejilla.

-Milo- exclamo Hyoga sonrojado mirando a la madre de su maestro.

-Lo sé todo desde que llegaron, ninguno pudo ocultar cuanto se querían- dijo la  señora de la casa- terminen de desayunar y pueden ir afuera a tomar un poco de sol.

-Disculpe si sueno algo…entrometido- interrumpió Milo- he notado en todo este mes que Camus ha sido la adoración de usted y su esposo desde que nació, pero me llama poderosamente la atención que en su habitación allá referencias a que iba a ser santo de la constelación de acuario, no me puedo explicar cómo lo dejaron irse a Siberia para convertirse en santo siendo este el tesoro de ustedes.

-Fue doloroso, no lo dudes- dijo poniéndose tras su hijo y luego lo abrazo- todo paso muy rápido, antes del tercer cumpleaños, desde pequeño Camus no soportaba temperaturas cálidas, en verano la pasaba en su cuarto jugando, escapando del sol, en invierno y otoño contento jugaba afuera, feliz se podría decir, cuando hacía calor él se ponía muy mal, según su pediatra era algo normal a su corta edad que tomara más gusto por temperaturas bajas y no altas, que con el tiempo el gustaría de temperaturas más templadas.

-No me explico aun lo de la constelación de acuario en el techo del cuarto.

-Cuando Camus tenía dos años y medio, llego a casa un hombre, su maestro- explico mirando al vacío- él nos dijo que las estrellas habían iluminado a Camus al nacer, era la reencarnación del santo de Acuario, protector de la onceava casa y que debía irse a Siberia al cumplir los tres años, Mi esposo y yo negamos  desde un primer momento, no queríamos que nos separaran de él, el hombre nos dio seis meses para probar sus palabras y cada una fue probada, muchos de los dibujos de Camus eran garabatos pero si uno miraba detenidamente el color azul con el que dibujaba, sus garabatos tenían una forma, de la constelación de acuario, un aguador, una vasija, incluso llego a hacer las luces del norte sin conocerlas, sin saber de las constelaciones Camus reconoció a la constelación de Acuario y cuando uno le preguntaba que veía en el cielo te decía, un hombre con un  vaso de agua o una vasija que derramaba agua, incluso señalaba las estrellas.

-Ya veo…- dijo Milo apenado.

-Lo último que su maestro nos mostro fue unos juguetes que eran de su antecesor y un par de lentes, Camus nunca los había visto y menos sabia como usarlos, pero cuando los toco supo cómo usar cada cosa, se puso los lentes, incluso aparentaba leer un libro viejo que su antecesor dejo sin terminar y el sabia la página exacta en que lo dejo, tristemente tuvimos que dejar ir a nuestro hijo, ya que el lucharía por el amor, la justicia, por la humanidad, contra nuestros deseos…tuvimos que hacer ese gran sacrificio, esperando algún día volver a tenerlo en nuestros brazos, eso no paso hasta hace un mes- explico abrazando al pelirrojo.

-Levántate Camus, levántate del suelo, tu pelearas por el amor y la justicia- escribió Camus en el aparato- ¿Quieres volver a ver a tus padres? Conviértete en santo dorado.

-¿Te trato mal cielo? – pregunto su madre mirándolo tristemente.

-No…no mucho- explico- al menos no me maltrataba, pero jure que sería mejor maestro que él, nunca maltrataría a mis alumnos si me tocaba ser instructor para futuros santos.

-Usted es el mejor maestro de todos- dijo Hyoga y fue a abrazarlo.

-Eres el santo más noble- acoto Milo- sacrificaste mucho por Athena, creo que eso te hace el mejor santo de todos.

-Cuando Camus se fue, pintamos la constelación de Acuario en el techo…al menos con eso sentíamos que teníamos a nuestro pequeño con nosotros- dijo tristemente a punto de llorar- perdonen…

-No se preocupe, entendemos- exclamo Hyoga- ha de ser difícil separarse de un hijo por el bien del mundo y aunque fuera lo correcto ha de ser muy…doloroso.

-Lo importante es que ahora está aquí, en su casa, con su familia- dijo sonriendo, pero fue interrumpida por el sonido del timbre, por lo que fue a atender.

-Con su familia, maestro- exclamo Hyoga con algo de desolación en su voz.

-Hyoga, tú eres como un hijo para nosotros, parte de nuestra familia- dijo Milo mirándolo con amabilidad- Camus sacrifico su vida para que tu llegaras al cero absoluto, ambos te protegimos cada vez que tuvimos la oportunidad.

-Si soy parte de su familia ¿Por qué no me dijeron del bebé?- pregunto mirando  a ambos.

-¿Quién te lo dijo?- pregunto Camus con su aparato- no queríamos decirte nada, hasta estar completamente seguros, hasta que…bueno.

-Cuando se fueron limpie la casa de Acuario y encontré un test de embarazo- explico sonrojado- y sabiendo que usted ha estado muy feliz por ese hecho maestro, yo…

-Hyoga, no, tu eres como un hijo para mí, nunca dudes eso- dijo Camus a través de su traductor- a pesar que te he tratado mal desde que regrese, por mi falta de sentidos, haz estado a mi lado, consolándome y dándome ánimos….

-Cuando se sentía mal le dabas hielo, si tenía fiebre emanabas aire frio para calmarlo- acoto Milo- Somos una familia, no queríamos decirte del bebé hasta estar completamente seguros, teníamos miedo de que…bueno, es un embarazo arriesgado y ni hablar de tus celos, te gusta hacerte notar cada dos segundos, solo ten por seguro que nadie ocupara tu lugar, eres parte de esta familia y siempre lo has sido.

-Gracias maestro- exclamo el rubio abrazándolo- ¿De cuantos meses está esperando?

-Dos- escribió- apenas cumplí dos.

-Entonces es reciente, me adelante al comprar un juguete- dijo apenado- compre un oso de peluche cuando venía…pensé que sería un lindo detalle.

-Lo es- dijo la voz robótica.

-Es muy lindo de tu parte Hyoga, vez Camus, te dije que será un buen hermano mayor…

La mueca de Camus decía todo, Hyoga sabía perfectamente que maestro confiaba ciegamente en él y que Milo solo hacia lo que hacía para sacarle una sonrisa a los dos santos de los hielo.

-Hyoga, dijiste que es muy resiente- recapacito Milo- Nosotros sabemos que Mu, Afrodita y Shura están esperando también ¿Qué sabes tú?

-Sé que Mu y Afrodita tiene cuatro meses o algo así, según Shiryu el de Shura es de tres meses- explico sonriendo- me pone muy feliz saber que usted es feliz maestro.

-Tú también eres parte de esa felicidad Hyoga- acoto Milo-los tres somos una familia muy poco convencional, pero una familia al fin.

-Me alegra escuchar eso- sonrió el ruso- maestro.

********************************************************************

Las planicies de un lugar remoto, donde solo muy pocos lograban acceder, rodeado de montañas, nubes y silencio, las planicies de donde ahora vivía el antiguo pueblo de Mu eran eso, un lugar histórico y desértico. Entre las antiguas ruinas de piedra, rodeadas por hierbas de más de cientos de años,  se hallaba un manantial, cuyas aguas eran reconocidas como milagrosas, cualquier mal podían curar, según la leyenda de los pueblo ese lugar era sagrado y jamás debería ser corrompido por la mano del hombre y durante los cientos de años había permanecido oculto en el tiempo.

Mu sabia de sus cualidades curativas de este lugar y en un afán de ayudar a Saga a recuperar sus dos sentidos faltantes, el oído y el habla, lo llevaba allí diariamente para que el santo de géminis se bañara en sus aguas milagrosas. Diariamente Saga se sumergía en sus aguas buscando un alivio para aquellos males que lo perseguían desde la victoria de Athena en la guerra contra Hades, desde que había despertado aquella calurosa mañana en el santuario y se dio con la desagradable noticia de no poder hablar ni oír, aunque su dolor no fue tanto comparado con el que pasaron Shura y Camus, o al menos así pensaba él.

Saga había aprendido muy rápido a leer los labios y comunicarse en lenguaje de señas,  por ello y en comparación con Camus y Shura, tenía total percepción del paso del tiempo, lo que Shura no tenia, y del espacio, lo que a Camus le faltaba al no tener la vista. Desde que había regresado a la vida estaba acompañado por su hermano gemelo Kanon, quien juro no separarse de él nuevamente y hasta la fecha, a un año de los acontecimientos lo había cumplido. Pero, al igual que Camus y Shura, también se deprimía por su falta de sentidos, en más de una ocasión había intentado quitarse la vida de la manera más “tradicional”, cortándose las muñecas o  de la misma manera que se quitó la vida la primera vez, en todas sus actos fallaron al ser Kanon quien lo detenía.

Kanon en cambio despertó con todos sus sentidos, muchos dieron por sentado que él sería el sostén del guerrero de Géminis o al menos ocuparía su lugar hasta que los recuperara Saga, pero en cambio él se había convertido en más que eso. Kanon fue quien aprendió en primer lugar el uso del lenguaje de señas y después le enseño a Saga para que este se comunicara, preocupado por su hermano no se separaba de el en ningún momento y no solo por el temor a que Saga cometiera Suicidio, sino al amor que sentía hacia su hermano mayor y era correspondido o eso parecía.

Saga pasaba diariamente una hora al día en aquel manantial, intentando recuperar sus sentidos, pero hasta la fecha nada había pasado, todo seguía igual. Kanon siempre lo esperaba  ansioso de sus sesiones en el agua, esperando ver algo, poder escuchar nuevamente la voz de su hermano o que este lo pudiera oír, pero no había pasado nada, aun así ninguno perdía las esperanzas.

-Saga- exclamo el gemelo menor dándole la toalla para secarse- Volverás a hablar y a escuchar yo lo sé.

Saga se secó tranquilamente y se colocó la túnica que Mu le había dado para su estadía en aquella zona, sin más volvieron a la torre de Jamir donde Kiki los esperaba con una sonrisa de par en par, aunque luego bajo la mirada cuando vio la negación en el rostro de los gemelos géminis.

-Las aguas curan lo que sea, hay que darle más tiempo- exclamo el menor sonriendo- dígales maestro.

-No pierdan la fe- exclamo lentamente el santo de Aries, seguido Saga y Kanon sonrieron.

Entraron dentro de la torre de Mu y fueron a la cocina, donde ya estaba previamente servida las tazas de té. Saga se sentó con consocio y dio un largo suspiro de resignación a lo que Kanon luego fue a abrazarlo por la cintura.

-Shaka dice que hay algo que aprender- exclamo el dueño de la torre- aún no sabe que, Saga tiene que aprender a ver más allá de lo que sus ojos ven,  pero no entiendo que es lo que tiene que ver.

-Yo aún no lo entiendo- dijo desilusionado el ex general  de Poseidón- Uno de los santos más fuertes…con una maldición tan terrible…debí ser yo.

-No Kanon, si a ti no te paso nada es porque has comprendido todo- explico Mu sonriendo- no necesitas aprender más nada, es Saga quien tiene los ojos vendados a pesar de ver.

-¿Pero qué es lo que tiene que ver?

-Bueno, tengo entendido que la situación de Shura mejoro recientemente- acoto- lo operaran para que recupere la audición y el, le puso énfasis a sus deseos cuando supo que estaba esperando un hijo de Aioros, quizás eso necesita saber Saga, que le digas sobre…tú ya sabes.

-Tengo más tiempo que cualquiera y aun así, gracias a la psicoquinesias he logrado aparentarlo- dijo avergonzado- no puedo creer que todos hayan caído en eso, menos tú…

-Kanon, hacerme ver como el embarazado cuando en realidad eras tú, fue una gran treta debo admitir- exclamo sonriendo- pero si lo que dice Shaka es verdad, Saga tiene que aprender algo y ese algo puede ser que tú puedas ayudarlo a comprender.

-La mente de Saga es susceptible a todo- acoto- aún no sé cómo explicarle que tendré gemelos…que dentro de cuatro meses llegaran... y yo…

-Has dejado pasar mucho tiempo, Kanon y tarde o temprano él debe enterarse, estas a cuatro meses de que llegue ese par al mundo, no creo que sea correcto ocultarle a su padre.

-Lo sé, lo sé-dijo pensante el gemelo menor y luego miro a Saga, quien leía una revista mientras tomaba su taza de Té.

-Regreso en un momento- exclamo el santo de Aires levantándose y se llevó a su discípulo consigo.

-Saga- dijo Kanon en un tono cansado tomándole las manos- tienes que saber algo.

Saga lo miro sin entender y luego entre señas le pregunto qué pasaba, Kanon usando el mismo lenguaje de seña que había aprendido para comunicarse con él en primer lugar le explico todo lo que le había ocultado en cuatro meses. Con Psicoquinesia había aparentado estar normal, que luchaba diariamente para mostrarse fuerte ante todos y que a todos los habia engañado.

Saga lo miro sin entender y con sus manos le pregunto qué era lo que debía saber y con lo que lo habia engañado Kanon, este lo tomo con ambas manos y toco su vientre, seguido toda la habitación pareciera que se movió, la ilusión provocada por la mente de Kanon hubo terminado al fin.

Kanon llevaba un vientre más que evidente, no era de sorprenderte pues el, además de ser el santo que llevaba más tiempo embarazado, era el único que esperaba por partida doble. Saga no salió de su asombro, no entendía que pasaba hasta que entro Mu y lo vio, el ya no llevaba aquel vientre que venía viendo en meses, miro a Kanon y este apenado lo miro a él.

Saga sonrió- Ya lo sabía- explico con sus manos haciendo señas- Ya lo sabía.

-¿Cómo?- pregunto Kanon sin salir de su asombro.

-Eras el único sano- hablo con sus manos- el único de doce…era muy sospechoso.

Ambos gemelos sonrieron, Mu sonrió viendo aquella muestra de afecto desde un pilar, el tiempo diría si Saga debía aprender algo para recuperar sus sentidos faltantes y fuera lo que debía ser, Kanon estaba comenzando a ayudarlo a ver más allá de lo que sus ojos captaban, tal como le dijo Shaka semanas atrás cuando Buda le comunico que todo era una prueba más.

Continuara 

Notas finales:

Espero les guste el cap,

Se habran dado cuenta que cambie la pareja SagaxMu por la pareja SagaxKanon, es que en bueno, me gusto mas para este fic teniendo en cuenta que Kanon pasa mas tiempo con su hermano que Mu.

Quizas alla quedado un poco confuso pero bueno, vale explicar, lo que paso en el fic, osea en la trama, es que Kanon usando su psicoquinesia a todos les hizo creer que el embarazado era Mu cuando en realidad era Kanon y Mu tambien ayudo a ese cometido con tal de ayudar al gemeinis menor con su dilema, quizas mas de uno no noto que Kanon era el unico que se dijo Sano cuando todos tenian algo XD

Espero les alla gustado, ya saben los Reviebs me animan a escribir, si ven los horrores de ortografia me avisan asi veo que paso, si es el Word, si se me pasaron a mi o es cuando subo a la pag el cap.

 

Nos vemos en la proxima actualizacion


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).