Ya habian pasado dos noches y los shinobis de konoha aun no llegaban, sino hasta esa misma tarde. Era normal, siempre tenia que pasar tres dias...
Gaara se habia levantado hace unas horas, no estaba acostumbrado a dormir tanto tiempo. Asi que se dirigio a la parte de abajo de su casa para desayunar algo, al entrar en la sala encontro al pequeño que habia conocido en el alberge donde los niños huerfanos iban y comian algo. Gaara se habia encariñado tanto con el que lo invito a vivir a su casa con sus hermanos.
Aun recordaba como lo habia conocido...
Gaara habia decidido que el mismo iba ser quien abriera el alberge todas las mañana. Ese dia en particular, el sol aun no salia asi que el particular frio de las noches en el desierto aun estaba presente, pero eso no impedia a gaara para llegar temprano.
Al estar ahi entro por la parte de atras, miro a su alrededor era algo acojedor para un alberge, pero era lo que se tenia ya pronto averiguaria la forma de recaudar fondos para ese lugar. se dirigio a la parte de enfrente donde habia un porton grande, lo abrio despacio ya que hacia mucho ruido y no queria despertar a alguien vecino. Al terminar de abri el porton, en frente al otro lado de la calle cio a un niño sentado en una banca; este traia unos shotrs cafes al igual que su playera de manga corta, gaara se pregunto como podia aguantar el frio, incluso él traia ropa de manga larga porque aunque no lo admitiera, tenia frio
Comenzo a cruzar la calle. El niño le causo curiosidad, camino lentamente hasta quedar frente a el, este levanto la vista y ahi fue cuando gaara pudo apreciar su cabello rubio como el de su hermana pero ademas sus ojos tan extraños; el derecho era de color violeta y el izquierdo de color purpura. Realmente extraño, pues no conocia una enfermedad que a los ojos les diera ese color.
Se quedaron en silencio por un largo rato, mirandose el uno al otro, hasta que gaara decidio hablar:
-¿Que haces en este lugar a estas horas?-le pregunto tratando de no sonar tan frio, pero la verdad era realmente dificil para él, el niño miro al suelo avergonzado por la pregunta:
-etto...yo...estaba...estaba esperando a que...-pero no pudo terminar su frase, estaba tan avergonzado de decir que no tenia ni para un pedazo de pan, pero gaara entendio perfectamente lo que trataba de decirle. Le tomo el brazo con delicadeza, el niño lo miro sorprendido:
-vamos-le dijo, el rubio se puso de pie y le siguio. Al entrar en el lugar, el pequeño se acaricio un poco lo brazos al notar radicalmente el cambio de clima de frio a calientito. Se acercaron a una mesa que estaba de frente a una pequeña chimenea, el niño se sento en una silla, gaara estaba en otra habitacion haciendo sabe que cosas. Pronto se dirigio nuevamente a donde estaba el niño con un baso de chocolate caliente en sus manos, se sento frente a el:
-toma-le dijo gaara, coloco el chocolate frente al niño:-la comida estara en unos momentos mas-le explico, pero el rubio mantenia la mirada baja mordiendose el labio inferior:-¿Que sucede?-le pregunto:
-es que...es que...yo no tengo para pagarle, señor-una vez mas sintio verguenza al decir eso, mientras que gaara sintio una gran tristesa al escuchar al pequeño, suspiro un poco:
-no te preocupes, no tienes que pagarme...es un regalo-le dijo cerrando los ojos, trataba de reprimir esas ganas de llorar al ver a un pequeño tan indefenso e inevitablemente se vio reflejado en él. El rubio lo miro sorprendido, nadie nunca le habia regalado algo, ni siquiera una migaja y ahora este *señor* le daba comida asi de la nada...tal vez era ese milagro que habia estado pidiendo desde hace mucho tiempo:
-a...arigatou-murmuro, lentamente tomo la taza de chocolate y comenzo a beberla de forma lenta, gaara abrio nuevamente sus orbes verdes para contemplarlo:
-¿Como te llamas?-no pudo evitar preguntar, el pequeño dejo su chocolate en la mesa:
-perdon. No me he presentado-sonrio, una sonrisa que le quedaba hermosa:-Me llamo Daiki y tengo diez años-luego volvio a darle un sorbo a su bebida. Gaara sonrio internamente...ese niño era especial, lo supo desde el momento en que se acerco a él, y no iba a dejarlo solo...
Esa misma tarde, despues de haber terminado sus deberes -un poco mas temprano- de kazekage, se dirigio a su casa, la que compartia con sus hermanos y junto a él iba su nuevo amigito Daiki que despues de haber tenido mas confianza en gaara comenzo a llamarlo *gaara nii*
Recordaba muy bien como habia entrado a su casa pidiendole al rubio que esperara en la sala mientras el iba a la cocina donde seguramente estaban sus hermanos:
-gaara que bueno que ya llegaste-dijo su hermana ofreciendole algo de té que el pelirrojo rechazo con educacion. Suspiro, sus hermanos le miraron:
-tengo que darles una noticia-sono serio, tanto que kankuro se asusto gritando:
-¡¡ESTAS EMBARAZADO!!-al pelirrojo le dio un tic en el ojo derecho y es que las unicas veces que le daba su tic es desde que comenzo a aguantar las bromas pesadas de kankuro:
-¡cierra la boca kankuro!-le grito temari arrojandole el té que anteriormente le habia ofrecido a gaara, este lo esquico con facilidad, despues arreglo su gorro:
-dejense de tonterias-sus hermanos le miraron, serios-esta vez:-Desde este momento en adelante alguien comenzara a vivr con nosotros-dijo
-¿que?-pregunto temari:-¿A que te refieres gaara?-
-no entiendo-dijo kankuro
-esperen-dijo, salio de la cocina. Tanto temari como kankuro deseaban saber de que hablaba gaara. Despues de unos momentos gaara regreso tomando de la mano a Daiki, sus hermanos se miraron y luego al pequeño y de ahi a gaara:- él es daiki, y como ya les dije, comenzara a vivir con nosotros-
Y no cabia duda de que gaara cada dia los sorprendia un poco mas...
Desde ese acontecimiento habian pasado ya tres meses, y ese pequeño ya era uno de sus hermanos...
¨¨¨***
-sakura chan-le llamo sai a la pelirrosa mientras esta trataba de cubrise de la arena que intentaba penetrar sus ojos:
-¿que sucede, sai?-le miro, este se acerco un poco mas
-pienso que seria mejor si te cargo para llegar mas rapido ya que si la gravedad de esta mision es como me la imagino deberiamos estar ahi mas que a tiempo-le explico, aveces sai se comportaba como un persona normal
-hai-dijo ella, despues sai se coloco en frente de ella esperando a que subiera a su espalda, despues de eso comenzo a correr mas rapido, pero para hacer el tiempo mas corto -aunque eso es imposible- decidio aclarar sus dudas:
-sakura chan-ella escucho:- ¿como es el Kazekage?-la pelirosa se sorprendio un poco por la pregunta -era verdad, sai no conocia a gaara-
-etto...pues ¿que quieres saber?-pregunto:
-no lo se. ¿como es?-eso no aclaro la pregunta de sakura, pero empezaria por describirlo fisicamente:
-bueno pues, es como del tamaño de naruto, pelirrojo de ojos verdes. Es una persona seria pero comprensible y amable a la vez-creyo que era suficiente hasta que recordo algo:- ah, por ciertop sai, no creo que sea prudente que le escojas un apodo o trates de hacer una broma con el. Podria enfadarse, sobre todo porque aun no sabemos si...bueno, le vas a agradar-
-descuida-respondio sai:- él es el Kazekage, un superior y aliado de konoha. Se como comportarme-le aclaro
Sakura suspiro, pero no sabia por que pero estaba segura de que sai haria algo vergonsozo, aunque no le dio mucha importancia, era verdad que sai sabia comportase con un superior, él mismo lo demostro al no tratar de hacer amistad con kakashi simplemente por ser un sempai para los ANBUS y sabiendo la reputacion de gaara duda mucho que se arriesge a algo indevido
Por otro lado, sai pensaba diferente, es decir, sabia que no debia llegar y abrazar al kazekage -sobre todo por lo que habia escuchado de el- pero le habia prometido a naruto que lo haria, que le diria que algun dia sera hokage y lo alcanzaria y despues le daria esos abrazos que naruto le hizo prometer. Aveces pensaba que su rubio amigo era demasiado cariñoso con las personas...