Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La mentira de una Mujer por Hali

[Reviews - 25]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Este capítulo es para Wahrheit quien siempre procura dejarme su opinión, muchas gracias siempre me animas a continuar y no tardar tanto con mis actualizaciones n_n

Las cosas iban mejorando poco a poco, Ren podía sentir como los ánimos se iban calmado, incluso llegó el día en que Keiko y Ren asistieron a la casa de Horo, el de cabellos azules se mostraba nervioso, había preparado todo para que saliera perfecto, sabía que a Ren le gustaba como había decorado el jardín pero ahora sabría el punto de vista de la pelirroja.

-Comeremos en el jardín- anuncio, Ren  se mostro contento

-Vamos Keiko- le guío Ren, la chica no pudo evitar su sorpresa al ver el hermoso jardín.

-¿Te gusta?- le pregunto su padre con una gran sonrisa

-Es… bonito- término por admitir

-Incluso puso un estanque- la jalo hasta ahí

-¿Son peces koi?-

-Son hermosos no-

-Ren- el mencionado miro a su koi quien ya llevaba la comida

-Vamos- animo a la chica, quien se quedo mirando embelesada el estanque

-¿Todo bien?- pregunto preocupado

-Si. Le ha encantado- le sonrió y beso, Horo se sintió más relajado

-Espero que les guste la comida-

-Me gusta todo lo que tú haces- le beso nuevamente, Horo, sonrió agradecido, ambos se sentaron a comer

-¿Ren, no comerá?-

-Dale tiempo, vendrá cuando este lista, el venir aquí ya fue demasiado para ella-

-Lo sé, no sé cómo agradecerles por la oportunidad-

-Te amo- lo beso con pasión, Horo le sonrió agradecido por el apoyo, terminaban la entrada cuando Keiko se acerco, Horo se levanto y sirvió.

-Es-Espero que sea de tu agrado- tenía que reconocerlo Horo se estaba esforzando

-Al final lo terminaste modificando todo- hablo Ren

-Lo sé pero al final ha quedado mejor de lo que esperaba-

-Es tan relajante estar aquí-

-Qué bueno que te guste, eso era lo que pretendía-

-En la noche debe ser hermoso-

-Puedes ver las estrellas o si prefieres encender las luces, ambos espectáculos son hermosos- hablaba con pasión, Ren no podía dejar de mirarlo y Keiko se quedo asombrada de verlo así, incluso llego a pensar que veía lindo, cuando el de cabellos azules se dio cuenta que ambos lo miraban se sintió avergonzado.

-Lo siento, los estoy aburriendo- bajo la cabeza, Ren sonrió con ternura

-Para nada, me encantaría poder verlo- la pelirroja se tenso –Pero no podrá ser hoy- de inmediato se relajo –Sera en otra ocasión- Horo asintió más relajado, aquella comida no fue tan estresante como la primera de hecho Keiko se sorprendió al percatarse que la estaba disfrutando.

-Todo ha estado delicioso, había olvidado lo bien que cocinas- Horo sonrió alagado.

-Gracias-

-Ya es tarde debemos irnos-

-Sí, gracias por venir- sonrió sinceramente –Les acompaño a la estación-

-No te preocupes- Horo asintió

Padre e hija caminaban hacia la estación

-¿Te gusto la comida?-

-No estuvo mal-

-¿Qué te pareció el jardín?-

-… Es bonito- Ren sonrió y no dijo nada más no quería presionarla

Horo se encontraba terminado de recoger cuando recordó algo, se dirigió hasta su habitación donde saco un sobre, lo miro con detenimiento y duda, después de unos minutos lo abrió decidido y leyó su interior.

Keiko comenzaba a confiar y a sentirse parte de una familia, debía admitirlo el cabeza de púas se estaba esforzando.

-Keiko estaba pensando en invitar a Horo a cenar al departamento, ¿qué opinas?-

-No se quedara- hablo a la defensiva

-No, él no se quedara- le aseguro

-…Bien-

-¿Cuándo te gustaría que lo invitáramos?-

-No lo sé… en un año-

-Vamos Keiko, qué te parece la próxima semana-

-Es muy pronto-

-Crees, mmm si tienes razón, mejor que sean dos- la chica suspiro frustrada

-Como quieras-

-¿Qué debería preparar?, Horo se lucio hoy con la comida- se alejo para planear todo, Keiko ni se molesto e hacer un comentario sarcástico, simplemente se dirigió a su habitación.

Ren espero hasta el día siguiente para comunicarse con su koi, se preocupo cuando el buzón salto, pasaron quince minutos antes de que le llegara un mensaje.

“Discúlpame, no puedo contestarte en estos momentos, te marco más tarde, te amo” Ren se sintió más tranquilo, desde que se habían separado se había vuelto tan inseguro, necesitaba estar al lado de Horo o saber de él, aquel tiempo separados lo había afectado y le había servido para darse cuenta que Horo era el amor de su vida y amaba estar a su lado, se encontraba concentrado buscando nuevas recetas cuando el timbre de su celular lo sobresalto.

-Bueno-

-Amor-

-Hola, lamento haber llamado en un mal momento-

-No te preocupes, ahora que he regresado a trabajar-

-Si lo siento, me había acostumbrado a llamarte a cualquier hora-

-Jejeje, yo también me había acostumbrado a escuchar tu voz en todo momento-

-Te extraño tanto amor-

-Apenas nos vimos ayer-

-Lo sé pero eso no es suficiente-

-Todo a su debido tiempo, no podemos precipitarnos-

-Comienzo a inquietarme- confeso

-Oh Ren…-Horo guardo silencio

-¿Amor?- pregunto angustiado

-No me lo haces nada fácil amor, estoy en mi limite- Ren no pudo evitar sonreír, al percatarse que Horo también pensaba en él y lo necesitaba.

-¿Te gustaría que nos viéramos hoy?-

-Me encantaría, es lo que más deseo pero no puedo-

-¿Por qué?- pregunto con un puchero

-Tengo que ponerme al día, me quedare hasta tarde-

-Comprendo, ¿Cuándo nos veremos?-

-El fin de semana-

-¿Hasta el fin?-

-Lo siento amor- Ren se sintió frustrado pero no podía hacer nada al respecto

-Supongo que tendremos que contenernos un poco más-

-Amor debo irme, te amo-

-Yo también te amo- después de colgar se sintió frustrado y decaído

Horo estaba agotado no solo física sino también mentalmente no podía dejar de darle vueltas a lo que descubrió y lo que había hecho, había traicionado a Ren al hacer aquella prueba y ahora que sabía los resultados no sabía qué hacer con eso, se alegraba de tener toda la semana para saber cómo reaccionaría al tener a su koi enfrente, simplemente no podía decirle lo que había hecho, eso los alejaría nuevamente y esa vez tal vez fuera para siempre, no podía permitirse eso, en cuanto salió empujado por el mar de gente de la estación le pareció ver una cabellera rosada muy familiar, Horo le resto importancia y un solo pensamiento inundo su mente “tal vez debo comprar un auto”

&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&

El fin de semana por fin llegó Ren estaba ansioso

-Ren- lo llamo Keiko

-¿Qué pasa?-

-Debo ir al museo- Ren se sintió alagado

-¿Deseas qué te lleve?-

-Eh no… necesito dinero para llegar-

-¿Estás segura de que no quieres que te lleve?-

-No, además ya estabas por salir no-

-Sí pero puedo llegar un poco tarde- Keiko le miro suspicaz

-No creo que quieras llegar tarde con tú pareja- hablo mordaz, Ren se sonrojo violentamente y se mostro nervioso

-Yo… este-

-Ya me voy- Keiko sonrió divertida al ver la reacción de su padre, mientras caminaba a la estación no pudo evitar pensar “en verdad se quieren” durante todo el camino fue sumergida en sus pensamientos “Ren lo ama y me ha demostrado que a mí también, él ha hecho todo porque confié en él, se ha esforzado por ganarse mi confianza… supongo que podemos ser una familia”

&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&

Ren se sentía tan avergonzado, Keiko  lo había expuesto, no quería que su huja pensara que quería más a su koi que a ella, suspiro decaído cuando llegó con su koi, éste noto su estado de ánimo

-Amor ¿qué paso, estas bien?-

-Sí, no… no quiero que Keiko crea que pienso más en ti que en ella-

-No comprendo-

-Ella me pido que la llevara al museo pero me dijo que no te gustaría esperar-

-¿En verdad te pidió que la llevaras?- pregunto asombrado

-Bueno no fue así como lo dijo- le explico la situación a su prometido, Horo sonrió y abrazo a su koi.

-Te preocupas demasiado amor-

-¿Tú crees?-

-Si, tal vez ella solo quiso hacerte una broma- Ren se mostro sorprendido para después sonreír.

-Amor- hablo con voz melosa Ren, Horo conocía bien ese tono pero siguió el juego.

-¿Qué pasa amor?-

-Ya no me quieres- hizo un lindo puchero

-Te amo- le beso con pasión y cariño cuando se separaron hablo

-Entonces se mío- le susurro con deseo, Horo rió, atrapo a su prometido en un abrazo y lo beso nuevamente

-Soy tuyo, solo tuyo- Ren le sonrió embelesado y volvió a besarlo mientras colaba sus manos bajo su camisa para tocar su torso provocando un gemido en el más alto –Vamos a un lugar más cómodo- Ren asintió y se dejo guiar a la habitación que ambos compartían, se fundieron en un nuevo beso, Horo dejo que Ren tomara la iniciativa, gimió cuando mordió su cuello expuesto.

-Tu piel es tan blanca, no te mordí tan fuerte y esta roja- lamio el área afectada, Horo gimió por la caricia

-¿Es malo?-

-No, me encanta, así pueden ver que ya tienes dueño- le sonrió sensualmente para continuar besando su cuello y deshacerse de su camisa para besar su pecho libremente.

-Te amo tanto Horo- hablaba con la voz cargada de deseo

-Yo también te amo, mi hermoso Ren-  lo tomo del rostro para besarlo con pasión –Ren sino te apresuras terminare tomándote-

-Pero ha pasado tanto tiempo, debo asegurarme de no lastimarte- Horo le sonrió enternecido y lo beso nuevamente, Ren aprovecho para deshacerse del pantalón y ropa interior de su koi y tocar con total libertad su entrepierna.

-Mmmm… Ren- aquel gemido le dio la confianza para comenzar a masturbarlo, los gemidos de Horo inundaron la habitación, Ren podía sentir su miembro erecto, se deshizo de sus prendas para comenzar a frotar y masturbar ambas erecciones –Oohhmmm… Ren- lo tomo de sus caderas imponiéndole un ritmo, Ren se detuvo causando un gruñido de frustración, Ren se recostó sobre su koi para besar su cuello y lóbulo provocando un estremecimiento en el cuerpo del otro, Horo se arqueaba por más contacto mientras pasaba sus manos por la espalda de su koi. Ren llegó a su pecho donde lamio sus pezones y los mordía con pasión mientras su mano bajaba aun más para llegar a aquella estrecha entrada y comenzar a estimularlo, Horo gimió con más fuerza, no podía articular palabra pues estaba sumido en un exquisito placer, lo único que podía hacer era rasguñar la espalda de su koi, Ren dejo sus pezones para besarlo con hambre, aprovecho el momento para introducir su dedo medio, Horo jadeo por la intromisión, tuvo que romper el beso para coger un poco de aire, Ren mordió la piel expuesta de su cuello, Horo estaba perdido en el placer, Ren jadeo en su oreja.

-Te amo-

-Ren- imploraba Horo

-No-

-Mmmm onegai-

-No quiero lastimarte-

-Pero… aaahhhh… te necesito-

-No voy a lastimarte amor ahora…- lo miro con determinación y pasión –No seas impaciente y disfruta- le sonrió como sabía le gustaba a su koi para después ir directo a su miembro y comenzar a lamerlo e introducirlo en su boca, Horo se removía lleno de placer, hacía tanto tiempo que su koi no hacía eso que lo estaba enloqueciendo, Ren introdujo más dedos preparando a su koi-

-Oh… ah… Ren…mmm- movía sus caderas penetrando aquella boca que lo estaba enloqueciendo, Ren lo dejo para colocarse entre sus piernas, Horo jadeo anticipando lo que vendría, tomo por la nuca a Ren para acercarlo y besarlo ansioso, cuando se separaron la mirada de ambos brillaban llenas de pasión y lujuria, Ren separo las piernas de su koi para colocarse en su entrada y comenzar a penetrarlo, Ren acariciaba sus piernas con dulzura y de una sola embestida entro, Horo gimió con fuerza y movió sus caderas, Ren comenzó a penetrarlo con lentitud y cariño, Horo lo miro con amor, de nuevo lo tomo de la nuca y lo beso.

-Te amo-

-o también te amo- Horo jadeo cuando Ren toco aquel lugar que lo hacía llegar al paraíso

-… Más…- apenas si podía hablar por el placer, Ren lo complació, moviéndose con mayor fuerza tocando su próstata, Horo no dejaba de gemir y tratar de aferrarse a algo, Ren lo notó, tomo sus brazos y los paso por su cuello

-Aferrate a mi- le hablo lleno de pasión y con seguridad, Horo amaba cuando su Ren se mostraba tan seguro y le brindaba esa confianza y seguridad, el de cabellos azules así lo hizo, abrazaba fuertemente a su koi gimiendo y jadeando sobre su oreja, Ren quería darle el máximo placer a su koi por lo que tomo su miembro y comenzó a masturbarlo.

-Oh… Ren- Horo no dejaba de moverse mientras gemía en el oído de su koi, aquello calentaba mucho a Ren, el de hokkaido no aguanto más hundió sus uñas mientras gemía llegando al climax, se dejo caer mientras su koi continuaba embistiéndolo.

-Horo mmm… delicioso- Horo  lo miraba embobado, el rostro de su koi lleno de placer que él le provocaba, aquello le encantaba, Ren lo embistió un par de veces para terminar dentro de él, Horo lo acerco para besarlo lleno de lujuria, cuando se separaron no podían dejar de mirarse

-Eso ha sido delicioso- hablo el de cabellos azules

-Lo sé, hacía tanto- le sonrió y beso el hombro

-Amor- Horo movió sus caderas -¿Ren podemos…?- pregunto temeroso y completamente sonrojado, el de ojos dorados sonrió y lo beso con deseo, había olvidado que Horo era insaciable.

Después de bañarse y una nueva sesión Ren dejo recostado a su koi

-Debo irme- le besó

-No quiero, quédate a mi lado- hizo un puchero, la mirada de Ren se entristeció

-Lo siento amor, no puedo-

-Discúlpame, no quería hacerte sentir mal perdóname- hablo completamente arrepentido

-Está bien, descansa, hacía tanto tiempo- le sonrió pícaramente, Horo le sonrió cómplice mientras se removía en la cama

-Lamento no poder acompañarte a la estación-

-No te preocupes, sabes que me has dado mucho más- se besaron nuevamente, Horo estaba renuente pero al fin lo dejo marchar, en cuanto cruzo la puerta se sintió tan solo, se acurruco en la cama, al percibir el olor de su koi sonrió y se quedo dormido.

Ren tuvo especial cuidado de cerrar la puerta, le preocupaba que su koi viviera solo en una casa tan grande, cuando entro al tren que lo acercaría a casa le pareció ver una cabellera familiar rosada, trato de ubicarla pero ya era tarde el tren comenzaba a alejarse.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).