Después de un complicado día de trabajo, Milliardo por fin se encuentra en el trabajo, se encuentra en el restaurante donde en diez minutos se encontrara con Wufei, sonríe es el mismo lugar en donde le pidió una oportunidad para salir con él hace casi dos años.
Milliardo entra al negocio, se sienta en la mesa mas alejada, de ahí puede ver cuando Wufei llegue, pide un café que la mesera no tarda en llevárselo
-¿Qué pasa ahora Wufei?- Murmura con el ceño fruncido, tomando un trago de su bebida, hace dos semanas que su Wufei actúa… diferente, Milliardo sabe que algo no anda bien y lo peor es que Wufei no dice una maldita palabra y Milliardo no es adivino como para saber que es lo que pasa por su testaruda cabeza.
-Hola…-La llegada de Wufei detiene el tren de sus pensamientos, Milliardo se acerca y besa sus labios o casi porque Wufei hace un casi imperceptible movimiento de cabeza por lo que Milliardo solo roza la comisura de sus labios
-Hace tiempo no veníamos aquí- Milliardo sonríe, prefiere ignorar lo que acaba de ocurrir- Tenemos muchos recuerdos aquí, es tan nostálgico
Pero Wufei solo asiente mirándolo con tristeza, Milliardo siente su corazón partirse; nunca ha soportado verlo así y haría cualquier cosa por quitarle esa tristeza
-¿Qué pasa Wufei?- Milliardo tomas sus manos apenas tocándole
Wufei lo observa unos segundos antes de retirar sus manos- Yo…- Ni siquiera sabe que palabras decir las ha pensado durante semanas pero ahora todas sus palabras le parecen vacías- Yo no puedo… no quiero- Corrigió sus palabras- seguir a tu lado, esta relación ya no funciona para mi- Ya no sabe que mas decir.
Milliardo lo mira sin poder creerlo, admite que han tenido algunos problemas pero ¿Quién no? Aun así no creyó que esto estuviera tan mal- ¿Por qué?- Pregunta con voz firme
-No lo se, ya no quiero siempre pelear, no saber que es lo que va a ocurrir al día siguiente- Suspiró frustrado- Solo quiero ser libre
-¿Me amas?- Milliardo no dejó de mirar a Wufei ni un solo segundo
En respuesta Wufei solo sonrió aun siente demasiadas cosas por Milliardo, que no es la falta de amor lo que los separa… pero ni siquiera esta seguro de eso
-Entiendo- Milliardo asiente con la cabeza; le lastiman las palabras de Wufei, no quiere dejarlo ir, nunca se perdonaría el perder al amor de su vida pero no puede obligarlo a permanecer a su lado….
Wufei lo mira confundido, no comprende e Milliardo, esperaba gritos, reclamos, maldiciones, todo menos esa tranquilidad que le esta asustando un poco.
-Solo quiero pedirte un favor…- Milliardo aunque quiera, no se atreve a tomar la mano de Wufei
-Lo que quieras
Milliardo le da una diminuta sonrisa antes de hacer su petición- Un ultimo día a tu lado, quiero sentirte mío de nuevo, que estés en mis brazos otra vez- Su sonrisa se vuelve triste- Hacer el amor, darte un beso apasionado y que seas mío como el los buenos tiempos- Sintió in escozor en los ojos, paso su mano por su rostro ¿Lagrimas?-¡No!- Pensó
En respuesta Wufei lo besa apasionadamente, recorriendo su boca con la lengua, iniciando el día que con gusto le da a Milliardo
……
……
Solo cuando los rayos del sol cayeron directamente en su cara, Wufei se digno en despertar, antes de abrir los ojos sonríe al recordar las horas pasadas, Milliardo lo beso con tanta ternura, lo sostuvo con tal gentileza que lo hizo estremecer- Lo amo- Piensa pero de inmediato sacude su cabezaabriendo0 los ojos, encontrándose con un lado de la cama vacio
-Esperaba que por lo menos te quedaras hasta que despertara- Murmura con el ceño fruncido, acariciando las sabanas ya frías su mano encontró una pequeña nota:
“Gracias por toda la felicidad que me has dado, yo te amo y siempre te amaré. Si algún día me necesitas solo llama y yo regresaré a tu lado sin dudar. Milliardo”
-Eres un bastardo- Wufei murmura arrugando la hoja, su visión es borrosa pues las lagrimas le impiden ver…
Milliardo camina por las calles apenas concurridas, aun no puede creer que haya dejado a Wufei, así, durmiendo, pero le hubiera sido imposible dejarlo si se despedía de él.
-Solo espero que algún día nos volvamos a encontrar- Sonríe ante la mirada de tristeza que le da su reflejo en un aparador- O que no te tardes mucho en encontrar a alguien que pueda amarte- Aunque este pensamiento le lastime demasiado.
Su celular comienza a sonar y después de buscarlo entre sus ropas duda en contestar, cuando aparece en la pantalla el nombre de su amor, aun así sonríe
-¿Wufei?
Con solo tres palabras, Wufei le regresa la vida a Milliardo, quien tiene una verdadera sonrisa en los labios
“Perdóname, te amo”
Milliardo regresa a lado de Wufei, su Wufei, porque aun no han terminado los buenos tiempos.