Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

SEGUIR por Rikkathum

[Reviews - 109]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

hello!!!

disculpen la tardanza pero es que me enferme jejeje

pero aqui esta el capi 11

habia pensado que seria el penultimo pero al parecer me saldra otro capi mas jejeje

muchas gracias a:

Lucesiitha

cimari

Rufus

pauangel85

Luna chan

thoru kanname

dulce_kokoro

 ETSUKO04

 kyo-chan@hotmail.co.jp

por leer y comentar jejejeje me hacen muy felices con sus cometarios jejeje y tambien muchas gracias a:

thoru kanname

arely_uchiha

Luna chan

 AnotherHistoryAbout

 cimari

Candi_Shuichi

takarai_euchan 

dulce_kokoro

Emii Uchiihaa Naamiizakii

ETSUKO04 

lorena

por comentar el fic  NO LO BESES y por seguirlo hasta el final, si mi larguisimo fic de dos capitulos jajaja

na enserio muchas gracias y espero que disfruten el capi

11.- CORAZON (PARTE 1).

Una mujer pelirroja tocaba con insistencia la puerta de un departamento pero no obtenía respuesta alguna por parte de la persona que se encontraba en el interior, desde el incidente en el hospital ya había pasado dos semanas desde que la persona que buscaba se hubiera encerrado en su departamento sin permitir visitas más que la de su hermano.

- esto en realidad fastidia – dijo en voz alta la mujer.

- no tienes idea de cuánto – la voz de un hombre atrajo su atención – yo en este momento debería estar con my Honey.

- tú eres Tatsuha, el hermano Eiri – el chico llegaba con unas bolsas de mandado.

- sí y tu Chizuru la psicóloga que le ha arruinado la boda a mi hermano.

- en realidad crees que yo fui la causante de ello, eh?

- mmm, no sé porque de repente Shuichi tomo la decisión de no casarse con mi hermano, solo se lo mismo que Eiri, después de tu platica con mi ex-cuñadin fue cuando paso todo, primero los días en que no quería ver a Eiri y después el no quererse casar, tal vez tu lo llames coincidencia.

- je, ha comido algo?

- claro! Cerveza y cigarros, la mejor dieta que podrás encontrar.

- ya, vas a entrar.

- por supuesto, cuando te marches – le dijo con una sonrisa en el rostro.

- quiero entrar.

- jaja créeme que no quieres entrar después de lo sucedido en el hospital.

La mujer llevo sus manos instintivamente a su cuello…

FLASH BACK

- re…repítelo… no pude escucharte bien, repítelo por favor – suplico entrecortadamente el rubio.

- que no quiero casarme contigo – esta vez la voz fue más fuerte y decidida, inclusive ahora Shuichi lo miraba a los ojos.

- estas de broma verdad? – sintió un nudo en la garganta.

- no, eso es todo lo que tenía que decirte ahora vete – la voz de Shuichi se notaba dura y fuerte.

- pero…porque?

- no tengo porque darte explicaciones, así que vete.

- pero Shuichi…

- pero nada, quiero que te vayas.

- maldición Shuichi, dime porque?!! Acaso es porque temes que queden marcas en tu cuerpo? Créeme que es lo último que me importaría yo te am…

- cállate!! No quiero escucharte simplemente quiero que te largues.

- no me voy a ir a ningún lado sin ninguna explicación coherente!!! – Yuki se estaba desesperando, no entendía el porqué de repente Shuichi no quería casarse con él, que había pasado para que si pequeño tomara esa decisión.

- no tengo porque darte una explicación, no me quiero casar contigo, no lo deseo, entiéndelo y LARGATE!!!

Yuki se había quedado sorprendido por el grito del pelirrosa, nunca le había levantado la voz en un tono serio, solo en berrinches estúpidos, quería creer que este era uno, pero no, Shuichi jamás despego sus ojos de los suyos – pero que es lo que está pasando aquí? – ninguno de los dos se dio cuenta cuando el doctor entro.

- es solo que lo llame para decirle algo, ya lo hice y le he pedido que se marche que ya no quiero verlo, pero no entiende, sáquelo de aquí!

- Shuichi…

- señor sería bueno que retirara, puede que el shock que recibió lo tenga de nervios y alterarse no es bueno para su salud.

- pero…

- por favor, ya hablara con él cuando este más tranquilo – Yuki miro a Shuichi, este ya no le miraba, su vista estaba dirigida al lado contrario donde estaba el, pero noto que todo el cuerpo de Shuichi estaba templando, al parecer en realidad estaba muy alterado.

- en una semana te darán de alta y vendré por ti – no dijo mas y salió casi como un zombi de la habitación, su hermano lo vio y se acerco rápidamente a él.

- que sucede Eiri?

- Shuichi… - fue lo único que dijo, su mirada se veía perdida.

- que pasa con él? – pregunto preocupado.

- eh peli-teñido, como está tu bola rosa – le pregunto la psicóloga que venía llegando junto con su primo y K.

El escritor la miro, sus ojos dorados se endurecieron más que nunca, la pelirroja se sorprendió al casi tenerlo encima de ella, los otros tres no pudieron reaccionar a tiempo, el rubio tenia a la pelirroja contra la pared, la tenia fuertemente agarrada del cuello y sus pies no tocaban el piso, la pelirroja no pudo más que poner sus dos manos en las manos que tomaban su cuello, los ojos grises no se despegaban de los dorados.

- QUE DEMONIOS LE DIJISTE!!!! – ante el grito del escritor los otros tres reaccionaron y trataron de alejar a Yuki de la mujer, pero era imposible, ni entre los tres podían.

- suéltala! – le exigió Hiro preocupado por su prima.

- Eiri!!! Pero qué demonios te pasa suéltala de una vez!! – Tatsuha estaba desesperado y preocupado por hermano, nunca lo había visto de esa manera.

- QUIERO QUE ME LO DIGAS, DIMELO, ANDA DE UNA PUTA VEZ DIMELO!!! – Yuki no escuchaba palabras de ninguno de los otros tres que estaban con él, ni siquiera sentía como K lo jalaba con todas sus fuerzas, el escritor despego a la mujer de la pared para estamparla con ella con fuerza.

- agh…Ei…ri…. – la chica sentía que no duraría mucho consiente si el rubio seguía apretando de esa manera, incluso lo más probable es que le rompiera el cuello.

- SUELTALA ANIMAL, LA ESTAS MATANDO!!!!

La voz de Shuichi fue lo que lo regreso al mundo de los cuerdos, miro hacia la habitación de Shuichi de donde el pelirrosa había gritado agarrado de la puerta ya que sus piernas aun estaban un poco débiles, después dirigió su  a la mujer que no dejaba de mirarlo, “LA ESTAS MATANDO” recordar esa frase fue suficiente para dejarla caer a piso.

- COF, COF, COF…AAH…AHHH – la chica ponía sus manos sobre  su cuello para tratar de reconfortarse mientras tosía y agarraba aire, Yuki volteo a ver a Shu de nueva cuenta para después irse del hospital.

END FLASH BACK

- y eso que no es la primera vez…

Tatsuha la miro incrédulo – como que no es la primera vez?

- lo ha hecho tres veces, dos inconscientemente y una completamente consiente.

- como fue eso?

- bueno la primera vez fue porque yo lo provoque, no sé si sepas de lo de Kitasawa…

- pues sí, mi hermana me conto un poco de ello.

- digamos que era cuando Eiri apenas comenzaba con las consultas, tocaba hablar de su sensei, le dije todos los antecedentes, él como el solo era un juego para su sensei, no soporto la presión y me agredió, no tenía la misma fuerza que tiene ahora, pero aun así creí que moriría, si no hubiera sido por mi ayudante yo no estaría aquí, he de decirte que por el por poco dejo la carrera de psicóloga.

Tatsuha se sorprendió pero comprendió inmediatamente – claro, entiendo, es como si a un nuevo policía lo atacara un interno, se sentiría inseguro constantemente.

- así es, mi trabajo es tratar con personas que se pueden llegar alterar por algún suceso de la vida que no logran superar y por consecuencia pueden haber muchos tipos de reacciones, tarde dos semanas en decidir qué hacer con mi vida, si no fuera por mi esposo no hubiera podido seguir y estoy segura de que Eiri se hubiera traumado mas, la segunda inconsciente fue la que presenciaste.

- y en la que fue consiente?

- después de la primera vez que intento casi matarme pues me hizo pensar en muchas cosas, que no siempre voy a contar con ayuda cuando algo así pasare, por lo que tome la decisión de aprender defensa personal, no sé cómo pero el cabron se entero y me puso a prueba, en la última sesión en Nueva York me hizo pensar que de nueva cuenta lo lleve al límite y se me echo encima, con lo que aprendí me lo quite y termine dándole un golpe en la cara, desde el piso comenzó a carcajearse y me felicito, me dijo “ya me puedo ir a Japón a gusto”.

- ya veo, pero y esta vez? Porque no te defendiste.

Chizuru guardo silencio por un momento, Tatsuha la miraba, al parecer no sabía cómo comenzar a explicar hasta que de repente hablo -  cuando lo hizo por primera vez vi confusión y demasiada tristeza en sus ojos, no quería aceptar la realidad y solo fue un impulso de  desesperación, en cambio esta vez, fue completamente diferente, sus ojos irradiaban odio hacia mí, dolor, angustia estaba decidido a deshacerse del problema sin importar las consecuencias, la decisión de matarme fue lo que me paralizo.

- y aun así quieres volver a verle?

- claro que si… - la chica le sonrió – ya me acostumbre a sus muestras de amor, aparte no puedo detenerme en este momento ya que no solo se trata de él, sino que también se trata de una persona que está muy herido y que además es la persona más importante para él.

- pero no crees que todo esto es raro, es demasiada coincidencia que Shuichi después de hablar contigo fue cuando decidió no casarse con él.

La psicóloga suspiro pesadamente – mira a ti no te debo ninguna explicación, pero si no lo hago no me dejaras entrar no? – Tatsuha sonrió de lado y solo asintió – pues digamos que en realidad es injusto que me adjudiquen la culpa a mí cuando las cosas ya estaban mal desde hace mucho tiempo.

- estas equivocada, ellos estaban bien, se amaban, no, se aman y esa es la razón por la cual se iban a casar…

- mira, no dudo ni por un minuto que se amen, pero en realidad ellos no estaban bien, Shuichi jamás se había detenido a pensar en el mismo hasta ahora, lo que siente y lo que no, lamentablemente para Eiri, esa bola rosa tiene  demasiadas dudas de su relación, de su amor, tiene dudas fuertes y bien fundadas, es por ello que tomo la decisión de no casarse.

- pero…

- el no se casara con alguien de quien duda, no se atara a alguien que puede que no lo ame.

- el lo ama – dijo seguro Tatsuha.

- mira, de las tres personas que más daño le han hecho a Shuichi, una de ellas ha sido Eiri y creo que tú lo sabes bien – Tatsuha no dijo nada y desvió la mirada en señal de que concordaba – y según lo que incluso ustedes mismo me han dicho, Eiri cambio de la noche a la mañana, esto hace que las dudas existan.

- pero eso…

- no es verdad?  Bueno eso solo le consta a Eiri.

- no de hecho puedo decir que incluso me consta a mi… - dijo Tatsuha dirigiéndose a la puerta para abrirla – antes de que veas a Eiri quiero que mostrarte algo, por cierto si vez a Eiri no te sorprenda, nos e ha cambiado de ropa desde que fue a recoger a Shu y este no se fue con él.

Chizuru asintió y se dedico a seguir al moreno, la psicóloga no pudo dejar de pensar que más que simples hermanos parecían gemelos – solo que uno es vainilla y el otro chocolate – Tatsuha la volteo a ver.

- qué?

- No nada – se dio un golpe mental – que es lo que me quieres mostrar?

- espérame en la sala y hazlo por favor – Tatsuha fue a la cocina y dejo el mandado después regreso a la sala – ven, sígueme – la pelirroja hizo caso y fue tras e él, entraron al estudio de Yuki.

- déjame adivinar aquí es donde Yuki hace sus novelas, no?

- si – se acerco hasta la computadora del rubio.

- no te matara si estamos aquí?

- pues sí, pero creo que esto es importante y te ayudara a hacer tu trabajo – dijo mientras abría unas carpetas de la computadora – hace tres días estaba aburrido de cuidar a mi aniki por lo decidí jugar un juego en la computadora, pero antes me puse a curiosear, me encontré con algo realmente interesante.

- sabes, no me interesa ver la pornografía de Eiri, ni mucho menos si el protagonista es la bola rosa.

- jajaja, eso no sería algo interesante, eso sería un tesoro invaluable – dijo con tono pervertido.

- y así te quiere tu novio?

- claro, más bien es por ello que me quiere jaja oh! Aquí esta, acércate.

La mujer se acerco y vio un documento del cual sobresalía el titulo, lo cual le llamo la atención al igual que las primeras líneas.

                “ESTUPIDO DIARIO”

“no puedo creer que le hiciera casi a esa estúpida psicóloga, Chizuru Nakano TE ODIO…”

- no puede ser, me hizo caso? – dijo la mujer asombrada.

- a que te refieres?

- antes de que se fuera de Nueva York le dije que desahogarse de alguna forma es bueno, como él es escritor le sugerí que lo hiciera escribiendo, que escribiera lo que sentía, lo que hacía, lo que no hacía, todo, así un poquito del peso se iba.

- pues entonces creo que deberías de leerlo.

- sí, buscare lo que necesito y después hablare con él, puedo leerlo aquí?

- no lo sé, hace días que no sale del cuarto, que tal si sale y viene para acá?

- solo gritas algo y yo sabré que viene en camino, así seré yo quien lo enfrente.

- seré hombre muerto…

- no te preocupes, si me mata a ti te dejara vivo jajaja

- ja-ja-ja pero después de ponerme una arrastrada, en fin, yo cuidare cualquier cosa gritare alguna cosa y tu dejaras esa computadora.

- claro, yo de todas maneras lo guardare en mi memoria – señalando una que estaba en su llavero – estoy segura que si a nosotros esto se nos hace interesante, hay otra persona que podría apreciarlo como algo mas.

- bien, te espero afuera.

La pelirroja ya no contesto nada y se dedico a leer, los primeros párrafos hablaban de cómo había decidido escribir el diario, se sorprendió mas al saber que lo empezó en la misma noche que se lo sugirió, pero muchas de esas cosas no eran lo que quería en realidad, así que se dedico a leer rápidamente hasta que por fin dio con lo que buscaba.

“…Mika llamo todo el día, no puedo creer lo molesta que está haciendo, si hubiera sabido que así seria no hubiera regresado a Japón, pero he de admitir que si no hubiera pasado no hubiera podido presenciar lo que vi hoy, unos grandes y hermosos ojos amatistas, increíblemente pertenecientes a una persona, un muchacho al cual se le escapo una hoja, leí su contenido, era una absurda canción de amor, o eso creí que era, la verdad es que ni siquiera le puse atención, la forma en que sus ojos llamaron mi atención me incomodo, solté algo despectivo y lo deje con la palabras en la boca, supongo que quería reclamarme por lo que dije en fin no creo volver a verlo, pero estoy seguro de que jamás olvidaría esos ojos, tal vez ni siquiera eran reales…”

- no me digas, ojos amatistas… era la bola rosa, ja! No me digas que… - se quedo callada con un brillo extraño en sus ojos -  esto es de cuando lo vio por primera vez…

“…paso algo que nunca imagine que pasaría, me reencontré con ese mocoso, el dueño de esos ojos, el muy idiota se me atravesó en el camino, por poco lo atropello, solo diré de esta noche que mi corazón latió como nunca antes, ya que no solo me cerciore de que era real, si no que tiene una hermosa voz, no puedo creer que ser así exista, me pregunto porque se cruzo en mi camino…

La psicóloga leía lo que el rubio escribió acerca de los primeros momentos que tuvo con el cantante, lo que pensó cuando el pelirrosa se metió a vivir a su departamento, la primera vez que admitió tener miedo de que las cosas sean igual que con Kitasawa, entonces llego a uno de los momentos cruciales de la pareja, la violación de Shuichi.

“…porque tuvo que pasar algo como eso para que me diera cuenta de que ese mocoso a mi lado solo sufrirá, lo violaron amenazándolo con perjudicarme si se resistía e inclusive su carrera, su sueño peligro por ello, por suerte conseguí la fotos y no paso a mayores con respecto a eso, pero ese niño fue lastimado en su corazón, en su cuerpo y tengo miedo que se convierta en lo que soy, lo mejor será alejarme de él, aunque eso signifique tener que casarme con Ayaka…

- tonto…

“no sé qué pasa con este estúpido corazón que latió tan acelerado al ver al estúpido mocoso vestido de mujer para ir a impedir que yo me casara con Ayaka, estuve tan feliz de ver esa mirada que no perdiera su brillo a causa de lo sucedido que no me importo nada y volví con él, pero es extraño, el se levanto como si nada con lo sucedido y fue tras de mí, acaso será porque él no mato a nadie y por ello pudo seguir adelante no como yo, no lo sé, pero al parecer estoy feliz por ello.

- vaya… - siguió leyendo y llego a la fecha en que Eiri decidió irse a Nueva York.

“…ya no soporto el peso del pasado, la muerte de mi sensei me persigue, no entiendo porque de repente me siento tan pesado, solo quiero irme, aparte no quiero que en algún momento Shuichi llegue a lastimarme, no sé porque pero estoy seguro que terminaría peor, será mejor que me vaya, solo un día mas con él, después me iré, es probable que no vuelva a escribir aquí, por lo que terminare con un simple Adiós”

- así que esa vez fue cuando fuiste a Nueva York… fuiste a matarte por miedo, ese miedo de lo que sentías por Shuichi te hizo tener que enfrentarte a tu pasado y te golpeo mas fuerte…

No puedo creer que de nuevo este aquí escribiendo en este Diario, pensé que realmente me había despedido de este mundo, de la vida, pero entonces esa bola rosa llego disfrazado de maldito perro y me salvo, lo hizo, ese estúpido mocoso me salvo y no sé porque demonios estoy feliz con ello, no si lo sé, porque a pesar del miedo que tengo sé lo que siento por él, solo espero que el tenga el valor de seguir a mi lado, lo más probable es que muchas veces intente alejarlo por mis sentimientos, pero sé que algún día las cosas cambiaran, con él a mi lado todo puede ser posible…”

La mujer siguió leyendo durante un buen rato, los buenos y malos momentos de ese rubio con el pelirrosa, todo lo que le hizo y lo que dejo de hacer, lo que realmente pensaba en el momento que hacia algo que lastimara al pequeño pelirrosa, en algunas ocasiones no pudo evitar soltar una que otra lagrima.

Por otro lado se podía ver a un moreno algo nervioso, eran las diez de la noche y la psicóloga no tenia para cuando salir, siete horas para ser exactos tenía esa mujer encerrada en el estudio del rubio, pero salió de sus pensamientos al escuchar la puerta de la recamara abrirse – ANIKI!!

Grito sin querer ya que se sorprendió al ver salir al rubio escritor de su habitación, la primera vez en esa semana.

- no grites idiota – dijo el escritor mientras se dirigía a la cocina, Tatsuha suspiro aliviado, al parecer el rubio no iría a su estudio, lo más seguro es que tenga ganas de una cerveza, pero el problema fue cuando el rubio regresaba y vio su estudio cerrado, pero eso no era lo que le extraño, si no ver un muy tenue luz que se veía por debajo de la puerta, después miro a su hermano, el cual se encuentra sentado muy cerca de este y mirándolo un poco nervioso – que demonios…

Sin más el escritor abrió la puerta de par en par encontrándose con la pelirroja recargada en el escritorio con sus brazos cruzados mirándolo fijamente, Tatsuha trago grueso, no sabía qué hacer, lo más probable es que recibiría una paliza por parte de su hermano.

- qué demonios haces en mi casa, en mi estudio?! – pregunto bastante molesto y luego miro a su hermano – quien te dio el derecho de dejarla pasar?!!

- bu-bueno…

- no le regañes, fui muy persistente escritor, casi lo violo para que me deje pasar y tu sabes que eso le traería problemas con su amante por lo que no le deje otra opción más que me dejara entrar – dijo con una sonrisa la mujer.

- me importa una mierda, lárgate de aquí.

- no te dijeron que no deberías hablarle así a tus mayores Eiri-kun?

- púdrete y lárgate!

- tenemos que hablar y no pienso irme de aquí sin hablar…

- no tengo nada de qué hablar contigo, ya has hecho demasiado, te agradezco tu ayuda – dijo en tono sarcástico.

- vamos, me lo debes, después de todo intentaste matarme!

- y si no te largas, esta vez si te matare.

- pero porque me hechas a mí la culpa de lo que decidió Shuichi? – claro que lo sabía, pero por lo menos así comenzarían a hablar del tema principal.

- porque después de que hablo contigo se encerró en esa habitación de hospital y cuando me dejo verlo fue para decirme que ya no quería nada conmigo y tu, TODABIA PREGUNTAS PORQUE?

Tatsuha dio un brinco en su asiento por el fuerte grito de su hermano, pero se sorprendió al ver que la psicóloga ni se inmuto.

- quieres saber que fue lo que le dije? – Eiri se quedo callado, ella lo interpreto como un sí – pues le dije él en realidad no estaba bien, que viera en su interior, que viera lo necesitado de ayuda que estaba, ni siquiera había llorado por lo sucedido, que era mejor que viera ahora que por dentro estaba tan dañado y que no siguiera aguantando mas eso el solo o en un futuro no muy lejano no lo soportara y no solo se dañara el mismo si no que a todos los que le rodean, ahora dime, en que parte de esas palabras le dije, no te cases con el amargado y pedante de Yuki Eiri?

- pudiste a ver dicho otra cosa…

- por favor Eiri, que más le pude a ver dicho?

- no sé!!  A lo mejor puede que tengas razón, que haya sido por su propia iniciativa, ya sea porque se siente mal por lo ocurrido, que quiere alejarme para que no lo vea así…

- si hay amor no creo que porque su cuerpo tenga una cicatriz tu lo abandones, eso lo sabe a la perfección, así que no seas egocéntrico, no te dejo porque no quiera que le veas ese cuerpo lastimado que ahora tiene, tampoco porque piense que te mereces algo mejor, es porque  no se siente seguro de ti…

- QUE? El te dijo eso?

- sí, hace dos días me lo dijo, de hecho yo también pensé que fue por el hecho de que se sintiera mal por lo sucedido, que no se sintiera a gusto con el mismo, pero lo que me dijo es que no estaba seguro de ti.

- pero… - Yuki se sintió mal por lo dicho y se recargo en el marco de la puerta, su niño, su pelirrosa, la persona que mas amaba dudaba de sus sentimientos - … yo lo amo, se lo he dicho, incluso cambie!

- no se te hace familiar el cómo está actuando ahora a como tú lo hacías en antaño?

- a que te refieres?

- en la vida de Shuichi tres persona fueron las que más daño le hicieron, dos de ellas fueron de su más entera confianza y cariño, lamentablemente para él, tu entras entre ellas…

- qué?

- tú lo heriste, lo traste mal, lo humillabas, lo engañabas, de repente dejaste de hacerlo pero tu forma de tratarlo no cambio, pero después simplemente de la noche a la mañana cambiaste convirtiéndote en el príncipe azul que él deseaba, entonces sintió miedo, miedo de que de la noche a la mañana también cambiaras y lo lastimaras de nuevo, digamos que se volvió un mini Eiri, con pelo rosa y ojos violetas.

- … - Eiri solo la miro, después le dio la espalda y camino poco a poco hacia uno de los sofás de la sala, se sentó y puso sus manos en su rodillas – entonces que puedo hacer, que puedo decirle para que vea que realmente lo amo, que no tiene que temer en que de nuevo are algo que lo lastimara, yo lo amo, LO AMO MALDITA SEA!!

- lo amaste desde el primer momento que lo viste verdad?

Eiri la miro…

- desde que sus ojos se cruzaron con los tuyos, desde que hablaste con él, pero no te diste cuenta hasta que ya habías hecho daño, tanto a él como a ti mismo…

- yo…

- si lo quieres de vuelta tienes que tener paciencia, demostrarle que lo amas, puedes…

- iniciar desde cero – la voz de Tatsuha se hizo escuchar, tanto la psicóloga como Eiri lo miraron – bueno, ustedes no empezaron como con una relación normal, los dos se ocultaban demasiadas cosas, digamos que incluso solo se juntaron para lamberse las heridas, pero creo que el único curado fuiste tú Eiri.

- la verdad es que Tatsuha tiene mucha razón – dijo la mujer – no te preocupes, dale tiempo al tiempo y déjame hablar con él, puede que logre convencerlo de hablar contigo, por mientras no te rindas, debes seguir adelante, luchando por el amor que dices tenerle, después de todo el lo hizo solo por mucho tiempo, tu también deberías pensar lo que ha sido su relación hasta ahora, tal vez así puedas dar con una solución, claro averiguando el problema primero.

El escritor no dijo nada, solo se tapo la cara con ambas manos y asintió, la psicóloga le sonrió a Tatsuha para después despedirse, ya era algo tarde así que lo más probable es que hablaría con la bola rosa mañana.

La noche paso rápidamente y en la mañana en una pequeña cafetería se podía ver a un pelirrojo platicando con un pelirrosa.

- como te siente? – le pregunto Hiro a Shu.

- ya mejor, algunas heridas aun me arden pero ya no es tanto, me duelen las costillas y el hombro pero ya no como al principio, pronto estaré mejor.

- has tratado las heridas para que dejen las menos cicatrices posibles?

- sí, el doctor dijo que es probable que algunas pocas si sean un poco notorias – se toco el corazón – la del pecho es una de ellas.

- ya veo y como te sientes en lo demás? Ya sabes emocionalmente?

- pues la verdad no sé, la psicóloga me deja pensando demasiado, creo que en toda mi vida nunca me había detenido a pensar en lo que me paso cuando niño, ni lo que sentí con lo de Aisawa, los tratos de Yuki y ahora con lo sucedido con Seguchi, realmente me sentía cada vez mas mal por dentro, puede que ella tenga razón, si sigo ignorando mi dolor pronto no me dejara vivir.

- tu decisión sobre Yuki-san, fue por eso?

- sí, aunque he de admitir que es un mero acto de cobardía, tengo miedo que él en realidad se dé cuenta después de unos meses que no me ama y las cosas empeoren a como estaban al principio, que esos días en los que él fue bueno conmigo se conviertan en un simple sueño, algo de mi imaginación creo para seguir adelante.

- Shuichi tu… aun lo amas? – se aventuro a preguntar el pelirrojo.

- … - “amarlo? Claro que lo amaba, pero tenía miedo, tanto miedo en confiar tan ciegamente y al final salir más herido de lo que ya estaba” – tal vez.

El teléfono de Shuichi comenzó a sonar, se fijo que era un mensaje, al parecer la psicóloga lo esperaba en su departamento, suspiro pesadamente, no es que esa mujer le callera mal, simplemente no le gustaba que rebuscara en su pasado de esa manera que lo hacía, lo peor del caso es que no tenía mucho tiempo de conocerla y lo hacía como si nada.

- tengo que regresar Hiro, tu prima esta de pesada de nuevo…

- jaja solo alguien como ella pudo tratar a Yuki-san y a alguien como tú, no crees?

- es verdad, ella fue psicóloga de el…

- es interesante no crees?

- no lo sé, en fin, me voy o me atendré a las consecuencias.

- cuídate y salúdamela…

Shuichi fue directo a su departamento, era un departamento que había comprado hace mucho tiempo, uno que tenía ya bastante sin utilizar, regularmente usaba de él cuando el escritor lo corría  y no quería molestar a Hiroshi, pero hace tiempo que ya no iba a él, de hecho cuando el escritor le propuso matrimonio había planeado venderlo.

- hasta que llegas – le dijo la mujer en tono de reproche.

- ya pasa… - le abrió la puerta y entro después de ella, le indico que se sentara en el sofá, ella así lo hizo – te ofrezco algo?

- sí, la verdad – dijo la mujer con una sonrisa en el rostro.

- la verdad?

- ya tuviste mucho tiempo para pensar en la razón de porque no quieres estar ahora con Eiri.

- simplemente ya no quiero estar con él, así de simple.

- no con ustedes no es nada simple, vamos Shuichi háblame, se sincero por una vez en tu vida...

- ya hemos hablado bastante.

- dime, que sentiste cuando tu padre te violo? – oh! Esa sí que había sido directo al hígado, nunca había hablado de ello, jamás.

- porque quieres saber?

- simple curiosidad supongo yo…

- pregunta otra cosa.

- de acuerdo, que sentiste cuando Aisawa te violo?

- acaso eres una pervertida?

- que sentiste cuando Eiri te dejo para irse a casar con Ayaka?

- …

- que sentiste cuando Eiri te dejo para irse a matar a Nueva York?

- …

- que sentiste cuando te era infiel?

- …

- que sentiste cuando te insultaba y humillaba?

-…

- que sentiste cuando de la noche a la mañana ya era lo que siempre soñaste?

- …

- que sentiste con lo sucedido con Thoma Seguchi? – Shuichi simplemente se había quedado callado escuchando las preguntas y viendo a la psicóloga se dio cuenta de que no tenía más opción de ser sincero por primera vez en su vida.

Notas finales:

que les parecio?

bueno, faltan ya solo dos capis para que esta historia termine, espero que lo sigan hasta el final jejeje

vy a tardarme un poco mas en subir porq ya mero entro en examenes pero pasiencia jajaja

nos vemos en los otros fic

saluditos!!!

review?


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).