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Si tu supieras por madamechan

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Notas del capitulo:

Muchhnas gracias a kjienes dejaron reviews

espero no defraudarles con este cap

advierto que hay lemon!


Al llegar vio  al gemelo menor despedirse de Ashura para luego caminar hacia los dormitorios por lo que le frenó


-Kuro…


-¿Todo bien? Sé que eres Yuui.


-Ya veo, perdón por no decirle. Al final  no pude hacer nada.


-¿Eh? Pero si has hecho bastante, enfrentaste a quien quiso abusar de ti cuando enseñabas en Francia. En cambio el cobarde de tu hermano no hizo nada, el debió tomar tu lugar ya que debió ser un shock enorme ver a ese sujeto.


-¿Eh? Pero si yo..


-No digas nada,  solo que no me contuve y golpee a tu hermano.


-¡¿Qué?!  Pero Kurogane-sensei ¿Qué ha hecho?


-Se lo merecía no?


-¡Mi hermano fue el agredido por Ashura no yo!


-¡¿Nani?!


-Ya no hay más que hacer, trataré de resumir pero después vaya a disculparse con mi hermano ya que usted es alguien a quien el estima mucho.


Se sentaron  en una banca y Yuui comenzó a contar:


-Mi nombre es Fay y mi hermano mayor es Yuui. Yo viajaba por el mundo en busca de las mejores recetas y mi hermano era un científico  muy conocido. Yuui era muy serio   con su trabajo, ganó muchos premios y honores por  sus experimentos.  Un día me llamó diciendo que quería enseñar  en algún colegio y que en Francia habían aceptado la solicitud por lo que estaba feliz. Yo seguí por mi lado y  cada vez que le llamaba  el me decía que estaba bien y que el director  le apoyaba mucho en las investigaciones. Cuando llegué a Francia quise reunirme con él pero a quien vi no era mi hermano; era alguien totalmente distinto,


-¿Distinto?


-Si;  no sabría decirlo; no quería verme y cuando quise abrazarlo no me dejaba; cualquier ruido fuerte  lo asustaba  y siempre estaba temeroso o nervioso. A veces le llamaban y su rostro parecía aterrado. Un día escuché ruidos en su cuarto; era el que estaba teniendo una pesadilla; fui a despertarlo pero al ver sus ropas  vi extraños moretones por lo que quise seguir revisando. Su cuerpo estaba lleno de heridas y en sus gritos decía “no!, basta! no quiero!”


Kurogane recordó que cuando estuvieron en el almacén Fay dijo esas mismas palabras cuando quiso  tocarle.


-¿Después que paso?


-Cuando despertó lo hice contarme todo y llorando me dijo que Ashura abusaba de él y que le amenazaba.  Yo  no pude preguntarle más detalles porque solo lo hería mas tampoco teníamos pruebas para poder denunciarlo. Tomé a mi hermano y huimos  a la casa de una tía en Inglaterra. Volví a mis viajes tiempo después de que él se recuperara un poco. Luego supe de que se había ido a Japón a hacer clases para Yuuko-sensei y que había usado mi nombre; por lo que al venir a Japón decidí usar el de Yuui.


-Ya veo. ¡Demonios!


Ambos llegaron a los dormitorios pero para su sorpresa el gemelo mayor no estaba.  Salvo una nota:


Querido Fay:


Eh tomado una decisión; creo que no seré mas un cobarde y eh decidido enfrentar a Ashura-sama.


No quiero que tus sueños sean interrumpidos por mi culpa; quiero que te conviertas en el mejor cocinero del mundo .


Por favor dile a Kuropon… mejor dicho, a Kurogane-sensei que lo siento mucho y que lamento que tuviese que soportar a alguien tan despreciable como yo.


No te preocupes por mí.


Te amo hermano.


Yuui.


-S…Se ha ido.


-tsk! Debemos buscarlo antes de que ese sujeto le encuentre.


-¿Pero dónde?


-Primero veamos si esa mujer sabe algo.


Camino al despacho pasaron por el auditorio donde estaban los shows y algo frenó al menor de los gemelos. Un piano sonaba, la canción era Claro de Luna. Un tema de por si muy triste.


-Es Yuui


-¿Como lo sabes?


-Mi hermano odia tocar el piano por que Ashura le obligó a aprender  y  tuvo que soportar todo tipo de tortura para aprender a tocar esa canción.


Entraron y en efecto el mayor de los D.Fluorite estaba tocando atrayendo la emoción de todos los oyentes quienes inconscientemente lloraban.


Fueron hacia el escenario y esperaron a que terminase para no interrumpir. El menor se percató de que Ashura había oído también el piano y que este miraba a su hermano desde  el acceso izquierdo del escenario.


Sentía como aquel hombre le miraba y oía con deleite tocar; mientras para él era una tortura que le hacía querer llorar; pero tocó el tema por completo recibiendo el aplauso del público. Se dispuso a retirarse por el lado izquierdo para enfrentar a Ashura Y tanto Kurogane como su hermano  fueron por el pero entre tanta multitud se les era difícil seguirles.


Entraron a una sala


-Te estaba esperando; Yuui


-No puedo decir lo mismo de ti. Ashura-sama


-Vas  a venir conmigo de regreso.


-No.  Solo vine a pedirte que me dejes en paz, si aun sientes algo por mi déjame ir


-Sabes que lo que me pides es imposible


Ashura se acerca hacia el rubio y le abraza para luego besarlo; eso último provoca que el ojiazul rompiera en llanto


-Por favor déjame ir


-No puedo. No ahora que te eh encontrado.


Poco a poco su cuello es besado mientras suplicaba que le dejara ir. Si gritaba, algún alumno le oiría y eso armaría un escándalo por lo que no gritó.  No se arriesgarìa a crear un escándalo en el instituto.


-Por favor, déjame ir


Sintió como una mano recorría bajo su camiseta y la otra aprisionaba fuertemente sus manos.  Cuando se cansó de acariciar su pecho, fue hacia la parte trasera de su pantalón


-Por favor , basta. No quiero esto.


Al sentir la intromisión de un dedo intentó negarse y huir pero Ashura le golpeó


-Lamento que me hicieras golpearte, sabes que me duele herir tu hermoso rostro… aunque veo que alguien más ya lo había hecho.


Siguió con dos dedos mas mientras el rubio lloraba esperando aterrado lo peor. Fue volteado apoyando sus manos a la pared y sintió  el filo de un cuchillo en su garganta.


-Sabes, quiero que nos vayamos juntos; lejos, donde nadie pueda alcanzarnos. Primero déjame sentirme en lo más profundo de ti Yuui y luego ambos nos iremos lejos, donde nadie nos alcance. Primero iràs tu y yo te seguirè.


-Ashura…sama… deténgase por…favor. –Dijo suplicante al sentir como el miembro de su violador  intentaba entrar en su intimidad. En eso son interrumpidos por el hermano menor del rubio y el profesor de educación física quien  golpea al tipo dejando a al gemelo menor ver a su hermano quien aun estaba en shock.


Enfurecido fue y intentó  enterrar el cuchillo en el ojos rojos pero este frenó el ataque con su mano resultando esta herida; para luego arrebatarle  el arma ágilmente y propinarle una golpiza al agresor ( para algo es el maestro de deportes y  orientador de Kendo y Judo )


-No sacas nada, si me echas vendré mañana por él y pasado mañana.


-tsk! Cállate! Si te atreves a tocarlo nuevamente juro que te mato!


-Yuui, vendré por ti para que huyamos lejos donde no nos alcancen. –dijo mientras miraba al gemelo mayor que abrazaba aterrorizado a su hermano.


De repente, miles de policías entran al aula junto a yuuko-sensei


-Era de esperarse de Kurogane-sensei. La policía se hará cargo ahora que fue encontrado en plena escena del crimen le será difícil zafarse de esta. –volteo hacia los gemelos y se acercó triste. –Lamento tanto  que tuvieses que pasar por esto nuevamente, pero ya acabó.


En el momento en que se puso de pie, después de tanto llorar; se desmayó. Kurogane le tomó en brazos  para llevarlo junto con el otro gemelo hacia los dormitorios.


-Voy por  el botiquín.


-No es nada, será mejor que le cures su rostro. A mi solo dame un trozo de tela para hacer presión.


-Si.


Se sentía muy culpable; primero por delatar su ubicación con ese sujeto llamado Fuuma; después con insultarlo y golpearlo; ya que en cierta forma eso hizo que fuese a buscar a Ashura. Sintió un dolor tan enorme cuando oyó  murmurar al rubio mientras dormía “basta””me duele” “déjame por favor” “no” “ayuda…me kuro…”


Se le acerca el menor.


-Déjeme yo me hare cargo de nii-san


-ya veo por qué le dices nii-san


-¿Eh?


-A estas alturas no sabes cómo llamarle ni quién eres, si Yuui o Fay o…


-Mientras él no le deje decirlo, será Fay y Yo seré Yuui.


-Ya veo.


-Kurogane-sensei ¿Puedo preguntarle algo? –dijo el menor al ver el rostro del moreno, angustiante.


-¿Qué sería?


-Ayer, mi hermano tenía marcas en el cuello ¿Fue usted?


-¿Y qué si fuera yo?  -dijo desafiante. –Pero  no llegamos a nada más que eso porque él no quiso


-Ya entiendo…  Debo rogarle que no se acerque mas a  el.


-¡¿Nani?!


-No quiero que vuelva a sufrir


-Pues dìselo a  èl. –Le viò a los ojos


- ¿Lo amas Kurogane-sensei?


-¿Tu que crees?


-Por favor cuide de nii-san  -dijo después de  un silencio. -yo iré a dormir a su dormitorio, cualquier cosa avíseme por favor.


-Si.


Despertó asustado y volvió a llorar. Tenía miedo, lo  último en recordar fue  ver a Kurogane. Que lo viese así, era tan vergonzoso y también tan miserable. Al ver que estaba en los dormitorios  se calmó un poco pero no le duró mucho pues entra la persona que menos quería ver


-Te desmayaste.


-Ya veo; ¿y Yuui?


-Está bien; le dije que fuera a descansar a mi cuarto, que yo me iba a quedar cuidando de ti. Asi que vuelve a dormir.


-¿Y Ashura-sama?


-Arrestado. Según esa mujer es bien difícil que este libre. Ya hay bastantes pruebas en su contra… y si escapa… Yo mismo me encargarè de que no vuelva.


-Arigato


-¿Eh?


-Por cuidar de mi ahora, de un cobarde –Dijo tristemente.


-perdón Yuui


-¿Eh?¿Cómo lo sabe-


-No importa, pero creo que debía decirte que lo sabía; aunque aquí eres Fay. Aun así lamento haberte golpeado, no sabía nada… nada


-No tengas lastima por un miserable como yo. Además te desagra…


-No me desagradas; lamento el haberte dicho eso.


-T… Tu mano. –Vio la mano vendada y sangrante del moreno


-No es nada, solo un rasguño


-Déjame ir por el botiquín, si no la curamos se puede infectar


-¡Te digo que es un rasguño! ¡Qué no entiendes!


Eso hizo exaltar al rubio quien  iba a ponerse a llorar, su mente no estaba para jugar a las apariencias. El moreno se percató de su error.


-Lo siento… ve por el botiquín


-No quiero tu lastima


-No es lastima, ve y hazme una maldita curación en  la mano, que ya debe de estar infectada.


Luego de aplicar algunas medicinas; el rubio procedió a vendarla delicadamente. Para Kurogane esto era muy triste, extrañaba  que el ojiazul sonriera aunque fuera de mentira.


-No tienes por qué ser tan cuidadoso, No me duele en absoluto


-Pero de seguro te duele Kurogane; no digas que no sientes dolor


Eso fue quizás lo más triste; oír su nombre por esa persona. Realmente estaba enamorado del rubio y verlo así le lastimaba tanto. A pesar de oir su nombre en la voz de Yuui, sabia que no era igual en la voz de Fay por muy gemelos que Fuesen.


-No duele, hay cosas que duelen más.


-Te lo dije; no quiero tu lastima


El moreno acercó su otra mano a la mejilla herida del rubio y este tendió a echarse para atrás pero al ver la mirada de Kurogane se quedó quieto


-Puedo pedir perdón por haber causado parte de esto; pero no por el que te hizo él; aun así pido que me perdones por no haber evitado que te volviera a lastimar.


-No es nada;  por lo menos no salió más gente herida.


Los días que siguieron fueron tranquilos; los gemelos daban clases normales; a ratos el moreno pasaba al aula de ciencias a ver si el rubio estaba bien y otras veces optaba por ir al casino a consultarle a Yuui. La verdad es que solo algo no era igual; Kurogane sabía que sentía más que amistad por aquel rubio que por tanto tiempo le sacó de quicio. Lo que menos quería  era verlo.


-hi! Kurorun-sensei!


-¿qué quieres?


-Hoy es un lindo día ne?


-¿Qué hay con eso?


-Yuui hizo mucha comida y quería invitarte a comer con nosotros .


-Tengo que hacer


-¿Eh? ¿En el descanso? Kurorin-sensei es un hombre muy ocupado


Vio que la herida en la mano del moreno aun no sanaba y eso le trajo algo de culpa.


-Tu mano aun no se cura ne?


-No es nada.


-¿Dónde tienes el botiquín?


-Te digo que no es nada.


-Pero… -toma la mano de su compañero y agacha la cabeza. –te hirieron por mi culpa.


-Que no es nada; yo me involucré porque lo quise


-Demo…


-El botiquín esta en ese cajón.


-hai!


Limpió bien la herida con algodón y suero; buscó algún cicatrizante para aplicar y se dispuso a vendar. El moreno miraba fijamente lo que el ojiazul hacia; adoraba esos ojos que tenían el color del cielo y esa piel blanca. Levantó su otra mano y acarició el cabello dorado de su compañero; este tembló en un principio pero por alguna razón sentir esa mano no le causaba miedo alguno, es más le relajaba y sin querer apoyó su cabeza en las piernas del robusto profesor mientras este le acariciaba cada mechón.


-Tienes que ir a clases.


-Nop, tengo bloque libre hasta las 11.^^


-Ya veo, yo tengo una clase ahora.


-Me gustan tus clases, ¿te molesta si me quedo?^^


-Sabia que dirias eso ¬¬


-Es un si ¿ne?^^


-¿A caso no tienes nada pendiente?


-Nop^^ vamos Kurorun-sensei no seas malo


-….


-¿si?


-Ya cámbiate, te veo en las canchas.


-hai!


La clase comenzaba y Kurogane mandaba a trotar a los alumnos; recordó  que si no hubiese recordado que tenia clases, lo más seguro es que habría intentado besar al rubio y agradeció el horario que tenia <<demonios amo este jodido horario>>. Dejó de pensar en ello y se puso a trotar junto a los estudiantes.


-Kurogane-sensei! Matte! –gritó el rubio al ver que habían empezado la clase. Vestía un pantalón deportivo color rojo, una camiseta blanca y un poleron también rojo; se ató el cabello para que no le molestase al correr y alcanzó a su sempai  a trote.


-¡Idiota! No puedo retrasar una clase por esperarte. Tsk


-Lo sé pero aun así creí que podrías esperarme ^^


-Son 15 vueltas.


-hai! ^^


Después de las 15 vueltas vinieron una sección de abdominales, donde debían hacer una cierta cantidad para tener una A. Kurogane evaluaba algunos y Fay ayudaba evaluando otros.


-waaaah! Syaoran-kun es muy ágil! Que más se puede esperar del capitán del equipo de futbol ne?


-No es nada, generalmente entreno todos los días junto con mi hermano


-Syaoron entonces debe ser muy bueno en deportes ne?


-Si.


La clase terminaba y estaban guardando las cosas; ese almacén tenía recuerdos;  los recuerdos de aquella vez que se besaron, tocaron y sientieron sus respiraciones; recuerdos de cuando el rubio le dijo que olvidara lo ocurrido.


-Será mejor ir a las duchas. Más tarde hay reunión de profesores y apesto.


-Sería malo si  oliéramos mal ne?


El moreno se quita la camiseta  dejando exhibir toda su musculatura bañada por el sudor. El ojiazul no pudo evitar ver tal escena; miró cada rincón de ese abdomen musculoso; Kurogane se percató de eso e intentó acercarse al maestro de química; con sus manos acarició los dorados cabellos y también el delicado rostro para luego besar suavemente.


Fay se sorprendió; pero se dejó besar  para luego ambos unir sus lenguas. El rubio posó sus manos en la espalda del moreno quien  comenzó a jugar con la camiseta que traía este. Sus manos querían recorrer más


Egoístamente  estrechó a la pared al rubio y puso una de sus piernas entre las de este  haciendo roce.


-ah! –gimió el rubio


Kurogane siguió besándole hasta llegar a su cuello; el rubio disfrutaba de casa beso que este le propinaba y cada vez se agitaba más.


-ah! –gimió nuevamente cuando su compañero movió la rodilla


Sintió como el rubio se estremecía cada vez que rozaba su pierna  así que decidió hacerlo más seguido; Fay comenzó a moverse haciendo más fuerte el roce hasta que sus gemidos comenzaron a ser más seguidos; se abrazó a la enorme espalda del moreno y se recogió por completo para luego estirarse completamente. Se había venido con la pierna de Kurogane.


El moreno quiso hacer algo más arriesgado y lo recostó en una colchoneta; Fay no opuso resistencia; siguió besándole mientras que  deslizaba una mano por los pantalones del rubio quien se percató de adónde iba


-Pa…ra ah! Kuro… rin ah!


El moreno miró a los ojos al ojiazul y le volvió a besar; retiró su mano  y abrió las piernas para apoyarse entre estas; cuando sintió que el rubio movía las caderas, decidió moverse también. Aunque fuera con ropa; el roce se sentía muy bien para ambos. Fay gemía y comenzó a pedir más velocidad a lo que Kurogane trató de complacer; sabía que por el trauma que tenía el rubio no podría empezar normalmente sino que tendría que saber cómo llegar a él.


-¿Te… gusta?


-S…i  ah!... se sien… te tan …bien ah! Ahh!


Nuevamente quiso tocar la entrepierna del rubio con las manos; pero este no le dejó; pareciera que  en el momento en que siente la mano ahí, su  defensa se activa.


-No doy más. –dijo resignado y se levantó.


-¿eh? –le miró sorprendido Fay  quien estaba más que excitado.


-Será mejor que nos preparemos para la reunión.


-Pero si faltan dos horas aun Kuroga…


-¡Si seguimos no me detendré cuando digas “no” ¡ ¿Entiendes?!


-Kurogane.


-Sé que tienes miedo, lo entiendo ¡demonios!


Tomó una toalla y se dispuso a salir del almacén para ir a  las duchas. Fay estaba nervioso y temía que Kurogane se fuese enojado así que le detuvo.


-¿Qué pasa?


-¿Estas enojado?


-No, no lo estoy


-¿Seguro?


-seguro


-¿Lo prometes?


-¡Que demonios! Tsk ¡te digo que no estoy enojado!


-Demo.


-¡¿Por qué te preocupa que este enojado?!


-Porque me gustas. o//o


-¡¿Nani?!


-Mejor me voy ne? Kurorun ^^


Kurogane lo toma de la muñeca y lo estrecha a la pared


-Repite lo que dijiste.


-¿Cuál? ¿Mejor me voy?


-No


-¿Demo?


-¡Ya dilo!


-… Me gustas.


El moreno se sonrojó como un tomate y volteo hacia la salida. Esas palabras eran sinceras; el profesor de química las dijo sin mueca alguna y sonrojado como colegiala enamorada.  <<¿Qué sigue ahora?>> pensó mientras el rubio estaba  más que avergonzado sentado en la colchoneta y tapándose la cara.


<<¡mierda!>> No sabia que hacer ahora; el sentía lo mismo pero solo de pensar en cómo decirlo lo sonrojaba mas y le costaba articular palabras.


Fay no aguantó mas y entre su vergüenza  se puso a llorar; se paró dispuesto a salir de ahí antes de que Kurogane le viera así; pero ya era tarde.


-¿P-Por qué lloras?


-Quiero irme.


-¿Nani? Pero si estamos hablando


-¿de qué?, si ninguno hablaba en minutos ya! No pienso obligarte a estar conmigo!


-¿Nani? ¿Tu crees que yo…? ¡Mierda!


-No quiero ilusionarme; ni obligarte a nada. Gome ne deja que me vaya a …


No alcanzaba a terminar la frase cuando es besado por el moreno; embriagado de placer respondió cada beso deseando  volver a lo que estaban-


-Idiota… ¿crees que haría esto con alguien a quien no quiero?


-¿Eh?... Entonces… ¿tu…


-Escúchalo bien porque no pienso repetirlo ya que es vergonzoso… Yo igual te quiero… ¡Demonios esto me está matando!


-Kurogane….


-¡Deja de llamarme Kurogane! Detesto cuando lo haces


-¿eh?


-Sal conmigo.


-¿Eh?


-¡Que no oyes! Sal conmigo.


-¿Salir?... te refieres a…


-Si. –Responde más que avergonzado.


-Demo… ¿Podré abrazarte cuando quiera?


-Si


-¿Me dejarías ir contigo de las manos y esas cosas?


-Si


Fay abrazó fuertemente a su compañero; estaba feliz, no le importaba nada mas salvo aquel momento.


-Idiota no tienes por qué llorar


-Demo…yo… jamás pensé que esto… pasaría.


-Voy a abrazarte así que ven.


-S…si.


Fay se dejaba abrazar fuertemente por el moreno  a quien amaba desde hace mucho; aquel que siempre quiso que le amara; aquel a quien jamás creyó poder amar.


Pasó un rato en el que solo estuvieron abrasados hasta  que Kurogane quiso besar aquellos labios que le volvían loco; cada roce de sus lenguas producía sensaciones difíciles de describir;  tratando de juntar ambos cuerpos lo más que se pudiese para sentirse mutuamente.


-Sácate la camiseta;  quiero verte.


-S… si


El rubio se saca la camiseta ya sudada hace tanto tiempo; su delgado y esbelto torso estaba a la vista del moreno quien quiso tocar;  cada caricia provocaba que el rubio gimiera y eso volvía más loco a aquel de ojos  rojos. Finalmente mientras le besaba volvió a abrazarlo y ambos sintieron el contacto directo de sus pieles.


Lo dejó suavemente sobre la colchoneta; vio cada rincón del torso de su acompañante y se fue a atacar su cuello.


-Ah!


Fay sentía un placer indescriptible; jamás había sentido esas sensaciones con ninguna otra persona. Sentía como su compañero degustaba cada parte de su delgado cuello mientras que con sus manos acariciaba sus tetillas; las apretaba  y eso le gustaba. De repente, el profesor de deportes se detiene.


-Ah! ¿Qué?


-Déjame mirarte


-Demo… se sentía tan… bien.


Su respiración agitada se notaba al mirar su pecho subir y bajar;  ambos sudaban nuevamente pero no por haber trotado si no por desear mas contacto entre sus cuerpos.


-Bájate los pantalones


-¿Eh?


-Quiero que me sientas más de lo que sientes ahora.


-demo…


Veía determinación en sus ojos; y sabía a lo que iba; esa parte que tanto le aterraba. Con Ashura era aterrador, asqueroso y doloroso. Por lo que tenía miedo. Tragó saliva y se bajó los pantalones tímidamente. Kurogane veía el esfuerzo de su compañero y le daba en cierta forma inseguridad querer hacer mas.


-Sabes que no quiero lastimarte ¿cierto?


-Aj…am


El moreno se acercó para posar su cuerpo sobre la delgada figura de Fay quien no puede evitar dar un salto y temblar  como conejillo arrinconado. Kurogane se dio cuenta y cambió de parecer. Aun no estaba listo. Luego de posarse sobre él le abrazó.


-¿Eh?


-Vamos a quedarnos así un rato ¿te parece?


-Demo… tu no ibas a…


-Te veo tan asustado que siento que voy a abusar de ti. No lo soporto.


-Kuro… gane.


-No me llames Kurogane, eres al único a quien odio llamarme así.


Permanecieron un tiempo; sus respiraciones eran agitadas en especial la del más alto que se contenía de no hacer nada más. Fay notaba la erección de su compañero y cuanto este aguantaba; se sentía egoísta. Así que temblorosamente acercó su mano a la entrepierna del moreno y comenzó a masajear el miembro de este.


-¿Nani?


-Se ve doloroso… déjame hacerte esto; ya que fue mi culpa que quedaras así.


Fay sentía que era enorme; estaba ardiendo y palpitaba de manera frenética; se percató de que el también estaba igual pero no sabía que hacer.


-Es… tas igual ah!


-Si … pero ahora estoy con el de Kurotan ^^


-Déjame hacerte lo mismo


Cuando el moreno se acercó a la entrepierna del rubio este tembló un poco, lo que le hizo detenerse y cuestionarse si continuar; no quería hacerle recordar cosas a su compañero.


Para su sorpresa, temblorosamente la otra mano del rubio tomó la suya y la llevó hacia su miembro; Miró y el rubio asintió; por primera vez  Fay le dejaba tocarlo.


Ambos acariciándose  para llenarse de placer. El sudor resbalaba por sus cuerpos y cada gemido era acompañado por el del otro; El primero en irse fue el rubio para luego dejar irse al moreno; al reaccionar vio la imagen que tenía enfrente. Un excitado profesor de química que agitado respiraba y le miraba con deseo; el miembro de este roseado con el líquido de ambos y el suyo en las mismas condiciones; vio su mano  húmeda también y vio la de su compañero en igual circunstancia.


Fay miraba a su pareja; veía lo agitado que estaba; su torso sudando y parte inferior húmeda al igual que la suya; había experimentado un placer y quería mas. A diferencia de cuando era tomado con Ashura, sintió placer por primera vez en vez de temor; quería saber si con cada acción sentiría igual; sentía punzasiones en su entrada como si esta le demandase ser tomada en cuenta.


Ante la vista del moreno; bajo lo que le quedaba de ropa interior exhibiendo todo su cuerpo agitado, sudoroso y deseoso. Su respiración agitada solo era la acompañante a cada movimiento que hizo; abrió las piernas ofreciendo su entrada al moreno indicando con sus manos  que quería atención en esa zona.


-H…aya..ku


El moreno no lo creía; Fay estaba invitándolo; temió que se arrepintiera después  y como que dudo en ir.


-Ha…yaku


Parece que el rubio estaba por explotar y demandaba algo más. <<mierda, se ve jodidamente sexy>> <<si no lo hago ahora, quizás cuando>>. Se acercó y el ojiazul sonrió; comenzó a besarlo mientras que acercó su mano que estaba húmeda por la acción anterior y metió suavemente el primer dedo.


-Ah! Due…le


-Lo moveré más despacio hasta que te acostumbres


Si bien le dolió aquella intromisión; comenzó a sentir poco a poco una sensación placentera; quería sentir mas hondo ese dedo por lo que trató de profundizar con sus caderas; el moreno dispuso a meter un segundo dedo.


-ah!


-¿Estas bien?


-…Si ah!... demo… ah!...mas rápido.


Introdujo un tercero que pasó rápidamente. Fay estaba en un estado de placer que  ya no razonaba; solo quería seguir siendo tocado e intervenido por su amado; moviendo las caderas cada vez más rápido para finalmente venirse; Kurogane retiró los dedos y retrocedió admirando la escena del lascivo amante que tenía frente suyo.


-Kuro… hayaku…el tuyo…


-¿Estas seguro?


-… Si eres tu… si.


Kurogane abrió las piernas de su compañero para  luego rozar su miembro a la entrada; esa sensación provocó que ambos gimieran; Para cuando entró la cabeza; Fay pegó un gemido de dolor.


-Lo siento.


-No te preocupes,  ya se me va a quitar.


Cuando ya se acostumbró a la intromisión; movió sus caderas avisándole al ojos rojos que ya estaba listo y ambos comenzaron un vaivén lleno de placeres. Fay estaba sintiendo mas allá de lo que imaginaba; tratando de abrirse más para poderlo sentir más a fondo aun; Kurogane ya había dejado la delicadeza, pues sumido en el placer de aquel sitio que lo acogía, quiso llegar más a fondo por lo que sus embestidas comenzaron a ser más profundas.


-Ah!... se siente… bien… Ah!... Ah! Kuro… párteme… Ah!


-No me des ordenes… ah! Mierda que eres bueno


-Ah!, Ah!,AH! Voy a venirme! Ah!... Ahhhh!!


-Yo… también…Ah!...


Ambos cayeron semi muertos en la colchoneta; miró a su compañero, sus cabellos dorados estaban empapados de sudor, su pecho agitado y sus gemidos lo volvían loco por lo que quiso besarlo.


-La reunión…


-Falta media hora ne? Será mejor que me levante a duchar… ah! Duele.


-Idiota, no intentes moverte así como estas.


-Demo la reunión, no puedo faltar >< Yuui llevará unos dulces


-Deja que me levante; mientras trata de vestirte; ya veré como te llevó para allá.


Lo primero que hizo fue limpiar para no dejar rastros de lo que había ocurrido aquí; Fay estaba mirándole sentado ya que su cuerpo estaba adolorido y estaba más que agotado. Salió y vio que las duchas estaban vacías; ayudó al rubio para que levantara , en ese momento Fay se estremeció y la vergüenza lo invadió


-Kuro…baka ah!


-¿Nani?


-Lo echaste dentro… Ah! Ahora está saliendo…


El moreno había olvidado ese detalle; que cuando su compañero se levantase, la sustancia que el depositó en el debería de caer; eso hizo que el ojos rojos se pusiera pálido y rojo a la vez.


-T…e traeré ropa, ¿crees poder bañarte?


-Sip! Dejé mi otra ropa en un bolso cerca de los aros de baloncesto.


-ya regreso. –dijo mientras le daba un dulce beso.


Después del baño se cubrió con la toalla y preparó algo de té. Su cuerpo dolía  por lo que buscó algún remedio en el botiquín de su amado. Tomó dos pues el dolor era bastante. Vio llegar a su compañero con su ropa.


-faltan 10 minutos Kuro-pon hayaku


-¡lo sé! ¡lo sé!  Vístete mientras me ducho.


Ambos llegaron tarde ante la mirada de Yuuko y los demás maestros.


 


 


 


 


 

Notas finales:

Espero reviews!!!


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