Todo el mundo tenemos una horma para nuestro zapato por arichan

¿Cómo habían llegado a eso? Llevaba la ropa mal colocada, la camisa abierta, tirado en aquella cama del hospital y encima de él Sully.

Retrocedamos hasta la mañana de ese mismo día, nuestros personajes estaban en lugares distintos, mientras que Sully se encontraba en casa junto a su mejor amiga. Mientras que en el hospital se hallaban un TOP discutiendo con su pareja sobre, ahora, la ropa que llevaría.

Miremos primero lo que hacen las chicas.

• No esa falda es espantosa. No voy a dejar que te pongas eso Inexys.

• Entonces, ¿por qué la has comprado? No me entra en la cabeza el por qué te gastas todo ese dinero en ropa. Pudiéndomelo dar a mi. A tu amiga que es pobre. - Inexys se pasó todo el almuerzo de la misma manera, quejándose y molestando a su amiga con el aspecto que tenía. Había conseguido que se cambiara tres veces de ropa. Pero eran las 5 de la tarde, y tenían que ponerse en marcha para llegar a tiempo para la cita con Choi Seung Hyun.

   

   

Por otro lado, en el hospital, Ji Yong pasó todo el almuerzo intentando convencer a su amado para que se pusiera la camisa a cuadros que él quería, junto con unos pantalones vaqueros negros, que se pegaban a sus piernas, dejando al descubierto sus largas y hermosas, según Kwon y todas las fans del rapero, haciéndolo ver aún más alto de lo que era.

Eso era una de las cosas que mas le gustaban a GD de Tempo, su altura, su metro ochenta largos. Siempre le gustó colgarse de él, y dejar todo su peso en él, sin que sus pies tocaran el suelo. Aunque tenía que admitir que tenía un fetiche con las piernas de su Hyung, esas largas y musculosas piernas, a las cuales preferiría estar abrazando en esos momentos, en vez de ver como eran abrazados por aquellos vaqueros, como los odiaba en esos momentos.

• Podrías dejar de mirar de esa manera. Sino me olvidaré que estás convaleciente y te haré muchas cosas malas. - aquellas palabras de su hyung le hizo sonrojar de los pies a la cabeza, sentía vergüenza, pero nadie sabía mejor que él que deseaba que le hiciera todo lo que deseara, porque el se dejaría sin chistar.

   

   

A las cuatro y media de la tarde por fin Seung Hyun consiguió el visto bueno de su bebe, pudiendo así dirigirse a la habitación donde esperaría a la presidenta de su club de fans. 

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Aquella joven llamada Sully había sido de mucha ayuda para ella. Ahora sabía que era lo que tenía que hacer. A ella nadie se la jugaba. Ella ponía las reglas y si no las cumplían simplemente los eliminaba del camino. 

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Tenían la mansión para ellos solos, DaeSeung había salido a grabar un episodio piloto de su dorama. Mientras que a SeungRi le había llamado Taemin. Asique los habían dejado solos en la mansión de BigBang. Aquel día Lee no tenía ningún compromiso. Mientras que TaeYang se había tomado un tiempo de descanso, para estar más cerca de su querido novio. Y como la banda no estaba haciendo nada en esos momentos tan difíciles, se lo podía permitir. 

Estaban tirados en una de las bancas que estaban en el jardín trasero Tae recostado con la espalda en la banca y Owen acostado en su pecho aspirando su aroma. El roce de sus piernas y su cuerpo hizo que el ambiente se caldeara hasta el punto que sin darse cuenta sus manos recorrían el cuerpo del contrario, propinándose caricias cargadas de deseo por encima de las ropas.

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Estaban delante de la puerta del hospital a dos plantas por debajo de su objetivo, pero no podían pasar. Bueno más bien les impedía el paso una mujer extranjera que miraba a Sully de manera muy extraña. Bueno a vista de Inesyx y el resto de personas de allí esa mujer tenía la mirada muy rara, pero unos ojos atrayentes y bellos a pesar de su extraña mirada. 

• Siento lo de tu abuelo - fueron las primeras palabras que salieron de esa mujer, para luego mirar a Inexys - te acuerdas en lo que hemos quedado ¿verdad?

   

• Si, ¿Cómo me iba a olvidar? - mentía, se había olvidado completamente de lo que había quedado con la asesina, claro hasta que la había visto en el mismo metro que ellas. Por casi le da un infarto, y no le había contado nada a Sully, aquello iba a ser complicado. Ella la tenía que colar en el hospital.

   

• ¿Cómo sabes tu lo de mi abuelo? - Sully se había atascado en la primera frase que había mencionado la extranjera. 

• Porque si. Vamos, mi tiempo es oro. - se giró para entrar al hospital seguida de cerca por Inexys y una confusa Sully. 

   

   

Las tres entraron en el holding del hospital buscando con la mirada a Dami, que era la que tenía que introducirlas en el ala donde estaba G-Dragon internado. Pero antes de que pudieran buscarla o siquiera darse cuenta de que estaba delante de ellas, la extranjera se llevó a rastras a Inexys del lugar, dejando a Sully sola ante una Dami un tanto extrañada. 

• ¡Hola! Tu eres la chica que acompañaba a Judit el otro día ¿verdad? - Dami se acercó a una Sully un tanto mareada por la situación que acababa de vivir. 

• Si unni. - una sonrisa surcó sus labios, consecuencia de que vería a su Tabi en unos momentos.

• ¿Esa no era amiga tuya? - preguntó curiosa Dami.

• Si, pero la tipa extranjera no se quien es.

• Bueno, vamos. A Choi no le gusta esperar.

• Si vamos - en esos momentos ya no se acordaba de su amiga ni de que la tubo en algún momento de su vida como tal. 

Subieron al segundo piso en ascensor. A nuestra querida Sully se le hizo eterno el trayecto en ascensor, pensaba que hubiera llegado antes por las escalera. Luego recordó que si subía por las escaleras se pondría a sudar y eso no estaba bien visto, era un poco asqueroso, siempre tenía que estar  limpia y fresca para ver a su oppa TOP.

Al final de una eternidad, para Sully, llegaron a la segunda planta y comenzaron andar hasta el ala donde tenían a GD ingresado lejos del resto de los pacientes.

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Como pudieron, entre caricias cada vez más intensas, entraron en la casa dirigiéndose a las escaleras mientras que la ropa volaba por todos lados durante el recorrido por la casa. Al llegar arriba Dong lanzó a Jinki contra la pared colocándose encima de él inmediatamente, aplastándolo con su cuerpo. Rozando todo su cuerpo contra el de su compañero, haciéndolo gemir.

Como pudo Lee sacó de encima suyo a su novio, para poder así andar hasta la habitación de Dong entre besos y caricias, más de una vez tuvieron que recargarse en las paredes para no caer por la intensidad de sus besos. Como pudieron llegaron a la habitación casi tirando la puerta en el proceso.

Dong se separó de Jinki para empujarlo sobre la cama, mientras el caminaba hacia el cuarto de baño que tenía ahí, para coger el lubricante. Cuando volvió encontró a un Lee de rodillas en la cama, sin ropa alguna, acariciando su cuerpo, mientras miraba con lujuria a Dong. El cual tubo que pasar saliva, su novio era perfecto, lo hacía todo de manera sexy y lujuriosa. Y eso a él le ponía mucho. 

Salió de su trance para acercarse a la cama y subir a ella. Acercándose a Lee para luego atacar sus labios sin compasión, haciendo que el otro chico pasara sus brazos por el cuello de Tae mientras ambos caían cuan largos eran en la cama. Las manos de Tae no se mantuvieron quietas y recorrieron todo el cuerpo de JinKi. El cual tampoco se quedó parado, dirigió sus manos a la parte trasera de YoungBae y apretó fuertemente su trasero. 

Ambos chicos se dejaron llevar por la lujuria del momento hasta el punto en el que no sabían donde terminaba un cuerpo y terminaba el otro. La boca de Bae comenzó a bajar por el pecho de Lee hasta encontrar sus pezones. Los cuales devoró sin compasión, lo cual sacó gemidos de placer de la boca de su acompañante. Pasó de sus pezones hasta su ombligo donde metió su lengua simulando penetraciones.

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Ahí estaban corriendo por todo el hospital buscando a un médico, que ella no conocía, pero rezaba que su secuestradora si que lo conociera. Porque no creía que aquello fuera a durar poco. No le había explicado mucho aquella mujer, tan solo que tenía que hablar con un médico y un psicólogo. Inexys no entendía la situación, para ella todo aquello era demasiado irreal. 

Tras girar en varios pasillos su improvisada secuestradora se paró de golpe haciéndola chocar contra su espalda. 

•  Quedate aquí quietecita, que no te pierda de vista. - después de aquellas palabras se acercó a un señor que se hayaba hablando con una familia que suspiraba de alivio. Se alegró de que todo les haya ido bien. 

Tras unas pocas palabras y una cara de miedo y asombro por parte del aquel doctor, ambos se acercaron a donde se hallaba parada Inexys, a la cual la asesina la arrastró del brazo, mientras que el médico hacia una llamada, y  caminaban hacia el ascensor más próximo.

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La había dejado delante de la puerta diciéndole que Tabi le esperaba al otro lado de la puerta, se le notaba nerviosa. Y era normal era la primera vez que iba a estar con él a solas, sin ningún adulto por el cual tuviera que retener sus impulsos. 

Toco una sola vez la puerta y esperó a que el hombre que estaba dentro le abriera la puerta, y entonces lo vió. Estaba ahí de pie parado con unos pantalones estrechos que le hacían unas piernas más largas, y una camisa a cuadros en tonos rojos y negros. Sully se tuvo que recordar que tenía que respirar para poder seguir viva y mirando aquel adonis. 

TOP se apartó de la puerta para dejarla pasar, cosa que hizo casi corriendo. Cosa que sacó una pequeña carcajada a su ídolo. Se sentó en uno de los sofás con esperanzas de que Tempo se sentara junto a ella. Pero no fue así. 

• ¿Cómo has estado?¿Estás bien? ¿Tienes hambre? ¿Has hablado con GD? ¿Es verdad que al final no habrá más BigBang? ¿Se habéis separado definitivamente? ¿Por qué?

El pobre de Tabi no sabía que contestar primero, aquella chica siempre lo puso nervioso. No podía hablar, y si lo intentaba salía con otra pregunta que lo dejaba aun más mareado, sin opción a contestar ninguna de ellas.

Mientras se levanta del sofá y se sienta en las piernas de él le dice - ¿Es que no piensas responder a la presidenta de tu club de fans?

• Espero que ya hayas hablado con GD de tus sentimientos. Porque todas tus fans ya sabemos que le quieres más que un amigo. Pero si no quieres intentarlo aquí estoy yo para sustituirle ¿verdad? - Sully no se daba cuenta de que TOP estaba temblado debajo de ella, y no por excitación, sino de miedo a lo que ella pudiera hacerle. - Pero si quieres intentarlo puedes contar con todo mi apoyo, y el de tu club de fans. - Mientras hablaba y hablaba Sully seguí sin darse cuenta de que cada vez estaban más fuera del asiento del sofá. Estaban a punto de caerse.

Cuando la puerta fue abierta, sobresaltándolos a ambos, haciendo que se terminaran de caer de donde momentos antes estaban sentados, quedando TOP tirado en el suelo con la ropa mal colocada, la camina a medio pecho, dejando ver los poco marcados abdominales que tenía. Mientras que Sully había quedado encima de él con la falda subida y la camiseta mal puesta. A esa posición se le sumaba la mano de TOP en la cadera de Sully, en un intento de que aquella chiquilla no se hiciera mucho daño cayendo encima de él.