- ¡¡Mello, cuidado!!
- … ¡Ah, eso no!
- De modo que así pasó todo – dijo Mía, todavía más impresionada; cuando, después, en el dormitorio, su hermana pudo contarle todo con mayor detalle – Salvaste la vida de Mello, Selena
- … ¿Sabes?: Después de todo por lo que ha pasado, empiezo a dudar de que alguien pueda matarlo alguna vez. Pero, me preocupa mucho que vaya a confiar demasiado en eso – La mayor de las gemelas abrazó un poco las mantas, al acomodarse mejor en el acolchonado – Debiste verlo cuando me protegió… Estoy segura de que si alguien lo necesita, nunca se detendrá…
- … Pero, ¿qué hacía en nuestra casa?
- … No lo sé - Sólo entonces, Selena cayó en cuenta – No le pregunté
- ¿No te parece raro?... Tal vez, quería hablar contigo
- … No; de ser así, lo hubiera hecho ya: Mello no tarda con cosas importantes
- ¿Y, si es algo importante que no puede decir?
Selena se mostró muy sorprendida:
¿A dónde quería llegar su hermana?
- No lo creo, Mía
- Vamos, piensa un poco – insistió ella – Lo conozco bien gracias a Matt, y sabes que no muestra sus sentimientos a menos que la vida dependa de ello. Y por eso lo hizo esta noche, ¿verdad?
Entonces, Selena pensó más detenidamente en el rato en el que el rubio la estrechó contra su cuerpo…
… Su respiración angustiada… El latido de su corazón… Su entrega… Aún cuando estuvieron en un gran peligro de muerte, ella se sintió feliz como nunca en su vida… Por primera vez, se sintió completa…
“Pero no sé si él habrá sentido lo mismo” – Como dijo: Mello tenía pasión para proteger a cualquiera:
¿Cómo distinguir si con ella era especial?
… Claramente, sólo demostrándole que él también podía refugiarse en ella cuando lo necesitara,… y viendo si se dejaba llevar, enteramente, por la emoción y la ternura… Entrando en su mundo…
“Aunque eso no me garantiza nada: Puede que no me ame, que nunca me haya amado…
… ¿Sería capaz de tanto, sin esperar nada, y por simple devoción?”
“… Sí lo sería”
Cada vez, se sentía más sorprendida del poder de su propio amor
Mía sonrió con dulzura a su querida hermana, y acariciándole el cabello la despertó de su ensoñación:
- Bueno, ya no pienses más en eso: Verás que, al final, el tiempo te dará todas tus respuestas
- ¿Cómo estás tan segura?
- Porque están en nuestro destino
- De no ser así: No habrían vuelto a nosotras
- …
Y, así, ambas jóvenes entraron en un merecido sueño; ignorantes de la nueva preocupación que embargaba, fuera, a sus adorados príncipes…
- ¡¿Cómo que no recuerdas el número de la casa?!
- Tenía entrenamiento: No lo apunté
- ¡Tú sí que eres brillante, Matt!
- ¿Quieres despertarlas?
Mello se revolvió el pelo, suspirando: ¿Por qué Near no contestaba al celular?
- Tal vez, no hay señal donde se encuentra; y nos hable cuando esté regresando
- Más le vale - ¡Lindo día escogió para irse de fiesta!
“Si Near regresa vivo, lo voy a matar… ¡¿Dónde diablos está?!”
- … ¡Gracias!
- …
El peliblanco no podía creer cuán bien se había sentido; y, abandonado, le echó los brazos al cuello, a la única persona responsable de toda su dicha…
- No tienes por qué, precioso – le dijo este, besando, una vez más, su sudada frentecita - Lo necesitabas, era mi deber, y lo disfrute tanto cómo tú
- …
- Te amo… ¿Lo sabes, verdad?... Sé que no te lo digo muy seguido, pero es así…
- …
- Claro que lo sé, mi vida… Pero gracias por decírmelo justo ahora – Y con intensa pasión volvió a besarlo; regresando su cuerpo desnudo a encima de su pecho, para que él le hiciera lo que le placiera en esa posición – Yo también te amo; y por eso no quiero que nada te separe de mí
- … Yo tampoco – suspiró él, correspondiendo a sus movimientos
- Entonces, ¿lo prometes?
- …
- Si no te separas de mí, yo no me separaré de ti
- …
- … Sí… Te lo prometo…
“… Gevanni”
- … Near… Near… Por favor, despierta
- … ¿Mmmm?...
(Tres… Dos… Uno…)
- ¡¡¡AHHHHHHHHHHHHHH!!!
- … ¡¡Ahhhhhhhhhhh…
Justin no pudo terminar su grito, porque un inmediato puñetazo de Near lo envió al suelo
El peliblanco se sintió embargado por un enorme susto, y es que ¡no recordaba absolutamente nada!
… La noche anterior (porque el amanecer había ocurrido hacía horas)… La fiesta… Unos tragos… ¡¿Por qué?! ¡¿Cuándo?! ¡¡¿Cómo llegó a la cama de esa habitación?!! ¡¡¿Y dónde estaba su camisa?!!...
(Afortunadamente, sintió que traía pantalones; si no habría sido un arranque mucho peor)
Desesperado, esforzó su cerebro al máximo para hallar las respuestas, y este le devolvió nada, excepto una terrible jaqueca; tan intensa, que lo envió, de vuelta, a acostarse sobre el acolchonado. Justin (que estaba sobándose el tabique, sorprendido de que no se le hubiera quebrado) se levantó, al momento, para atender a su invitado…
- ¡Ey, no hagas eso!: Sólo te lastimarás – le dijo, tratando de frenar sus intentos por volver a enderezarse – Trata de calmarte: No es tan serio
- ¡¿Qué no es tan serio?! ¡¡Auuuu!! - ¡Hasta oír sus propios gritos le dolía! – ¡Estoy en una cama desconocida, en una habitación desconocida, con una cicatriz desconocida! –: Acababa de notar, un pequeño moretón rojo en su hombro derecho; parecía de un pellizco - ¡¿Cómo me hice esto?!
- … Eh, pues… Bueno, eso sí fue mi culpa
- ¡¡ ¿Qué?!! ¡¡Auuuuuuu!! – ¡Era como un taladro en su cráneo!
- ¿Quieres parar?: Si sigues así, en verdad no podré aclararte nada – Justin le puso una mano en el pecho y la otra en la frente, presionando los puntos correctos para relajarlo – Ahora, estate quieto… Respira,… - (Near estaba más agitado que potro en rodeo; pero se esforzó) – y tomate esto – Y, luego, le pasó una taza con un preparado humeante
El menor la cogió un poco indeciso; pero al mirar, directamente, a su anfitrión, se sintió convencido de que no podía estar dándole nada malo; y bebió un largo sorbo, sintiendo, al instante, que el aroma y el calor le reconfortaban su órgano más afectado… Gracias al cielo… Ahora sí, ¡¡nunca más volvería a beber!!
Justin suspiró aliviado al ver a Near más tranquilo; y jaló una silla, a su lado, para empezar la que era… una muy difícil historia…
- Por favor, no omitas ninguna parte: Si arruiné mi reputación con todos, tengo derecho a saberlo
- Mejor, empecemos desde el principio: ¿Recuerdas que fuimos a cabalgar?
- … Sí… Creo que sí: Competimos, tú perdiste… Y luego…
- Sí, exacto
(No valía la pena hablar de esa parte)
- Empecé a beber, y…
- Discutimos
- …
- Me hiciste prometer que te dejaría sólo, y pensé que la mejor forma de ganar tu perdón era haciéndote caso. Lo hice muy bien,… hasta que, noté que te estabas pasando demasiado de la raya – (Near se tocó la frente, avergonzado) – Temí que alguien fuera a aprovecharse de ti… Luego, me di cuenta que no tenía por qué: Al primero que intentó propasarse contigo le dejaste un ojo morado… Entonces, empecé a temer por la seguridad de los demás (Presa fácil, es un apodo con el que nunca más volverán a llamarte) y cuando se me presentó la oportunidad te traje a este cuarto para que te calmarás mientras todos se iban… Fue un momento muy divertido: Mencionaste cosas muy raras… Creo que pensabas que eras un pirata… - (¿Cómo no recordaba tanto?) – Entonces, cuando quedamos solos, me ofrecí a llevarte a casa… Pero no conseguí que dijeras donde vivías… Así que, pues… No tuve más remedio que dejarte mi cama
(Dios, ojalá que los profesores nunca se enterarán de ello)
- ¿Y por qué estoy sin camisa?
- Oh, olvidé esa parte: Le derramaste vino encima. Pero no te preocupes, la eché en la lavadora de inmediato; ya debe estar lista
- …
Eso… era increíble
Justin no sólo había cuidado de su honor… Sino que, también, ahora, lo estaba atendiendo al perfecto detalle. Near no podía explicar lo aterrado y adolorido que estaría si él no se hubiera tomado tantas molestias, ¡y después de que le hizo pasar tan extraña noche! ¡No tenía palabras para agradecerle!
… Un momento… ¿No estaba olvidando algo más?...
- ¡Mis hermanos!
- … ¿Qué?
El peliblando, volvió a la desesperación, y salto de la cama…
- Tengo que llamarles: Deben estar muertos de preocupación, por mí… Y, no quiero ni pensar lo que harán cuando les diga que… ¿Dónde está mi teléfono?
- Yo lo tengo
- … ¿Por qué?
- Estabas muy delicado, y un sonido así podía estresarte gravemente. Pero, de nuevo, no tienes de qué angustiarte: Llamé cuando te quedaste dormido, y los puse al tanto
- ¿De verdad?
- Sí. Y creo que estaban muy cansados, así que sólo me amenazaron de muerte
- … La que me espera llegando
- …
- Justin, de verdad, no sé cómo, pero promete que lo haré: Te devolveré este favor, con intereses
- … ¿Ya me perdonaste?
- …
- … Sí, claro
- …
- Entonces, no tienes nada que devolverme – Y sonriéndole maravillosamente, le señaló una puerta cercana – Entra, y dúchate, te dejaré tu camisa afuera; luego, podemos irnos
- …
“Demasiado amable… Demasiado comprensivo…”
- Justin; ¿Por qué eres así conmigo?
- Porque… acabo de descubrir que tenemos mucho más en común de lo que me imaginaba
- Ya lo hablaremos otro día: Anda, tus hermanos te están esperando
- …
“Así que,… se llama Gevanni”
(Near habló un poco, mientras dormía)
Una hora más tarde, el rubio-castaño estacionó su auto frente al edificio de los muchachos. El peliblanco bajó un poco temeroso, pero dispuesto a enfrentar cualquier reclamó como el adulto que era…
- ¡¡¡¿TE VOLVISTE LOCO?!!
- … Justin, mis hermanos
- …
(Definitivamente, dormir mal no ayudaba al carácter de Mello)
- ¡¡Near, ¿cómo se te ocurre aventurarte en el bosque y tenernos aquí, tan preocupados?!!
- Lo lamento mucho, chicos; pero yo…
- ¡Lamentar no es suficiente!: ¡¡Casi morimos de un infarto!!
- Es que…
- ¡Te debería…
- Mello
- ¡¡¿Qué?!!
- Cálmate
- ¡¡Estoy calmado!!: ¡Es el niño este, él que no es racional!
- ¡Yo no soy ningún niño!
- ¡Claro que lo eres!: ¡Un niño irresponsable!
- ¡Oh, vamos! ¡Estás haciendo el ridículo!
- ¡No me hables de hacer el ridículo!: ¡No conoces ni la mitad de lo que pasa!
- ¡¿De qué hablas?!
- Roth regresó
- ¡¿Qué?!
- … ¿Qué sucede? – Justin (que no pensaba que nada más, referente a ese trío, pudiera asombrarlo) no entendía por qué la mención de ese sujeto causó tan repentino silencio
- ¿Tú quién eres? – La verdad, ninguno lo había tomado en cuenta desde que entró
- Oh, lo siento: Soy Justin Parker. Y déjenme decirles que es un placer conocerlos: Near me ha hablado mucho de ustedes y…
- ¡Lárgate!
El peliblanco tomó a su amigo y lo llevó fuera antes de que la cosa empeorara: Que sus hermanos hubieran permitido que se quedara con él la noche entera (porque pudieron ir a buscarlo) era, ya, bastante milagroso, y, un solo movimiento, una sola señal, de que tenía una relación estrecha con el menor, podía costarle más que una costilla…
- Me siento terrible por esto; Pero es algo muy importante, y será mejor que te vayas
- Está bien: Lo entiendo – Le sonrió (otra vez) muy comprensivo; acariciándole, brevemente, el hombro – Nos veremos en otra ocasión
- … ¿Podría ser pronto?
Near no pudo evitar mencionar eso, antes de que desapareciera por el pasillo
- Es que… me gustaría que me aclararás qué tanto tenemos en común
- …
- Sí: Sólo llámame
- Lo haré… Gracias
Podía haber sido poco tiempo; pero, ambos, ya habían picado, profundamente, en el otro
“Puede ser por lo que insinuó. Ya lo averiguaré” – se propuso Near.
Pues, ahora, había cosas mucho más preocupantes…
Matt le contó la historia (porque Mello estaba harto de tener que recordar el peligro en el que puso a Selena), y el peliblanco no se lo podía creer: Por una vez, sus exageraciones estaban fundamentadas
- Creí que dijiste que lo dejaste sin un centavo
- Lo hice – dijo el rubio, que de nuevo daba vueltas por la sala pensando
- Entonces, ¿cómo pudo hallarte, sin recursos?
- Es lo que tengo que averiguar… ¡Y sé cómo!
- ¿Así? – Matt lo miró sorprendido
- Sí - Y, con ello, Mello fue a por su chaqueta – Está algo lejos, pero es la mejor opción
- Perfecto: ¿A dónde vamos?
- …
- …
- …
El silencio que aplastó la entusiasta pregunta de Matt, sólo le confirmo a Near lo que ya se sospechaba
Y Mello lo dijo bien claro, para que no quedara ninguna duda:
- Ustedes no vendrán
- Mello – Lo nombró Matt; en lo que él y Near se levantaban indignados
- Recién acabo de cerciorarme de que ambos están a salvo y no voy a cambiar eso llevándolos conmigo, y exponiendo nuestra relación frente a posibles secuaces de Roth… Ya hice bastante anoche – “Si no hubiera seguido a Selena… Ella no…”
- Tú no entiendes el buen cristiano ¿no? – le dijo el pelirrojo – Lo de ayer no fue tu culpa
- Y debemos estar juntos: Sí ese tipo va a venir por nosotros, tenemos derecho a saber de él
- No lo hará si yo lo evitó
- Dices eso, pero ayer no pudiste prever que venía detrás de ti ¿o sí?
- …
- … Near
- …
Aquello fue duro. Pero fue lo único que se le ocurrió al menor para hacer aterrizar a su hermano
Lástima que no le funcionó:
- Un error que no volveré a cometer; así cómo cualquiera que los arriesgue
- Entonces, ¿qué?: ¿Vamos a quedarnos aquí, sentados, mientras tú juegas al llanero solitario? ¿Cómo lo has hecho todos estos años? ¿Incapaz de aceptar que podemos serte de ayuda?
- … Near
- Ustedes no conocen nada de cómo es esto
- Y, para ti, eso es bueno, ¿verdad? ¿Desde cuándo apoyas la ignorancia, Mello?
- ...
- Muchachos, ya
- ¡Oh, vamos! A estas alturas ese acto me parece bastante ridículo
- …
- Ya no somos niños, ya no somos tus pequeños hermanos menores, y tú ya no eres el responsable de todo; ¡así que abandona ese miedo, y deja de jugar a que eres nuestro padre!
- ¡¡No!!
Y de un momento a otro, el rubio regresó a Near a donde estaba; con un directo empujón
- Y si alguno de los dos intenta a seguirme… - No dijo más y simplemente cerró la puerta; pero el tono tan amenazante que más usó fue suficiente:
Hacía mucho (mucho) que no veían a su hermano mayor así de furioso; lo que pasó, realmente, le afectó:
Sin lugar a dudas, Selena era un tesoro,… incluso, más valioso que ellos
A Near, ese final, lo encolerizó mucho; y (aprovechando el momento en el que Matt recibió una llamada telefónica) decidió salir a caminar y pensar; Y (cómo si ese lugar ya hubiese sido bautizado para ello) sus pasos lo llevaron a aquel puente sobre la autopista; donde se detuvo a mirar pasar los autos, y, de cuando en cuando, dejar caer unas piedritas...
¡¡Eso ya era el colmo, con Mello!!: Parecía que no importara cuanto crecieran o lograran por sí mismos; ¡para él siempre serían su frágiles hermanitos! ¡¿Qué no se daba cuenta que ese, justo, se estaba convirtiendo en su punto débil?!: Si tan sólo dejara que ellos se informarán, se prepararán y defendieran contra todo; ese tipo no tendría oportunidad contra los tres juntos (“Como muchos, no la tuvieron”*) Entendía sus temores, pero… ¿Qué no era hora de, ya, dejarlos atrás?
“Perdí una familia una vez… No volveré a hacerlo”**
Entonces, el menor, habría dado todo porque su hermano se abriera más respecto a ello; pero, siempre, y sin excepción, él se cubría con esa actitud; y eso lo enojaba. Eso, y la forma cómo trató a Justin, eran las razones por las que agradeció mucho que se fuera antes, sin darle tiempo de responder a ese empujón.
“Justin” – El nombre de su amigo ya le causaba cierto efecto:
No entendía, ¿por qué como sus hermanos lo recibieron le supo tan mal como el perderse la acción?...
… Quizás, por todo lo que hizo por él, entre ayer y hoy… Y lo protector y amable que se portó… No, ¿para qué negarlo?: Por poco que llevaran de conocerse, ya le había tomado bastante aprecio al joven rubio-castaño. Además de todas las grandes cualidades que le notó cuando lo nombraron su guía de clases (Inteligencia, talento, profesionalismo…), también estaba lo amable, comprensivo y detallista que era; cosas que, sin duda, no le imaginó, la primera vez que chocó con él…
“Eso demuestra que nunca debes juzgar a alguien según la primera impresión” - se dijo el peliblanco, de pronto, exponiendo una linda sonrisa: Quizás, por fin, después de todo, sí tenía un nuevo amigo…
“… Yo… juzgué muy bien a Gevanni, la primera vez que lo vi…
… Y, ahora,… desearía no haberlo hecho”
- Near
- …
- ¡Por fin!
- …
“Esto… no puede…
… Imposible”
- … ¿Gevanni?
- …
El pelinegro no cabía en sí de la felicidad
Near retrocedió impactado, y quedó, muy peligrosamente, sobre la baranda del puente. Sólo por eso, el mayor no se acercó más; pero demostró su emoción de otras maneras: Casi al borde del llanto, se restregó los ojos, el rostro y el cabello con nerviosismo, varias veces, antes de volver a hablar…
- … No puedo creerlo… Después de tanto… Pensé que sería imposible poder verte…
- … ¿Qué estás haciendo aquí?
- …
Aunque el menor tenía la respiración agitada, no se dejó de notar el tono duro de su voz
Gevanni Stephen se apagó un poco
- Tú… ya lo sabes
- …
¡Un huracán de emociones desesperantes se apoderó de Near!
- ¡¡¿Por qué?!! – preguntó, acercándosele unos pasos; como reprimiendo el impulso de abalanzársele - ¡¿Por qué continúas haciéndome esto?! ¡¿Hasta cuando me vas a dejar en paz?!
- ¡Hasta que aceptes que todavía me quieres, y que podemos solucionar esto!
- ¡¡¿Cóm… ¡¡No tienes derecho a decir eso!!
- … Near…
- …
Ambos se dieron cuenta de que la fuerza del momento podía jugarles una mala pasada: Respiraron profundo para contralarse; Y Gevanni continuó, suplicante,…
- Near, mírame - …tomándole los hombros para llegar a sus ojos; y sintiendo el electrizante cosquilleo que lo recorría al tocarlo – Estoy aquí: Sigo mandando todo al demonio, para volver a encontrarte… Eso, debe demostrarte, siquiera, un poco, lo importante que eres para mí… Yo…
- … Lo fuera o no, ¿porqué tendría que interesarme? – dijo él, separándose de sus manos
(¡Maldita sensibilidad!)
- Sí te interesa: La última vez, pensaste que no, y eso te lastimó… Y nunca me perdonaré por eso
- …
- Por favor: Aclaremos las cosas
- ¡No hay nada que aclarar!: Te he escuchado lo suficiente ¡¿o no?!
- …
- Sé que la primera vez que ocurrió estabas ebrio, infeliz de que decidiera quedarme dos meses más en el extranjero; y que fue Vanessa, la que se te metió por los ojos… Que la segunda vez, te engañó haciéndote creer que yo te era infiel… Y que la vez que yo los interrumpí no iba a pasar nada; que querías echarla porque supiste de su mentira… ¿Me faltó algo?
- …
- Sí: Que te amo, y nunca dejé de amarte
- …
¡Maldición, ¿por qué su corazón saltaba, cada vez que oía eso?!
Near se separó más, entre suspiros y movimientos llenos de pena: No sabía que parte le dolía más; su orgullo o su afecto; uno al no ser defendido con uñas y dientes, y el otro al no ser escuchado, para satisfacerse. Finalmente, no se dejó impresionar, y continuó con una sorprendente madurez…
- Gevanni: Ya es tarde… Ya se acabó
- …
- Ya déjalo, inicia una nueva vida - (“Cómo yo lo intento con todas mis fuerzas”)
- ¡¿Crees que no he tratado?!... ¡Pero, no puedo! ¡No puedo, y no quiero! Todo mi ser se resiste a entender que te perdió… Y no puedo controlarlo…
- …
- Te amo, Near; cómo tú no hay nadie más – y de pronto, se aproximó lo suficiente para besarlo – Extraño tu risa, tu calor, tu ternura, tu…
- ¡Ya basta! ¡Yo también te extraño!
- …
- Pero eso no cambia nada
- …
- No hay solución
- ¡Sí la hay! Si lo intentamos…
- Yo no quiero intentarlo
- …
- Ya no
- No quiero
- …
(Por más que hubiera dado todo por que sí, su voz no sonaba segura)
- Vete, Gevanni
- …
- Lo haré… Pero sólo, por ahora
- …
- ¡¿Por qué?!
- …
- … Porque te amo
- …
“Aquí me encuentro, en un puente, por la tarde, (Near) ***
con pizcas de todo lo que dijiste, hace rato
Oigo como mi corazón late, partido
Me dice:
Se acabó
Se acabó
Se acabó
Hora de hacer que mi mente se convenza,
que mis amigos me ayuden a olvidar
Esta sensación, no me va a acabar:
De alguna forma, yo voy a…
Yo voy a…
Yo voy a…
¡Mandarte lejos! (Coro)
¡No volver a ver tu cara! (Near)
¡Llenar de ruidos, mi cabeza! (Coro)
¡No oír, más, tus palabras! (Near)
¡Haré, cuánto tenga que hacer!
¡Para olvidarme de ti! (Juntos)
¡Ciudad, eleva tu audio! (Coro)
¡Chicos, griten alto! (Near)
¡Rock, fiesta, pleitos! (Coro)
¡Manden, mi espíritu, volando! (Near)
¡Haré, cuánto tenga que hacer!
¡Para olvidarme de ti! (Juntos)
¡Para olvidarme de ti!
Todavía, te siento en mi interior, (Near)
como una masa uniforme, tocando puerta
¿Creíste que cambiaría de opinión?
Pues, muévete
Muévete
Muévete
No dejaré que juegues conmigo, otra vez
Vive con ese recuerdo, golpeando tu memoria
Estaré bien, aunque ahora nadie lo pueda creer
Pues, yo voy a…
Yo voy a…
Yo voy a…
¡Mandarte lejos! (Coro)
¡No volver a ver tu cara! (Near)
¡Llenar de ruidos, mi cabeza! (Coro)
¡No oír, más, tus palabras! (Near)
¡Haré, cuánto tenga que hacer!
¡Para olvidarme de ti! (Juntos)
¡Ciudad, eleva tu audio! (Coro)
¡Chicos, griten alto! (Near)
¡Rock, fiesta, pleitos! (Coro)
¡Manden, mi espíritu, volando! (Near)
¡Haré, cuánto tenga que hacer!
¡¡Para olvidarme de ti!! (Juntos)
En otro momento, nunca lo imaginé (Near)
Estuve loco, ¿por qué nunca lo pensé?
Perdí mi mente, pero, ahora, le digo:
¡Me olvidaré de ti!
¡Mandarte lejos! (Coro)
¡No volver a ver tu cara! (Near)
¡Llenar de ruidos, mi cabeza! (Coro)
¡No oír, más, tus palabras! (Near)
¡Haré, cuánto tenga que hacer!
¡¡Para olvidarme de ti!! (Juntos)
¡Ciudad, eleva tu audio! (Coro)
¡Chicos, griten alto! (Near)
¡Rock, fiesta, pleitos! (Coro)
¡Manden, mi espíritu, volando! (Near)
¡Haré, cuánto tenga que hacer!
¡¡Para olvidarme de ti!! (Juntos)
¡Para olvidarme de ti! (Near)
Haré, cuánto tenga que hacer… (Near)
¡¡Para olvidarme de ti!! (Juntos)
- ¿Hola?
- Justin, soy Near. Sé que tal vez es demasiado pronto, pero ¿quieres salir esta noche?
Para cuando terminó el ocaso, Mello ya había llegado a su destino: Un barrio peligroso y clandestino, en las afueras de West Hollywood, repleto de bares y clubes nocturnos; donde las brillantes luces en cada techo sólo se igualaban al número de estafas, que podían cometerse, dentro de los locales, cada noche…
“Mas, yo nunca fui idiota”- se dijo, al reconocer el lugar - “Veamos, si Reed está de buen humor…”
Claramente, sí: Dentro, se vivía una ardiente fiesta; con las conocidas muchachas en ropa corta, bailando sobre mesas y alrededor de tubos, para deleite de los hombres, y el barman arrojando licor por montones, a quién lo pidiera. Seguramente, su querido amigo, acababa de cerrar un gran negocio…
“Bueno, lo que hace no es ilegal… y me sirve” - Informante de profesión (para gente con mucho dinero): Podía meterse en cualquier alcantarilla y escuchar cualquier conversación; así que, si Roth había encontrado una forma de salir del hoyo, y estaba en L.A., Reed Butler, lo sabría.
Al cruzar la pista, el rubio llamó toda la atención: Algunos sabían quién era; otros, se lo preguntaban; y las mujeres, se entusiasmaron mucho, por la llegada de nueva carne fresca, y, además, una tan atractiva…
- Hola, mi amor; ¿ya tienes compañía para esta noche?
- …
Mello sólo le sonrió tranquilo a la joven de vestimenta sensual y exquisitos atributos que le había cerrado el paso, acariciándole el pecho (comprobando, así, lo bien formados de sus músculos)
- De hecho sí, preciosa; pero de negocios, nada más: Vengo a ver a Reed
- En este momento está muy ocupado– dijo ella; en lo que más bailarinas, se acercaban
- Créeme; me recibirá – dijo él, viendo que estaba en el cuarto del fondo – Así que, discúlpame
Y, dejándola cautiva, la levantó con un brazo, rodeándole la cintura, y la depositó a un lado
- ¡Qué fuerte!
- ¡Y qué guapo!
- ¡¿Viste sus ojos?!
- ¡¿Quién es?!
- ¡¡Mello!!
En efecto, a Reed no le molestó para nada recibir a su mejor cliente (y quién lo había salvado de la cárcel, más de una ocasión); e, inmediatamente, despidió a las dos excelsas chicas que le estaban dando su espectáculo privado, para hacerle sitio en su mesa, y atenderlo cómo se debía…
- ¿Qué te trae por aquí?: Hacía mucho que no venías a verme
- Y nada me causaba más placer
El soltó varias carcajadas; llenas de humo, debido al puro en su boca:
- ¡Baltus, tráenos un bourbon de la mejor clase!
- Sí, señor – El criado hizo una reverencia antes de retirarse
- Siempre es un placer hablar contigo – le sonrió, acomodándose su lujoso traje, que combinaba con su cabello negro azabache – De qué se trata ahora, ¿un asesino serial, o un político ladrón?
- Un poco de ambos
- …
- Ya veo: Hablas de Roth Rottends
*Mi fic “Estrella Nueva”
**Mello perdió a sus padres biológicos a manos de asesinos
***¡La canción de Near! (Si esperaban una triste o romántica, se equivocaron xD): “Para olvidarme de ti”, con algo que nunca hemos hecho antes: La gente que pasa se une a Near con los coros, y además, baila a su alrededor, como un grupo de bailarines con su solista. El peliblanco, al principio, siente como su corazón agoniza por rechazar a Gevanni; pero luego, su amor por su orgullo le regala un nuevo ánimo de vivir a mil por hora, para olvidarse de él.