----------------------------------------------BENJAMIN-----------------------------------
La vida está compuesta de dos clases de persona, quienes mandan y quienes obedecen…
Suena sencillo pero a veces es complicado saber quien es quien, bajo cientos de miles de caretas y mentiras, puedes ocultar tanto como quieras…
Claro que, el problema no es mentir, el problema es ser descubierto
Papá me enseñó que debes dar siempre tu mejor esfuerzo para conseguir aquello que deseas, independiente de lo que sea, y mamá me enseñó que papá no siempre tiene razón…
-¡Buenos días!-
Le sonreí a mamá, llevaba todo el cabello revuelto y como de costumbre hacía esfuerzos para preparar el desayuno, papá me había comentado que siempre había sido así…
Como si le idea de cocinar fuese su enemiga
Pero que tenía otros “talentos especiales”, obviamente no quise preguntar qué clase de talentos
-Buenos días- saludé dejándome caer sobre mi asiento frente a la barra
-¿Y Bastian?-
“Probablemente durmiendo en el baño ya que lo obligaste a salir de la cama”
-No lo sé-
Mamá se quedó mirando la entrada de la cocina y luego suspiró
-Iré por él-
Sonreí de medio lado imaginando el regaño que se llevaría papá, me serví mi café y un par de crepes que había dejado Gabriel sobre la mesa
-¡AYYY!-
Exactamente treinta segundos después apareció papá, a medio vestir y con una expresión de dolor en el rostro
-Hola- me saludó echándose sobre su asiento y arrebatándome mis crepes
Entrecerré los ojos y abrí la boca dispuesto a reclamar pero mamá salió de algún lugar y casi desnucó a Bastian
-¡No te comas la comida de tu hijo!- regañó mientras me regresaba mis crepes
Sonreí con suficiencia
-¿Y para mí no hay crepes?-
Rodé los ojos, ¿Algún día dejaría de hacer lo mismo?
Mamá le sirvió y sirvió su plato antes de sentarse
-¿Hoy tienes clase de piano?-
Miré a Bastian algo sorprendido de que lo recordara, generalmente era mamá quien lo hacía
-Ahá-
-Gabriel me comentó que te saliste de las clases de francés-
No sonaba a reclamo sino a curiosidad, algo que las demás personas no conseguían entender
Mis padres jamás serían capaces de obligarme a estar en una clase que no me gustara, de hecho Bastian cuando se enteró de la cantidad de clases extracurriculares que deseaba tomar se opuso
-No me agradaba la profesora- me encogí de hombros restándole importancia
El resto del desayuno transcurrió con normalidad, cuando faltaban quince minutos para las ocho tomé mi bolso y salí al jardín, nuestro chofer me esperaba sentado en el asiento del conductor
-Buenos días señor- saludó
-Buenos días-
Me senté en la parte trasera y cuando arrancó el vehículo fijé mi mirada en mi teléfono celular, tenía un mensaje de Evan y una llamada perdida de Mat
“¿Por qué no viniste? Estuvimos esperándote y tuve que convencer a Max para que se liara con la de primer año D: “
Alcé una ceja, ¿Así que aquella chica realmente quería acercarse a Aaron?
Alcé mi rostro mordiendo mi labio inferior, maldita zorra, pensé que la había convencido de no acercarse a Aaron pero si Evan tuvo que pedirle aquello a Max fue porque no me escuchó
-Ya llegamos-
-Gracias, nos vemos-
Bajé del automóvil respirando profundamente, la chica no tendría un buen inicio en el instituto, claro que no
Caminé por los extensos prados del colegio, decidiendo cual sería la mejor opción para sacar a esa tipa del tablero, justo cuando llegué a la entrada del edificio se me ocurrió una idea, pero para eso necesitaría a Kyle
-¡BEJAMIN!-
Ni me molesté en girarme, reconocería aquella voz en cualquier parte, pocos segundos después sentí los brazos de Evan rodeando mi cuello
-Te extrañé, I miss youuuuuuuuuu-
¿?
-Solo fue un día- repliqué sonriendo
-Just one day??? En un día pueden pasar muchas cosas…-murmuró misteriosamente
Fruncí el ceño
-¿Algo que deba saber?-
-Erick regresó- soltó como si nada
Parpadeé intentando procesar aquello, cuando comprendí la sonrisa del gemelo menor se volvió divertida
-Eres retorcido- acusé retomando mi paso hacia el salón
-¿Yo? Yo no le espanto todos los pretendientes a cierto pelirrojo- susurró de tal forma que solo yo le escuché
Fruncí el ceño
-Cada uno se encarga de sus asuntos como puede- le resté importancia al asunto
-¿Cómo nos vengaremos de esa chica?-
Me detuve y giré a mirar al de cabello oscuro, su sonrisa había desaparecido
-¿Estás molesto con ella porque se besó con tu hermano?- bromeé sabiendo la extraña verdad que se escondía tras mis palabras
Evan se encogió de hombros
-No me gusta que toquen lo que es mío-
-Eres increíblemente celoso- acusé
-Mira quien habla-
Nos sonreímos al mismo tiempo
-Buenos-
Mat pasó a nuestro lado con la mirada ligeramente perdida, detrás de él, Samantha tarareaba una canción
-¡Hey!-
La atención del gemelo se centró en nuestro primo y corrió para alcanzarlo
-Permiso-
Me sorprendió un poco la aparición de Aaron, probablemente porque llevaba una enorme maqueta se ladeó hacia mi lado y chocó conmigo, pero como siempre aquello consiguió enfadarme
“¿Qué clase de persona se enfada con tanta facilidad con aquel que, según parece, le tiene enamorado?”
A saber…
-Lo siento-
-Ten más cuidado- espeté sin asombrarme por el tono agresivo con el que dije aquello
Aaron se giró levemente y me miró con frialdad
-Ya me disculpé-
-Lo siento, tal vez deberías hacerlo dos veces, como el año escolar-
Aquel era un golpe bajo, ambos lo sabíamos y me arrepentí inmediatamente de haber pronunciado aquellas palabras, pero no iba a disculparme
“Otra prueba de lo estúpido que puedo llegar a ser”
-Piérdete Bejamin-
Se alejó luciendo increíblemente tenso, suspiré, ¿Por qué no era capaz de tratarle bien?
Después de todo, nuestras familias estaban en contacto, le conocía de toda una vida…
“Tal vez porque eres un imbécil inmaduro pese a cuanto te esfuerzas en demostrar lo contrario…”
Alejé aquel pensamiento de mi mente y me senté en mi puesto habitual, al lado de mi primo, que, sinceramente no parecía estar prestándole la más mínima atención a Evan y su charla sobre los colores de moda en la nueva temporada
-Y por eso es tu oportunidad para destacar tus ojos- finalizó el gemelo sonriendo radiantemente
Alcé una ceja, Mat ni siquiera se dio por enterado que aquella conversación terminó, de hecho parecía monólogo
-¿Cómo está Erick?- pregunté sabiendo que aquello llamaría su atención
Y obviamente funcionó, aunque deseé tomarle una fotografía a la expresión de sorpresa que apareció en su rostro
-¿Qué pasa con Erick?-
Sonreí de lado
-Te preguntaba cómo está, ¿Luce muy diferente?-
Me arrepentí un poco de haber preguntado aquello, después de todo Evan y yo éramos los únicos que sabíamos cuan mal había estado Mat, quien ni siquiera fue capaz de confesárselo a su melliza
-Demasiado- susurró mi primo mirando sus manos con cierta nostalgia
Me acerqué y acaricié su cabello lentamente
-Es tu hermano, estoy seguro que no se olvidó de ti- murmuré
Mat me miró con una sonrisa que más que sonrisa parecía mueca
-Se olvidó de mí durante todo este tiempo, y quieres que crea eso…no soy tan estúpido Benjamin, pero al parecer él no lo cree así-
-¿Por qué dices eso?- interrogué algo perdido
-Es lo suficientemente descarado para comportarse como si nada hubiese pasado…¿Realmente hice mal al creer que tendría a mi hermano cerca de mí después que se marchara a otra ciudad?-
“Tal vez sí”
Evan y yo nos miramos brevemente, tal vez para otras personas el tono desesperado de Mat habría sido incomprensible, porque, ¿Eso era lo que pasaba con los hermanos verdad?
Pero para alguien como nosotros, que habíamos crecido envidiando ligeramente el lazo que ellos tenían…era bastan comprensible
“Quizás demasiado…y eso que soy hijo único”
-Mat, don’t worry, tarde o temprano tu hermano comprenderá el error que cometió y se disculpará como se debe…entonces llámanos y te daremos consejos sobre como actuar- añadió Evan causándome un escalofrió
Aquello no podía significar nada muy bueno
Nada bueno podía venir de una mente como la suya…en especial si se combinaba con una como la mía…
-Gracias por su apoyo-
Sonreí sinceramente, Matt siempre era increíblemente honesto cuando era capaz de expresar sus sentimientos…
E increíblemente ingenuo cuando se trataba de ver lo que los demás pensaban o sentían con respecto a él…
Como si sencillamente aquella capacidad no hubiese estado en su ADN
-¡Silencio todos!- gruñó el profesor consiguiendo llamar nuestra atención
Suspiré, otra clase comenzaba
.
.
.
-Entonces ya sabes lo que tienes que hacer- sentencié sonriéndole a Evan
-Sometimes tus sonrisas me dan miedo- murmuró
Alcé ambas cejas
-¿Mis sonrisas? ¿Es este el momento adecuado para que empecemos a preguntarnos cual de los dos es peor?-
-Touché-
-Bien, manos a la obra, allá va la tipa esa-
El plan era de lo más sencillo, Evan se haría pasar por Max y seduciría nuevamente a esa zorra, luego, en el momento adecuado yo tomaría imágenes comprometedoras y al día siguiente todo el instituto sabría que clase de zorra era, eso con la pequeña ayuda de Kyle que reuniría a todo el instituto en la cafetería para mostrar el video…
Con algo de suerte no volvería a fijar su mirada en Aaron
Y todos estaríamos en paz
Seguí en silencio a Evan, la chica lucía totalmente satisfecha de sí misma, reprimí una sonrisa, no sabía lo que le esperaba…
.
.
.
-¿QUE MIERDA SIGNIFICA ESTO?-
Alcé mi mirada del libro que leía tranquilamente sentado en mi lugar habitual del campus, el primer receso había comenzado y con ello la aparición de cientos de copias de las imágenes que había tomado ayer…
La estúpida estaba a medio vestir, con el rostro en el suelo, suplicando por sexo…
Una imagen grotesca y degradante…
Pero por supuesto eso no sería todo
-¿Qué pasa Andrea?- pregunté ocultando cualquier emoción
Evan a mi lado se puso de pie fingiendo preocupación
-¡USTEDES SON UN PAR DE MALDITOS DESGRACIADOS! ¡ME LAS VAN A PAGAR!-
Entrecerré los ojos
-¿De qué estás hablando? ¿Acaso no se puede leer en este lugar sin que una chica…como tú, venga a amenazarnos?-
Su mirada brillo por el odio, a lo lejos se escuchaba la risa de cientos de estudiantes viendo las imágenes
-Me tendieron una trampa, no era Max con quien estuve ayer, ¿verdad?-
Evan se cruzó de brazos y le prestó una repentina atención a sus uñas
-Querida, si no eres capaz de reconocer quien es quien, ¿Cómo esperas que te reciba en mi familia?-
-¡NO TENIAN DERECHO A HACER LO QUE HICIERON!-
Mi amigo sonrió y se acercó a ella lentamente, consiguiendo que retrocediera asustada
Bostecé aburrido, aun faltaba el video pero ella no conseguía entretenerme mucho
-Solo diré una cosa honey, no vuelvas a acercarte a mi hermano, es MIO, ¿entendiste?-
-Actúas como si fuesen más que hermanos- acusó
El gemelo se encogió de hombros
-¿Acaso podría importarme lo que una basura como tu puede pensar? Lárgate antes que pierda mi paciencia-
Dudó un poco pero se marchó corriendo, estudiantes la apuntaban y señalaban las imágenes que tenían en sus manos, regresé mi atención a mi libro, esperando
.
.
La hora del almuerzo llegó rápidamente, como estábamos esperando, Kyle hizo su parte, concentrando a todos y poniéndole play al video que había grabado
-Para estar en primero pareces experimentada- se escuchó la voz distorsionada de Evan
-¿Pensaste que iba a ser una estúpida mojigata? Sé hacer muchas cosas, tú solo pídeme-
-¿Y con quien practicaste?-
-Ajajaja, ¿Con quién practiqué?...los novios de mis amigas son muy calientes ¿sabes?-
Observé como TODAS las chicas que se sentaban cerca de Andrea la miraban con estupefacción…y odio
-¿Y con alguien mayor no?-
-El profesor de biología sabe mucho más de lo que aparenta…- sonaba orgullosa de si misma pero todos en el lugar la miraron con asco
Sonreí complacido, esto bastaría para que decidiera marcharse del instituto, a mi lado Matt me miró fijamente
-¿Tú no tuviste nada que ver verdad?- susurró mirando con cierta tristeza a la zorra esa
-Yo no soy quien aparece con la voz distorsionada, si eso te deja más tranquilo-
Asintió evidentemente más relajado, de cualquier forma yo no había mentido
El resto del agradable video Andrea disfrutó hablando mal de la mayoría del instituto, obviamente eso incluía profesores y directivos…
-¿Mencioné que Kyle es excelente reuniendo personas?- susurró Evan en mi oído
Sonreí mirando al rector del lugar, obviamente no estaba contento con lo que estaba viendo…
-¡Señorita! ¡Hágame el favor de acompañarme a mi oficina!- exclamó furioso cuando la reproduccion terminó
Antes de desaparecer por las puertas de la cafetería la zorra nos miró con odio pero me encogí de hombros y me despedí con un gesto de mano
Fue un placer conocerte…querida…
.
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.
A la salida del instituto no había imagen alguna pegada en las paredes, sabía que aquello era obra de los auxiliares. Mientras caminaba con Evan y Mat conversando a unos pasos de mí escuché a alguien llamándome
-¡Hey Benjamin!-
Me detuve y giré, encontrándome con Kyle, llevaba el uniforme del equipo de football y la banda que lo identificaba como el capitán atada en la cabeza
“Como si nadie supiera que te comportas como un imbécil cuando estás rodeado de tus amiguitos…”
-Hola- saludé de forma desinteresada
-Sabes que nada de lo que hago es gratis ¿verdad?-
Pensé que hacerme el desentendido sería interesante, al menos pondría en evidencia su desesperación
-Suenas como prostituto- me burlé riéndome
-Como sea, lo que hice a la hora de almuerzo…tiene su precio-
Alcé una ceja
-¿Debo suponer que es algo que me concierne a mí?-
-Tú me lo pediste-
Se acercó pero no retrocedí, incluso cuando sentí sus labios a un par de centímetros de los míos
-Me encantaría satisfacer tus estúpidos deseos pero tengo clase de piano-
-No te ofendas, me encantaría hacer ciertas cosas con esa boca y esos ojos tan negros, pero quiero que me ayudes con otra cosa-
Me crucé de brazos, ¿Ofenderme?
¿Por alguien como él?
-No lo sé, depende de lo que sea, no olvides lo que tuvo que pasar la pobre de Andrea-
Había una advertencia en mi tono y el lo entendió inmediatamente porque alzó las manos en son de paz
-Tranquilo, solo quiero que me ayudes con Mat-
“Pobre ingenuo, como si tuviese una posibilidad contra lo que tiene Matt en casa…”
-Mmm, ¿Qué clase de ayuda? No olvides que estas hablando de mi primo y que no eres precisamente un ejemplo de persona para estar cerca de él-
-¿Acaso tú si lo eres?-
-Yo no me he acostado con todas las chicas de este instituto- repliqué consiguiendo sorprenderle
-¿Qué? ¿Los alcances de tu fama te han sorprendido?-
-Ayúdame con Matt y haré todo lo que quieras- susurró contra mi oído
Aunque estaba en el límite de malinterpretarse como algo sexual me pareció tentador…
Demasiado tentador…
Demasiado…
-Lo pensaré, mañana te daré mi respuesta- respondí finalmente
-¿Mañana?-
-Y no insistas- ordené con calma
Su expresión se relajó un poco y suspiró, me pregunté que tan interesado estaba en Matt
-Dime una cosa Kyle, ¿Lo quieres o simplemente quieres acostarte con él?-
Se quedó mirandome fijamente, evaluando su respuesta, no me preocupó, en caso de mentir lo sabría inmediatamente, mi padre se había encargado de enseñarme a identificar a un mentiroso
-No le amo, pero no quiero jugar con él- respondió al fin
Mantuve mi impasibilidad y asentí
-Mañana- sentencié dando media vuelta para marcharme
Esto había dado un giro inesperado
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------------------------------------------------------EVAN-----------------------------------------------------
-¡Max tráeme el insecticida!-
Miré a Vin fijamente, tomé mi vaso con bebida y salí de la cocina
-¡MAX!-
-¡SOY EVAN MALDICION!- grité mientras subía las escaleras
¿Qué clase de padre confunde a sus hijos durante…TODA su existencia?
Papá estaba saliendo de su habitación cuando yo subí, por lo que me miró con paciencia
Infinita paciencia
-Discúlpale, la nueva colección de otoño le tiene estresado-
Bufé pero permití que besara mi frente
-Really? Porque ni aunque tiñera mi cabello sería capaz de diferenciarnos- acusé
Papá suspiró y me sonrió
-Cuando ustedes llegaron, se desesperaba mucho más al tener que presentarlos a otras personas, yo le sugería vestirlos diferente pero entonces se quejaba que eso no tenía sentido, porque eran gemelos…creo que en el fondo si los diferencia pero le cuesta aceptarlo-
Aquel era el argumento más enredado que había escuchado en mi vida, extrañamente, coincidía con el carácter de Vin
-Será-
Subí el resto de las escaleras hasta mi habitación, dejé el vaso sobre la mesita al lado de la puerta y me analicé en el espejo, hace tiempo que quería teñir mi cabello, pero aquello me diferenciaría de Max y disminuiría la cantidad de bromas que puedo hacer…
Suspiré, era un sacrificio que tendría que hacer para evitarme el pedirle ayuda en mis ideas
-Luces como si estuvieras pensando-
Me giré sorprendido, Max estaba apoyado en el marco de la puerta, sin camisa y con una paleta entre sus labios
-¿Piensas que no lo hago?-
Se encogió de hombros
-Supongo que debería darte crédito, lo que le hicieron a Andrea fue bastante cruel…pero no por eso original-
No me sorprendió que lo supiera, sino que no estuviese enfadado porque ocupe nuestra…”ligera similitud” para engañarla
-I know, supongo que debería dejar de ver tantas películas estadounidenses- sonreí apoyando mi espalda en el espejo
Nos quedamos en silencio, mi mirada se perdía en aquella paleta…especialmente en aquellos labios, ¿Sabía Max la fascinación que me causaban las cosas dulces?
-¿No esás enfadado?- murmuré sin apartar la mirada
Una sonrisa se extendió por todo su rostro, lentamente se acercó a mí y me presionó contra el espejo, no hice amago de acercarnos más, solo porque deseaba ver hasta dónde deseaba llegar
-mmm, ¿Debería?...Después de todo, yo he fingido ser tú para liarme con algunos chicos…tal vez por eso no esté enfadado-
Algo como un volcán en mi pecho hizo erupción pero no emití sonido alguno, no iba a darle el placer de saber que aquello me ponía muy, muy celoso
-You? Pensé que alguien tan obsesionado con el computador no tendría tiempo para suplantar la identidad de su hermano…eso es algo que se acepta más en…mí- susurré arrebatándole la paleta y comenzando a degustarla frente a sus ojos
Max sonrió, no con alegría obviamente, pero sí con intriga
-¿En el dulce Evan? ¿El inocente e incomprendido Evan?- murmuró delineando con su dedo mi mandíbula y bajando por la línea de mi cuello
Me estremecí, notando que mis defensas cayeron solo con ese toque, esa sensación de electricidad que comenzaba en la zona donde él había tocado y se extendía por toda mi columna
Volvimos a quedarnos en silencio, mirándonos fijamente y la sensación de que estaba mirándome en el espejo se acrecentó cuando su mano acarició mi brazo y descendió hasta quitarme la paleta
-Tal vez tengas razón, mi personalidad no tiene nada que ver con esa retorcida mente tuya- se encogió de hombros antes de salir de mi cuarto
Me quedé parado mirando la puerta
“¿Qué fue eso?”
Me encogí de hombros y decidí restarle importancia al asunto, aún tenía que convencer a un sopenco para que hiciera mis deberes por esta semana
.
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-¿Qué Kyle QUE?-
Miré a Benjamin intentando encontrar algo que me confirmara que se trataba de una broma, pero estaba tan serio como de costumbre
-Eso, que quiere que le ayude con Matt…-
-But…-
Estaba tan impactado que olvidé que tenía una botella con bebida en la mano y esta resbaló cayendo al suelo
Varios chicos iban pasando y uno de ellos corrió hasta nosotros, tomó la botella y me le entregó evidentemente nervioso
-Gracias…baby- susurré deleitándome con su incomodidad…
Si solo mi hermano alguna vez pudiese lucir así producto de mi presencia…
-¿Y?-
Sacudí mi cabeza, Benjamin me miraba evidentemente fastidiado
-Sorry, estaba pensando en otra cosa, bueno, el caso es que dudo que sea buena idea- sentencié convencido
Con la reputacion de Kyle ayudarle a enamorar a Matt sería un error de proporciones
-Parecía…interesado en Matt, si sabes a lo que me refiero, más allá de solo querer acostarse con él…de hecho me pareció inteligentemente sincero en lo que dijo-
Sonreí con burla
-Tú eres inteligentemente sincero y eso no te coniverte en alguien de quien fiarse, o que no mienta-
Se encogió de hombros
-Lo que me ofreció a cambio es tentador y no pienso entregarle a nuestro primo en bandeja, creo que será divertido ver al gran Kyle baboso por alguien que ni siquiera se percata de su presencia-
Volví a sonreír, esta vez casi soltado una carcajada
-¿Te das cuenta que estás describiendo lo que te pasa con Aaron?-
Su expresión denotó que había puesto el dedo en la llaga
-Whatever, estoy esperando mi nuevo cd de boyfriend, so, debo irme-
Benjamin se quedó mirándome y sonrió, recuperando de alguna forma aquella inocencia que había iluminado sus ojos cuando era pequeño
-Tu y tus chinos- murmuró
Fruncí el ceño
-¡NO SON CHINOS, SON COREANOS!- grité golpeando el suelo con mi pie
AISH!
¿Es que nadie era capaz de diferenciar a un coreano de un chino y de un japonés?
Me alejé a paso raudo, estabamos en periodo de clases pero no me importó, de cualquier forma el ramo de física era basura…well, todos los ramos
Salté la verja que separaba el instituto del resto de la ciudad y emprendí mi camino hacia el centro comercial, estaba ansioso, mi cd debería haber llegado hace una semana pero los típicos retrasos habían impedido aquello
Parpadeé al ver a mi gemelo saliendo de un restaurant
¿Qué hacía en uno tan costoso en horario de clases?
Apresuré el paso para acercarme y molestarle pero una mujer elegantemente vestida salió y lo besó…en los labios
Me quedé estático, intentando entender aquello
La mujer evidentemente era casada, el anillo en su dedo anular no podía mentir, por otra parte, las finas joyas que portaba hacían notar su posición, eso y su belleza…
Max no la miraba especialmente enamorado pero no parecía totalmente indiferente
Los seguí en silencio, sintiendo repentinos deseos asesinos
-¡Jajajajaja! Eres tan gracioso-
Acé una ceja, Max no contaba chistes, ¿Qué podía parecerle tan gracioso a ella?-
Caminaron por hasta un estacionamiento donde abordaron un BMW rojo que me pareció bastante apropiado a la…mujer
No necesité ninguna prueba para comprender que iba a pasar, mujer casada, interesada en un estudiante de dieciseis años, vestida de forma insinuante…
Sentía la rabia burbujeando en mi piel, aquel descubrimiento consiguió que recibiera minuevo cd con el ceño fruncido, regresé a casa sin importarme nada, mis padres estarían trabajando y solo nuestra nana tenía permitido ingresar durante el día
Estrellé la puerta de mi habitación con furia…
¿Por qué Max no me había comentado que tenía una amante?
¿Y sería la única?
Recordé la sonrisa llena de satisfacción que caracterizaba a mi gemelo…
No, probablemente no era la única
¿Y desde cuando?
Siempre lo veía pegado a esa computadora…
La computadora…
Salí de mi habitación e ingresé a la suya, todo lucía normal, la cama ordenada, el armario cerrado, el escritorio con el dichoso notebook…
Sonreí con suficiencia, solo le echaría una mirada, ¿No podía ser malo verdad?
“¿No recuerdas que Max te advirtió que no te metieras a su computador?”
Alejé aquel pensamiento de mi mente, el haberlo visto con aquella mujer era suficiente justificación para lo que iba a hacer
Levanté la pantalla y presioné el botón de encedido, más rápido de lo que me esperé, apareció en control de seguridad pidiéndome la contraseña
Fruncí el ceño…
¿Cuál podría ser?
Tecleé algunas palabras y me frustré al ver el anuncio de contraseña errada
¿Qué tan difícil es averiguar la contraseña de tu gemelo?
Volví a teclear algunas palabras, consiguiendo el mismo resultado, mordí mi labio inferior, tenía la sensación que podría estar todo el día escribiendo y no conseguiría nada
-Estúpido hermano gemelo que se anda revolcando con zorras…-
Aquello me indignaba más que cualquier cosa…
Apreté con fuerza el agarre que tenían mis manos sobre el borde del escritorio, ¿Por qué…?
Me obligué a tranquilizarme, respiré varias veces y decidí que lo mejor sería regresar a mi habitación, o salir de casa, pero no quedarme en su cuarto pensando en cómo se vería mi gemelo acostándose con aquella mujer
Apagué el computador y salí deseando poder reclamarle cuando llegara…
¿Pero reclamarle por qué?
¿Por conducir su vida como a él se le plazca?
¿Por hacerme pensar que por ser mi gemelo teníamos un puto lazo especial?
¿O porque pensé que había la suficiente confianza entre nosotros para decirme algo como aquello?
“Como si tu le dijeras todas las cosas que haces…”
Bufé indignado
-Me las vas a pagar zorra…nadie se mete con mi hermano…-
Y sí que me las arreglaría para que me pagara
-----------------------------------------------------------------END EVAN---------------------------------------------
.
.
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¿Qué clase de persona consigue que la rabia surja de pronto y luego desaparezca completamente?
La cena había transcurrido de forma normal, yo ignorando a Erick y Samantha prestándole toda a su atención…
Bueno, la mitad de su atención porque la otra parte estaba centrada en papá, como siempre
-¿Y cómo te ha ido en el colegio?-
Fruncí el ceño pero alcé mi rostro para mirar a mi hermano, parecía interesado
“Vete al demonio”
-¿Alguna razón para estar interesado?-
Todos en la mesa se quedaron mirándome fijamente
¿Qué acaso yo no tenía derecho a ser borde?
-Eres mi hermano-
-Eso no pareció importarte hasta ahora-
Nos quedamos mirando fijamente, pude percibir la frialdad comenzando a inundar sus ojos…
¿Y qué si se molestaba?
Se lo tenía merecido…
-Eh…¿Quién quiere postre?- preguntó mamá poniéndose de pie con una sonrisa incómoda
-Yo estoy satisfecho, permiso-
Salí de aquel salón sintiendo todas las miradas sobre mi nuca
¿Qué si me arrepentía por como me estaba comportando?
Tal vez…
De cualquier forma, no podía borrar lo que había dicho
“Es peculiar la forma en la que te comportas, solo en presencia de Erick…”
-Hey…¿puedo pasar?-
-No-
Miré a Erick entrar a mi habitación aun sin mi permiso y me enfurecí
-¿Para qué preguntas si no vas a respetar lo que diga?- inquirí indignado
El suspiró pero llevó sus manos detrás de su cabeza y se acercó a mí despreocupadamente
-¿Qué pasó Matt? Antes eras tan dulce…-
Estaba burlándose, la sonrisa en su rostro lo evidenciaba, apreté los dientes con fuerza, intentando controlarme
-No soy un niño-
-¿Eso crees?-
-¿Y tu eres el que va a hacerme a crecer?- me mofé
Su mirada se volvió seria, pero de pronto sonrió, confundiéndome
-Tal vez debería hacerlo…-susurró tan bajo que no estuve seguro de haber escuchado bien
-Como sea, sabes que estoy enfadado contigo-
-Claro que lo sé, ¿Qué clase de hermano sería sino?-
Parpadeé algo desconcertado con su respuesta
-¿Te das cuenta de lo que estás diciendo?- reclamé poniéndome de pie
Su sonrisa se ensanchó y siguió avanzando hasta conseguir que mis rodillas se doblaran y mi espalda chocara contra mi cama
-¿Sabes tú lo que estás diciendo?-
Las palabras que intenté pronunciar no pasaron de mi garganta, aquello era tan malditamente típico en él…
-Quiero que me perdones-
¿?
-¿Qué?-
-¿Qué debo hacer para conseguirlo?-
Comenzó a caminar frente a mí, murmurando un par de cosas, hasta que se detuvo sonriendo y me miró con intensidad
-Lo tengo-
Sentí su mano aferrándose de mi brazo, mi piel se erizó ante el contacto pero él no pareció notarlo, tiró de mí hasta ponerme de pie
-Vamos-
-¿A dónde?-
En mi estupefacción había olvidado negarme
-A caminar-
¿Caminar?
Ya era de noche…
-Pero…-
No tuve tiempo para oponerme, salimos de la casa después que él le dijo algo a mamá, el frío viento nocturno estremeció mi cuerpo, no traía una chaqueta como Erick
-¿Te gusta?-
Parpadeé e intenté alejarme, pero no me lo permitió
-¿Qué intentas hacer?- pregunté mirando fijamente mis manos
-¿Qué no es obvio?-
“Obviamente NO” pensé frunciendo el ceño
-¿Esta es la forma que tienes para…?-
Me interrumpí a mi mismo al ver a mi hermano recostándose en el primer banco que encontró, abrí los ojos sorprendido
-¿Qué…?-
-Ven aquí…-
Mis pies me acercaron a él, cuando estuve lo suficientemente cerca tiró de mi mano para que me sentara, lo hice algo tenso, la sensación de su piel sobre la mía era extrañamente electrizante
Se acomodó lo suficiente para que su cabeza quedara sobre mi regazo, intenté lucir normal, pero me quedé perdido observando su rostro
“Era demasiado perfecto para ser real…”
-¿Por qué me miras así? Vamos, mira el cielo-
Sentí como la sangre se acumulaba en mi rostro al escuchar aquella acusación, me alegré de que estuviese completamente oscuro y automáticamente alcé mi rostro, encontrándome con el cielo estrellado
-Vaya- murmuré prendado de aquella imagen
Erick no comentó nada y agradecí aquello
Era…
Totalmente cautivador…
Y no supe si aquella descripción calzaba con el cielo nocturno…o con mi hermano
.
.
.
-¿Sam?-
Entreabrí los ojos un poco, hace un par de horas había conseguido conciliar el sueño pero el peso sobre mi cama me alertó
Sinceramente pensé que era mi hermana colándose en mi cama para contarme algo sobre el chico del que “está perdidamente enamorada”
-Error…-
Abrí los ojos al máximo y me incorporé
-¿Qué haces aquí?- casi grité sintiendo la sangre en mi cuerpo fluyendo veloz
-Estaba leyendo un libro y pensé en venir contigo-
¿Por qué tenía que ser tan honesto?
-Estaba durmiendo- me quejé
-Ya no-
Entrecerré los ojos y me giré en la cama, acomodando las frazadas sobre mí
-¿Eso es un “lárgate”?-
“Tómalo como quieras, pero al menos déjame dormir tranquilo…”
Me mordí la lengua para no pronunciar aquellas palabras
-Anda, muévete un poco-
Fruncí el ceño
-¿No tienes una cama para dormir?- espeté sin moverme un centímetro
-Si, pero esta tiene algo que la mía no-
Lo miré fijamente, pero nunca hubiese esperado lo que vino a continuación
-¿Qué?-
-A ti-
Mi corazón comenzó a latir con fuerza, pero él no le tomó el peso a sus palabras y se coló bajo mis frazadas
-¡Hey! ¡No te he dado permiso y de cualquier forma la cama es lo suficientemente grande para que duermas cómodamente…alejado de mí!- enfaticé las ultimas palabras esperando que dejara de comportarse de esa forma
¿Cuándo se había vuelto tan descarado?
Bien, es cierto, él siempre había dicho lo que quería sin cortarse, pero ahora era más problemático hacerlo…
¿Qué un adulto no entiende eso?
“Tal vez sea más cuidadoso, pero con otras personas…”
¿Otras personas?
“Eres su hermano…”
-¡Ya! ¡No me abraces!- chillé intentando alejarme de aquellos brazos
Una sonrisa traviesa se deslizó por sus labios
-Pero hace frío- se quejó apegándose a mí
-Entonces vete a tu cama- gruñí comenzando a perder la paciencia
Lo cual, para una persona como yo, era MUCHO
-Ya te dije que no quiero-
-¿Y yo si debo obedecerte?-
-Soy el hermano mayor-
Me mordí el labio inferior con impotencia, hacía frío, es cierto, pero con sus brazos rodeando mi cintura y su rostro apoyado sobre mi pecho se sentía mucho más cálido…
Y mucho más débil…
-¿Por qué estás así? Intenta tranquilizarte, solo soy yo…Erick-
Precisamente por eso mi respiración era tan errática…
Y comenzaba a odiarme por aquello
Me obligué a regularizar mi respiración, aun así, el sentir su cuerpo tan cerca del mío jamás se había sentido tan incómodo
-Hey…-llamé al cabo de unos minutos
No hubo respuesta y por un instante pensé en golpearle
“Es tu hermano mayor, no lo hagas”
Contuve mi mano que se quedó a medio camino entre la cama y su cabeza, suspiré, dejándola caer sobre sus cabellos
Erick se acomodó mejor contra mí y no pude evitar sonreír ligeramente
Desde que tenía memoria recordaba aquel comportamiento de gatito cuando le acariciaba el cabello
“¿Ahora sonríes?”
Suspiré, no había mucho que yo pudiese hacer, así que decidí que lo mejor sería intentar dormir, aun con su aroma inundando mi nariz
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-Buenos días-
Benjamin me saludó con una sonrisa que me paralizó, lo conocía lo suficiente para saber que no podía significar nada bueno
-Hola…¿Por qué tan feliz?- pregunté mientras me dejaba caer en mi asiento
Pareció escoger cuidadosamente sus palabras
-Necesito que me hagas un favor…-
Me quedé mirándole fijamente, intentando averiguar de qué se trataba
-¿Qué es?-
-Verás…hoy me toca ordenar unos archivos en la biblioteca, pero mi profesor de piano adelantó la clase ya que tiene a su madre enferma…¿podrías cubrirme?-
Así que de eso se trataba…
-Claro, no te preocupes- sonreí intentando tranquilizarle
Los gemelos aparecieron por la puerta, Max escuchando música con las manos en los bolsillos, relajado, por el contrario Evan lucía como alguien a quien le habían dicho que estarían acechándole para matarle
-Buenas- saludó el gemelo mayor dejándose caer en su puesto
Evan nos miró fijamente y luego le dedicó una mirada de rabia a su gemelo
Alcé una ceja por la sorpresa, ¿Desde cuando Evan se comportaba así?
Si desde que yo recordaba, siempre había sido especialmente amable con Max…
-¿Discutieron?- pregunté sin preocuparme por el gemelo mayor, podía escuchar la música incluso desde mi lugar lo cual evidenciaba el alto volumen
-Aún no- respondió sin apartar la mirada de su reflejo
Pero Max no se dio por aludido
-¿Qué pasó ahora?-
Benjamín no era una persona especialmente curiosa, su personalidad era desinteresada en cuanto a enterarse de los problemas de los demás, por eso, que estuviese preguntándole directamente a Evan solo podía significar que aquellas miradas de rabia le habían fastidiado
-I’m not sure, but…cuando lo esté necesitaré su ayuda-
Nos miró fijamente, como pactando aquello
Me encogí de hombros
-Mientras no dañe a nadie-
Benjamín bufó, pero no me molesté, estaba acostumbrado a ello
-Demasiado bueno para tu propio bien- canturreó mi primo de ojos negros
Me quedé mirándole fijamente pero él no pareció prestarme atención, comprendí el por qué cuando Aaron ingresó al salón, varias chicas lo miraban deslumbradas pero luego miraban a Benjamín y apartaban su mirada
¿?
“Me pregunto por qué siempre actúan así”
El profesor ingresó al salón y la calma reinó
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-¡ERES UN ESTÚPIDO!-
Me detuve a mitad de camino hacia mi mesa, llevaba la bandeja con mi almuerzo en mis manos y caminaba lentamente para evitar caerme, pero el grito de Evan me sorprendió
A mi lado, Benjamín bufó
-¡NO TE VAYAS!-
Max no parecía dispuesto a escuchar a su hermano porque dejó su bandeja y se marchó con las manos en los bolsillos, nos acercamos al gemelo menor
-Me las va a pagar-
-¿De qué hablas?- pregunté sin poder evitar mi curiosidad
Evan se mordió el labio con fuerza, pocas veces lo había visto tan furioso
-Max está acostándose con alguien, pero cuando le pregunto si tiene novia no me responde-
Benjamín le dedicó una mirada extraña pero rápidamente centró sus ojos en su plato de comida
-¿Cómo lo sabes?- susurré extrañado
Mi primo sonrió con amargura
-Le vi con ella, saliendo de un restaurant-
No dijimos nada más, no estaba seguro de qué decir y tenía algunas cosas en las que pensar…
“Como en tu extraño comportamiento con tu hermano mayor”
¿Eh?
“Y en esa sonrisa perfecta, esos ojos verdes, y para que vamos a hablar de ese cuerpo…¿verdad?”
-¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAA!- grité llevándome las manos a la cabeza
Mis primos se quedaron mirándome fijamente
-¿Algún motivo en especial para gritar como desquiciado?- me molestó Evan
-Ninguno-
“Solo comencé a emocionarme DEMASIADO al pensar en el cuerpo de cierta persona”
-Of course, a mi también me encanta romper en arranques le locura, es bueno para la salud-
¿Estaba bromeando?
-¡Aajjajajajajaj!- Benjamín comenzó a reírse con cierta desesperación
Alcé una ceja, aquello no era para nada creíble y me di cuenta que estaba en lo cierto cuando su sonrisa desapareció en un instante, siendo remplazada por una expresión de seriedad
-Dime Matt…¿Quieres hacer algo entretenido hoy?- susurró mirándome fijamente
Parpadeé no muy seguro de las implicancias de aquella proposición
-¿De qué hablas?-
-Vamos a una fiesta- sugirió consiguiendo que Evan sonriera de inmediato
-¿Una fiesta?- repetí
Era viernes, por lo cual no era del todo irracional, pero ellos nunca me habían invitado a una de sus fiestas
No es como si fuesen a muchas en cualquier caso
-Party…vamos a relajarnos- murmuró Evan con una radiante sonrisa
-Supongo que está bien- acepté
-Perfecto- Benjamín se puso de pie y salió de la cafetería llamando la atención de muchas personas
Ya estaba acostumbrado a aquello, bueno, a que ellos llamaran la atención, sus personalidades ayudaban mucho, en mi caso…solía asustarme cuando alguien se me acercaba
“Nadie lo pensaría si ve como te comportas con tu hermano”
-¿En qué piensas?- Evan me miró fijamente, sentí un escalofrío, aquella mirada era demasiado intensa y fría
Pareció notar que estaba dándome miedo porque sonrió y su expresión cambió totalmente
-Sorry, es que parecías muy concentrado-
Mira quien habla…
-¿A qué lugar iremos?- cuestioné intentado cambiar el tema
Sus ojos celestes brillaron por la expectación
-Es genial, solo recuerda vestirte como si fueras mayor de edad-
Alcé una ceja
-¿Por qué?-
-Porque los niños nunca hacen cosas divertidas- respondió mordiendo con sutileza la bombilla de su malteada
Intenté comprender a qué se refería, tenía un presentimiento, pero no me imaginaba a ellos colándose en clubs nocturnos…
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-¿Piensas salir?-
Mamá me miró con cierta curiosidad, no supe por qué me puse tan nervioso, tenía casi dieciséis años pero su mirada tenía une extraño poder
-Benjamín y Evan me invitaron- respondí procurando sonar tranquilo
Una suave sonrisa se extendió por su rostro
-¿A qué hora piensas llegar?-
-Eh…- Jamás había salido a una fiesta, no tenía idea de a qué hora terminaban
Intenté recordar la hora a la que llegaba mi hermana los fines de semana
-¿Cuatro?-
-¿Quién los llevará?-
-Un amigo de Evan, que está de cumpleaños- mentí sintiéndome muy mal
Jamás le mentía a Angel, bajé mi mirada esperando no tener que seguir haciéndolo
-Bien, confío en ti hijo, cuídate-
Sentí como acariciaba mis cabellos y luego salía de mi habitación, me quedé parado frente a mi cama con la ropa en mis manos
“Eso estuvo mal…”
¿Y qué iba a decirle?
“Pues Benjamín y Evan piensan llevarme a un club para mayores de edad, y no tengo idea como iremos o como regresaremos pero no te preocupes”
Miré la ropa que estaba en mis manos, jeans desgastados, una polera blanca y un polerón gris
¿Cómo pretendían que me viera mayor de edad?
La gente siempre decía que lucía como alguien de catorce años…
-Hermanitoooo me prestas…oh-
Samantha se recargó en el marco de la puerta y sonrió…
Y su sonrisa no me hizo sentir para nada tranquilo
-¿Saldrás?- preguntó divertida
-Algo así-
-¿Con esa ropa?- señaló mis vestimentas con cierto deje de incredulidad
-¿Qué tiene de malo?-
Mi melliza se acercó a mi cerrando la puerta tras de si, la sonrisa en su rostro era demasiado…peligrosa
-¿Con quien saldrás?-
-Evan y Benjamín-
Sus ojos se abrieron y la sonrisa se extendió
-No puedes usar esa ropa- sentenció arrebatándomela de las manos
-¿Eh? ¿Por qué?-
-Porque no te verás mayor de edad- replicó arrojando mi ropa y comenzando a buscar en mi armario
La miré desconcertado
-¿Cómos sabes…?-
-¿A dónde irán? Sé muchas cosas que tu no querido hermanito-
Ciertamente aquello no respondía mi pregunta
-Esto está mejor-
-¿Jeans blancos?- miré aquellos pantalones que me había regalado tío Vin la navidad pasada
-Exacto, jeans blancos…y…¿Dónde está la camisa que te regalé?-
-¿La roja?-
-¡Aquí está!-
Miré el conjunto pensando que no se me habría ocurrido ponerme aquello…junto
-Y una chaqueta…esta-
Samantha me tiró la ropa en la cara y me empujó hacia el baño
-¡Ya voy!- intenté detenerla pero su entusiasmo aumentaba sus fuerzas
-¡Y no salgas de ahí hasta verte aún más lindo de lo que eres!-
La puerta se cerró a centímetros de mi cara, suspiré antes de meterme a la ducha, resignándome completamente
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-HELLOOOOO!-
Miré fijamente a Evan e internamente agradecí la ropa que había escogido mi hermana para mí, mi primo llevaba pantalones de cuero negro muy ajustados, una camisa blanca y una chaqueta verde
-Luces tan bieeeeeen- suspiró sonriéndome
-¿Y Benjamín?-
-Lo trae su chofer-
Alcé una ceja
-¿A ti no te trajo el tuyo?-
Evan ladeó su cabeza y se quedó mirando la calle por unos instantes
-Estaba ocupado llevando a mi hermanito a otro lugar-
Me mordí la lengua para no preguntar a qué lugar, Evan lucía incómodo al hablar del tema
Y la palabra “incomodidad” tratándose de él, sugería que había algo serio
Un par de minutos después apareció el automóvil de Benjamín, mi primo sí lucía como alguien mayor de edad, jeans oscuros, una camisa muy delgada y ajustada azul y una chaqueta negra completaba su atuendo
“Ahora siento que no me dejarán entrar”
-¿Listos?- preguntó sonriendo divertido
Miré el club frente a nosotros, habían muchas personas haciendo fila para entrar, un guardia que debía medir al menos dos metros y que evidentemente se ejercitaba a diario, escogía quien entraba y quien no…
-¿Están seguros de esto?- susurré atemorizado
El de ojos celestes bufó y se acercó al guardia con paso seguro
El hombre lo miró e inclinó levemente la cabeza, sorprendiéndome
-Buenas noches- saludó el guardia sin apartar su mirada del suelo
Miré a Benjamín en busca de alguna explicación, pero lucía demasiado tranquilo, me empujó levemente para que ingresara
Pasé por delante del guardia conteniendo el aliento, una parte de mi esperaba que de pronto me mirara y me prohibiera el paso, pero aquello no ocurrió y mis primos y yo seguimos nuestro camino hacia el interior del lugar
Sobra decir que estaba muy oscuro, era un pasillo increíblemente largo, que llevaba a una especie de recibidor, con una escalera al lado derecho, custodiada por dos hombres aun más altos que el de la entrada
Pensé que iríamos hacia la pista principal, pero Benjamín sonrió con superioridad y se encaminó hacia la escalera
-Buenas noches- saludaron ambos con una inclinación de cabeza
Pase entre ellos comenzando a sacar conclusiones
Era obvio que mis primos, contrario a lo que me había imaginado, pasaban varias noches en este lugar, pero lo que me desconcertaba era aquel trato de respeto…
¿Por qué tres hombres de semejantes características se inclinarían en señal de respeto a dos adolescentes de dieciséis años?
-Tendrán que explicarme esto- sentencié cuando estuvimos lejos de aquellos guardias
Ambos sonrieron mirándose entre sí y me sentí excluido, pero me sorprendió lo que había frente a mí, el segundo piso de aquel club tenía espacios diseñados elegantemente, sofás blancos y negros, con sillones a su alrededor formando un semi círculo, mesas de cristal con terminaciones metálica y separaciones con rejas metálicas que conseguían un total de cuatro ambientes diferentes
Lo único que recordaba que había un club era la baranda de cristal que permitía mirar hacia el piso inferior
-Mat, a veces es mejor no saber- afirmó Benjamín dejándose caer en el sofá del sector más apartado
Miré algo incómodo a nuestro alrededor, los otros tres ambientes eran ocupados por hombres con traje que nos miraban con cierto recelo
-¿Entonces por qué me trajeron?-
-Para que disfrutes- Evan sonrió
Un chico con delantal de garzón apareció llevando una bandeja repleta de botellas
-¿Ustedes beben?- inquirí sorprendido
En menos de media hora había conocido un lado totalmente oculto en ellos
Como si los estudiantes y quienes estaban ahora frente a mí fuesen personas diferentes
-No te obligaremos a hacerlo-
¿Era eso tranquilizante?
Lo que me preocupaba era…ellos
-Pero…-
-Pero si quieres hacerlo te enseñaremos para que no te emborraches la primera vez como tu primito-
Miré a Evan quien apartó su mirada algo avergonzado
-¿Por qué ellos les tienen respeto?- cuestioné dejándome caer entre mis primos, el mayor de ellos destapó una botella de tequila, por su parte el gemelo una de…vodka
“Ni siquiera beben cerveza”
-A nosotros no, a un amigo nuestro- respondió Evan sonriendo
-¿Amigo?-
¿Qué clase de persona sería ese “amigo”?
-Un sujeto realmente interesante, lo conocí hace un par de años y se lo presenté a Benjamin-
-¿Quién es?-
-No te preocupes, debería venir hoy, pero si no es así, disfruta de este lugar, muchos quieren entrar pero muy pocos lo consiguen…-
¿Eso era bueno o malo?
Me sentía en presencia de extraños y no de dos de mis primos, que hasta hace media hora, pensaba, conocía perfectamente
Benjamín me miró con seriedad desde sus ojos negros y puso su mano sobre mi hombro
-Tranquilo Mat, ¿Qué es lo peor que podría pasar?-
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¿Realmente escoges a tus amigos?
Hay personas que parecen tener ese “poder”, son increíblemente sociables y siempre están rodeados de rostros sonrientes y palabras de apoyo, pero en el fondo, se encuentran totalmente solos, porque podrán haber muchos a su alrededor, pero nadie realmente cerca…
En una época pensé que eso era bueno, ser popular, que las chicas gritaran por ti al verte pasar, que todos desearan ser como tú y que te invitaran a sus fiestas en un patético intento por parecerte a ti…
Pero mi realidad es diferente, ahora que mis amigos apenas pueden contarse con los dedos de una mano, ahora que la mayoría voltea su rostro al verme pasar, ahora que las chicas cambian su camino o me miran con cierta reticencia…ahora creo que es bueno no estar rodeado de hipócritas
Sin embargo, aunque los amigos que tengo son quienes se quedaron a mi lado y me dan su apoyo de una forma incondicional, me gustaría que cuando me interesara una chica esta no me rechazara automáticamente
Hace un par de años decenas de chicas me suplicaban por una oportunidad, actualmente ninguna se me acerca, sé que tengo diecisiete años, que soy muy joven, que la vida es larga…
Pero me gustaría no sentirme tan rechazado…
Tan…excluido, todo el tiempo, con cada mirada, con cada susurro...
Aaron