Desliz
Capitulo 08: Distancia.
Fénix
Estaba furiosa, estaba histérica, no sabía muy bien que le había dicho a Chris o a Nix. Caminaba furiosa a la piscina del instituto, mi rol como capitana del equipo de natación era esencial, y no había podido entrenar. Entre a los vestidores, me cambie, y seguí mi rutina, calenté primero, y me zambullí al agua, sentía como me ardían los puños y que la sangre de Chris no se iba a limpiar tan fácil de mis manos, ahora ya manchadas.
No era el comportamiento de una capitana, no era el comportamiento de la presidenta de la facultad de ingeniería.
-Que he hecho- dije mientras los circuitos se mezclaban, y la piscina se hacia diminuta, mientras de nuevo el beso entre Chris y Nix me asechaba la mente. No podía dejar de pensar en ello, y menos después de que por fin nosotras dos nos habíamos declarado formalmente
-Un día, no pudiste dejarme un día, disfrutar de mi noviazgo- dije al aire mientras regresaba a los vestidores. -Solamente un día era lo que pedía- cerré el puño y golpee los casilleros haciendo un ruido sordo
Recargue la cabeza en los casilleros, y comencé a llorar. Estaba destrozada, pero nadie podía verme así y menos en esta semana
-o-
Par de horas después, Nix descansaba en la enfermería, se le había bajado la tensión por no haber comido y estaba descompensada y deshidratada por haber tomado tanto y vomitado de ese modo.
Mientras un suero ayudaba a su organismo a reponerse, la doctora del campus, le explicaba a Chris el estado de la chica.
-Estará bien, solo necesita hidratarse, descansar y comer bien... algo ligero y mucho liquido... Me sorprende ver a Nix en ese estado, no es propio de ella ni tomar así, ni estar tan débil, le hice unos análisis de rutina. Ya tengo el informe del re ingreso al equipo de jockey... -mirando interrogante a Chris- Mira sé que no me incumbe y no sé que habrá pasado entre ustedes, pero por el bien de las dos, mediten muy bien esto.- Se expreso Karen con serenidad, abandonando la estancia.
Chris miro a Nix en la camilla aun inconsciente, se sintió molesta y celosa, sabia que si la chica se había embriagado había sido por su culpa, y ese desmayo había sido de la impresión y la discusión con Fénix. Odiaba a Fénix, porque el corazón de la persona que quería le pertenecía a ella, mordiéndose el labio frustrada, se sentó junto a Nix para sostener su mano a modo de apoyo.
-De algún modo hare que te fijes en mí... No quiero forzarte, pero vas a ser mía Nix.- Susurro seguidamente.
La chica del ave mítica se reincorporo, y siguió su camino de nuevo a cambiarse y seguir con sus clases con su rutina de la vida que ahora parecía vacía sin su más grande amiga y ahora amor, se seco las lágrimas con las palmas de las manos, se cambio, y salió de las instalaciones deportivas del campus.
-Presidenta Fénix!!!!- se oyó a lo lejos - Fénix!, presidenta... - era una de las asistentes de la junta de directivos de la facultad - La vice presidenta, se desmayo y ahora está en la enfermería, me pareció prudente avisarle- dijo la chica inocente.
- Bien Claudia, si fue prudente, en un momento iré...- la presidenta dijo, sin ánimos, y con cara de desagrado - ¿Ahora qué te paso Nix? Tendré que encontrarme de nuevo contigo después de todo- dijo la chica en su mente.
Con un caminar cansado y pausado, ingreso a la enfermería sola, había mandado a Claudia a llevar unos documentos a la junta de docentes.
- Y bien ¿cuál es la situación Karen? ¿Que tenemos con la vice presidenta?- dijo esta sin cambiar el tono de neutral
-Señorita presidenta... La situación que tenemos actualmente es que Nix, ha tomado demasiado, no ha comido y ha vomitado el alma...- dijo la mujer sin corte y sin anestesia - Aparte aquí tengo en mis manos que la señorita Nix ha hecho su solicitud para el reingreso al equipo de jockey.
El alma de la chica del ave mítica se paralizo al oír las palabras del equipo de jockey mientras su expresión no cambiaba.
- Así que el equipo de jockey.... –comento casi en un susurro- ¿Y la lesión de su rodilla? Si no me falla la memoria, la señorita abandono el equipo por ese motivo la pasada temporada…- Pregunto la chica a la doctora.
- De todo bastante bien, solo ahora los niveles de glucosa e hidratantes están bajos, pero de todo muy bien- dijo Karen sentándose en su escritorio dejándole ver el expediente de Nix.
- Bien- dijo Fénix caminando hacia la cama en donde se encontró de nuevo con Chris.
- Chris...- dijo la presidenta sin ponerle demasiada atención.
- Fénix -dijo Chris en forma de saludo formal. Las dos mujeres se quedaron en silencio mirando a Nix, Fénix sin cambiar de expresión camino hacia la ventana y dejo unas flores, las favoritas de Nix: rosas azules. Y se retiro sin voltear atrás.
Chris simplemente se mantuvo en silencio, por un momento se sintió culpable, pero no le importaba, si con ese alejamiento, Nix podría fijarse en ella, haría todo lo posible por separarlas y mantenerlas distantes.
Media hora después, Nix comenzó a despertarse, evidentemente desubicada y algo desorientada, intento levantarse, pero Chris gentilmente se lo evito, regresándola a la cama con calma.
-Aun necesitas descansar un poco, cuando el suero se termine y puedas levantarte, te llevare al apartamento....- Explico Chris.
-¿Pero qué paso? ¿Que hago en la enfermería?-. Interrogo Nix algo asustada.
-Te desmayaste hace un par de horas, te descompensaste y se te bajo la presión... Pero ya esta más estable, como dijo Chris, cuando el conteo del suero termine, y estés un poco más espabilada, dejare que te marches, solo si alguien te lleva... Así no puedes conducir es peligroso...-. Agrego Karen, mientras revisaba a la joven.
-D-De acuerdo...-. Tartamudeo Nix apenada y avergonzada, siendo la Vice presidenta, acababa de hacer el ridículo desmayándose y por haber sido una borracha imprudente.
-Programare para mediados de semana tus pruebas físicas y motoras, quiero que el traumatólogo revise tu rodilla, los análisis de sangre ya los hicimos y estas bien de salud... Sino tienes inquietudes, puedes marcharte...- Intervino la doctora luego de un rato.
Aun algo débil Nix se levanto de la camilla, rechazando el apoyo que Chris le ofrecía, camino firme por los pasillos, ya debían ser alrededor de las seis de la tarde, las clases habían culminado, sintiendo aun mas hambre, suspiro para caminar al estacionamiento.
-Estas loca si crees que voy a permitir que te vayas así, no puedes conducir es muy peligroso...- Comento Chris, evitando que Nix abriera la puerta de su coche.
-Por favor Chris, no me siento bien, tengo hambre, estoy cansada... Solo quiero comer, ducharme y dormir... No me hagas más difícil esto.- Pidió Nix de forma desganada.
-Deja que te lleve a comer, me hare cargo de ti, te llevo a tu apartamento y me marcho... No intentare propasarme si es lo que te preocupa...- Bajando la guardia, miraba suplicante a la chica.
Nix quedo visiblemente sorprendida con aquellas palabras, analizando las expresiones de Chris entendió el porqué de su comportamiento, no estaba ni ebria, ni drogada ni enfadada, por lo que la chica, era todo un amor con ella.
-Esta bien, tu ganas...- Accediendo sin saber realmente el porqué, Nix camino junto a Chris a su camioneta, permitiendo que la chica le abriera la puerta del copiloto, se dejo caer en el asiento, intentando relajarse, el dolor de cabeza que tenia, le molestaba.
Lo que Nix no sabía, era que Fénix observaba con atención, desde la parte superior del estacionamiento, aquella escena la destruyo aun mas que haber visto el beso entre ellas, dejando fluir sus lagrimas, camino a su vehículo y salió de allí como alma que lleva el diablo, necesitaba perderse, olvidar, gritar, dejar de sentir.
Fénix conducía rápido, no sabía si ir a tirarse de un puente, o solamente tomar hasta el hartazgo, de cualquier manera las dos opciones estaba fuera del alcance, el puente no estaba muy cerca y el tomar no le gustaba, no tanto como perderse en la piel de otra mujer cuando esta se sentía vacía. Llamo a Hécate y esta no contestaba.
-Demonios el seminario de artes plásticas y visuales era hoy- Dijo la mujer visiblemente enojada.
Condujo a un puente cercano, era el puente donde las dos habían pasado varias noches tomando y confesando su amistad, era especial y ahora ella necesitaba de Nix más que nada en el mundo. Condujo hasta el mismo, Bajo del auto y grito su alma, golpeo el suelo y grito aun mas.
- ¿Por qué Nix?, Por que Nix si sabias que éramos- dijo mientras agachando la cabeza, llorando y sintiendo como de nuevo el corazón se le destrozaba
Se sentó en el capó del auto y miro su móvil.
- Nada - dijo con cara de fastidio. - Si a nadie le importa la presidenta hasta que la necesitan- dijo al aire de nuevo la chica. Miro de nuevo el móvil, aun nada.
- Como es que puedo esperarte, aun sabiendo esto, aun sabiendo que fuiste para mí- Dijo en su mente.
- Que pretendes, al volver al infierno de Chris y de nuevo al equipo de jockey- saco un cigarrillo que no solía fumar y lo prendió para tranquilizarse y limpiar la sangre de sus manos, estaba herida, pero no le cuadraba nada de aquello, Nix no era así de sumisa.
-o-
Nix permitió que Chris la llevara a cenar, a un restaurant elegante y modesto, de comida vegetariana, estaba absorta en sus pensamientos, perdida en sus sentimientos, que solo se limito a comer en silencio.
Chris la llevo al apartamento, ayudándola a bajar, se mantuvo al margen en todo momento, al ver que la chica entraba, se marcho sin más, se sentía extraña, era increíble como sus sentimientos por Nix la transformaban en otra persona.
Nix se desvistió con calma, dejando regadas las prendas de ropa por toda la casa, se metió bajo la regadera, dejando que su alma se desahogara, mientras las lágrimas se mezclaban con el agua fría, golpeo la pared frustrada. Sabía que Fénix estaba herida, desconcertada, que seguramente la chica estaría ahora mismo meditando cada palabra, frase y hecho, mordiéndose el labio frustrada. Abandonaba la ducha, para dejarse caer desnuda en la cama, el olor de las sabanas incremento el dolor en el pecho, era una mezcla de su aroma con el de Fénix, abrazando la almohada, sollozo hasta quedarse dormida.
Había sido un día fatal, el peor de su vida.
-o-
El cigarrillo le había calmado un poco la mente, y el coraje, solo el imaginar a las dos juntas la perturbaba.
- Bien cálmate Fénix, tienes que ser como lo que dice tu nombre- Dándose coraje a sí misma, apago el cigarrillo condujo lento y pausado, sabía que Nix estaría en casa a estas horas de la noche, Hécate no iba a salir del seminario hasta muy tarde en la noche. La chica llego a su residencia. Y tomo una ducha caliente, sin mas recordó todo lo sucedido la noche anterior, la noche de la fiesta de la facultad, ese día en el que ellas pasaron de ser amigas a amantes, ese día en el que su corazón quedo plasmado en sus heridas ya cicatrizadas, el día en el que su mejor amiga se volvería su mártir.
-Nix Te extraño- escribió en la humedad del espejo de su baño y lo borro inmediatamente. Sabía que tenía que alejarse de ella y de otro sentimiento que tuviese que ver con ella. Iba a ser una noche de la cual las pesadillas eran las protagonistas. Ese día se convirtió en su peor pesadilla, el día en el que Nix se alejara como lo hizo en el grado que se conocieron.