Semestre interesante por deka

Era viernes y la semana había transcurrido bastante monótona, sin nada interesante que contar.

Hiroki veía al mundo girar bajo sus pies, gente gritando aterrorizada en máquinas de tortura... No era de ninguna forma concebible que la gente pagase por entrar a ese horrible lugar, y nombre más absurdo tenía, "parque de diversiones". De divertido no tenía pero ni la "D", sólo había asistido a ese absurdo lugar porque todos sus amigos se habían empeñado en ir y le dijeron cobarde cuando rechazó la invitación. Hiroki le temía a las alturas, por lo cual casi todo ese parque resultaba horrible para él, se montó en uno de los juegos que le pareció menos horrendo, las sillas voladoras... Se levantaban a una altura considerable pero... No giraban tan rápido como los demás... Así terminó Kamijou sentado en esas sillas voladoras, mientras que sus demás amigos estaban regados por el parque. El ángulo en el que estaba, la distancia entre él y el suelo y las estúpidas matas que le golpeaban los pies en cada vuelta eran los factores que, juntos, hacían que Hiroki maldijera haber accedido a ir y encima, haberse montado en ese tonto juego...aunque... Al cerrar los ojos... Era lo mejor que le había pasado. Sentía como si volara... Le pareció encontrarse en la punta del Titanic, pero muchísimo mejor, no era Jack Dawson(1) el que le acompañaba en su fantasía, era Nowaki, que le sostenía, entre sus brazos se sentía seguro, invensible... Nowaki... Nowaki... El nombre se repetía continuamente en la mente de Hiroki, le daba valor... Nowaki... Nowaki...

«Qué carriso hago yo pensando en él? No es normal, no es normal que lo recuerde en estas condiciones, no es normal que me de valor pensar que estoy entre sus brazos y definitivamente no es NADA normal imaginarme con él en la punta del Titanic Ò////Ó voy a parar en loco .-. Al menos ya se está deteniendo...»

Las sillas iban cada vez más lento y Hiroki se percató de la presencia de cierto peli-azul a un lado de la salida. Cuando el "doctorsito" notó que el peli-marrón lo estaba viendo, le saludó con la mano y amplió su sonrisa.

«Nowaki *-* Nowaki? O.O de verdad está aquí!!...?... Qué hace aquí?!»

La máquina se detuvo por completo y Hiroki, tambaleándose un tanto mareado, caminó hasta la salida. Trató de aparentar que estaba completamente bien, de poner su cara más sosegada, pero... El mareo le impidió caminar correctamente y le hizo caer en los brazos del más alto.

-Hiro-san, estás bien?

- S-si - respondió reincorporándose

- Te quieres montar en algún otro juego, Hiro-san? ^^

-NO!! - el grito asombró a Nowaki, quien inclinó la cabeza a un lado para mostrar su sorpresa, pero sin soltar en ningún momento a Kamijou - digo... Sólo... me quiero ir ya de aquí - estableció cansado.

-Bueno, vámonos.

Hiroki trató de separarse de Nowaki para caminar por su cuenta, por el contrario, Nowaki lo abrazó todavía más fuerte y así se fueron abrazados a la casa. Kamijou sonrojado a más no poder caminando un poco por delante, evitando que el peli-azul notase su nerviosismo y el "doctorsito" infinitamente contento.

Por otra parte, en el mismo parque, iban Chiaki y Hattori caminando, el último le había comprado a su asistente algodón de azúcar, lanzadores de burbujas... Era una pareja de lo más curiosa, el menor iba saltando adelante, contemplando emocionado todo el parque, mientras que el mayor lo seguía mirándolo con ternura. Se encontraron con Yuu.

- Yuu!! -exclamó Chiaki brincando a los brazos de su amigo

- Qué haces aquí? - preguntó seco Hattori

- Vine a dar una vuelta, o no puedo? - Yuu arqueó una ceja

- Puedes hacer lo que quieras.

Desde que Chiaki había saltado a los brazos de su amigo, mantuvieron el abrazo, ambos chicos, uno al lado del otro, rodeándose los brazos la cintura del otro.

- Hattorii, no deberías ser tan malo con Yuu, no seas amargado ^^

- Es que no tiene otra forma de ser jajaja

A Hattori lo tenía consternado el abrazo de los dos muchachos, no pudo formular una respuesta coherente, desvió la vista para no observar eso.

- Qué pasa Hattori? El gato te comió la lengua?

Preguntó Yuu con expresión sarcástica, acercándose más a Chiaki, para molestar a Hattori, quien volteó casi de forma automática a ver la nueva posición que adoptaban, sintió ese nuevo acercamiento como una punzada en su pecho... De verdad sentía que dolía... Tanto que quería él a su asistente y no se daba cuenta. Desconsolado, expresó una orden:

- Vamos ya a la casa Chiaki - tomó de la mano a su asistente, tratando de apartarlo del otro, pero Yuu lo cogió de la mano

- Qué pasa Hattori? Yo no me quiero ir todavía

- He dicho que nos vamos, mañana hay mucho que hacer

- Ha dicho que no quiere, déjalo

Otra punzada... Hattori no pudo más, soltó a Chiaki y se marchó.

- Eeh! Hattori! No te vayas!- Chiaki gritaba, pero el mayor no le oía - Kyaa... Por qué se habrá ido así?- preguntó rascándose la cabeza

- De verdad no te enteras de nada, no?

- Aah?

- Olvídalo...

- Pero...

-Vamos a la nodriza (2)

Así, arrastrado por su amigo, llegaron ambos dentro de la cabina. Comenzaron la vuelta sentados uno frente al otro. Chiaki estaba asomado por la ventana, mencionando cada detalle que le sorprendía (prácticamente todo) así que no notó cuando Yuu se sentó a su lado.

-Ehh! Yuu! Mira a esos dos besándose O.O

Justo cuando terminó de pronunciar esa frase, los labios de Yuu se estamparon sobre los suyo. Anonadado, Chiaki lo empujó lejos de si.

- Qué haces?!!!

-Mostrándote que es algo normal -dijo yuu con indiferencia - deja de ser tan niño, fue un beso, no es nada.

Hattori había presenciado el beso, decidió vigilarlos cuando notó que se estaban montando en la nodriza... Aunque se lo esperaba, ver eso, le había roto el corazón... Lleno de rabia, se alejó de aquel lugar.

- Bueno, pero igual no lo hagas de nuevo... - pidió Chiaki

- Por qué? - Yuu se acercaba nuevamente al otro

- Porque no me gusta... Yuu... Aléjate

Frustrado, Yuu suspiró.

- Hattori te tiene bien controlado, no?

- No me tiene controlado, somos amigos ^^

- Amigos... Amigos... Dios Chiaki, abre los ojos -.-

- A qué te refieres?

- Él está enamorado de ti!

- Hattori? Eso es imposible, somos amigos

- Eso no impide que esté enamorado

- Que no lo está!

- Si tu lo dices... Capaz me confundí
«Hattori obviamente está enamorado de Chiaki, pero yo también, si él no se lo dice yo no le ayudaré, probablemente me convenga más que no se de cuenta» pensaba Yuu, no se rendía, trataba de acercarse al otro cuanto se lo permitía. Nervioso, cuando finalmente pudo bajarse del juego, Chiaki corrió confundido, gritándole a Yuu que estaba cansado y se iría a su casa. Mientras corría, se encontró con Hattori en una especie de juego de lucha, en el cual golpeaba rabiosamente un saco de boxeo.

- Eeh! Hattorii!!

El mayor volteó a verlo, sintió una nueva punzada de dolor y golpeó de nuevo al saco, con más fuerza ahora. Chiaki, confundido, observó cómo el mayor descargaba su rabia en ese juego. Cuando terminó, el asistente corrió hacia donde su jefe.

- Hattorii!!!!! Pasó algo? Por qué estás molesto

El mayor ni siquiera volteó a verlo, miraba el cielo, buscando la luna, pero lo único que llegó a ver fue las estrellas, fijó la vista en la más brillante y habló lo más calmadamente que pudo.

- No estoy molesto, sólo me sorprendió la cercanía entre tú y Yuu.

- Somos buenos amigos ^^

- Los amigos no se besan

- Tu... Viste el...

- Si

«Y si... Yuu tenía razón y... Hattori está... No, imposible»

Una risa nerviosa brotó de los labios de Chiaki ante este pensamiento. Hattori lo miró confundido por su risa.

- Qué es tan divertido?

- jeje... Nada ^^U

Caminaban uno al lado del otro. «Lo amo, maldita sea... Lo amo desde hace tanto... Y el ... Yuu y él se... Se besaron... No puedo, es como si ese beso me quemara en el pecho, duele... Seguiré siendo su amigo, pero ya no puedo, no puedo seguir durmiendo en la misma cama de él como si nada, me encanta estar todo el día con él... Pero no puedo pasar tanto tiempo a su lado sabiendo que su corazón es de otro, no puedo...»

Junto a un río que cruzaba el parque, se detuvo Hattori de golpe, causando que Chiaki se tropezara con él.

- Qué pasa Hattori?

El mayor, con las manos hechas puños, respondió:

- No puedo

- Aah? A qué te refieres?

-Ya no seré más tu jefe, olvida la estúpida apuesta, no hace falta que estés conmigo...

- No estoy contigo porque seas mi jefe...- esas palabras confundieron a Hattori, hizo que se le iluminaran levemente los ojos, y Chiaki lo notó

- Qué quieres decir?

- Estoy contigo porque eres mi amigo

Amigo... Esa palabra se llevó consigo todo rastro de alegría en el rostro de Hattori.

- Olvídalo, no te preocupes, yo duermo en el sofá, no hace falta que estemos juntos...

- Pero yo quiero estar contigo!- Chiaki se había aferrado del brazo del mayor, al darse cuenta de esto, Hattori se volteó y tomó el rostro de Chiaki entre sus manos.

«Qué es... Este sentimiento? - la mano derecha de Hattori recorrió delicadamente el rostro del menor, haciéndole estremecer - será que de verdad... Está enamorado de mi?»

- No lo entiendes - besó tiernamente la frente del menor, ruborizándolo- estoy enamorado de ti

«Supongo que eso responde mi pregunta... Pero... Qué es lo que yo siento? Por qué esas palabras me hacen tan feliz? - con sus labios, el mayor cruzó la cara del menor hasta dejar su boca justo por encima de la del menor - Por qué me hace sentir tan vivo? Y a la vez con tanto miedo... Bésame de una vez!»

- Y no te obligaré a hacer nada... Sé que no sientes lo mismo así que... No importa...

Hattori se alejó de Chiaki.

- Espera!! - el menor cogió al otro de la mano - yo...yo...yo...

El mayor permaneció inmóvil, sabía que si quería conocer el final de esa oración, debía permanecer como estático.

- Yo... Yo... No se lo que siento pero... Quiero averiguarlo y...

El menor había estando mirando al suelo, sin soltar el brazo del más grande, al levantar la vista y ver la sonrisa de su jefe, se ruborizó y lo soltó de golpe, caminó hacia atrás, tropezó y... Hubiese caído, pero Hattori lo atrapó a medio camino del piso, atrayéndolo hacia si. Chiaki, tras estabilizarse, no se apartó del mayor, simplemente miró hacia otra parte y dijo avergonzado:

- Olvida todo lo que dije, simplemente... No te vayas

Hattori sabía que haría falta muchísimo tiempo antes de escuchar los sentimientos del menor, pero por ahora, eso era más que suficiente. Sumamente contento, el más grande besó a Chiaki, quien no presentó respuesta alguna, aunque tampoco rechazó el beso. Se tomaron de las manos y marcharon a su casa, sin pronunciar palabra.

En el parque también caminaban juntos Shinobu y Miyagi.

- Voy por refresco - dijo el más grande

El menor se quedó solo en medio del camino, esperando a Miyagi cuando llegaron unos bravucones que él conocía muy bien, eran los que, todos los días en la escuela le quitaban la comida, le escondían los libros, le tiraron un zapato por la ventana... No era suficiente estar con ellos en el colegio? Además tenía que encontrárselos aquí. Pero nada ni nadie le arruinaría esa noche con Miyagi, era su ídolo, estaba enamorado de él... Ya tendría tiempo para decírselo después, su ídolo acababa de terminar el noviazgo con la hermana del menor, al último no le parecía conveniente confesar sus sentimientos todavía... Pero esa es otra historia, el problema ahora era el conjunto de 3 imbéciles que se acercaban a Shinobu.

- Qué pasa enano?

Dijo el más alto, moreno de pelo negro y rizado, el otro era más bajo, moreno de pelo negro y liso, el último era el más pequeño, blanco, catire... Hicieron un círculo los 3, empujando a Shinobu entre ellos. El agredido terminó cayendo al piso, donde le pisoteaban cada que trataba de levantarse. Cuando ya no pudo más seguirse moviendo, se resignó a ser golpeado, se quedó en el piso hecho un ovillo. Los agresores se separaron y comenzaron a golpearle con rocas que habían en el piso. Hasta que...

Bum Plaff catapotome! (Jeje por favor interpreten eso como sonidos de golpes)

Cuando Shinobu abrió los ojos, Miyagi estaba levantando al más alto de sus agresores, los otros dos estaban tirados en el piso.

- Le vuelven a poner una mano encima a ese niño y se las verán conmigo >__>

Shinobu no daba crédito a la escena que se desarrollaba ante sus ojos. Luego de lanzar al último hombre al suelo, Miyagi se acercó al menor, poniendo una mano en su hombro.

- Estás bien?

- S-si

- Puedes caminar?

- Claro

Trató de levantarse, pero le dolía todo y se sentía demasiado débil.

- Ok, te cargaré.

- N-no Ò////Ó yo puedo caminar

- Si no puedes ni ponerte en pie -.- no seas terco

Miyagi cargó a su asistente como si de una princesa se tratara, el menor rodeó el cuello de su jefe con sus brazos y contempló su rostro... Su ídolo y ahora también su héroe... Estaba perdidamente enamorado, y pronto se lo diría... Por ahora asi esta todo bien... Pero pronto se lo diria... Quizás... Antes de lo que se imaginaba él mismo.