Tora lloraba como un bebé de teta; era todo un borracho llorón. Yo prácticamente le acunaba en mis brazos mientras él sollozaba sobre mi pecho. Qué escena más gay... Podríamos haber sido los protagonistas de My Little Pony y nadie hubiera notado la diferencia.
Pero se veía tan débil, tan diferente al Tora duro y malvado al que estaba acostumbrado a tener que aguantar... ¡Estaba tan violable! Quizá pensara eso porque yo también había tomado un par de copas de más aquella noche.
Estábamos como en el decimoquinto bar en el que habíamos entrado, no sabría volver a casa por mi propio pie, así que tendríamos que pasar la noche en algún hotel cercano. Sonreí en mi mente al pensar en pasar una noche de hotel con Tora...
-A...Akira... ¿Soy patético, verdad?-
-Un poco-el alcohol me animaba a no mentir-Deberías dejar de pensar en él-
-Pero me gusta... Y...ah... ¡Akira, tú sabes lo bueno que es en la cama!-
-Lo sé...-sonreí-Tiene un culo de lo más estrechito...-solté una pequeña carcajada-Aunque...no me gusta ser dominante últimamente...-
-¿Qué?-Shinji sonrió-A Akira le gusta que le den por detrás~-canturreó
¿Tan rápido se le había pasado el llanto? Maravillas del alcohol...
-No me gusta que me den por detrás...bueno, no lo sé, nunca lo han hecho-mi mirada se perdió completamente-Pero me gustaría...-hice un puchero
-¡Pero si tú estás bueno!-me gritó al oído-Cualquier tío medio gay se moriría por penetrarte...-sonrió-Te lo aseguro...-
-No sé yo...-me quejé-La persona a la que yo quiero pasa de mí-
-¡¿Quién pasa de mi Akira?! Le voy a meter un balazo entre ceja y ceja-
-Estás muy borracho... Mejor vamos a un hotel...-
-¡Pero vamos a buscarte un hombre antes!-
-Cállate, bobo-lo ayudé a levantarse
-Bueno, nos apañaremos con lo que tenemos...-cogió la botella de cerveza que estaba sobre la barra-¡Vamos al hotel del amor!-
**
Las ganas de contarle todo a Tora habían desaparecido; quizá el pequeño tuviera razón, quizá no le importara... Al fin de al cabo yo solo era su juguete ocasional, no era nadie para él, ni siquiera su hermano, ni siquiera su nada.
Yo solo era su puta. Y a ratos.
No apareció en toda la noche a buscarme, a pesar de que recé innumerables oraciones para que lo hiciera... Ruki durmió abrazado a mí; y me besaba cada vez que despertaba...pero yo me sentía sucio... Ya no le correspondía...
-Uruha...te quiero...-
Maldito niñato con síndrome de Estocolmo... Sentía como iba perdiendo parte de mi energía y orgullo cada vez que esas palabras salían de su boca. ¿Te quiero? A mí nadie me quiere... Tora nunca me ha querido, nunca me ha tenido aprecio... Aún recuerdo con dolor su reacción cuando le conté quién era yo...
-Tú no puedes ser mi hermano...-
-Lo...lo soy-
-¡¿Pero qué hemos hecho?! ¡Degenerado, esto está mal! ¡Podrías habérmelo dicho antes! ¡Llevamos dos semanas haciendo algo horrible!-
-Pero yo...-
-Pero nada; eres una puta sin dignidad, me has manipulado para convertirme en una abominación de la naturaleza como tú-
Comencé a llorar, esas palabras habían sido realmente duras...
Después de eso me ofreció a Reita por primera vez... Yo tenía mucho miedo, pero en cuanto entramos en la habitación, me tranquilizó:
-No te preocupes, no te haré daño... Recuéstate-
Me trató con delicadeza...no me dolió, fue muy despacio...Y a pesar de que el único rostro que pasara por mi cabeza fuera el de Tora, hizo que disfrutara.
La verdad es que si me ponía a pensarlo con detenimiento, incluso Reita me había tratado mejor que Tora en el tiempo que llevaba viviendo allí... Pero yo no quería a ese rubito pelo pincho de buen corazón. Solo soy una ''abominación de la naturaleza'' enamorada de su hermano, después de todo. ¿Por qué nuestro padre tenía que ser el mismo hombre? ¿Por qué teníamos que tener en común parte de nuestro código genético? ¿Por qué tenía que vivir yo esta tragedia digna de los dramaturgos griegos más sonados?
Seguro que nadie compró a Eurípides en un mercado de la mafia griega.
Aunque hubiera sido digno de ver, la verdad...
No es tiempo para bromas, Shima...tienes a Ruki dormido encima de ti... Son las cuatro de la madrugada y Tora no está aquí contigo...
Quizá deberías rendirte de una vez y conformarte con lo que tienes. Míralo...el chico es mono...y quizá sus palabras sean sinceras...
Sé un buen tipo, dale una oportunidad.
**
Entonces las luces se apagaron, y grité una obscenidad porque seguía inmovilizado por aquel ser. El espectáculo estaba a punto de comenzar.
-¡Miyavi, devuélveme mi droga, coño!-
-Cállate, o las señoritas no saldrán; he elegido el espectáculo que se llamaba: ''El descenso de la diosa'' así que espérala...-
Pues espero que se te caiga en la cabeza.
Empezó a sonar una música tántrica, y me resigné a seguir tumbado en el suelo. Aparecieron dos mujeres en la pasarela; vestidas como... ¡Joder, como putillas indias! Ya sabéis, las de la danza del vientre, con cascabeles que sonaban cada vez que daban un paso... Joder, cómo movían las caderas... Balanceaba mi cabeza siguiéndolas con la mirada, hipnotizado; esperaba que el mariconchi que tenía encima hubiera pensado en la posibilidad de que luego nos las lleváramos a cuartos apartados.
¿Qué pasa? Soy un hombre después de todo, ¡y las tetas son las tetas, son el demiurgo del universo! Aoki no se molestaría si me acostara con una mujer... más bien me exigiría que lo hubiera traído conmigo a la reunión, porque después de todo el tumor de Gackt también está aquí... ¡Pero Aoki no es un tumor! Aoki es...la cosa más adorable y follable de este maldito mundo...
¡Pero es mi cosa! ¡Mía y de nadie más, así que tened cuidado porque muerdo y tengo la rabia y meto katanas por anos ajenos! ¡¿Entendido?!
¿En qué estaba? Ah, sí...las tetas salvarán al mundo... Tetas grandes, pequeñas, redonditas, suaves... Con pezones rositas...
La música se detuvo junto con las bailarinas, y algo nuevo pasó... Una compuerta del techo se abrió, y efectivamente, la diosa de pezones rositas descendió.
Pero era una diosa con pene. Y sin tetas.
Y a Kazuki le gustan las tetas.
Pero al parecer al florero no, porque se apartó de mí y me devolvió mi droga; la cual no tardé en apurar en una larga calada... Observé mejor el espectáculo... el ''dios del este'' era un chico moreno montado en un columpio para pájaros.
Bienvenido, dios cacatúa, te adoramos a ti y a tu tanga de cuero. Aunque no por el tamaño de tu aparato reproductor precisamente, porque no es que se te marque algo excepcional.
Yo la tengo más grande.
No llevaba nada más puesto a parte de eso...bueno, las cuerdas que lo inmovilizaban, si es que cuentan como ropa...Una vez en la plataforma las bailarinas se acercaron a él, como en una estudiada coreografía, y pasaron sus manos por ese pequeño cuerpo, despertando su deseo...y por supuesto el nuestro.
Eso sí que era una cara de furcia profesional... Me acomodé para verle mejor; el pelo le cubría parte de la cara y uno de sus bonitos ojos maquillados de un negro tan tóxico como el opio que me estaba fumando...
Pero mis ojos se fueron directamente a sus labios pintados de rojo, entre los cuales relucía una mordaza negra compuesta por dos tiras de cuero y una bola en el medio. Seguro que sabía manejar muy bien esa boquita tan sucia con la que no paraba de darle vueltas a la esfera... Tenía la forma perfecta para complacer a mi amiguito...
Lo dejaron unos segundos así para que lo miráramos... Como cuando te presentan a la vaca que te vas a comer antes de matarla en los asadores americanos... Ahora que lo pienso solo los he visto en las películas, nunca he estado en uno personalmente... Bueno, ya tengo plan romántico con Aoki para este fin de semana. ¡Vamos a matar vacas!
Una de las señoritas le quitó la mordaza.
-Ah...-soltó un gemido digno de película porno y nos miró fijamente con sus ojos matizados de un color artificial debido a las lentes de contacto que llevaba-Caballeros, esperen un poco...el espectáculo a penas ha comenzado...-
Tenía una voz relativamente aguda, y en lo personal me resultó estridente. Había perdido el interés en esa fulana.
Pero mirad quién no lo había hecho... Sonreí como un niño a punto de hacer algo malo antes de dirigirme a su ''pretendiente personal''.
-¿Qué pasa, Mi-ya-vi~? ¿Te gusta la furcia?-
-¡No es una furcia!-me gritó
-Hahahha, eso es un sí...-me levanté y me subí a la plataforma sin hacer caso a las quejas de Miyavi; las bailarinas se retiraron-Hola, guapo...-
-Hola...-se relamió los labios-¿Podría ayudarme a levantarme, por favor...?-jadeó-Es complicado con estas ataduras...-hizo un puchero
-Por supuesto-lo levanté-Eres muy bonito...mi querido...-
-Yuuki-
-Me gustan tus labios...Yuuki... ¿Me permites besarlos?-
-Es usted muy pícaro... Pero antes de eso...-las bailarinas regresaron con una silla, para mí, por supuesto-Siéntese, por favor...-
-Cómo no, precioso-le di un azote en el culo y me senté
Lo último que hice fue dedicarle una mirada de superioridad a Miyavi antes de que me taparan los ojos con una venda.
**
Hundí la cabeza dentro del agua, ese maldito ninja...
''Su rostro es mucho más hermoso de lo que lo imaginé''
¿Soy realmente hermoso?
Saqué mi cabeza del agua y observé mi imagen en su superficie... Yo solo veía a un hombre cansado... Un hombre sin dignidad...
La perdí hace tanto tiempo...
Las vejaciones de Kazuki en público solo son una prueba más de que no me respeto a mí mismo en lo más mínimo. Realmente me estoy haciendo un favor al cubrirme con el velo, pues no quiero verme. Es un poco raro... Por fuera soy esa persona habladora, fuerte y quizá algo malhumorada e infantil de vez en cuando que ve todo el mundo...
Pero por dentro estoy destrozado. No me quiero...
Por eso me es difícil concretar lo que siento por Kazuki...Y más aún lo que siente él por mí. Cuando convives con una persona que no está en sus cinco sentidos empiezas a dudar de los tuyos... Empiezas a preguntarte si esa persona que está en el espejo eres tú...O es solo un fantasma, y el ''tú'' que has conocido a lo largo de toda tu vida no era real...
Me gustaría explicarme... el opio no es la primera adicción que ha tenido Kazuki... Él era una persona seria cuando lo conocí...Fue un amor apasionado, del tipo que ves en las películas; nuestros besos duraban horas, y hacíamos el amor siempre que podíamos. Me decía que me amaba, y yo le creía, porque yo también lo amaba.
Pero la presión de llevar el clan le hizo daño.
Empezó a fumar, y no tabaco precisamente... También se inyectaba...de todo... Estuvo a punto de morir en un par de ocasiones... La sombra de la sobredosis lo acechaba, y las alimañas que esperaban que muriera para ocupar su puesto también.
Cuando no tenía su dosis diaria se comportaba de una manera horrible conmigo...llegaba a casa y discutíamos, me insultaba, me llamaba de todo, incluso llegó a golpearme y a hacerme sangre en alguna ocasión... Y cuando la persona que se supone que ''te quiere'' hace eso contigo... tu forma de ver las cosas cambia.
En esa época yo me autolesionaba...me cortaba...los brazos...las piernas... ''la perfecta piel de porcelana'' de la que debería presumir quedaba marcada cada noche en la que él no aparecía por casa... Era una forma de hacer escapar el dolor que sentía por dentro hacia fuera... ''Si duele significa que estoy vivo'' ''Si duele significa que estoy vivo'' Era lo que me repetía una y otra vez hasta caer profundamente dormido...
A día de hoy sigo haciéndolo...muy de vez en cuando...a escondidas, en momentos como este, en los que me siento tan pequeño...
La diferencia es que antes Kazuki ni reparaba en los cortes que tenía, simplemente llegaba hasta el culo de drogas, me violaba, y dormía tranquilo después de correrse... Bueno, violar es una palabra demasiado fuerte, el sexo duro no tiene nada de malo, ¿verdad?
¿Verdad?
Se disculpó conmigo por todo eso...cuando lo dejó, aunque quizá ya era demasiado tarde para ambos. Intentó no consumir nada...pero solo aguantó unos días totalmente limpio; y es que el síndrome de abstinencia es implacable. Finalmente el opio fue la solución temporal a nuestros problemas... Ahora está tranquilo...y aunque una parte de mí sigue echándole en cara que se drogue, la otra tiene miedo de que lo deje o de que vuelva a las drogas duras y se porte mal conmigo de nuevo... Porque como ya he dicho, ahora está calmado...
Solo...que ya no es mi Kazuki... Se le va la cabeza...dice cosas sin sentido que a él le parecen divertidas, pero siento que le he perdido...
Solo en esos fugaces momentos de lucidez que tenía era cuando me sentía bien, como si hubiéramos vuelto a los viejos tiempos...
Para mi desgracia esos momentos cada vez estaban más separados en el tiempo. Y le echaba de menos...echaba de menos que me abrazara y que me dijera que me quería. Ya no era la persona de la que me enamoré, pero seguía viéndola cuando lo miraba directamente a los ojos, entre las brumas de humo tóxico que los inundaban ahora...
Salí del agua y observé mi cuerpo desnudo antes de cubrirme.
¿Hermoso? Y una mierda...
**
Yuuki revoloteaba al rededor de Kazuki y a mí me estaba hirviendo la sangre al verlo... ¡Yo quería ser él! ¡Era mi espectáculo, maldita sea, la diosa era para mí, yo la había elegido después de todo! Yuuki ya estaba desatado y se contoneaba con una boa de plumas negra como si de un espectáculo de burlesque se tratara.
Maldito Kazuki... Su sonrisa me estaba cabreando...
-¿Se está divirtiendo, señor?-
-Muchísimo...-Kazuki respondió desde la silla-Pero déjame tocarte-
Maldito, lo hacía a propósito, estaba seguro... ¡Quería joderme y sabía como!
-En seguida voy, señor...-nos lanzó un beso antes de darnos la espalda y se sentó encima de Kazuki-¿Así está bien?-
-Muy bien...-Kazuki le agarró del trasero y lo apretó entre sus manos-Tienes un culo muy prieto-después de eso lo movió sobre él, simulando que lo embestía
-Ah...y usted tiene las manos muy largas-nos miraba a cada frase que decía
Si todo esto era actuación por favor que alguien le trajera un Oscar. Era perfecto...provocaba con cada movimiento, pero a la vez se arrepentía y actuaba tímido. Era un suke en potencia...Y yo me encargaría de doblegarlo. ¿Podría llevármelo a casa...? ¿Cual sería su precio?
Pero... ¿Y si Kazuki se lo quería llevar también y sustituir a Aoki con él? No, de ninguna manera, que se buscara a otro, Yuuki era para mí y lo acababa de decidir. Como si tenía que rebanarle el cuello a ese inepto drogadicto.
Miré a un lado, apartando la vista de mi presa por un segundo. Hyde estaba sentado en el regazo de Gackt y buscaba su atención con besos cortos y caricias bien intencionadas, pero el otro lo apartaba con cortesía, como diciendo: ''Te quiero, pero ahora no es el momento''. Era un tipo reservado para esas cosas, así que lo sentía por Hyde, seguro que echaba en falta algo de afecto en público. Si fuera yo lo cubriría de besos a todas horas... Porque yo soy un tipo cariñoso, y me gusta mostrarlo en público, sin prestar atención a lo que piensen los demás. Quizá si Hyde no estuviera tan enamorado de Gackt sería más feliz conmigo.
Pero no estamos hablando de Hyde ahora. Y Yuuki sigue ahí, semidesnudo y sentado encima de un Kazuki salido. Así que con toda mi valentía me subí a la plataforma, y la otra pareja nos miró interesada, dejando su teje maneje de ''Gacchan quiero mimos'' ''Ahora no, Hyde''.
-¿Usted también quiere divertirse?-Yuuki me miró a mí, y me derretí por dentro
-Sí, quiero-
-Oh, por favor, nena, dime que el travestido arcoiris no se ha subido aquí-Kazuki se quejó al escuchar mi voz
-Sí, estoy aquí-me acerqué y le quité la venda de los ojos de mala manera-Y Yuuki es para mí-cogí de la cintura al moreno y lo aparté de él
-¡Oye!-volvió a quejarse-Si querías un trío no tenías más que decirlo-separó las piernas-Adelante, cuando quieras-sonrió de manera socarrona
-¿Eso quieres, ah? Vas de duro por la vida y realmente eres más sumiso que cualquiera de las putas que te hayas llevado a la cama-entonces me abalancé sobre él y lo besé, atrayéndolo por la nuca con mis manos, mordiéndolo de manera dura, dejando sus labios rojos e hinchados cuando me separé-¿Ves? Estás tan rojo como los próximos labios que pienso probar-miré de reojo a Yuuki-Y yo que tú...por lo pronto iría al baño a solucionar esto-le di un agarrón a su entrepierna-Gatito asustadizo-me separé del todo de él-Lo siento por interrumpir tu espectáculo...Yuuki-esta vez lo iba a besar a él, pero Kazuki me empujó y caí al suelo-¡¿Pero tú eres idiota?!-
Cuando miré en esa dirección; Kazuki estaba besando a Yuuki en mi lugar, y este tenía los ojos cerrados. Monté en cólera... Intenté calmarme mientras me levantaba:
-Kazuki...aparta...-
Dejó de besarlo y lo agarró por la cintura.
-¿Por qué? Pero si es ideal~-
-He dicho que te apartes-
Tanto Gackt como Hyde también se levantaron, y Yuuki se apartó de nosotros.
Esto olía a pelea, y no pensaba perder.