D.L.N
II
7:30am
Kouyou movía suavemente el hombro de un durmiente Yutaka, ya había hecho el desayuno. El niño despertó y luego de estirarse un poco fue cargado por su hermano hasta la mesa
- ¡Buenos días!
- ¡Buenos días onii-chan!
Yutaka sonrió al ver que el desayuno consistía en sándwiches
- Le pusiste mayonesa – señalo el suyo
- ¡Sí! Pero recuerda que no puedes comer mucha, es malo para la salud
- ¡Hehe! – le dio un gran mordisco
- ¡Cuidado te ahogas! Hay suficiente tiempo para comer tranquilos.
Luego del desayuno, donde Kouyou escucho mucho sobre los amiguitos de Yuta y su nuevo sobrenombre
- ¡Ok Kai-chan! ¡Vamos a vestirte que ahora si nos tenemos que marchar!
- ¡Haaaaai!
Ese día Kouyou no vio al moreno de larga cabellera, pero si al castañito que se acerco a ellos apenas llegaron. Un deje de decepción le hizo fruncir sus gruesos labios. Luego se rio de sí mismo por estar anhelando ver a un sujeto que acaba de conocer
*
11:45pm
- No puedo, no puedo, no puedo... – la voz de Takanori se escuchaba bajo la cobija
Yuu a su lado, sentado recostando su espalda en la cabecera de la cama
- ¡Cuenta ovejas! – exclamo sonriente el moreno
- ¿Otochan…? - llamo, ignorando lo que le habían dicho
- ¿Dime…?
- ¿Me compras más dulces?
- Ya te di muchos hoy
- Para mí no, para Kai y Shou
- ¿Y por qué no compartes los que te di?
- Son muy pocos
- Está bien
- Gracias
- ¿Ya te vas a dormir?
- ¡Nop!
- ¡El hermano de Kai es lindo! – continuo el niño
- ¿Ah?
- Eso. Unas señoras en la guardería lo dijeron – aclaro el castañito
- Ah sí…
- ¿Ah sí?
- El es…lindo
- Mmm…estoy pensando en un nombre para él
- Deberías dejar de hacer eso. No ha todos les gusta que le anden poniendo sobrenombres
- ¡Aoi!
Yuu lo miro frunciendo los labios
- Eres demasiado… ¡hehe!
Yuu se inclino a su izquierda y volvió a coger su guitarra posándola en su regazo. Takanori salió de debajo de las sabanas quedando boca abajo apoyando su mentón en sus manos esperando a que las notas musicales de una suave balada inundasen su habitación
Takanori se quedo dormido una hora después entre risas, mientras contaban lo primero que se les viniese a la cabeza a ambos. Desde estrellas hasta camarones, los cuales le dieron hasta hambre
*
Era la primera vez que lo veía desde aquel día, segunda vez por consiguiente
Yuu observo aún desde su auto como Kouyou caminaba cargando a su pequeño hermanito. Sonriéndole y jugueteando con él. Eso le hizo recordar la niñez que tuvo junto al suyo -su hermano mayor- antes de que este se mudara a otra ciudad. Kouyou daba la impresión de ser un muy buen hermano. Y según lo que había entendido, él solo era el que se hacía cargo del morenito debido al fallecimiento de sus padres. Algo muy impresionante en un joven de su edad, ya que estos suelen solo pensar en fiestas y chicas. Kouyou se veía completamente enfocado en su estudio y su hermano
Se bajo, sacando la pequeña mochila del asiento del copiloto, donde había guardado unas cosas que su Taka seguro usaría. Abrió la puerta trasera de la camioneta y con cuidado saco al pequeño que venía recostado, sintiendo el desvelo de la pasada noche. Los ojitos de Takanori se fueron abriendo de a pocos mientras su padre le cargaba. Lo primero que vio fue el rostro de su padre, específicamente su barbilla debido a como le cargaba.
Y otra vez, Aoi se había ofrecido llevar al chico cuando le vio salir de la guardería. Una vez que Taka saliese corriendo, recuperado a asombrosa rapidez del sueño que minutos atrás alegaba tener, completamente despierto, para encontrarse con sus nuevos amiguitos, ambos fueron hasta el vehículo
- No tiene que ser tan amable conmigo. – Exclamo el rubio con una sonrisa apenada – Siempre he tomado el tren, no qui-
- ¡Me agradas! –y de la nada aquellas palabras salieron de su boca. No sabía bien el real significado que tuviesen
Kouyou lo miro de hito en hito hasta que una sonrisa se formo en sus labios
- Usted me agrada también
- No me trates de usted por favor
- Ok. ¡Hehe!
Durante el trayecto Yuu se las ingenio para conversar fluidamente con el chico a su lado. Pudo también, en cada semáforo, notar un poco más de la presencia del chico. Unos centímetros más alto que él, su cabello rubio largo resultaba solo ser largo detrás ya que a los lados parecía ser más corto, vestía jeans oscuros junto a una playera blanca con un sweater largo, dándole un look bien coqueto.
Vio en su rostro, sus mejillas, un ligero sonrojo y fue ahí que se dio cuenta que el chico en efecto era consciente de su…sondeo, a su persona
- Disculpa…
Kouyou solo negó moviendo la cabeza
Ya casi llegaban a su destino.
Yuu estaciono frente al lugar y Kouyou agradeció como la última vez, aunque
Vio al chico sujetar la manija de la puerta ¿Dónde estaba el beso?
En ningún momento se detuvo a preguntarse por qué rayos pensaba en eso
- ¿Hoy no hay beso? – podía jurar que el rostro del chico, cubierto por un mechón, se había puesto rojo
Kouyou trato de calmar la respiración que de un momento a otro le dio por salirse de su patrón normal. Aun con la cabeza gacha giro parte su cuerpo para cumplir con lo “pedido”
Aoi sintió la suave y rápida caricia a su mejilla dada por aquellos gruesos labios
Rio como idiota cuando el chico se bajo completamente azorado
Después cayó en la realidad de que lo que acaba de hacer fue una gran tontería
Arranco en dirección a su trabajo
*
Takanori jugaba a las escondidas con Shou, Kai y el nuevo chico que conocieron un par de horas antes, Sakamoto Takashi, bautizado una hora después como Saga, por el menor de todos. Takanori tenía una agudeza y habilidad no comunes en niños de su edad
El pequeño castañito hizo un mohín sentándose en el suelo acolchado. Esos tontos amigos suyos eran realmente buenos en el juego. Tenía mucho rato buscándolos ya
Bufo y vio como una de las mujeres que atendían ahí caminaba con una bandeja con jugos, la siguió y halo de su vestido para que le diera uno. La sonriente mujer le dio una galleta también y con eso se fue hasta uno de esos asientos grandes y abombados donde se sentó justo cuando frente a él, en la t.v empezaba uno de sus shows favoritos
Quince minutos después.
Takanori reía escandalosamente por lo que veía en la t.v cuando un cuerpo se interpuso en su campo de visión. Alzo la vista y Kai lo veía con el ceño fruncido
- Ruki….
El menor sonrió
- ¡Kaichuu! – Alzo un brazo - ¡Te encontré!
- Si claro… - más atrás de Kai venían Shou y Saga visiblemente molestos también
- ¡No nos buscaste! – reclamo Kai
- ¡Si lo hice! –Exclamo – ¡No es mi culpa que se hayan escondido tan bien!
Luego de reñir por un rato más, los niños se quedaron junto a Ruki viendo el programa con más jugos y galletas que les habían dado
Kai, sentado a su lado, apoyo la cabeza en el hombrito de Ruki bostezando
Luego de eso su día fue con normalidad
A la hora de irse Takanori se llevo de la mano a Kai hasta el auto, Kouyou venia llegando en ese momento cuando los niños le pasaron por un lado. Kai se devolvió, lo abrazo y Ruki otra vez se lo llevo
Kouyou se quedo de pie en la acera. En la camioneta podía distinguir la silueta del conductor y como los dos niños se montaban atrás ¿Que haría ahora? Sería demasiado vergonzoso ver a Yuu-san a la cara
La voz de su hermanito le atrajo, vio las cabecitas de ambos asomadas por la ventanilla
Y tan tenso como estaba camino
Aoi no podía evitar que una sonrisa le bailara en los labios. Desde antes de que se montara en el auto pudo notar el gran sonrojo que traía el chico ¿Por qué? ¿Le habría incomodado lo de la mañana? ¿Cómo se lo podría preguntar? Y más importante ¿Por qué estaba tratando a ese chico como si de una chica se tratase? Porque a él…no le gustaban los hombres ¿No?
- Al fin lo tengo –Takanori se recostó sobre el asiento del copiloto. Kouyou le miro sin entender – ¡Uruha!
- ¿Ah?
- ¡Uruha! Así te llamare. Todos piensan que eres lindo y lo escuche en un cuento.
Kouyou se quedo sin habla
- ¡Hasta papá dijo que eres lindo, así que debe ser cierto!
Kouyou se quedo sin respiración. El chico se volvió a su asiento junto a Kai y Aoi trato de no chocar al terminar de escuchar aquello
¡Bendito Takanori!
*
12:35am
Reita, sentado en la orilla de la cama, se estiraba luego de haber pasado ese exquisito rato junto al pelinegro a su lado. No es que siempre las probara de pasivo, pero con aquel sujeto había estado bien. Muy bien. Condenadamente bien.
Sintió una mano deslizándose por su columna ¿Sería que quería más? ¡Vaya! ¡Habían sido tres veces ya!
La voz del pelinegro le hizo voltear
- ¿Cuándo te volveré a ver?
Reita se puso de pie terminando a si de ponerse sus bóxers, busco donde habían quedado sus pantalones y el resto de su ropa
Sí, estaba ignorando deliberadamente la pregunta del otro
- ¿No me vas a responder?
- …No se – dijo cortante
Akira termino de vestirse y cuando se agacho a recoger sus botas una figura se paro frente a él. Alzo el rostro sin levantarse y se encontró con que el otro no se había tomado ninguna molestia en cubrir aunque fuese un poco su desnudez
- ¡Debería aprovechar un poco más entonces! – el sujeto le alzo por los brazos empujándolo sobre la cama
- Es tarde yo…
El otro no le dejo continuar, apresándolo bajo su cuerpo y reclamando sus labios en otro de esos apasionados y salvajes besos, los mismos que atrajeron a Akira en primer lugar
- Por cierto – bajo por su cuello – ¡Soy Tora!
CONTINUARA
-Grezz-