El que es celoso, no es nunca celoso por lo que ve; con lo que se imagina basta.
Jacinto Benavente
Dramaturgo Español
CAPITULO 10
CELOS
-¡SEBAS-CHAN!- un grito le distrajo e inmediatamente todos los presentes voltearon a ver a quien había interrumpido la tranquilidad en aquel lugar. Aquella chica de largos cabellos azabaches se lanzó sobre Sebastián haciéndole caer de lleno al suelo…
-¿Qué hacen aquí todos ustedes?-
-Disculpe la intromisión, Sebastián-sama, pero Lady Kotomi insistió en venir a verlo- hablo seriamente Gaara, quien no apartaba la vista de cierto moreno de ojos negros, vestido de negro y quien tampoco le quitaba la vista de en sima.
-Waaa, te extrañe mucho, mucho, ¡Sebas-chan!- se restregaba contra el la pelinegra ante la atónita mirada de todos, ya que ambos chicos ahora se encontraban en el suelo y en una posición bastante incomoda…
-Vale… yo también te extrañe, Kotomi-chan- sonreía el ojivioleta y eso fue la gota que colmo el vaso, Naruto se aclaro la garganta lo suficientemente alto como para que ellos escucharan…
-No me interesa que tipo de relación tengas con esta chica, Sebastián, pero por si no te has dado cuenta, seguimos en el trabajo, ¿o a caso ya lo has olvidado?-
-No, en lo absoluto, Uzumaki-san…- puñalada… Naruto se sintió descolocado y frunció el seño, desde que se conocieron, el azabache le había dicho que no quería formalismos, y ahora mismo utilizaba uno con el. Eso era un golpe bajo para su orgullo…
-Waaa… ¿Quién es el chico rubio con carita adorable?- a la morena le brillaban los ojos ahora con corazones en ellos- ¡pero mira que monada!- A todos en aquella habitación les caía una gotita de sudor…- espera un segundo…- se volvió hacia Sebastián quien trago duro- ¿el es tu persona especial?-
-Por supuesto que no- hablo Naruto con un visible sonrojo en el rostro- yo no soy la persona especial de nadie-
-¿Eso es verdad, Sebas?, por que nadie mas que yo puede ocupar tus pensamientos… ¡yo soy tu otra mitad!- inflo los cachetes la chica y se sentó en el suelo de manera infantil.
El murmullo se acrecentó en el lugar, ¿Su otra mitad?, ¿significaba que esa chica y Sebastián eran… novios?
-Hey, ¿Qué pasa ahí?- pregunto Shino un poco extrañado- ¿Por qué no están trabajando?-
-La señorita aquí presente interrumpió las actividades- hablo seriamente el rubio
-¿Actividades?-
-Si, ahora mismo somos mayordomos y…-
-¡¿MAYORDOMOS?!- se escucho un grito por el lugar- Mi lindo Sebas-chan no puede ser mayordomo de nadie- la chica frunció el seño- ¿Cómo es que estos… humanos te obligaron a hacer eso?-
-Kotomi, es un juego…- la reprendió el mas alto para que no fuese a meter la pata…-
-Si es así, ¿yo también puedo jugar?-ô_ôU
-Lo siento, pero como coordinador de este evento, me rehúso- Hablo Shino, quien estaba al pendiente de todos sus “subordinados”- si lo desea, puede participar pero no de esa manera, puede hacerlo como un cliente-
-Vale, ¿y como se hace eso?-
-Escoges a alguien de los mayordomos o sirvientas para que te acompañe a tomar el te o bien solo para disfrutar de su compañía. “¿a caso esta niña no sabe nada?“-
-En ese caso… escojo a ese lindo chico que parece kitsune- sonrió picaramente la morena, para frustración de Naruto.
-Naruto- tomo nuevamente la palabra Shino- atenderás a la señorita, da tu mejor esfuerzo-
-Hai…- suspiro el rubio resignado y con una reverencia, le indico en donde se podía sentar- Bienvenida al Usagi Maid Butler Café, ¿Qué se ofrece, ama?...- y aquí comenzó su calvario…
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Una muy furiosa pelirrosa (maldita zorra barata… ejem, lo siento, continuemos con el fic…), se encontraba en el baño maldiciendo en voz alta a la morena que la había dejado en ridículo frente a toda la escuela.
-Esa zorra… juro que me las va a pagar…-
-Calmate querida, diciendo esas palabras al viento no lograras nada… a demás- hablaba su mejor amiga Ino- si sigues haciendo esas caras, te saldrán arrugas muy pronto…-
-No puedo calmarme Ino, esa perra me hizo quedar mal…Osh…-
-Sakura, Ino…- entraba al baño una agitada Temari- ¿adivinen que?-
-No estamos de humor, habla ya…-
-Ya se quien esa chica…
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Quince minutos y nada… El ambiente estaba tan tenso que si alguien se ponía a jugar con un cuchillo podría escuchar como se cortaba en aire. Naruto no dejaba de sonreír aun que por dentro se estuviera comiendo sus entrañas…
La chica frente a el, tenia los codos apoyados en la mesa y la cara entre sus manos, tenia esa expresión de quien a matado un pajarillo y lo tomara como una broma maliciosa. Hacia unos minutos que se habían presentado formalmente, sin embargo, Naruto, antes de conocer siquiera su nombre, ya le tenía resentimiento…
“Nadie mas que yo puede ocupar tus pensamientos”
Eso había dicho ella y eso había sido muy cruel, claro que esa chica no lo sabia por que seguramente se ganaría sus burlas por poner los ojos en su “novio”, ya que al menos eso había entendido el…
-¿y… no piensas hablar, lindo kitsune-chan?-
-No soy un kitsune, y… ¿Qué quieres que te cuente?- disimuladamente, El ojiazul miraba a Sebastián que pronto terminaría su turno con la mesa que atendía actualmente. Kotomi sonrió.
-¿Estas enamorado?-
-¿perdón?-
-No respondas con mas preguntas… ¿estas enamorado?- Naru la miro detenidamente y por un segundo volvió a desviar la mirada hacia Sebastián quien también le observaba. Un sonrojo visible apareció, rápidamente agacho la cabeza para tratar de ocultarlo, aun que fue en vano por que aquellos ojos violetas no dejaban de verle.
-Yo… no lo se…-
¿En verdad no lo sabia? O, ¿simplemente no quería aceptarlo?, el rubio no dejaba de darle vueltas al asunto, era extraño, hacia un par de días se aferraba a la idea de no dejar de amar a Sasuke quien termino tratándole como basura. Y en ese momento apareció Sebastián, alguien parecido un poco físicamente a su Ex, pero muy diferente al mismo tiempo, su forma de ser era lo que mas le llamaba su atención…
-Nee… Kitsune-chan,-ahora Kotomi sonreía mas maquiavélicamente-¿te gusta Sebastián?-
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¿Frustración, tristeza o quizá molestia?... ¡va!, en realidad no le interesaba mucho lo que sentía en esos momentos, solo quería hablar con Naruto, explicarle que no había sido su intención besarlo, que se declaro antes de tiempo y que por eso, el ahora mismo, ya no estaba seguro de lo que sentía…
-Ya termine con mi trabajo, Aburame-kun-
-Bien hecho Sebastián-san, ahora puede relajarse un momento, gracias por su arduo trabajo-
El moreno se levanto de la mesa y se estiro por un momento, salio de aquel lugar no sin antes mirar por enésima vez a la razón de sus desvelos y comenzó a caminar por los pasillos, se aflojo un poco la corbata, la verdad era que aun que aquel traje le parecía elegante, no dejaba de ser algo incomodo usarlo, sobre todo por que los mayordomos vestían, de donde el venia, una túnica gris. Suspiro con cansancio. Necesitaba mojarse la cara…
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¿Había escuchado mal?... si seguramente había sido eso, tenia que haber escuchado mal, por que si no, acababan de meterlo en un dilema bastante “grueso”…
-No piensas responderme, Kitsune-chan?- pregunto en forma burlesca la chica que miraba a un sorprendido y colorado rubio- ¿te gusta Sebas-chan?-
No, definitivamente no había escuchado mal, los colores se le subieron a la cabeza, se había puesto rojo hasta las orejas y ahora no sabia como salir de ahí… maldijo mentalmente a los dioses y a su tan odiado mal karma…
-N-no se a que t-te refieres, Kotomi-san…- y ahora se delataba, ¡genial!, los dioses se burlaban en su cara…
-A mi no me engañas, Naru… a ti te gusta mucho Sebas-chan, se te nota a leguas de distancia…- El rubio la miro con detenimiento, pareciera que a esa chica no le interesara que estuvieran hablando de su novio…- je, je, pero bueno, a quien lo de gusta Sebas-chan si es tan guapo y atlético, sin mencionar que tiene unos brazos grandes y fuertes y un trasero de infarto…- Naruto frunció el seño
-¿de que hablas?, el no es un trozo de carne, ¿sabes?, no deberías de hablar de tu novio de esa manera, ni mucho menos, restregarle en la cara a los demás lo bueno que esta… llegar a un lugar y gritar a los cuatro vientos “que nadie mas que yo puede ocupar tus pensamientos… ¡yo soy tu otra mitad!”- ante esto ultimo no pudo evitar sonrojarse. Kotomi soltó una sonora carcajada.- ¿Qué es tan gracioso?-
-Nada…- Kotomi se apretaba el estomago para no seguir riendo tan locamente- Mejor, ¿Por qué no vas a buscarlo y que el te explique todo?, por que creo que no entendiste nada. Naru-chan…,
-Cerberus-san no tiene por que explicarme nada…creo que todo quedo muy claro…- agacho la cabeza derrotado-
-Yo te lo digo por que el se siente igual que tu…a el también le gustas…
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Abrió el grifo y el agua comenzó a salir. Pasó sus manos por debajo de esta y se estremeció ante lo fría que estaba. Rápidamente se mojo la cara y suspiro otra vez.
El tenia un claro objetivo, encontrar el sello demoníaco, y si era así, ¿Por qué se vida se había complicado tanto?, es decir, ahora no solo era encontrar a quien se había robado el sello y llevarlo ante la triada, también tenia que pensar como hacer para arreglar las cosas con Naruto…
Naruto… ese chico había entrado a su mundo por un descuido (recordemos que Naru es experto en tropezarse y en uno de esos accidentes conoció a Sebas…) y desde ahí había comenzado todo. Ver sus expresiones: su risa, cuando se sonrojaba, cuando hacía uno de esos berrinches por algún comentario de Sai… y era extraño por que eso solo sucedió en un par de días, y le agradecía al destino por haber puesto en su camino al rubio…
“Los demonios son bajos, se aprovechan del dolor de los seres humanos… los enajenan, los engañan para obtener lo que mejor les convenga…los acosan, toman su cuerpo y finalmente, su alma… es un ciclo que nunca termina…”
-Es un ciclo al que debemos acostumbrarnos…-
“Todo lo que un demonio vive es una ilusión, las promesas que hace, los sentimientos que tiene… por eso es mejor no hacer lazos con nadie, mucho menos con los humanos: ellos son frágiles, mueren con facilidad, son fáciles de engañar, y pueden llegar a ser tan bajos y ruines como un demonio…”
Eso lo sabia y lo tenia muy presente, en toda su existencia, había conocido humanos de toda clase, desde miserables hombres que se pudrían en dinero y que aun así su avaricia no cedía, hasta aquellos que anhelaban una miga de la mesa de esos ricos y añoraban hartarse con las sobras que estos dejaban
-pero… el… Naruto es diferente a los demás…-
“Naruto es el motivo por que continuo en este lugar…”
-Me pregunto por que un chico tan lindo como tu, esta tan solito en un lugar como este…- una pelirrosa sonreía de manera seductora a su ahora, nueva presa…
[FLASH BACK]
-Sakura, Ino…- entraba al baño una agitada Temari- ¿adivinen que?-
-No estamos de humor, habla ya…-
-Ya se quien esa chica… su nombre es Kotomi y según entendí, conoce a un tal Sebastián, de la clase del rubio idota del Uzumaki…-
-¿Quién te lo dijo?-
-Sasuke, al parecer se tropezó con ella y con otras dos personas, la chica es nueva, se suponía que hasta regresando de vacaciones entraría oficialmente, pero parece que decidió hacernos una visita anticipada…-
-¿y eso en que nos ayuda a nosotras?, queremos venganza Temari, no saber de las transferencias de la escuela-
-Pues, aféctala indirectamente, amor, seduce al chico que busca con desespero y que según se, no esta, para nada mal…-
-¿no sabes que tan importante es ese chico para ella?-
-Lo suficiente para que la mates de un infarto por celos…- sonrió presuntuosamente Temari- ¿y, que dices?-
-Manos a la obra entonces- sonrió maliciosamente la pelirrosa
[FLASH BACK END]
-Disculpe, pero según se, al baño de los hombres no se le permite la entrada a las chicas… lo que hace esta fuera de lugar, fuera de las reglas…-
-Amor, las reglas se hicieron para romperlas…- Sakura se acerco hacia donde el se encontraba, lo suficiente para sentir su respiración- nunca me imagine que fueras tan lindo, Sebastián…- se mordió los labios de forma sensual (pluagh… ¡Esto no es un simulacro, repito, esto no es un simulacro, sálvese quien pueda!)
La pelirrosa pasó sus manos por los hombros del moreno sintiendo los fuertes brazos. En tanto Sebastián sintió ese sentimiento: egoísmo, el egoísmo que guardaban los humanos en lo profundo de sus corazones, pero no fue cualquier cosa, aquella persona emanaba no solo egoísmo, sino desprecio, arrogancia y maldad…
Se tenso en seguida y quedo por un segundo consternado… segundo que Sakura aprovecho para acercarse a el y tratar de besarlo…
-Sebas… tián…-
-Naruto…-
[FLASH BACK]
-Cerberus-san no tiene por que explicarme nada…creo que todo quedo muy claro…- agacho la cabeza derrotado-
-Yo te lo digo por que el se siente igual que tu…a el también le gustas…
Inmediatamente después de que le dijera eso, su corazón volvió a latir fuertemente y sus esperanzas renacieron otra vez, se levanto de la silla y sin decir más, salio corriendo tratando de alcanzar a Sebastián.
Sonreía, corría por los pasillos de la escuela y sonreía otra vez, sus ojos emanaban ese brillo especial que hacia semanas había perdido gracias al bastardo de su ex novio… muchas veces, durante las noches se cuestionaba si en verdad lo había llegado a amar, o solo se aferraba a el por temor a estar solo, como siempre lo estuvo cuando aun era un niño… y ahora que ya pensaba con la cabeza mas fría, se había dado cuenta que decía amar a alguien que no valía la pena…
“Cuando te detienes a reflexionar si amas a alguien, es cuando ya no sientes nada por el…”
En algún momento de su vida había escuchado esa frase de labios de Hinata y ahora sabía cuanta razón tenia…
Vio como el moreno doblaba y entraba a los baños, se detuvo por un momento para tomar aire, y se volvió con una sonrisa, misma que se desvaneció cuando Sakura Haruno entre detrás de el… apresuro el paso y cuando estaba en la puerta trago duro, la abrió de golpe y ahí estaban los dos… abrazados y a punto de besarse…
[FLASH BACK END]
-Lo siento, pensé que no había nadie…- ensombreció el rostro salio corriendo inmediatamente de aquel lugar siendo observado en todo momento por una chica ojiverde un poco extrañada, se giro entonces para ver a Sebastián de frente
-ahora, ¿en donde nos quedamos…?- sin darle tiempo a terminar, el moreno la sujeto por las muñecas y la aparto bruscamente… - ¿Qué te pasa?, Sueltame me haces daño…-
-No todos los hombre son como el infeliz del Uchiha, no a todos los puedes seducir de esta manera tan baja… ¿Por qué no te respetas un poco?...- y sin decir mas, salio corriendo detrás del rubio.