“Como un vaso albergaste infinita ternura,
y el infinito olvido te trizó como a un vaso.”
-Pablo Neruda-
CAPITULO 7
MI PERSONA ESPECIAL
Había despertado temprano, como todas las mañanas. De alguna manera la poca acción de los últimos meses, aunado al hecho de que no podía “comer” normalmente, le hacia sentirse cansado, y a veces, hasta frustrado. Pero no podía hacer nada de eso, lo que menos quería en ese momento, era levantar sospechas sobre su verdadera naturaleza.
El agua recorría su piel desnuda. Delineando de manera casi irreal, aquel cuerpo de bien formados músculos. Su piel blanca, apenas se distinguía del vapor del agua…
[FLASH BACK]
-¿Estas bien, Naruto?-
-Claro- se levanto presuroso y con la cara hecha un tomate, sin embargo, no dejo pasar por alto aquel bombeo en su corazón –“me prometí a mi mismo no sentir nada mas por nadie”…-“se decía mentalmente- “si no quieres volver a sufrir, no te enamores otra vez… aguanta Naruto…”-
[FLASH BACK END]
“No sentir nada más por nadie… Si no quieres sufrir otra vez, no te enamores… “
Desde aquel primer día en el que habían chocado por accidente, no había podido sacarlo de su mente. Naruto Uzumaki era un chico que había sufrido por un amor no correspondido, o al menos eso había entendido por lo que le había dicho Sai.
“Es como un ángel con las alas rotas…”
Se dijo en ese momento, ¿Cuánto dolor soporto?, ¿por cuantas humillaciones habría pasado ese chiquillo de mirada ingenua y hermosa sonrisa?
“Y sin embargo no pierde su buen animo… es… diferente de los demás humanos”
Y se dio cuenta ese mismo día cuando por segunda vez, choco de frente con el, al contacto de ambos cuerpos le sorprendió y le gusto… algo en su interior creció… algo que alguien como el, estaba seguro, no podría sentir…
“Todos los seres humanos despiden un aura de frivolidad, de egoísmo, que guardan en sus vacíos corazones, por eso no nos acercamos a ellos, por que esas sensaciones son similares a arder en vida en el infierno…”
Pero el era diferente. Muy diferente de los demás, ese chico no despidió ninguna aura egoísta ni frívola, no despedía ningún sentimiento vació… Naruto Uzumaki, era calido…Y quizá por eso su atención se desvió al rubio.
En sus miles de años en ese mundo, el gran Duque Astaroth nunca conoció a persona parecida. Siempre a hombres y mujeres con deseos de poder, de vida. Personas que nunca se conformaban con lo que tenían, personas que se maldecían por su suerte, por su forma de vida… nunca creyó que alguien como el aparecería.
Quizá por eso su corazón latía fuertemente cada vez que le veía, cada vez que se acercaba a el… y ese sentimiento, en lugar de molestarle o incomodarme, le gusta…
“Naruto Uzumaki… me gusta”
No… quizá era mucho mas que eso… quizá, por primera vez en toda la historia demoníaca, uno de los principales pilares del inframundo, había cedido a sus propios caprichos… quizá, existía esa pequeña posibilidad, de que el, Sebastián Cerberus, se hubiera enamorado de Naruto Uzumaki, ni siquiera el mismo lo sabia a ciencia cierta, pero lo que si sabia, era que el era muy especial…
“Quizá, sea mi persona especial…”
-DOCUMENTO DE TRANSFERENCIA EDUCATIVA-
PREPARATORIA KONOHA
TOKIO, JAPON.
NOMBRE DEL SOLICITANTE:
SEBASTIAN CERBERUS
EDAD:
17 AÑOS CUMPLIDOS
RESIDENCIA ACTUAL:
BORDEAUX, FRANCIA
MOTIVO DE TRANSFERENCIA:
PERSONAL (FAMILIAR)
ESTANCIA:
TEMPORAL
Nada, leyó por enésima vez. Nada relacionado al incidente de la tarde anterior, ni en los periódicos, ni en las noticias, mucho menos en Internet y eso era extraño.
Suspiro con pesadez, creía que quizá, al revisar el expediente de transferencia del “idiota ese” podía descubrir algo que le dijera como había hecho aquello…
[FLASH BACK]
-¡No juegues con nosotros!- aquellos hombres se lanzaron al ataque, sin embargo, antes de que pudieran darse cuenta, todos ellos iban cayendo con los brazos rotos, ante la atónita mirada de Sasuke…
-“¿Cómo lo hizo sin siquiera tocarlos?”-
-Se los advertí…-decía sin deje de preocupación, para continuar su camino…
-“¿Quién demonios eres… Sebastián Cerberus?”-
[FLASH BACK END]
Se levanto de la silla y salio apresuradamente de la biblioteca, ahora mismo tendría una reunión con los del consejo escolar para lo del fin de cursos… algo bastante molesto ya de por si…
(DOS HORAS DESPUES)
-¿festival escolar?-
-Así es, Sebastián-san, el consejo decidió que este año se llevara a cabo un festival escolar, y si nos va bien, una cena baile en un lugar cerca de aquí. Por eso mismo, debemos organizarnos, ya que necesitamos sugerencias para el tema de grupo-
-¡Kosupure-kei Inshokuten!- grito una chica de coletas y ojos café claros
-¿un maid café?-
-Si… pero no uno cualquiera, sino uno de anfitriones- sonrió de manera divertida una chica de cabellos castaños atados en dos chongos (no se si así se diga… -.-U) en la cabeza.
-¿Te das cuenta de lo que estas hablando, Ten-ten?... a demás, eso no es un maid café, es un “Butler café”…- pregunto un muy preocupado presidente de clase, su nombre era Shino, Aburame Shino
-pues yo concuerdo con Ten-ten…- hablo entonces una chica con corazones en los ojos… fanática del yaoi, obviamente… (“yaoi mode on…”)- a demás, tanto chicos como chicas, tenemos muy buenos candidatos…-
- Sin mencionar que esta claro que el motivo de este festival escolar es recaudar fondos para el baile del cual nos hablaron, ¿no es cierto?-
Shino se preguntaba si ese día había lago extraño en el ambiente… ¿A caso todas chicas pensaban igual?, ¿todas eran fanáticas del yaoi? (…creeme amigo… el yaoi dominara el mundo…XD)
-¿Alguna otra sugerencia?- pregunto el presidente pidiendo que alguien tuviera otra no tan descabellada idea… sin embargo, nadie mas levanto la mano… ¡¿a caso todos creían que era buena idea?! Suspiro con pesadez- Vale, entonces se queda el “Butler-maid café de anfitriones…”-
Al fin la campana que anunciaba el descanso, había sonado. Ahora mismo, Naruto, Sai y Sebastián caminaban hacia el jardín para disfrutar de su almuerzo.
-¿Con que un “Butler-maid café de anfitriones”, eh?-
-Nee, Naruto-kun, ¿nunca has entrado a un café así?-
-solo había escuchado hablar de ellos…- Sai, sonrió de medio lado
- entonces, ¿nunca has visto a nadie en cosplay sirviendo café?- la mirada de Naruto se desvió hacia donde se encontraba Sebastián, quien ahora sacaba dos latas de sumo de la maquina despachadora. Sai, quien estaba atento a las miradas que su rubio amigo le regalaba al azabache, sonrió con ternura (bastante extraño en Sai), ya que se dio cuenta que quizá ese chico podría sacarlo del sufrimiento que había causado el Uchiha bastardo- ¿Puedes imaginar a Sebastián vestido de mayordomo sirviéndote un rico café?-
-IMAGINACION DE NARU MODE ON-
Con un fondo rosado, un hombre joven de cabellos negros, sonreía seductoramente a un rubio quien esperaba impaciente a la mesa, un café humeante, que traía en una charola. El joven rubio abrió los ojos como platos… Sebastián, vestido únicamente con un pequeño mandil, se acercaba a el…
-¿Desea algo más, amo?...- y su voz… esa voz tan sensual…
-IMAGINACION DE NARU MODE OFF-
-¡Sai no me hagas pensar en cosas innecesarias!- grito el rubio tratando de controlar su hemorragia nasal, debido a su lujuriosa imaginación.
-Pero si yo no he dicho nada malo-
De pronto, Naruto resbalo al pisar una cáscara de plátano (no pregunten de donde salio… solo salio). Aquella caída parecía en cámara lenta. El rubio cerro los ojos por inercia, sin embargo, su cuerpo no cayo al suelo, algo calido lo sujetaba en un abrazo protector…
-S-Sebastián…- *///*
-¿estas bien?, ¿no te hiciste daño?-
-I-ie… yo no…- no podía apartar la vista de aquellos enigmáticos ojos que lo cautivaron desde el principio…-“¿Qué me pasa?, ¿Por qué mi cuerpo se acalora así?... Sebastián es tan guapo…”- eran los pensamientos del rubio, mientras que ambos cuerpos se acercaban cada vez mas… era como la atracción de un magneto para con el hierro, simplemente inevitable…
Se sentía acalorado, su cuerpo no le respondía. Quizá su situación no era la mejor: estaba en brazos de un chico quizá más atractivo que el Uchiha, se estaban acercando lentamente, y claramente su cara estaba hecha un tomate, podía sentirlo. Miro con ensueño aquellos labios delgados, esos endemoniados labios que le incitaban, que se le insinuaban…
Y pronto, aquel contacto se hizo presente, solo que…
-Estas muy rojo Naru, ¿no tendrás fiebre?- los labios de Sebastián fueron a parar a la frente de Naruto, eran calidos y suaves.
Abrió los ojos y se sonrojo mas de lo que ya estaba, se separo del aludido que sorprendido, le miraba detenidamente.
-¡p-por supuesto que estoy bien, BAKA!... “¿Que hago?… ¿Qué estoy haciendo?... yo… yo no puedo enamorarme… no otra vez…”-
Naruto salio al jardín rápidamente, seguido por un par de miradas; sus amigos no le quitaban la vista de en sima…
-Dime algo, Sebas-chan-
-¿Que pasa?-
-¿Qué piensas de Naruto?-
-¿Que pienso?-
-¿tu sientes algo mas que atracción por el?-
-Ahora mismo no lo se, Sai…- el de ojos negros se volvió a ver a su amigo con detenimiento- solo se… que Naruto es, quizá, mi persona especial…