Que pensarías cariño si yo te dijera
que con tus caricias has secado los ríos de pena y tristeza,
que en tu mirada he viajado al profundo infinito
y que con tus besos has provocado nuevos instintos
¿QUE PENSARIAS?
Anónimo
CAPITULO 8
MIS SENTIMIENTOS POR TI
Corría por los pasillos de la escuela. No había podido bajar el condenado color rojo de su rostro. Mira que hacerle creer que… que…
-¡Waaa!, tengo que dejar de pensar en eso…-
Rápidamente entró al baño de la segunda planta, suspiro con alivio y ser acerco a los lavabos. Mojo su cara con el agua fría que salía por el grifo… Ya que aun cuando lo hacia, no podía evitar recordar lo sucedido hacia apenas nada…
-“¿Por qué me sentí así?... mi cuerpo sigue caliente…”- se tocaba la frente. Dio un profundo suspiro nombrando a quien le ponía de los nervios desde su llegada-…Sebastián…-
-¿Qué hace un chico de 2do año en los baños de los grados superiores?- se volvió sorprendido. Frente a el, con una visible cara de molestia, se encontraba Sasuke- ¿sabes que está fuera de las reglas lo que haces?-
Naruto se tensó en ese momento, ¿por que cuando sus dudas eran tan grandes, tenia que aparecer precisamente el? (esta también es experiencia propia… en serio, el universo me odia o simplemente tengo mal karma…)
-L-lo siento- agacho al cabeza, Sasuke le miro con detenimiento.
-Dime una cosa, Naruto…-abrió una llave para lavarse las manos- ¿Qué sabes sobre ese tipo… Sebastián…?-
-¿Por qué lo preguntas?-
[FLASH BACK]
-¡No juegues con nosotros!- aquellos hombres se lanzaron al ataque, sin embargo, antes de que pudieran darse cuenta, todos ellos iban cayendo con los brazos rotos, ante la atónita mirada de Sasuke…
-“¿Cómo lo hizo sin siquiera tocarlos?”-
-Se los advertí…-decía sin deje de preocupación, para continuar su camino…
-“¿Quién demonios eres… Sebastián Cerberus?”-
[FLASH BACK END]
-No, por nada… solo, deberías tener cuidado…-
¿Qué?... había escuchado mal… ¿Sasuke Uchiha le había dicho… deberías tener cuidado?, ensombreció el rostro, sintió una opresión grande en el pecho…
-¿Me pides que tenga cuidado de un chico que se preocupa por mi… que me cuida…?, de quien debería tener cuidado es de ti… de alguien que abofetea a los demás no solo con golpes… sino con palabras, de alguien que no conoce el significado de la palabra amor…-
Sasuke lo tomo por la mano y lo jalo hacia la pared, esto hizo que a Naruto le doliera un poco la espalda e hizo que soltada un leve quejido.
-OH si… es verdad…de quien debes tener cuidado es de mi…-se acerco peligrosamente al cuello del rubio-…del maldito que te golpea…- paso su mano por debajo de su camisa tocando suavemente su piel -del que te toma a la fuerza… ¡de alguien que jamás te amo!- se burlo en el oído del ojiazul
-Sueltame…- los ojos del rubio comenzaron a llenarse de lágrimas… mientras aquellos dolorosos recuerdos, regresaban…
[FLASH BACK]
Eran cerca de las 5:30 de la tarde, Naruto estaba terminando de preparar la cena. Aquel día, cumplían cinco meses desde que Vivian juntos. Sonrió satisfecho ante aquella mesa llena de ricos platillos a la vista…
-Ojalá le guste…- se dijo mientras sus hermosos ojos azules despedían una luz increíblemente natural y hermosa…
-.-.-.-.-.-.-.-
Veía el reloj por enésima vez, era cerca de la media noche y Sasuke no aparecía. El rubio se estaba quedando dormido sobre el sofá, cuando escucho un ruido que lo hizo levantarse rápidamente. Frente a el, casí siéndose de borracho, se encontraba Sasuke.
Paso su mano por su pecho, Sasuke nunca tomaba, desde que comenzaron a salir, es mas, apenas sentir el olor del alcohol le mareaba…
-Sasuke… ¿Por qué estas tan mal?- se acerco al moreno para tomarlo en brazos y llevarlo a la habitación. Sin embargo, antes de siquiera tocarlo, este le aparto bruscamente con un manotazo…
-No me toques… todo… todo esto es tu culpa…-
-¿de que hablas…?- pero sin siquiera dejar que terminara lo agarro con fuerza y comenzó a quitarle a ropa como un salvaje… dejando a su paso marcas y moretones en su piel tostada… Naruto trato de defenderse sin éxito alguno, ya que cuando trataba de separarse del moreno, este le daba algún golpe en la cara…
-.-.-.-.-.-.-
El cuarto estaba en penumbra, solo la tenue luz de las lámparas de las calles se colaban por las ventanas. En el suelo, un florero roto podía apreciarse con facilidad. En un rincón, con los ojos hinchados por el llanto, y el labio roto, se encontraba Naruto, envuelto en una sabana blanca, completamente desnudo, en su piel trigueña, podían observarse claramente algunos moretones y chupetones causados por el encuentro con su pareja hacia apenas unos minutos.
El azabache le observaba impasible. Con desespero dio la última calada al cigarro que tenia en las manos… Rápidamente lo apago en un cenicero que se encontraba en un buró. Y camino hacia donde se encontraba el rubio aun sollozando…
-Lo siento…- dijo acariciando la mejilla contraria- es por tu propio bien, mi lindo kitsune…-
[FLASH BACK END]
-Basta… por favor…- amargas lágrimas salían de los azules orbes del rubio.
-¿sabes que cuando pones esa expresión, menos quiero parar...?- lamió descaradamente el cuello moreno
-“sálvame, Sebastián”-
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-Sai no encuentro a Naruto- dijo Sebastián quien regresaba del salón de clases- ¿sabes en donde puede estar?- preguntaba el moreno ya que minutos después de que su amigo saliera corriendo a quien-sabe-donde, no lo había vuelo a ver…
-quizá en los grados superiores… en los baños, aun que esta prohibido, Naru nunca entiende…-
-¿grados superiores?- Sebastián abrió los ojos en desmedida- ¿en donde puede encontrarse al Uchiha por accidente…?- ambos fruncieron el seño
-Mierda…-
Comenzaron a correr desesperadamente hacia la segunda planta, ahí, en donde los baños de los grados superiores se encontraban.
Sebastián frunció el seño entonces, sabia que el rubio estaba en peligro, ¡maldición!, podía sentirlo… un deseo de venganza comenzaba a crecer en el, debía hacer algo, sin embargo, desplegar sus poderes con Sai ahí, era algo muy peligroso.
Se detuvo de golpe haciendo que su amigo chocara con el.
-Sai…-
-¿Qué pasa, por que te detienes?- El de ojos negros miro a su compañero inquisitivamente y abrió los ojos con sorpresa- “¿no eran violetas los ojos de Sebastián?”- pensó, ya que ahora mismo, tenían un tenue color azul… El sueño le invadió por completo, su cuerpo parecía mas pesado de lo normal…
No supo cuando perdió el sentido…
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Un golpe hizo eco en aquel baño apartado de las aulas.
-¡Te he dicho que eres mío…! ”…siempre lo serás…”- Sasuke había perdido la razón luego de minutos de forcejear con Naruto.
-Basta… ¡por favor, Sueltame!- ahora el rubio lloraba amargamente mientras su labio no dejaba de sangrar- te odio… ¡te odio!...-
Aquellas palabras dolían en lo profundo de su ser… ¡Ese mocoso no sabia lo que decía!, el había hecho todo eso por su propio bien –el de Naruto- por que prefería que el cuerpo del rubio fuese marcado por sus golpes, antes de que su familia le pusiera un dedo en sima.
Alzo la mano, dispuesto a dar una segunda bofetada, sin embargo, alguien lo detuvo, una mano que apretaba cada vez más fuerte…
-Escucha bien lo que diré, Uchiha Sasuke: Nunca, en tu miserable vida, le vuelvas a tocar un solo cabello a Naruto…- el mencionado frunció el seño
-¿Quién te crees para darme ordenes?- Sebastián, furioso, apretó el agarre y lo lanzó lejos, haciendo que el otro chocara con los lavabos, golpeándose fuertemente la espalda.
El ojivioleta se agacho para tomar al rubio en brazos, quien al verlo, lloro y se acurruco en su pecho, quedándose dormido casi al instante, ya que aquella escena había sido sin duda, muy cansada para el. Sebastián por su parte, vio al Uchiha de reojo, quien se estaba parando con algo de dificultad.
-Bastardo… tu no tienes nada que ver con esto, ¡así que suelta a ese sucio marica de una vez!-
-Dime Uchiha, ¿has estado en el infierno alguna vez?-
-¿Qué mierdas dices?-
-Por que yo si…- Sebastián sentía su sangre hervir- y creeme…- sus ojos violetas, ahora eran de un azul profundo, un azul que detonaba ira, sed de sangre…- Que todos esos gritos de terror, todos esos alaridos de dolor, toda esa sangre y esas lagrimas, no se comparan con lo que te haré si lo vuelves a tocar, ¿me escuchaste?- Sebastián salió rápidamente del lugar, sabia que si perdía la cabeza, lo mas seguro es que de ese bastardo mal parido de Uchiha Sasuke no quedara ni el apellido…
El Uchiha sudaba, sentía que su corazón saldría disparado en cualquier momento, esos ojos…
-¿Quién es… quien demonios es? Apretó fuertemente los puños y golpeo el suelo- esos ojos… esos malditos ojos… ¡Demonios!-
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Ya era muy tarde, las 8 o las 9, en realidad no lo sabía y mucho menos le importaba. Veía de reojo al chico rubio que en esos momentos dormía sobre la cama de la enfermería. Había curado sus heridas, trato de hacerlo lo mejor que pudo como un humano ordinario y no con sus poderes.
Naruto se removió un poco, el se levanto de la silla en la que estaba y se sentó en la cama, a un lado de el. Lo miró mas de cerca, Naruto era la persona mas hermosa que jamás en su vida hubiese visto:
El cabello rubio estaba un poco revuelto, su rostro, mostraba una impecable serenidad, sus labios, eran delgados y se imagino, también suaves, su piel trigueña invitaba a ser tocada, trago duro, el estaba acostumbrado a tomar todo cuanto quería, pero esta vez era diferente, Naruto no era como los demás, el era especial, demasiado especial. Acerco su mano a la mejilla contraria pero paro en seco cuando vio como Naruto abría lentamente los ojos.
-¿Sebastián?-
-¿estas bien?, ¿Cómo te sientes?-
-Yo estoy bien, ¿en donde estamos?-
-En la enfermería, aun que ya es un poco tarde- Naruto vio a su alrededor y se dio cuenta de que afuera, ya estaba oscuro
-¿Qué hora es?-
-Como las 8 o 9, en realidad no lo se a ciencia cierta, dime Naruto, ¿ese infeliz te tocó?- Naruto ensombreció el rostro
-no… llegaste justo a tiempo-
-Sai me dijo que entre tu y el… bueno… que ustedes… que no la pasaste tan bien- Naruto no le respondió, se acomodo en la cama quedando sentado y se abrazo a si mismo.
-Es verdad… por eso no pienso enamorarme nunca mas, no quiero arriesgarme a sufrir de la misma manera…-
-Pero no todos somos iguales…- el rubio le miro intrigado- yo se que el no supo apreciarte, que no supo ser lo que tu necesitabas, se que no fue lo que esperabas, pero no tienes por que decir que no te volverás a enamorar…-
-Sebastián…-
-Naru, no debes cerrarte al amor- sonrió de manera tierna- dicen que quien te ama de verdad, nunca te hará llorar, yo pienso lo mismo…- y lentamente, se acerco al rubio depositando un tibio y calido beso en sus labios, sintiendo la suavidad que ellos le regalaban, sintiendo, que poco a poco, aquella “persona especial”, se convertía en su “persona vital”…
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-por fin te encontré… Sebas-chan…- se escucho en aquella fría noche, una risa divertida…