Miraba la ventanilla como niño encantado por ir de viaje con sus padres- Tal vez si se quita las gafas podría ver mejor los colores- dijo el chofer quien le miraba por el retrovisor
-Dirás que soy un ridículo pero hace mucho que no veía un paisaje semejante- quitándose las gafas
-Pues entonces disfrútelo joven Shiroyama
Siguió mirando- Odio tanta formalidad y eso del apellido y demás- exhalo
-En su mundo señor Shiroyama es lo más normal
Se quedó pensando unos minutos- Mira eso es una vaca?- dijo emocionado para después hacer una larga pausa- Crees que nos acostumbremos?
-Disculpe? Que si se acostumbraran? Yo creo que todos nos acostumbramos a todo señor- mirándole al mismo tiempo que giraba el auto- solo es que tan dispuestos estemos al cambio- me explico?
-Completamente- sintiendo que el auto se detuvo- es aquí?
-Si es aquí señor, aquella casa que se ve al final de este camino
-Es pequeña- dijo bajando la ventanilla
-Si me lo permite señor comparada con su mansión toda casa de por aquí es pequeña
-No exageres- dijo sonriendo para después bajar del auto- Vaya- dijo inhalando profundamente- hasta el aire es diferente aquí
-Es un tanto más limpio señor- dijo entrecortado por el esfuerzo de sacar las maletas del auto- La mudanza no tardará en llegar. Dentro hay gente que le servirá dos personas para ser exactos
-Dos para tan pequeña casa
-Fueron las ordenes que no dieron señor
-Yo no di ninguna orden- dijo entrando a la casa
Por dentro la casa era bastante agradable. Tenía una pequeña sala y un comedor para cuatro personas. La cocina estaba detrás del comedor y tenía una puerta que daba a un pequeño pero simpático jardín- es un concepto interesante- subió las escaleras y encontró dos recamaras- supongo que esta es- abrió la puerta y encontró a dos chicas- Está todo bien?- pregunto al ver la cara de espanto de ambas
-Jamás habíamos cargado maletas tan pesadas señor- dijo una de ellas mientras que la otra se escondía
-Oh ya veo- dijo sonriendo- Permítanme- alzando la maleta- Ya está. Les ofrezco un disculpa hay veces que exageramos nuestro equipaje
-No... No se preocupe por favor es culpa nuestra por ser tan débiles- rieron- yo soy Lena y ella es Vera y estaremos aquí a su servicio
-Ok muchas gracias Vera y Lena- dijo riendo- Ambas empleadas no podían dejar de ver lo atractivo que era su nuevo patrón- Y por aquí hay una plaza o un no se bar o algo para divertirse?
-En domingo?- pensó Vera
-Hoy si hay plaza, nosotros iremos verdad Vera
-Ah sí es en una hora más o menos en lo que hacemos la lista
-Bien entonces me pondré algo más cómodo e iré con ustedes- dijo cerrando la puerta del baño
Los minutos pasaban mientras el agua de la regadera le recorría todo el cuerpo. Por alguna extraña razón estaba muy cansado al grado de poder salir del baño y tomar un largo sueño- tienes que salir y conocer lo que hay por aquí- se dijo a sí mismo al momento que cerraba la llave del agua caliente y el agua fría se apoderaba de el- está muy fría- dijo titiritando. Salió del baño y recordó que todo, aun, estaba en la maleta- demonios!- dijo riendo mientras buscaba la toalla completamente desnudo- esto sí, esto sí, toalla!, bien ya tengo todo- pensó mientras comenzaba a vestirse- bien, listos para la aventura
-Ya tenemos todo apuntado- dijo Vera- es una larga lista así que pasaremos un buen tiempo en la plaza- rio
-Y yo iré con ustedes- interrumpió su patrón mientras bajaba las escaleras
-Esta seguro? Es lejos y hay que caminar mucho. Solo para llegar a la plaza son como- pensaba- veinte minutos caminando
-Eso no es problema Alee nos puede llevar, verdad Alee?- preguntando al chofer
-Si señor aunque debo coincidir con Vera, creo que no le gustara la plaza
-De que hablas? No puede ser tan diferente así que vamos
El auto comenzó su andar mientras que Lena y Vera le hablaban un poco de la ciudad- En verdad es una ciudad? Yo lo llamaría pueblo- dijo riendo- perdón. Continúen por favor- las chicas dijeron el nombre de la zona donde vivían y después hablaron sobre la diversión- el zoológico, el circo?- dijo muy sorprendido- eso puede ser divertido?
-No para su estilo de vida señor pero para esta gente es la máxima diversión- respondió Alee
-Un día debería de ir señor- dijo Lena
-Seguro que lo haré. "Esa es la razón por la que estamos aquí"- se dijo a si mismo perdiéndose en sus pensamientos hasta que escucho al chofer decir que ya habían llegado- aquí no tienen parking? Y donde está la plaza?
-Esta es su plaza señor- rio el chofer- el mercado ambulante o tianguis como prefiera llamarlo- Las chicas bajaron del auto y esperaban a que su nuevo y muy atractivo patrón bajara también- si no quiere con gusto lo regresare a casa
-Está bien Alee. Debo aprovechar ahora que no tengo a nadie que me diga que hacer- hizo una pausa- se ve divertido
Bajo del auto y comenzó a recorrer el mercado con gran curiosidad. Venía detrás de Vera y Lena quienes, al parecer, tenían una buena conversación. Llegaron al puesto de frutas y verduras y puso mucha atención puesto que no tenía ni idea de cómo escogerlas... Estaba atento a las lecciones que le daban cuando sintió un pequeño empujón en las piernas- cuidado- dijo al ver a un chico- la gente está haciendo fila- reclamo molesto
-Vamos Ruki te estoy diciendo- interrumpió un mal teñido
-Lo conoces?! Haz que se forme
-No tenemos tiempo para formarnos detrás de niños ricos que compraran medio puesto Reita
-Sabes que, iré a ver lo demás puestos- dijo el mal teñido antes de alejarse
-Lena, Lena- dijo llamando a la chica- creo que ya me harte así que regresare al auto
-Está bien- dijo la chica
Se hartó de tanta gente por lo que decidió volver al auto pero, para su sorpresa, no recordaba cual era el camino de regreso- demonios!- vio un pasillo con puestos que estaba casi vacío y decidió seguirlo- ok en definitiva este no es mi día de suerte- el camino estaba cerrado por una pared lo que le indico que no había sido el camino correcto- y ahora que- miro a los alrededores y decidió ver los puestos en lo que bajaba el flujo de gente.
Se había dirigido a esos puestos en búsqueda de algo que le ayudara con sus trucos de magia. Tenía la cabeza llena de nuevas ideas para el puesto que Uruha le había cedido y para eso necesitaba primero probarlas.
Caminaba pensando en un acto cuando vio al chico del puesto de frutas. Sin saber porque se quedó observándolo- Que te pasa Reita- se dijo así mismo- solo compra lo que necesitas y vámonos- Trato de enfocarse e incluso compro un pedazo de tela rojo que había encontrado y un poco de listón el cual comenzó a trabajar.
Para su sorpresa le era imposible dejar de ver a aquel chico en especial cuando lo vio sonreír- sonríe como los ángeles- dijo en voz alta
- Y haz visto sonreír a los ángeles?- dijo la señora del puesto quien escucho lo que el mal teñido dijo
-Nunca, pero estoy seguro que lo hacen igual que el- por fin decidió acercarse al ver que el chico veía las flores- Son bellas cierto?
-Lo son. Y por lo menos no son maleducadas como tu amiguito- dijo dejando la rosa
-No te la llevarás?
-No- le dio la espalda
-Oye! Lamento el comportamiento de Ruki digamos que él siempre vive a esa velocidad pero créeme que no fue su intención- llamó la atención del menor quien había comenzado a caminar por el pasillo
-Si bueno creo que tú no eres como el- sonrió mientras volteaba a ver uno de los puestos- Ya viste esa estatua-señalándola
-Sí, es un elefante- contesto el mayor- te gustan?
-Son mis animales favoritos, bueno jamás he visto uno de cerca pero en verdad creo que son criaturas estupendas
-Yo podría mostrarte uno
-De verdad!-interrumpió dando un grito- te lo agradecería mucho-tomándolo del brazo- Pero como podrías? Quieres decir en un zoológico porque tampoco he ido a uno
-No en un zoológico- dijo riendo- en el circo
-El circo? – Dijo sorprendido- Todo el mundo aquí habla del circo como si fuera lo mejor del mundo y yo nunca he ido a uno
-Nunca has ido a uno? Tampoco has ido a un zoológico? En qué clase de mundo vives querido
-En uno que seguramente te gustaría vivir
-Tú crees?- comenzaron a caminar al área de estacionamiento que el menor había visto a la distancia- Créeme que no, soy feliz viviendo donde vives
-No te gustaría vivir en una ciudad más grande?
-No, soy feliz viviendo en el circo. Tenemos giras, vamos de aquí para allá
-Eres cirquero? Y que haces en el circo- sonrió
-Soy un mago
-Mago!- dijo mirándole a los ojos- Pruébalo
-Que, qué? No, no, no jamás hago magia solo para probar que lo hago. Lo siento pero te equivocaste de persona- rio
-Pero
-Pero en vista de que eres nuevo por aquí y nunca has ido a un zoológico o a un circo, hare un pequeño truco para ti- sacando la tela que compro en el puesto- bien- hizo algunos movimientos con la mano- ahora debes soplar aquí para que todo funcione- el menor soplo con un sonrisa en la cara- Shalom!- dijo dándole una rosa hecha de listón
-Vaya! Como lo hiciste- su cara revelaba la emoción que tenía al haber recibido el obsequio- muchas gracias!
-Entonces que día puedo invitarte al circo? Por cierto mi nombre es Reita
-Bueno yo acabo de llegar y aún tengo cosas que hacer pero
-Señor - interrumpió el chofer- pensamos que se había perdido y- mirando su reloj- es hora de ir a casa señor
-Alee si tienes razón creo que es hora de ir a casa- volteo a ver al mal teñido y le sonrió- Nos vemos Reita
-Espera! Al menos dime tu nombre- No recibió respuesta ya que el menor subió a su auto lo más rápido que pudo y se pusieron en marcha- Wow!- dijo al sentir un sinfín de emociones
-Qué te pasa Reita! Que no piensas ayudarme con todo esto- el pequeño Ruki había aparecido nuevamente
-Sí, lo siento yo perdí la noción del tiempo y- hizo una pausa- Acabo de conocer al amor de mi vida
-El amor de tu vida- pregunto- eso lo dices en cada ciudad a la que vamos Reita. Porque no mejor aceptas que tu único amor verdadero es Uruha y listo
-Uruha? Creo que no Ruki, ese chico
-Sí, sí, señor enamorado ya vámonos.
-Espera debo comprar algo- alejándose
…