Esa noche Severus, tomo una poción para dormir sin soñar, se sentía realmente mal al enterarse de quien estaba enamorado era nada más y nada menos que el niño que vivió, un chico que le odiaba, aunque a su mente vinieron las últimas palabras de Harry “búrlese por que me enamore de un sueño”
Además de ser su alumno, sin contar que podría ser su hijo, Severus llevo sus manos a la cabeza
–Fui a la escuela con sus padres-se lo dijo a el mismo, soltó un gran suspiro y tomo la poción para dormir sin soñar
Por su parte Harry, llego a la sala común encontrándose con Hermione y Ron esperándolo –como te fue –pregunto la chica, Harry la paso de largo sin antes contestarle -mal- y subió a su cuarto para dormir dejando a Hermione y Ron preocupados.
-Harry, Harry despierta o llegaremos tarde –decia Ron moviendo a Harry el cual al abrir los ojos se veía sumamente cansado, no había podido dormir en toda la noche y cuando por fin pudo conciliar el sueño Ron lo despierta, se metió a bañar y arreglo para correr junto con Ron a clases.
Llegaron a la puerta del salón y abrieron con delicadeza –nos permite pasar-pidieron ambos chicos mirando hacia el interior, cual fue la sorpresa de ambos al mirar a la profesora McGonagall.
Se miraron uno al otro pensando que se abrían equivocado de salón, lo cual sería lógico por la prisa que llevaban pero, tantos años en Howard y no saber dónde estaba el salón de pociones era el colmo, McGonagall los miro con la ceja alzada -Entren-dijo seria ya que Snape nunca llegaba tarde a ninguna de sus clases.
La mañana siguiente para el profesor Snape fue una catástrofe, no solo se había quedado dormido gracias a la vendita poción para dormir sin soñar, no alcanzo a desayunar y para colmo llegaba por primera vez tarde a una de sus clases, camino a prisa por los pasillos del colegio, su túnica iba abierta ondulándose al caminar dejando ver la ropa muggle que siempre usaba debajo de ella, su cabello que siempre engrasaba por protección hoy se veía espectacular.
Llego a su destino disculpándose de su llegada tarde, tanto alumnos como la profesora McGonagall, quienes al verlo quedaron sorprendidos.
Minerva solo atino a asentir y retirarse del lugar, -si creen que por mi tardanza van a ser menos están muy equivocados- menciono Snape y justo como lo había dicho los había puesto a trabajar en tres pociones que tenían que salir bien, y un resumen de en que te habías equivocado para que saliera errónea.
Para Harry la clase no fue mejor que otras, al igual que en todas le resto puntos a su casa y tuvo un castigo al derramar la poción al profesor, pero es que el verlo así, lo desconcentraba, nunca había puesto atención al atractivo de Snape, de hecho dudaba que tuviera uno hasta el ese momento.
Y para colmo tenia que pasar esa tarde ayudando al profesor snape como castigo por su imprudencia.
Camino con nerviosimo por el pasillo, hasta llegar a las masmorras, lo penso dos veces antes de tocar, con un pase, se digno a entrar.