Otros resultados: 13 Series
Jerry o Tom por Aphrodita
Antagonistas, y a la vez camaradas. Tom no imagina la vida sin Jerry, al igual que Jerry la vida sin Tom. Es una de las tantas relaciones de amor-odio.
Zoro/Sanji
Wakareru por Aphrodita
Lanzó un suspiro escandaloso y comenzó con la sempiterna búsqueda. No era la primera vez que le hacía lo mismo, y con sinceridad comenzaba a hartarse de la situación.
Luffy no sabía qué era lo que le enojaba en verdad, si que Usopp mintiese como siempre, o tener que reconocer que últimamente nada era igual con el tirador.
Sanji/Usopp/Luffy
The Game of the Destiny por Flippy
Coincidencia o destino...?, que es lo que les espera a la tripulacion del sombrero de paja cuando se adentren en las profundidades de una isla sin retorno, ¿triunfara el amor sobre la muerte?
ZoroxSanji
Mientras dormía por Aphrodita
Aunque no lo demostrase con sentida emoción, Sanji adoraba ver los dibujos de Usopp. Desde que lo conoció y siempre, supo que el tirador tenía madera de artista. Un estilo propio que con el correr de los años, perfeccionó. Por lo tanto, si al cocinero antes gustaba de espiar los trabajos de su compañero, en el presente era él quien le pedía que se los mostrase.
¿Qué es lo que esconde el tirador cuando se rehusa a mostrarle su trabajo?
Carabela por Aphrodita
Descubrirán que no siempre son malos los cambios, que nada es inmutable, que hay cosas más importantes por conservar que un objeto estropeado, y que la amistad incondicional puede ser inanimada.
Las debilidades de Sanji y el amparo de Usopp.
---
Zoro/Sanji, Sanji/Usopp, Zoro/Nami, ¿Luffy/Robin XD?
Un camino en Raftel por Aphrodita
El parte médico del día fue alentador; si bien Usopp no se encontraba del todo recuperado, la fiebre había bajado lo suficiente como para no considerarla un peligro.
Las ojeras del reno llegaban al suelo, por eso desde hacía varios días Sanji le había propuesto hacerse cargo él de administrarle la medicación y de vigilar su evolución, turnándose.
Desde que Usopp cayó fuertemente enfermo, había dormido en la enfermería, mientras Chopper lo hacía en la silla, sin suponer que tendría que estar tantos días en esa circunstancia.
Por supuesto que como médico no se quejaba; pero claro que con el correr de los días el cansancio se hizo sentir, por eso no rechazó la primera oferta de Sanji. Y pese a que todos se habían ofrecido, el cocinero se había mostrado muy territorial, así que sólo ellos dos se encargaban de cuidarlo.
Requiescat in pace por Aphrodita
Se ha vuelto viejo. Se ha vuelto frágil. Se ha convertido en recuerdos. Murió hace tiempo, pero la muerte todavía no ha ido a buscarlo.
Su cadáver yace en la mansión, comparte la cama con la única mujer a la que supo abrirle su corazón y, aunque nunca han tenido hijos, los niños de la aldea fueron lo más cercano a eso; pero ya se han convertido en hombres de familia que no tienen tiempo. Algo que a él ha comenzado a sobrarle.
Se mueve de un lado al otro, como un muerto en vida. Va del taller a la costa, de la costa a la mansión, le pregunta qué hay de comer, y hasta esa pregunta tan cotidiana, le recuerda a él.
Íntimo por Aphrodita
Se había acercado a él, en silencio; era como si en algún momento de su amistad hubieran hecho un pacto implícito al respecto: Buscaba con calma un cigarrillo, se relajaba y lo fumaba lentamente, mientras Usopp lo contemplaba con interés y complicidad sin dejar de hacer lo que estuviera haciendo, sea pescando en la noche, dibujando por simple ocio o planeando alguna mejora para las armas.
Quédate para que se vaya por Aphrodita
La primera vez que ocurrió se mantuvo apartado del grupo por tanto tiempo que todos se preocuparon por él. Desde entonces cada tanto sucedía; y más allá de volver a ser el mismo chico que conocían del East Blue, tarde o temprano adoptaba esa actitud esquiva y taciturna. No le duraba demasiado, pero era notorio que algo había cambiado en él. Pensaron que quizás se aislaba para poder disfrutar de la soledad, sin embargo, en el fondo sabían que Usopp era sociable por naturaleza.
Durante mucho tiempo supo cómo controlarlo, no obstante un buen día ya no pudo reprimirlo.
Sogeking siempre había sido parte de él, pero nunca antes había reclamado tanto espacio como hasta entonces. Decidió, de manera desesperada e imprudente, que era a Sanji a quien tenía que advertírselo.
Mariage Blue por LudraJenova
Después de un tiempo la tripulación del sombrero de paja se da cuenta que Luffy y Nami están más unidos que nada...sobre todo porque Nami se encierra con él a solas en su cabarete, nadie sabe que pasa y creen que quizás Luffy y Nami sean pareja, ésto principalmente lo cree Zoro, quien termina por deprimirse porque Luffy no lo ama como él lo hace; cuando llegan a una isla, Zoro comete la peor estúpidez de su vida...se casa con el primero que le pide matrimonio, o sea con Ace.
Ahora...¿Qué hará Luffy al respecto?
Parejas:
Principal: LuffyxZoro.
Secundarios: AcexOC(Shoei), SanjixNami y ShanksxOC(Ank).
Terciarios: UsoppxKaya, FrankyxRobin, ChopperxOC(Dark-un zoan devil fruit) y otras que quizás se nombren después.
Warning: Mpreg (embarazo masculino), en futuros capítulos.
SUSPENDIDO HASTA NUEVO AVISO.
La planta de los dioses por Aphrodita
Luego de Skypiea ya nada debería sorprenderlo, al menos en cuanto a tribus y creencias se tratasen. Creía haberlo visto todo, pero sabía que pensar eso en el Grand Line era un error.
Se acercó con curiosidad hacia el grupo que se encontraba reunido, en lo que parecía ser el comienzo de un ritual.
—En nuestras tierras —explicó el nativo, sin mirar al pirata dándole la sensación de que quizás le hablaba al aire—, hace mucho tiempo, los dioses decidieron otorgarnos la planta sin nombre en forma de lluvia.
Fueron Chopper y Robin quienes repararon, apenas se encontraron con la tribu y dicha planta, que era única en su especie.
---
Advertencia: Lemon ménage à trois... casi.
Eclipsado por Aphrodita
Se preguntaba desde cuándo había empezado a sentir eso por Sanji. Suponía que desde la primera vez que lo vio y empezó a conocerlo. Nació como una ligera curiosidad, que fue mutando a una concreta atracción hasta convertirse en eso que era lisa y llana admiración. Pero sabía que era un imposible y él, que no era negativo en verdad, sólo realista, reparaba en lo fútil que resultaba soñar con improbables.
Enfrió esos sentimientos, creyendo que el cocinero jamás repararía en ellos, pero contrario a lo esperado, fueron creciendo, y con Usopp no fue la excepción la libido y la necesidad humana.
Memorias por Aphrodita
La herida que Usopp se había hecho en la palma de la mano no era de consideración y estaba cicatrizando a la perfección, pero el impedimento que representaba dicha herida, comenzaba a tornarse un poco frustrante, sobre todo a la hora de diseñar inventos o dibujar por simple ocio y aburrimiento. Sanji lo miraba en silencio desde que se había sentado a la mesa con el lápiz y la hoja, y se mantuvo así por un largo tiempo, hasta que el tirador pareció darse por vencido, arrojando con fastidio el lápiz sobre la mesa, para después volverlo a tomar en clara señal de no pensar dejarse vencer:
—Que importante son para un artista las manos, ¿verdad?
Juntos pero no revueltos por Aphrodita
—Te quiero —La confesión nació en un murmullo. Seriedad absoluta reflejada en el rostro, entremezclada con el terror a una posible reacción negativa; pero la amplia sonrisa que su capitán le regalaba le quitó todo pesar.
—Yo también te quiero, Zoro —Reía, como un niño.
El mentado suspiró, no le había entendido. Conocía a Luffy lo suficiente para asegurar que éste había interpretado su cariño como el que se le puede tener a cualquier otro integrante de la tripulación, y le era menester explicarse.
Talk dirty por Aphrodita
Le encantaba dar placer. Obtenía el suyo cuando era su amante el que disfrutaba del encuentro. Le producía un efecto inigualable e inexplicable oír los gemidos producidos por su propia pericia y por sus manos… esas mismas que adoraban recorrer la anatomía del contrario hasta saciarse de cada recoveco.
—Ya, cocinero. —El reclamo varonil nació como un reproche. Quiso incorporarse, hacerle lo mismo que le estaba haciendo: volverlo loco, pero no se lo permitió.
—Quédate quieto, ya te dije: déjame a mí. —Sí, le encantaba hacerlo todo.