TE FALLE
Dolor, cuanto dolor se puede sentir al perder un ser querido.
Estuve ahí para ti apenas naciste, te vi. crecer y llamarme coni-chan.
Para luego por un simple tecnicismo de herencia consanguínea ver como te alejabas de mí.
Soporte tu rechazo, tu repudio, no me importaba, estaba ahí a tu lado.
Mi corazón se lleno de esperanza al notar tu cambio con su llegada.
Escuche de tu boca llamarme hermano por primera vez en mucho tiempo y aunque mi corazón estaba a punto de estallar de alegría, las circunstancias me impedían ir a ti para brindarte un calido abrazo al igual que en nuestra niñez.
Siempre estuve ahí, pendiente, para ti, solo para ti.
Entonces ¿Por qué?, ¿Por qué, tuve que alejarme justo cuando mas me necesitabas?
No lo se, simplemente no puedo encontrar respuesta para ello.
Veía tu mirada llena de orgullo caer ante mi, como nunca imagine, mas te ignoraba.
Pocos eran los días que solía permanecer en palacio, prefería pasar mi tiempo de lleno en misiones que en aquella época nunca faltaban.
Sabia del rechazo que provocabas en los miembros del palacio, sobre todo en nuestra familia pero aun así te ignoraba, dándote un cortante hola o adiós cuando nos encontrábamos.
Podía ver en tu expresión la esperanza acumulada en aquellos días, deseabas que te sonriera, que te abrazara, escuchar salir de mi boca algo mas que un simple saludo, palabras de consuelo, esperanza, quizás, no lo se, lo único que sabia en esos momentos era que debía solucionar el problema que habías creado, ya que si algunos te defendían, abogando por ti, habían muchos mas que ante sus ojos no eras mas que un vil traidor.
Me fui de lleno a cumplir con mi deber, dejándote olvidado, con la baga idea que estarías bien a su lado, ya que, aunque no te amara, te quería y apreciaba, eso era suficiente para que nuestro generoso Heika, no les permitiera poner un dedo en contra tuya. Como iba a suponer que el mismo que me juro protegerte con su vida seria el causante de tu muerte.
Ahora esta ahí, tirado en el suelo, llorando a mares, mientras miro como tu frágil cuerpo se termina de consumir, dejándome un gran vacío en el pecho.
El era la daga clavada en tu pecho, siempre lo fue, mas me negué a ver el peligro latente de aquel sujeto que ayude a que existiera por amor a ella.
Tiene el corazón roto, me alegra, así lo tenias tu desde que lo conociste.
Siento rabia, tanto que solo es opacada por el dolor que se cierne con persistencia dentro de mi interior.
Te falle, lo se, la promesa que te hiciera apenas viste este mundo por primera vez, esta rota.
Duele, duele no verte mas, duele no oír tus reproches, duele no escucharte llamarme coni-chan, hasta me duele el saber que ni siquiera podré escucharte decir furioso que no soy tu hermano.
Te perdí, duele, pero es la verdad.
FIN
Que les parece nuevamente la historia me quedo corta por lo cual debere escribir algo extra para rellenar y asi me permitan subir la historia.
Pueden creer cuanto ama Conrad a su hermano para soportar todas las humillaciones que le hizo pasar en lo largo de su vida.
Tambien, donde estaba la madre que no detuvo tal comportamiento, despues de todo era apenas un infante cuanto comenzo, era facil de pararlo, con o sin padre racista.
Por otra parte, donde estaba Gwendall para detener a su padrastro, despues de todo el ya para esa epoca tenia casi la edad que tiene Conrad en la serie, bueno un poco mas joven.
Bueno, para que vean que ser el hijo favorito no siempre es facil y que no por ello se debe creer que tiene todo facil en la vida.
Pobre Conracito, pobre.