CAP.10
ES TARDE
No podía estar pasando, tan solo hacia dos meses aquel prometido fugaz había sido rechazado por Wolfram, tan solo hacia seis semanas pudo volver a la normalidad su relación de amistad con este, tan solo hace dos semanas se armo de valor para declararse pero como siempre su cobardía le gano y tan solo hace tres días atrás por fin se había atrevido.
Ahora esperaba su respuesta, pero como afectaría esto a su futuro con el rubio, lo amaba, ya no le importaba decirlo, tampoco que fuera un hombre y mucho menos su estado, nunca estuvo con el por lo que era, si no por quien era, amaba su forma de molestarse por todo, de cómo cuidaba cada detalle, de cómo se esforzaba por velo feliz tanto a el como a Greta.
Deseaba echarse a llorar.
-Es de cobardes Shibuya- le dijo su amigo apenas noto su reacción.
Es de cobardes llorar por el amor perdido, porque si, con lo que acababa de ocurrir, definitivamente perdería a Wolfram.
-¿Qué piensas hacer?-
-Por favor Murata, ahora no-
-Se sabrá tarde o temprano y…-
-¡Ya lo se, demonios!-
No pudo mas, unas cuantas lagrimas cayeron por sus ojos siendo rápidamente secadas, el moreno de ante ojos se sintió mal por su amigo, quizás debió ser mas delicado con el tema, pero que podía hacer, el futuro del reino estaba en juego y el único responsable era aquel joven rey, que lo quisiera o no debería asumir las consecuencias de sus actos.
Ya tarde se lo encontró en el jardín de palacio, tan bello como siempre, le sonrío y apenas quiso entablar una conversación para dar paso a su respuesta, este lo felicito, deseaba morirse en ese mismo lugar, el ya lo sabia.
-No te preocupes Yuri, seremos amigos como siempre-
Le decía mientras el no despegaba la vista del suelo, amigos, ahora entendía cuanto podía doler aquella palabra.
-Espero que seas feliz-
Se retiraba y el como un idiota parado sin hacer nada, reacciona, se decía, reacciona.
-¡No!, yo te amo a ti por eso…-
-¡Basta enclenque, acaso piensas arruinar tu vida por mí!-
-¡Arruinar dices!, ¡acaso no me escuchaste!, ¡te amo!-
-No, lo que tu sientes es lastima, solo eso-
-¡Te amo, no es lastima!-
Le dijo yendo hacia el, tomándole de los brazos e intentando de forzar un beso que el rubio supo esquivar echándose hacia atrás, al punto de casi caerse de espaldas.
-Es tarde-
Fue lo último que escucho de su amado aquella noche y sin mas le dejo marcharse con el corazón roto, al igual que él.
El anuncio se dio a conocer apenas a una semana de discutir con su familia el asunto, la boda del Heika de Shin Makoku era inminente y el rumor de un futuro heredero aun mas.
Continuara...............................