Cap. 31
Luego de aquel altercado Hiroki decidió seguir a Tsumori, el castaño aún estaba asustado realmente no creía que llegaran a los golpes, pero pasó y solo él terminó pagando los platos rotos; al llegar al departamento del doctor, este rápidamente fue por todo lo necesario para curar a su amor…
T: aún te duele? –pregunta el rubio colocándole paños helados en el lugar golpeado, mientras el castaño asiente levemente- no deberías haberte metido, era algo entre los dos y…
H: lo siento, yo solo…
T: interrumpiendo- qué, acaso querías protegerme, tanto me amas mi amor? –dice bromeando-
H: no seas tonto!! –golpeando en la cara al rubio con un almohadón que había cogido del sillón en el que estaba sentado- e.. es que a mí no me gustan las discusiones que involucran golpes, prefiero las discusiones que son solo verbales… -dice con algo de rubor, recordando que antes casi siempre discutía por todo y con todos-
T: ja, ja, ja –se ríe mientras se quita el almohadón que seguía en su rostro por la fuerza empleada- eso lo sé muy bien, ya que esas discusiones son casi imposibles que las pierdas, no? –sonriéndole tiernamente, para luego retomar su labor curando la mejilla lastimada del castaño; pasaron incómodos minutos de silencio hasta que el rubio decidió hablar- Nowaki es un tonto, como se atrevió a hacerte daño?
H: él no lo hizo a propósito, -baja la mirada hacia el piso- sabes Tsumori creo que esto fue lo mejor que pudo pasar…
T: lo mira extrañado- pero por qué dices eso Hiroki?
H: sonríe triste- porque será una excusa para evitarlo, no creo que se atreva a siquiera verme ahora
T: ja, ja –se ríe por lo que escucha- se ve que has olvidado lo persistente que es… -levanta el rostro del castaño con ambas manos- pero dime, por qué quieres evitarlo?
H: mirando a los ojos del rubio- Nowaki rompió su compromiso con Rumiko
T: soltando el rostro del castaño- lo sé –el profesor lo mira con sorpresa, por lo que el rubio sonríe y le dice- no tienes que sorprenderte, Nowaki no esperó para decírmelo… pero no entiendo, eso no debería de alegrarte?
H: abre más aún los ojos, ya que no esperaba ese comentario- por qué dices eso?
T: sonríe triste- en serio quieres que lo diga?... –no oye respuesta y procede- Hiroki tu amas a Nowaki, lo sé y si el rompió su compromiso con Rumiko entonces ahora no hay nada que los pueda separar, no?
H: no, no es así, yo no quería que ellos terminaran, yo no quería eso… tal vez si pero eso era antes de conocer a Rumiko, soñaba con que Nowaki me recordara y recordara todo lo que habíamos vivido, o simplemente que me amara nuevamente, pero ahora es diferente, ahora está Rumiko de por medio, ella es muy buena y no merece que le haga esto -desviando la mirada para que el otro no se diera cuenta de la tristeza que sentía por lo que iba a decir- por eso yo quiero que ellos vuelvan, que se casen y tengan muchos hijos –empieza a sollozar- eso era lo que me dijo que quería Nowaki antes de irse a EEUU –hablando con dificultad- y conmigo eso es imposible, porque yo, yo ahora estoy esperando un hijo tuyo y… -ya no da más y empieza a llorar amargamente sobre sus manos que habían llegado a su rostro para evitar ser visto, mientras el doctor le miraba desgarrándosele el corazón -
T: Hiroki yo… -dice casi sin aliento- yo… -es interrumpido por el timbre que sonaba sin parar como si quisieran romperlo, por lo que este se apresuró a abrir y al habló toscamente al que había tocado- tú? qué haces… -no pudo terminar de hablar ya que el visitante inesperado entro sin permiso haciendo a un lado torpemente al dueño-
N: llega hasta donde se encontraba Hiroki, observando que estaba llorando y que no se había percatado de su presencia, sabía que era culpa suya, pero lamentándose no arreglaría nada, sabía también que lo primero que tenía que hacer era llevarse a Hiroki de ese lugar ya que con Tsumori presente no iba a poder controlarse otra vez; por lo que se acercó rápidamente al castaño y lo tomó por el brazo levantándolo, Hiroki estaba atónito a ver que era levantado por el ojiazul y trató de zafarse- nos vamos! –lo dijo como una orden llevándoselo a la fuerza-
H: no!, suéltame!!, déjame, yo no quiero ir contigo!!! –trata de soltarse fallando en el intento ya que Nowaki era mucho más fuerte que él- Tsumori, Tsumori por favor!... –estirándole su brazo libre lo llama pidiendo ayuda, pero el rubio solo desvió la mirada muy dolido ya que no sabía si hacía lo correcto al dejar que se lo llevaran o debía retenerlo- Tsumori… -dice de último ya fuera del departamento viendo como el rubio cerraba la puerta, por lo que resignado y con la cabeza gacha sigue al ojiazul-
…
T: golpea la pared con fuerza- demonios esto no tenía que suceder, pero Hiroki… él… rayos…….. lo arruiné…
Luego de un no tan largo viaje Hiroki y Nowaki habían llegado a su departamento, este último aún sostenía el brazo del profesor, ambos entraron, Nowaki tiró las llaves en la mesa y sentó a Hiroki en el sillón…
H: sin mirar al ojiazul- quiero irme a dormir!
N: lo mira triste pero decidido- Hiroki, lamento haberte lastimado, no era mi intención, yo me alteré y reaccioné mal, lo sé, pero Tsumori me sacó de quicio, yo solo necesitaba… no, -negando con la cabeza- necesito hablar contigo… -el castaño aún tenía desviada la mirada, así que solo continuó- ya no me casaré con Rumiko, rompí el compromiso… -soltó sin más rodeos-
H: ya lo sé Rumiko me lo dijo –eso no sorprendió al ojiazul, porque era lógico que el día que pasó con la castaña esta le hubiese contado todo ya que lo trataba como un buen amigo- ella está sufriendo mucho, por eso tú tienes que volver con ella… -se gira para mirar al doctor a los ojos- te dije que te odiaría si rompías con ella! Por qué lo hiciste, por qué la haces sufrir?!!!
N: por qué me dices eso Hiroki… si sabes que yo te am…
H: eso no es cierto!!!, -interrumpiendo- cómo puedes amarme si no recuerdas nada de lo que vivimos… además –grita y luego se tranquiliza- Nowaki tú fuiste el que eligió ser feliz junto a Rumiko, y yo estuve de acuerdo, por eso…
N: eso fue porque creí que no tenía a nadie aquí, tú debiste haberme dicho lo que éramos, por todo lo que habíamos pasado para que nuestro amor crezca y estoy seguro que no te hubiera dejado por nada del mundo!!, juntos… -tomando de las manos del castaño entre las suyas- juntos hubiéramos logrado desde hace mucho que yo recordara… no!,-sujeta los hombros del castaño que en ese momento subía su mirada hasta chocar con la del doctor- juntos todavía podemos recuperar mis recuerdos y el tiempo que perdimos!
H: pero tú no me amas, solo crees hacerlo por lo que te contó Akihiko! –dice mientras caen unas cuantas lágrimas de sus hermosos ojos color miel-
N: Cómo puedes estar tan seguro de eso!!?, por qué no puedes pensar en que así como me había enamorado de ti en el pasado del mismo modo me volví a enamorar ahora, es que no cuenta?, además yo ya sentía muchas cosas por ti antes de que Usami san me dijera siquiera algo!... –ve que el castaño había desviado la mirada hacia el piso, por lo que bajo la cabeza en señal de derrota; tal parece que el castaño era demasiado obstinado para creer que Nowaki se hubiera vuelto a enamorar de él, no encontraba la manera de convencerlo ya había usado todos sus recursos-
H: lentamente levanta la vista y aún con lágrimas en los ojos ve la pose de derrota que había tomado el doctor- yo… te amo!, -dijo casi sin poder contenerlo por más tiempo- te amo tanto, tanto… por eso yo solo quiero tu felicidad!! –sigue llorando, mientras el otro había escuchado muy sorprendido aquella confesión, esa era la respuesta que buscaba… soltó los hombros del castaño para ahora sujetar su rostro y darle un beso en la frente-
N: se separa un poco para preguntarle- en serio crees que mi felicidad es Rumiko? –el profesor asiente, a lo que el médico solo sonríe no pudiendo creer de lo terco que era su amado- te equivocas, yo nunca podría ser feliz con Rumiko y a consecuencia ella también terminaría siendo infeliz… porque yo solo te amo a ti kamijou Hiroki y a nadie más!, - le sonríe tiernamente y con pequeños besos quita las lágrimas que bajaban por el rostro del castaño, dándole luego un tierno beso en los labios el cual es aceptado sin protestas- no sabes cuánto me gustaría recordar!
H: snif, snif -gimotea- entonces creo que necesitas un golpe en la cabeza –le dice sonriendo a modo de broma-
N: ja, ja, -se ríe de la broma- o tal vez solo te necesito a ti –se acerca al castaño que solo cierra los ojos esperando ansioso lo que sabía que iba a venir, y así fue Nowaki le dio un beso que de a poco se intensificaba volviéndose cada vez más y más apasionado, era tan maravilloso ese sentimiento que no se habían dado cuenta de cuando llegaron a la habitación de Hiroki que envuelto en el placer estaba estático solo sintiendo como el ojiazul le quitaba la camisa- eres tan bello… - decía mientras besaba el cuello hasta llegar a los hombros del castaño que solo emitía leves ruidos de placer- esto es como un sueño, si uno muy hermoso… -expresaba en acciones lo que sentía en ese momento, pero los sueños siempre terminan en la mejor parte y esta no sería la excepción; habían parado en seco cuando escucharon llegar a la castaña y esta los estaba llamando- rayos!!!
H: Rumiko llegó!... Nowaki, por favor no le digas!... –sujeta su brazo suplicándole- te lo pido!
N: asiente sonriendo- descuida mi amor, se lo diremos cuando creas que sea el mejor momento- recibiendo una sonrisa aliviada de Hiroki; sale del cuarto sigilosamente escabulléndose en el baño de tal manera que hizo creer a la castaña que se encontraba en este- Rumiko llamabas?
R: ah, si! –saliendo de la cocina, pensé que habían preparado algo, pero veo que no, de seguro es porque no había nada que preparar, no? –luego gira por todos lados como buscando a alguien- y Hiroki?
N: ah?... él, él está en su habitación creo… -dice rascándose la cabeza-
H: al oír que la castaña preguntaba por él decidió salir, al fin y al cabo ya estaba tranquilo, excepto por cierto problemilla que tenía ahí abajo…- Hola Rumiko, que bueno que llegaste, estaba en mi habitación arreglando algunas cosas –dice algo nervioso ya que no había pensado qué decirle-
R: umh –mira que el profesor actuaba algo extraño y luego ve su mejilla golpeada- pero qué te pasó??!! Se le acerca y le toca con cariño el lugar lastimado-
H: ah! Bueno es que no me di cuenta que la puerta de la alacena estaba abierta y choqué con ella- dice rápido y muy nervioso-
R: ya veo, pero ten mucho cuidado de ahora en adelante, no me gusta nada que te andes lastimando!... –se gira hacia el ojiazul- bien Nowaki que te parece si me acompañas al súper a comprar la despensa, nos falta un montón de cosas- dice ya mirando al ojiazul-
N: bueno, pero y si voy con Hiroki, además a ambos nos tocaba cocinar, no sería justo hacerte trabajar después de que ya trabajaste todo el día! –no quería a toda costa dejar a Hiroki y más ahora que habían progresado tanto-
R: no seas tonto Nowaki –sonríe- cómo quieres que Hiroki cargue con la despensa en su estado, basta de excusas yo estoy bien, si? Así que vamos! –lo empuja hasta sacarlo del departamento, luego entra ella sola- espérame olvidé algo –diciendo eso como excusa se acerca a Hiroki y le susurra al oído- no te preocupes Hiroki ya me lo llevo, ahora puedes solucionar tu problemita con toda calma –señalando el problema del castaño y le sonríe como cómplice- tranquilo! esto es normal en tu estado lo comprendo muy bien y no te asustes si pasa seguido ok?–se marcha dejando a un castaño rojo como tomate, ya que lo habían descubierto-
Rumiko Y Nowaki habían tardado lo suficiente para que el castaño arreglara su problemilla, se surtieron de lo necesario y ciertamente era en serio que Hiroki no hubiera podido con tanto que trajeron, cumpliendo con su labor el profesor y el peliazul prepararon la cena, comieron y fueron a sus respectivas habitaciones para no levantar sospechas, Hiroki creía que era demasiado pronto informarle de toda la verdad a la castaña ya que su compromiso había sido roto recientemente por lo que ella seguía triste y el decirle la verdad solo sería hacer que ella termine aún mas triste, no querían ocultarle el amor que ambos se tenían pero iban a esperar solo un tiempo, en el cual su relación casi no avanzaría mucho en cuanto a lo físico pero si a lo sentimental ya que cada día que pasaba sentían como se amaban aún más, esa dicha que tanto habían esperado había llegado en el mejor momento y sentían que nada los separaría esta vez
Pero muchos de esos días felices que pasaban, también mortificaban al castaño el cual se sentía mal tanto por Rumiko como por Tsumori ya que sabía que el rubio lo amaba mucho además era el padre de su hijo y había hecho hasta lo imposible para conseguir su amor sin éxito, cada detalle que le tenía, cada palabra de amor que le bridaba a él y a su bebé le rompían cada vez el corazón; pero no podía corresponderle, era un hecho y sabía que el médico nunca iba desistir y lo comprendía muy bien ya que había algo o mejor dicho, alguien que los uniría para siempre, su bebé!, ese bebé que habían amado desde que supieron de su existencia tanto sus padres verdaderos como aquel que se consideraba también uno…
Mientras que Hiroki y Nowaki fortificaban el amor que se tenían, Misaki y Akihiko disfrutaban de su embarazo juntos, viendo como poco a poco el vientre del menor, que albergaba a sus bebés, no paraba de crecer, ya habían adquirido muchas cosas para recibirlos, claro está que Misaki estuvo cuidando del patrimonio de sus hijos en cuanto a dinero se refería, pero le fue inútil y como siempre el escritor se había salido con la suya, la habitación que sería para sus bebés ahora estaba equipado por todo lo necesario para recibir a un niño y a una niña tal y como se los había hecho saber Rumiko, lo que no sabían era que los diagnósticos sobre el sexo de los bebés en especial en un embarazo gemelar no eran precisamente certeros por la dificultad que representaba el identificar varias estructuras, teniendo la posibilidad de recibir una pequeña sorpresa en el momento del nacimiento o quizás un poco antes; su felicidad era inmensa y más después que el ojimiel les dio la noticia de que las cosas con Nowaki se habían arreglado y que su amor iba en ascenso, con el único inconveniente de que Rumiko aún no estaba enterada, pero eso luego ya no sería problema
Por otro lado Shinobu se encontraba sufriendo, ya que el mes que tanto ansiaba que pasara para saber el resultado de sus exámenes había llegado con la peor de las noticias, la prueba salió negativa el ojigris no era fértil, este resultado había acabado con todas las esperanzas que tenía de formar una hermosa familia junto a su amado, aunque Rumiko le había dado esperanzas sabía que no eran muchas, pero no perdería nada haciendo hasta lo imposible, mientras que por el otro lado Miyagi ni cuenta se daba del pensamiento que Shinobu albergaba en su mente ya que él era feliz solo estando siempre con su niño ojigris. Miyagi había tomado de manera tranquila el hecho de que Hiroki estuviera embarazado claro que al principio le pareció sorprendente y más aún al enterarse de quien era el padre, pero no le refutó nada, lo bueno era que ya se había vuelto más responsable ya que no quería darle trabajo extra al castaño debido a su estado e incluso había dejado de fumar en la sala de literatura a causa de eso
…
El tiempo pasó casi volando y nacimiento de los bebés de Misaki estaba pronto, solo faltaban dos meses para que su embarazo llegara a su término, pero Rumiko les había informado que era probable que el parto podría adelantarse debido a que se trataba de gemelos y el cuerpo del menor no iba a poder resistir que estos se desarrollen por completo dentro de él ya que le podrían dañar órganos importantes
En ese tiempo Shinobu ya había hablado con Miyagi sobre su situación, diciéndole lo triste que lo ponía el no poder tener hijos así como Hiroki podía; pero el pelinegro solo le consolaba diciéndole que todavía era joven y que tenía toda una vida por delante, pero Shinobu no se daba por vencido así que se había sometido a un tratamiento que Rumiko le recomendó para poder ser fértil, pero ya había pasado meses de tratamiento y cada vez que se realizaba los análisis de fertilidad estos daban negativos, ya estaba por rendirse, no quería recibir malas noticias otra vez creía que no lo iba a resistir, pero tampoco quería dejarlo ya que Miyagi y la castaña lo estaban apoyando mucho
S: y bien… -estaba nervioso esperando junto con su novio quien le sujetaba la mano fuertemente, a que la doctora le diga los resultados de sus últimos exámenes-
R: mirando a la pareja, luego cierra los ojos y niega con la cabeza- Shinobu kun tú… -cambia su expresión totalmente- estás embarazado!!! –dice feliz y sonriendo-
S y M: qué? –dijeron al mismo tiempo y muy sorprendidos
S: de verdad Rumiko?? No me engañas, de verdad estoy, estoy… -no puede acabar de hablar y empieza a llorar de felicidad-
R: se levanta rápidamente de su asiento y abraza con mucho cariño al menor- cómo crees que voy a engañarte con esto!, es la verdad!, tal parece que la última dosis que te apliqué surtió efecto, ahora no solo eres fértil si no que ya estás esperando un bebé!! –abraza con más fuerza al menor y luego se separa un poco para susurrarle- Se ve que seguiste haciendo la tarea –dice en broma y limpiando las lágrimas que aún caían por el rostro de Shinobu- ya Shinobu basta de lágrimas, desde ahora solo sonríe y sé feliz por esta bendición que te fue dada, además el bebé siente todo lo que tú y no quiero que sienta tus lágrimas aunque estas sean de felicidad! Y tu Miyagi san más te vale que lo consientas mucho ya que esto solo se logró gracias a la perseverancia de Shinobu kun
M: no te preocupes lo mimaré todo el tiempo –dice dando un tierno beso al menor- sé que dije que era pronto, pero ahora solo estoy esperando a que nazca para que lo tengamos entre nuestros brazos!
S: Rumiko, cuanto tiempo crees que estoy, bueno tú sabes… -dice un poco apenado ya que esa situación por la que pasaba era nueva-
R: bueno según los resultados casi cuatro semanas, la droga actuó rápido en la última dosis –dice sonriendo viendo como la pareja se llenaba de felicidad- pero sabes que debes cuidarte mucho, un embarazo masculino es muy riesgoso, el tiempo de gestación varía, debes tratar de mantener a tu bebé ahí –señala el vientre del menor- el mayor tiempo posible… -se pone a escribir- tienes que comprar estos suplementos, los cuales son para un mes, compren nuevos cuando se acaben hasta que el embarazo termine, además es necesario que vengas cada mes para ver cómo se desarrolla, de acuerdo? –le da lo que prescribió-
S: gracias Rumiko, de verdad gracias por todo, es gracias a ti que yo pude embarazarme –le dice mientras le toma de las manos en agradecimiento-
R: no tiene por qué además es mi deber y la mayor parte del éxito es por tu esfuerzo y de mucho ayudó el que seas joven
M: pero aun así, gracias, por ayudarnos a obtener esta felicidad!
R: ya basta de agradecimientos, si? Yo lo hice porque los quiero ver felices y me alegro que lo estén, bueno creo que ya deben ir a festejar, y con respecto a hacer aquellas cosas pueden hacerlas así que no se preocupen –les guiña un ojo haciendo que el menor se sonrojara mucho- bien yo también me retiraré ya que terminé mi turno! –se saca la bata-
M: nosotros también nos vamos, Rumiko si quieres te llevamos a tu casa, es lo mínimo que podemos hacer, después de todo lo que hiciste!
R: de verdad!! Claro que quiero me ayudarían mucho!!, estaba pensando pronto adquirir un auto también es necesario tener uno y me dio mucha envidia cuando Nowaki obtuvo el suyo por eso ahorre mucho y pronto ya podré pagarlo- dice muy feliz saliendo del lugar-
S: que bueno, me alegro por ti, de verdad que tener un auto en este tiempo es muy necesario –dice siguiendo a la doctora salen al estacionamiento y parten hacia la casa de la castaña para dejarla-
Cerca de la entrada del departamento…
N: hola Rumiko llegaste pronto!! –dice mientras iba saliendo del departamento-
R: si bueno eso es porque Miyagi y Shinobu me dieron un aventón! –sonríe- ya te vas? Y Hiroki está adentro?
N: si regresaré mañana, Hiroki está en la cocina, ya sabes tiene antojos a cada rato –sonríe casi escapándole una risita-
R: ja, ja, ja es divertido ver el manifestarse los síntomas del embarazo, aunque tardaron en aparecer, pero me alegra que tenga mucho apetito y pocas nauseas, mejor me apresuro o terminaré yendo a surtir la despensa otra vez! –se adentra al departamento- que te vaya bien Nowaki! –dice recibiendo un asentimiento del médico, para luego cerrar la puerta y dirigirse a la cocina- wow calma Hiroki! Por favor déjame algo a mí! Ja, ja… -se acerca al castaño el cual deja de comer-
H: se limpia los labios- jump –se ríe- lo siento Rumiko, es que no puedo evitarlo cuando mi bebé quiere comer debo consentirlo –dice acariciando su abultado vientre con dulzura-
R: le sonríe con ternura- Hiroki en serio no quieres saber el sexo de tu bebé?
H: no Rumiko, quiero que sea una sorpresa cuando llegue –sonríe, pero luego cambia su expresión a una seria, había pensado toda la semana en decirle toda la verdad a la castaña, todo lo de su actual relación con Nowaki ya que en todo ese tiempo habían sido cautelosos con su relación, pero ya era hora de aclarar las cosas no quería hacer pasar más el tiempo- Rumiko… –obtiene la atención de la castaña- necesito hablar contigo… -dice tragando en seco-
R: claro Hiroki! –dice animada-
H: podemos ir a mi habitación? –la médico asiente y ambos se dirigen al lugar, una vez llegaron se sentaron en la cama- sabes Rumiko, yo te estimo mucho, sé que te haré mucho daño con lo que te diré, pero es necesario que lo sepas…. –pasan incómodos segundos de silencio- yo… soy la persona que te quitó a Nowaki –baja la mirada como si estuviera arrepentido de lo que hizo y para no ver el rostro de la castaña- Nowaki y yo fuimos pareja antes de su accidente, pero él me olvidó y creí que lo nuestro no tendría solución, yo nunca lo dejé de amar pero decidí rendirme… nunca quise hacerte daño, pero no pude evitarlo, Nowaki… él se enamoró de mi nuevamente, por eso terminó contigo… y yo lo acepte…
R: mira al castaño con una mirada triste y una sonrisa resignada- sabes Hiroki… en este momento quisiera golpearte… -el profesor la mira con mucha sorpresa mientras la doctora solo se ríe- pero no por haberme quitado a Nowaki, no, mejor dicho por recuperarlo… si no por esperar tanto tiempo para decírmelo -no recibe ninguna respuesta solo un rostro arrepentido- yo… ya lo sospechaba,-sonríe- no es normal que de casi no quererse ver y no soportarse, se llevasen tan bien de un día para otro, por eso estaba esperando a que alguno adquiera valor y me lo dijera, también no quise decirlo porque no quería irme de aquí… pero supongo que debo irme… -se incorpora-
H: no! no Rumiko, eso no cambia las cosas en ese aspecto, tu puedes quedarte todo el tiempo que quieras, nos agrada tu presencia aquí! Sé que soy egoísta al pedirte que te quedes después de haberte hecho tanto daño, pero de verdad me alegraría que no te fueras –dice muy preocupado por la respuesta que iba a obtener-
R: no Hiroki, ninguno de ustedes tiene la culpa de amarse… pero está bien me quedaré!, a decir verdad me dolería más alejarme de ustedes, además adoro mi trabajo! –se acerca al castaño y le toma de las manos- no te niego que nunca había perdido la esperanza de regresar con Nowaki… hazlo feliz si?, por los dos! –dice con una mirada tierna-
H: Rumiko… -es interrumpido por el teléfono que sonaba-
R: voy yo –se dirige rápidamente al teléfono y contesta- aló??
A: agitado- Rumiko que bueno que contestas! –dice un poco alterado-
R: Usami sensei??, sucede algo? –pregunta indiferente-
A: es Misaki, tiene mucho dolor!!! lo llevo al hospital? –pregunta nervioso no sabiendo que hacer-
R: qué?!! Pero que está esperando, llévelo al hospital de inmediato, lo más seguro es que los bebés están por nacer!
A: qué? Pero si aún falta dos meses!
R: eso dígaselo a los bebés!!!, ahora apresúrese que yo salgo para el hospital en este momento!!! –cuelga- Hiroki, Misaki tendrá a los bebés! Iré a asistir el parto… -el castaño se sorprende mientras la castaña se pone el abrigo de inmediato y llama al hospital para decirles que tengan listo el quirófano ya que Misaki iba a tener los bebés por cesárea-
H: Rumiko puedo ir contigo?! –dice preocupado-
R: está bien vamos!! –acepta ya que sabía que el profesor sentía mucho cariño por Misaki y la salud de este le preocupaba-
Luego de un rápido viaje al hospital la castaña alistaba todo lo necesario esperando preocupada la llegada del menor, el cual no se hizo esperar mucho, y una vez llegado lo llevaron de inmediato al quirófano, lo alistaron rápido sentía mucho dolor, pero aún no se había roto fuente y todavía tenían el tiempo necesario para aplicar anestesia la cual hizo efecto casi de inmediato, durante todo ese procedimiento el escritor no se separó del menor ni un segundo sujetándole la mano a modo de apoyo y con mucho amor
R: bien Misaki, no te preocupes, si? Todo saldrá bien! –le dice para tranquilizar al castaño- bien empecemos!- dijo animada, debía estar muy concentrada para que todo saliera a la perfección, y con paciencia procedió: realizó la asepsia de la zona, luego la incisión la cual no era sentida por el castaño gracias a la anestesia, terminó de incidir y verificó no haber dañado ninguna estructura interna, luego de unos minutos pudo diferenciar bien a cada bebé sacando con suma delicadeza a la más cercana y evitando que el cordón umbilical se enrollara- bien y aquí está la primera –dice entregando a la bebé que lloraba a la enfermera para que la limpiara y abrigara para después entregársela a su padre-
A: no puedo creerlo Misaki aquí esta nuestra bebé y es tan hermosa –dice sin querer soltarla, pero debía ponerla encima de Misaki para que él también la disfrutara-
Mis: mi hermosa nena, tenía muchas ganas de tenerte entre mis brazos!! –agarrando como podía a su beba la cual era verdaderamente hermosa, tenía los ojos verdes de su papi el cabello plateado igual al de su padre- ahora esperemos que tu hermanito vendrá pronto –decía observando como la doctora ya estaba con su bebé en brazos-
R: ya nació –sonríe entregándosela a la enfermera para que repita lo anterior hecho- pero… -decía mientras los padres ponían una cara de preocupación por el pero dicho por la castaña- creo que erré en la determinación del sexo –la enfermera le entrega a la bebé- tienen otra linda bebé!! –entregándoles a su hermosa beba-
A: que? Una bebé Misaki mi amor tenemos otra hermosa nena!!! Gracias mi amor, gracias por hacerme padre de dos hermosas princesas!! –dice besando la frente y los labios del menor-
Mis: sonríe- la verdad me sorprendió, creí que era varoncito, creo que tendremos que cambiar el decorado de la habitación para esta hermosa princesa o se enfadará por tener todo color azul –acariciando los cabellos plateados de su segunda bebé que era exactamente igual a la primera-
R: en verdad lo siento Misaki, no suele pasar esto, pero es muy complicado ser exactos cuando son dos y las demás veces que hicimos la ecografía pues se removían bastante por lo que no pude verificar mi anterior diagnóstico –decía mientras terminaba de hacer la sutura del lugar por el que las niñas habían llegado al mundo-
Mis: no te preocupes Rumiko! Estamos muy felices por tener dos hermosas nenas, verdad Usagi san!!
A: si muy, muy felices –besa con amor los labios del menor- gracias Rumiko! En verdad te agradezco que hayas asistido a Misaki
R: fue todo un placer! –sonríe- bueno al parecer las bebés están en perfectas condiciones, pero de todas maneras las tendremos en observación solo por esta noche ya que nacieron antes de lo previsto- ambos padres asienten resignados ya que no querían separarse de sus princesas, les dan besos en sus cabecitas y se despiden de ellas- descansa Misaki, necesitarás muchas energías desde ahora para consentirlas –dice mientras se llevan al castaño hasta su habitación en una camilla seguido de su escritor-