Cap. 37
Se encontraban todos en el auto de Rumiko dejando atrás el del rubio ya que este quería cerciorarse de que su amado castaño no sufriera daño alguno, con su hermoso bebé en brazos que ya dormía después de que había llorado tanto, cualquiera decía que sintió lo que su padre sufría y lo que le estaba por venir…
R: llegamos!, dame a Haru y baja a Hiroki rápido!! –decía demandante mientras salía apresurada-
T: por qué estamos en mi departamento? –abre la puerta y saca al profesor cargándolo al estilo princesa-
R: no preguntes tonterías, dónde más querías que lo lleváramos, además esto funciona como yo digo, ahora camina! –subiendo al elevador, al llegar al piso se encaminan rápidamente dentro del departamento- bien ahora mételo a tu habitación!
T: haciendo lo ordenado, se encamina dentro y recuesta a su amado en su cama- lo siento Hiroki, no sé lo que pretende hacer ahora, pero no me revelaré ya que ella puede hacerte mucho daño si lo hago, si lo sé, soy un cobarde, -recriminándose mentalmente- debí haberte dicho todo desde un principio –acariciando el rostro de ojimiel- pero… yo te… -de pronto oye el llanto de Haru por lo que sale corriendo angustiado hacia su auxilio, había sido un tonto por dejarlo solo con aquella demente, de seguro le habría hecho algo- Haru!! –llegando donde su amado bebé-
R: qué pasa Tsumori, por qué estás tan alterado? –mirándolo con una cara como si no supiera la angustia que lo había puesto así- qué?... en serio crees que le habría hecho daño a tu hijo? –diciéndolo con una gran ironía- solo se despertó y como no está acostumbrado a mí, lloró… ya! Deja de mirarme como si fuera un monstruo!, mejor dale algo ya que tiene hambre, recuerda que es tu hijo y tienes que cuidarlo bien –sonriendo le entrega a Haru que estaba sollozando y sale de la cocina-
T: ya mi niño, calma, -meciéndolo- la mala ya se marchó y no te hará nada, tienes hambre verdad?, en seguida te preparo la leche que tanto te gusta! –mira con ternura al bebé- no sabes cuánto desearía que en realidad fueras mi hijo, pero aún no siéndolo te quiero como si lo fueras, y a tu papi lo adoro, así que ayúdame si?, ayúdame a enamorarlo, sé que lo puedo hacer… no, juntos lo podemos hacer inmensamente feliz!... solo que necesitará un poco de tiempo –pone el agua para el alimento de Haru-
R: saliendo de la cocina- bueno ahora con lo siguiente… -entra donde estaba Hiroki- jump- ríe- de verdad que la suerte está de mi lado, sabes Hiroki?, la oportunidad que le di a Tsumori también es para ti, así que aprovéchala, no te vuelvas a meter en mi camino y yo haré lo mismo, -acercándose a un castaño inconsciente-pero para cerciorarme… - empieza a desvestirlo- es necesario aclararle a Nowaki cuál fue tu decisión, no? –sonriendo maliciosamente, termina de quitarle con algo de dificultad hasta la última prenda regándolas por todo el piso, para luego cubrirlo con una sábana- hecho, ahora solo falta que Tsumori se apresure y haga lo suyo, estoy segura que Nowaki no tarda en llegar
T: pero que haces?!! –mira sorprendido el como la castaña tapaba a su amado- por qué le quitaste la ropa a Hiroki, qué es lo que pretendes? –le recrimina a la castaña-
R: mejor cierra la boca y haz lo mismo, no tenemos tiempo que perder, Nowaki ya ha de haber terminado su turno en el hospital y llegará en cualquier momento
T: tú estás mal!, yo no…
R: vamos Tsumori!, no me vengas con eso, sé que tu deseas esto más que nada, ahora, si no quieres aprovecharte de la inconsciencia de Hiroki, no importa pues lo único que tienes que hacer es fingir que lo han hecho, así Nowaki ya no querrá saber nada más y Hiroki será completamente tuyo! Tan fácil como eso!... –diciéndolo con una sonrisa maliciosa-
T: se sentía muy culpable, ya que estaba llegando muy lejos, pero aun así había cosas que lo prácticamente lo obligaban y dejaban continuar, tales como el amor obsesivo que sentía por Hiroki y la amenaza de Rumiko– estás segura que todo saldrá como lo planeaste? Porque yo no creo…
R: ya basta!! Te dije que no tenías derecho a replicarme ahora, mira que estoy siendo generosa contigo, no hagas que me canse! –mirando hacia la calle por la ventana- Haru está durmiendo –el rubio asiente- bien pues… -saliendo de la habitación-
T: espera que intentas hacer?!! –sujetándola de un brazo-
R: tú que crees- en tono amenazador- quieres acaso que te vuelva a decir que pasaría si me traicionas, recuerda que aquí el único que parecería culpable eres tú, no tienes salida ahora… - se oye que alguien toca la puerta- tsk… ya llegó! Sé que Nowaki no es de tu agrado por eso no me importa lo que le digas, solo has que salga de aquí completamente decepcionado de Hiroki, entendiste?!!, apresúrate!, yo estaré en la habitación de Haru, por si se te ocurre traicionarme de nuevo! –se zafa del agarre, apresurándose a su destino-
T: espe… -vuelven a tocar la puerta- rayos!! –se desviste rápidamente y se acuesta a lado de Hiroki, acercándose a él hasta abrazarlo-
…
N: que raro, habrá salido?, no, no lo creo de seguro se cansó de esperarme y se quedó dormido, realmente espero que Tsumori no se encuentre –verifica si la puerta no tenía seguro, y efectivamente así era- que bueno, ahora… -cierra la puerta despacio detrás de él- ah, debe ser ahí! –se dirige hacia una habitación que tenía la puerta ligeramente abierta por la cual salía un poco de luz- Hiro san estás aquí? –adentrándose en la habitación- Hiro… -queda atónito al presenciar aquella escena, no podía creerlo, ahí estaba su amado Hiro san en la cama de su senpai y ambos parecían estar desnudos cubierto solo por aquella sábana, y lo que le quebró el alma y corazón fue que se encontraba en brazos del imbécil de Tsumori- no es cierto… esto no puede ser verdad! –alzando la voz-
T: había escuchado que alguien había ingresado, confirmando quien era al escuchar decir lo último dicho por el ojiazul, en ese momento supo que era hora de actuar, por lo que se removió simulando que empezaba a despertarse- qué? Quién está… Nowaki?... –bien demos inicio a la función- pensaba
N: estaba en silencio y como ido sin apartar la mirada de aquella escena que ni en sus peores pesadillas hubiera deseado ver, si, ya había ocurrido en otra ocasión pero en esa no tenía la desdicha de ser expectante, no podía creer, no, no quería creerlo, pero era evidente y totalmente cierto lo que se hallaba frente a sus ojos, ciertamente su único y más grande amor estaba desnudo a lado de la persona que más odiaba en esos momentos, sin querer y de una manera totalmente cruel supo la decisión de su adorado castaño- por qué? –diciendo casi sin voz-
T: sonriendo– lo siento Nowaki, pero como puedes ver… –se incorpora hasta quedar sentado y empieza a acariciar algunos cabellos del profesor- Hiroki ya decidió con quien se quiere quedar –girando a ver con una mirada afilada la reacción del ojiazul-
N: aún no sabía que decir, era como si las palabras sobraran en esa situación; era verdad!, ya que nada de lo que diría pondrían las cosas a su favor, estaba tan dolido y con ganas de huir de ahí, pero quería terminar bien las cosas, ya que sabía que esa situación no era enteramente culpa del castaño, ni de su senpai, él era tan o más culpable que ellos dos, había abandonado por tanto tiempo a Hiroki, lo hirió en lo más profundo con la insensible noticia de su boda que ahora ya no se haría y aún peor lo había hecho suyo a la fuerza muchas veces y actuado, aunque no fuera a propósito, como si no supiera nada- si… eso es… lo que parece, supongo que lo tengo bien merecido, -con la cabeza gacha sonreía con una inmensa tristeza- hice sufrir mucho a Hiro san, pero de todas formas no pensé que fueran tan crueles como para hacerme esto… pero ya bueno, de algún modo iba a enterarme y cuanto más antes mejor… -decir eso le rompía el alma y corazón en mil pedazos y su expresión de infinita tristeza lo decía todo, intentó darse la vuelta pero el rubio lo detuvo-
T: espera!... no puedo dejar que te vayas así! –se levantó de la cama y cubrió con una bata para luego acercarse lentamente a su kohai mientras pensaba –es ahora o nunca, arreglar las cosas en este mismo instante o terminar lo que empecé… -Nowaki…
N: solo te diré una cosa –interrumpiendo- puede que hayas conseguido que Hiro san se decidiera por ti, -gira hacia el rubio para dedicarle una mirada entre triunfante y orgullosa- pero él nunca te amará como me amó a mí, ya que el amor que nos teníamos es algo inalcanzable e inolvidable, por eso…
T: eso no lo sabes!!! Eso no lo puedes saber!!! –estaba muy molesto, no esperaba oír esas duras palabras de parte del ojiazul- se acabó, incluso estaba dudando en si darte esa oportunidad que tanto querías, pero me retracto, lastimaste mi orgullo, ahora ya no hay vuelta atrás –pensaba mientras lo miraba con rabia –
N: eso lo sé perfectamente! –grita evitando que el rubio dijera algo más- porque yo no solo tuve su cuerpo si no también su corazón –decía mientras se acercaba a su castaño-
T: que… -mirando atónito como el pelinegro se aproximaba hacia su castaño- qué piensas hacer?!!
N: … -ignorando al rubio por completo-
T: Nowaki! –reclama-
N: silencio!... no quiero que se despierte, descuida ya no les molestaré más, solo quiero despedirme, así, en silencio… –lentamente se acerca hasta proporcionarle el que creía era el último beso que le daría a esa persona que le había hecho infinitamente feliz – lamento haberte causado tanto dolor, adiós Hiro san… -se aparta un poco- no, adiós Kamijou Hiroki, te deseo que seas muy feliz… -se reincorpora y acercándose a su senpai le dice casi en modo de advertencia- confío en que no le harás ningún daño… -luego apacigua su semblante- puedo ver a su bebé?... quisiera despedirme de él también
T: con una expresión de sorpresa por aquella petición- ah… si, está bien –salen hacia la habitación de Haru, llegan a la puerta y vuelve a hablar- por favor no hagas mucho ruido me costó dormir a Haru –rayos, ojalá Rumiko nos haya oído y se esté escondiendo –pensaba mientras abría lentamente la puerta, mostrando alivio al no encontrarla-
N: acercándose a la cunita donde yacía el hermoso bebé dormido- hola, así que te llamas Haru, es un nombre hermoso sabes?... lamento no haberme comportado como un verdadero padre cuando tuve oportunidad, no me malinterpretes, no es que no te amara, es solo que estaba un poco confundido, pero ahora estoy pagando por ello… -acariciando su mejillita- eres tan hermoso igual que tu papi, me hubiera gustado formar una linda familia contigo y tu papi, pero sé que él te hará inmensamente feliz… ah… -levanta su mano de golpe porque el pequeño castaño comenzaba a removerse-
T: es suficiente, será mejor que te retires… -interponiéndose entre Nowaki y Haru antes de que el último despertase-
N: si… -le dedica una tierna sonrisa al bebé para luego salir sin decir nada más-
T: cuando oye la puerta cerrarse suspira aliviado- ya se fue –mirando al bebé que ya se había despertado- pensé que despertarías inmediatamente, pero veo que tú también estás de mi lado –moviendo la manita de Haru y dedicándole una mirada llena de ternura- ya que si tu padre hubiera visto el color de tus ojos habría hecho un escándalo que…
R: que despertaría a Hiroki y se armaría un lio, verdad? –saliendo del armario-
T: ah… con que te escondiste ahí, que bueno que me hayas escuchado y pudieras esconderte –mirando con desgano a la castaña-
R: sonriendo- ah, si?!... pues no era necesario, sabía que estaban viniendo…
T: cómo?!… ah ya veo –dice mientras la castaña le enseñaba el aparato- así que, te enteraste de todo, nunca habría imaginado que usarías el intercomunicador del bebé para oír nuestra conversación
R: si, sabes?, estas cosas sí que son de utilidad –se aproxima al rubio y coloca una mano en el hombro de este- felicitaciones Tsumori, hiciste un buen trabajo… aunque por un momento creí que me traicionarías! –El rubio desvía su mirada- me alegra que no lo hicieras, ya que si lo hubieras hecho en estos momentos me habría llevado a Haru muy lejos de aquí! –sonriendo descaradamente-
T: atónito la mira con los ojos muy abiertos- no había pensado en esa posibilidad… de cualquier modo me arrepentí de dar marcha atrás- pensaba- en serio?... vaya creo que eres muy despiadada…
R: ja, ja, ja, me halagas mucho Tsumori, bueno ahora que todo ya está hecho, me voy… -empieza a caminar hacia la salida-
T: espera Rumiko! –la detiene- no puedes dejarme así, qué se supone que le diga a Hiroki cuando despierte?, cuándo despertará?, estás completamente segura que tu amnésico funcionó?
R: vaya estaba esperando por esas preguntas- se da la vuelta para mirarlos- bien pues, mi droga si es efectiva, por lo menos sé que todo lo que pasó el día de hoy no podrá recordarlo… ahora bien… puede que no pueda recordar lo de ayer… una semana… un mes… -dice desinteresadamente-
T: qué?, pero qué estás diciendo?, no puede ser!, me estás diciendo que Hiroki podría padecer una amnesia completa!
R: no, no lo creo, dudo que pueda olvidar lo de un año completo, mi amnésico no es tan fuerte, pero al aplicarlo parenteralmente podría tener un efecto mayor… por lo de cuando despierte, dale hasta mañana, quizá tenga un poco de fiebre, pero como te dije es normal… y sobre que le dirás… -sonríe maliciosamente- depende de que recuerde, hazle todas las preguntas posibles para saber hasta qué punto recuerda y de eso cuéntale hasta que llegaron con Haru aquí, luego dile que él salió al mercado a comprar algunas cosas y que cuando volvió estaba totalmente decepcionado de su suerte ya que se había enterado que yo esperaba un bebé de Nowaki…
T: eh?... pero tú no estás… -intenta replicar pero es interrumpido-
R: tú y yo lo sabemos, pero él no lo sabe, solo dile eso y que después ante tal decepción él te pidió que lo ayudaras a olvidar esa dolorosa realidad y que por eso se encontraban en esa situación, -sonriendo- estoy segura que al principio reaccionará mal, pero conociéndolo no creo que te eche la culpa, ya sabrás que hacer después… -se vuelve a mover, esta vez hacia la salida, gira nuevamente antes de salir- de lo demás me encargo yo, ahí te dejo a Hiroki nuevamente en bandeja de plata como aquella vez, disfrútalo!... de todos modos, le dirás que lo hicieron, no? –sonriendo le guiña un ojo en señal de complicidad- nos vemos Tsumori- sale y cierra la puerta tras de si-