Ya había pasado un mes desde que Bruno vino a mi casa, íbamos de bien a mejor, después de aquella vez que fue a recogerme, lo presente a mis padres e inmediatamente mi madre lo amo, y a mi padre le pareció simpático… algunas tardes íbamos a mi casa a jugar videojuegos, ver películas de terror, leer mangas, y en otras, salíamos a ver más la ciudad, e ir al cine a ver los estrenos de las películas más esperadas del año, me sentía bastante cómodo con él, aunque en algunas ocasiones veíamos a Logan en la entrada de su casa hablando con alguna chica o a veces lo veíamos pasar con su carro, que según Bruno era BMW Z4 del año, era plateado, yo no sabía de carros así que no me sorprendí mucho… mis padres tenían unos más “sencillos” y “normales” mi padre tenía un Ford azul y mi madre un spark verde limón, no eran tan lujosos, ya que no les gustaba eso, si claro, yo no quería aprender a conducir ya que para eso están los transportes públicos, y así me evitaba problemas, Bruno tenía su propio auto pero compartía la misma forma de pensar que yo.
Una tarde que salimos de ver la película de “monsterers university” ambos queríamos verla ya, así que pasamos casi casi la noche entera afuera del cine para poder tener entradas en el estreno y al salir de ver la primera función Bruno contaba algunas partes en voz alta para los que esperaban verla, así, según Bruno se les “cagaba” la salida al cine, era demasiado divertido, pero luego me sentía mal por las demás personas, regresamos en el vagón y Bruno ahora le tocaba irse con su madre así que nos dividimos 3 cuadras antes de la privada, ya era de madrugada, y estaba cansado, me encontré con Don Edmundo en la caseta, tiempo atrás cuando estaba decidido a contarle mi problema, decidí que era mejor enterrarlo y jamás decirlo a nadie, iba a platicar con el de vez en cuando, pero no tanto ya que era un tanto tarde, me platicaba de sus viejos tiempos y de sus amores, era un gran señor que supo cómo vivir su juventud, llegue a la caseta y como siempre, lo salude
-¿Qué tal le fue?- me abrió el portón
-bastante divertido- me pare frente a él, yo estaba un poco más alto que el, pero era por las edades
-me alegro- sonrió, ahora le faltaban más dientes,
-si… gracias- saque de mi bolsillo unas gomitas y unos chocolates- tome… se los guarde- extendió sus manos y los agarró
-muchas gracias jovencito- me despedí de él y camine a casa, vi de reojo la casa de Logan, estaba a oscuras, llegue a mi casa y entré, mis padres ya dormían así que me fui a mi habitación y sin quitarme nada, me avente a la cama y me quede dormido, había sido un día muy cansado.
El lunes por la mañana mi mama me dijo que el miércoles no hiciera planes, porque debía ir a una fiesta, no me dijo el motivo de la fiesta, pero de seguro a mí no me importaba y si, llena de gente importante, jefes, y otros más, papa estaba en los de gente importante, así que era un invitado de honor, y su familia tenía que acompañarlo en la velada, que sería desde las 9 de la noche y “hasta donde el cuerpo aguante” esas habían sido las palabras de mi madre, quien después se echó a reír y yo la acompañe en esa risa, al llegar a la escuela se lo conté a Bruno, y empezó a molestarme con que niño rico y todo eso, entonces le pregunte,
-¿Por qué no vas a ir tú?- él tenía que ir, ya que su padre era un reconocido abogado, estábamos en descanso y esa vez llevo mango en rebanadas
-porque mis padres y yo saldremos de la ciudad, iremos a ver a la única hermana de mi padre que pronto se va a casar y mi madre ayudara en la decoración, fiesta, vestido…todas esas cosas así que estaremos con ella durante una semana y nos vamos en miércoles por la mañana- que mala suerte
-será lenta esa semana- comí un poco de mango
-sé que me extrañaras pero debes ser fuerte- siempre saliendo con sus dramas, los cuales me daban risa
-de acuerdo lo intentare- le seguí el juego, el soltó una carcajada, seguimos platicando hasta que debíamos salir del colegio.
Llego el tan “esperado” día de la dichosa fiesta, esa vez mi madre eligió mi atuendo para esa noche que consistía en una camisa color vino, la cual remango un poco, un chaleco negro con gris, un pantalón negro, zapato de gala negro, y una corbata negra, la cual no ajusto tanto, no peino mis cabellos y los dejo “libres”, quería ponerme un sombrero, pero a eso me opuse
-se te vera bien Kalil- trato de ponérmelo
-mama, será una molestia en el resto de la noche- creo que la convencí por que se resignó en ponérmelo, esa noche mi madre llevaba un vestido azul marino, con escote de princesa, hasta el suelo chifón y que tenía volantes se veía muy hermosa… y a su cabello lo junto de un solo lado y le hizo unas cuantas hondas, le quedaba bien, mi padre llevaba un pantalón gris, camisa blanca, un saco gris con algunos detalles en negro y una corbata negra con puntitos blancos…sencillo, a él y a mí no nos importaba el cómo vestir, pero siempre entraba mama a “rescatarnos”, una vez listos y con la palabra “guapos” de mama salimos de casa y subimos al auto de papa, la fiesta se llevaría a cabo en uno de los hoteles más importantes de San Francisco El Hotel Labarazii, me sonaba pero no recordé en donde lo había escuchado… el hotel estaba en el centro de la ciudad, era enorme, tenía como 20 pisos había muchas ventanas y algunas tenían pequeños balcones con flores colgando de ellos, todo el hotel estaba iluminado, tenía un gran jardín dándonos la bienvenida y en medio del jardín una gran fuente, que lanzaba el agua como a 6 metros o más, el agua se veía gracias a las luces que tenía la fuente las cuales eran amarilla/anaranjada, rodeamos el jardín en el auto y al llegar frente a la entrada, bajamos del auto, e inmediatamente vino el valet parking, el cual iba vestido con una camisa de manga larga blanca, pantalón negro, zapatos negros y un pequeño pañuelo en el cuello color vino, se llevó el auto y nos encontramos con varios fotógrafos y reporteros, que estaban lejos gracias a los guardias de seguridad, caminamos por una gran alfombra roja y pasamos a la recepción del hotel, la cual era innecesariamente enorme, las paredes eran de color crema que tenía unos detalles en forma de abanicos, nos acercamos a la barra de recepción la cual tenía la típica campanita, tenía ganas de tocarla pero ahí estaban los recepcionistas que vestían igual que el valet parking, solo que las mujeres llevaban falda negra en tubo, había 4 recepcionistas, la barra era larga en rectángulo, de color blanco, que tenia de adorno plantas pequeñas, y en la parte de atrás de la recepción caía agua, que igual era iluminada, y en la parte de arriba había un barandal por el cual pasaban algunos, lo que yo creo eran invitados de la fiesta, nos acercamos y mi padre empezó a platicar con un recepcionista yo me fije en todo lo que me rodeaba vi que del lado derecho había una gran sala y que a su lado había unas grandes escaleras que igual estaban adornadas con plantas y del lado izquierdo una fuente, que alrededor tenía más asientos, había hombres con elegantes trajes, y mujeres con largos o cortos vestidos de todos los colores, desde negro a uno que otro rosa chillón , algunos estaban sentados en la gran sala, y atrás de esa sala había una gran pecera que cubría casi toda la pared, inmediatamente me fui hacia ella, al estar frente a ella quede impresionado, había pequeños y grandes peces, de todos los colores,
-¿impresionante verdad?- una voz detrás de mí, era mi madre quien también veía los peces
-si- seguimos viendo por un rato más la gran pecera hasta que mi padre nos llamó para reunirnos con él,
-la fiesta se está llevando a cabo en el piso 12- subimos a uno de los 3 elevadores que había, el interior del elevador no era menos impresionante, el piso estaba cubierto por una alfombra roja, el techo y las paredes eran de madera, había 3 lámparas y en la pared de en medio había un tubo dorado, mi padre presiono el botón con el número 12, los botones prendían, había otros botones, un rojo, y unos cuantos otros que no sé de qué eran, antes me gustaba subir y bajar en el ascensor, pero después de muchos regaños, entendí que “no era divertido”, se escuchó la pequeña campanita que anunciaba que habíamos llegado y salimos, caminamos por un largo pasillo, que tenía una alfombra color verde, no chillón, más bien elegante, como todo en ese hotel, las paredes eran de madera oscura, y en ellas había puertas, que empezaban del número 620, los números estaban en color dorado, y al lado de cada puerta había lámparas de pared, que las mismas iluminaban el pasillo, gracias mama por vestirme bien, si no, me sentiría un poco incómodo, al final del pasillo había una gran puerta de madera, color blanca que estaba abierta y a cada lado había 2 personas con el mismo uniforme, llegamos con ellos
-sean bienvenidos, por aquí- nos guio una joven como de 25 años, era rubia, y su cabello estaba en una coleta, nos guio por el salón de eventos, el cual era enorme, paredes blancas y muchas mesas y sillas alrededor de una gran pista de baile, la cual era de color café claro en la cual ya había parejas bailando al ritmo de la lenta música que se escuchaba, la cual eran violines, la pista estaba iluminada por una gran lámpara de lagrima, que tenía muchos, pero muchos cristales que caían en forma de fuente, los focos daban una luz blanca, había un escenario, y a su lado había una orquesta, ni grande ni pequeña, vaya algo “normal”,
-Kalil, vamos a ver a nuestro anfitrión- se agarró del brazo de papa y caminamos entre la gente, como estaba muy grande el salón había de sobra espacio, pero de seguro faltaban invitados ¿Quién conocería a tanta gente?, y ¿sería tan importante como para que todos sus invitados fueran?, que lío, caminamos un poco más, yo solo veía a la gente que había, algunas tenían copas en su mano, otras reían y platicaban, había de todo, gente mayor con muchas canas, hasta a adolescentes, no había niños, de seguro muchas niñeras están trabajando hoy, nos detuvimos y vi frente a nosotros… ¡al papa de Logan! Y junto a él estaba ¡la señora Lorena!... ¡claro!, este hotel es de ellos, de los Labarazii, ¿Cómo fue que se me olvido?... eso quiere decir que ha de andar por aquí ¡Logan!, de acuerdo, respira Kalil, de seguro aún no sabe que estas aquí, debes fingir dolor de estómago y me iré enseguida,
-¡que guapo estas Kalil!- me saco de mis pensamientos la señora Lorena, baje la vista al piso blanco que había
-¿verdad que si?, fue justo lo que le dije- la acompaño mi madre, ambas empezaron a platicar
-¿Qué tal Kalil?- me saludo el señor Labarazii
-hola, señor Walter- no me olvide de su nombre, que bueno
-espero la pases muy bien, hay varias jovencitas por aquí, así que saca a alguna a bailar- no gracias señor, no es que no supiera bailar, pero podría verme Logan…
-claro, señor Walter- ambos hombres se alejaron de mí, y mi madre seguía platicando con la señora Lorena, hasta que se llevaron un momento a la señora Lorena
-qué ambiente ¿no crees Kalil?- si madre, no tengo oxígeno en mis pulmones,
-si…mama me duele el estoma…-
-esta vez no caeré en esa mentira Kalil, nos quedaremos todos- no funciono mi plan, y es que con él, ya me había salvado algunas veces, y otras simplemente tenia suerte y estaba enfermo, ahora ¿Cómo saldría de esta?
-está bien mama- deje caer mis hombros,
-¿porque nos vas a buscar a alguien para bailar?, o a socializar un poco Kalil, no te hará daño- me miro con una sonrisa, le sonreí un poco y asentí, momentos después llego la señora Lorena y me separo de mi madre con la excusa de que la presentaría a sus “amigas”, y ahí estaba yo, solo, ¿ahora qué hago?, mis padres dejaron a su hijo en pleno campo de guerra, y con una “bomba” que no sabía en donde estaba, era mejor evitar lugares solos, así que camine un poco y vi a lo lejos un gran bufet, algo de comida no estaría mal, me acerque y vi cosas que jamás había visto en toda mi vida, había de todo ahí, y creo que cosas vivas, había bebidas en copas, las bebidas eran de colores como el rojo, amarillas, el rojo no sé qué cosa era, pero el amarillo de seguro era champagne, había también vino, y otras cosas más,
-¿desea algo señor?- atrás del bufet había 2 chefs que tenían su típico traje blanco
-no gracias… pero ¿Qué es lo de la bebida roja?- no quería quedarme con la duda
-está hecha a base de fresa, pero tiene una gran cantidad de alcohol, que no le recomiendo tomar, si es que no quiere perderse la celebración- me sonrió
-le haré caso- el chef asintió y ahora le prestaba atención a una joven que llego, alguien me tomo del brazo, me espante, me dio la vuelta ligeramente y… me encontré con unas jovencitas que me rodeaban, por un momento creí que era Logan
-ven se los dije, es el hijo de los señores Kelsen, y tu nombre es Kalil, ¿verdad?- me pregunto una que era un poco más baja que yo, tenía un vestido rojo, un poco más arriba de la rodilla y su cabello era rubio, utilizaba tacones negros no tan altos
-si…- ¿Cómo sabían mi nombre?, me habrán investigado… si claro, como no, al lado de ella había otras, cuatro en total, una tenía un vestido azul, era más alta que yo, pero por los tacones que traía, que igual eran azules, ella era castaña, otra con un vestido rosa largo, era alta, pero igual por los tacones, era rubia, la otra traía un vestido verde más arriba de la rodilla, tenía tacones negros igual de altos
-me llamo Marie- puso una mano sobre su pecho- y ellas son Julie, Victoria y Sofie- señalo a las otras tres, Julie era la del vestido azul, Victoria el de rosa, y Sofie tenía el verde
-hola…- baje mi vista al piso
-pero vaya que eres lindo, ¿estas con pareja?- me pregunto Julie,
-no…- me cohibí un poco más, todas me veían muy de cerca, y me rodeaban, impidiendo que salga corriendo
-¡perfecto!, entonces vayamos a bailar- menciono Victoria
-alto, yo fui quien le hablo primero así que yo primero bailare con el- ese comentario lo dijo Marie, quien ya me tomaba de un brazo
-Marie, que egoísta, déjanos algo esta noche- todas empezaron a discutir un poco, yo no sabía qué hacer, ¿y si les digo que soy gay y que ya me dieron?, no eso no sería bueno, tal vez alguna sería una loca fujoshi de esas, y empezaría a acosarme con preguntas, era mejor evitar eso, por fin empecé a escuchar la conversación
-bailare una pieza con él, y después se los dejo- me apretó un poco más Marie, las otras lo pensaban, llegue a visualizar por atrás de una de ellas a alguien… creo que era Logan… si, si era, estaba platicando con otras chicas, y tenía en la mano una copa con champagne, aun no me veía, estaba sonriendo con la gente que estaba a su alrededor, no vi si tenía zapatos…¡tranquilo Kalil!, respira, y tranquilízate, debía salir de ahí…, pero estas chicas… me hice un poco de lado disimuladamente y la cabeza de una de las chicas me cubrió de la vista de Logan
-entonces está decidido- me jalo un poco Marie, ella había ganado,- vaya solo bailare una pieza contigo, y después les toca a mis amigas- llegamos a la pista, la tome por la cintura, no junte tanto nuestros cuerpos, fue delicadamente, después juntamos nuestras manos, ella puso su mano en mi hombro y empezamos a movernos al ritmo de la música, era lenta, que mala suerte tengo, bailamos junto a otras parejas,
-eres muy guapo, me sorprende que no tengas pareja- menciono Marie cerca de mi oído, pero no me estremecí nada
-si…- para separarla un poco de mí, aproveche una parte de la canción y le di una vuelta, ahora ya estábamos a la misma distancia del principio, pero se volvió a acercar a mí, y me dijo al oído
-¿quieres una pareja?- me aleje un poco de ella, dándole nuevamente otra vuelta
-no gracias- ahora ando pensando en otras cosas como para preocuparme en tener una novia, y menos a alguien que apenas conozco… recordé a Logan, con el me salté todo y caímos en la cama
-pero si eres malo…- me beso la mejilla, y se acercó más a mí, para mi suerte la canción termino, e inmediatamente di las gracias, tenía que salir de ahí ya, estaría más a salvo en mi casa y no me importaba el regaño de mis padres, me alejé de la pista, pase al lado de las demás chicas, ignorándolas monumentalmente, pase por toda la gente de la fiesta y me dirigí a la salida… empecé a caminar por el pasillo, llegue frente al elevador, presione el botón que lo llamaba, espere un poco, y cuando las puertas se abrieron.. ¡adentro estaba Logan!.