Jong In sonrió mientras Luhan abría más la boca para otra mordida. Maldición, su pareja era sexy con eso ojos. Tomando otra uva del tazón, Jong In la deslizó sobre el labio inferior de su pareja.
─ Abre más, bebé.
Luhan lo complació, pasando su lengua por la piel de la fruta. Jong In gimió. Incapaz de resistirse, él apartó la fruta y la reemplazó con su lengua.
Jong In hizo el tazón a un lado mientras se rodaba sobre su pareja. Ellos estaban acostados en la cama disfrutando de un perezoso domingo en la mañana.
Su pene se movió cuando su pareja chupó su lengua, riéndose mientras le daba un húmedo beso. Luhan no era el mismo hombre que había conocido hace un mes. Su pareja ya no se estremecía cuando uno de los guerreros se enojaba o Jong In se molestaba. Eso era una buena señal.
Jong In tomó una de las almohadas de debajo de la cabeza de Luhan y la colocó bajo el trasero de su pareja.
Luhan rio. Jong In nunca se cansaba de oír ese sonido. ─ ¿Qué estás haciendo?
Jong In se lamió los labios mientras veía la extendida vista debajo de él. Un delgado, y firme cuerpo con risos caobas alrededor de su erecto y glorioso pene. Le sonrió diabólicamente a su pequeña pareja, mientras bajaba hasta que sus ojos estaban al nivel de ese hermoso y pulsante eje.
Tomó el eje en su puño y lo llevó a sus labios mientras se abría más. El miembro estaba caliente y el pre semen salado. Jong In gimió cuando tomó el pene de su pareja hasta que la nariz tocó los recortados rizos.
Luhan se movía debajo de él, jadeando y gruñendo, jaló el cabello de Jong In, las mejillas de Jong In se hundían, sacó el eje de Luhan de su boca en un largo y tenso movimiento de succión.
─ Oh. —Luhan jadeó, empujando su pene de nuevo hacia la boca de Jong In, jalando su oscuro cabello. Jong In giró la lengua alrededor de la corona y empujó el pene por su garganta.
─ ¡Deja de torturarme! —Luhan gritó al cielo mientras se retorcía. Jong In se rio alrededor del pene de su pareja. Él deslizó sus manos bajo el culo de su pareja, usando el cuerpo de su pareja para empujar y sacar el eje de Luhan de su boca.
─ Jong In —Luhan gritó mientras se tensaba, sus nalgas se apretaron en las manos del moreno mientras blanco y caliente semen era disparado en la garganta de Jong In.
Jong In entró en la recamara después de una larga reunión con los Centinelas, vio a su pareja en el frio suelo con los ojos cerrados y la piel pálida.
Le gritó a Siwon que le hablara al médico lobo. Levantando a su pareja, Jong In lo llevó a la cama, cubrió a su pareja y corrió al cuarto de baño por una toalla fría. El débil pulso de Luhan le preocupó más que cualquier otra cosa. Dejó la tela en la frente de Luhan y acarició su cara con la punta de sus dedos.
Veinte minutos después el corpulento doctor entraba al cuarto. Él examinó a Luhan, tomó muestras de sangre y examinó su cuerpo entero. Chasqueó la lengua varias veces, negando con la cabeza y murmurando para sí mismo. Finalmente acomodó las sabanas alrededor de la frágil apariencia de Luhan y fue al cuarto de baño a lavarse las manos.
El doctor salió con el ceño fruncido. — He sido doctor durante seiscientos años y créeme cuando te digo, tu pareja ha sido envenenada. Fue con algo suave. Solo querían que enfermara. Eso seguirá su curso y mejorara por si solo en un día. El vómito debió de haberse llevado la mayor parte de eso. Recomiendo muchos líquidos y electrolitos por el vómito. No comida solida hasta que su estómago se recupere.
La cabeza de Jong In se fue hacia atrás como si le hubieran golpeado. ¿Envenenado? ¿Quién podría envenenar a su pareja? ¿Cómo? ¿Cómo alguien pudo haber entrado y hacer eso? Jong In dejó caer la cabeza hacia atrás aullando con todo su dolor e ira. Chanyeol y Siwon entraron corriendo al cuarto, sus ojos viendo alrededor del exabrupto de Jong In.
─ ¿Cómo? ¿Sabes cómo él fue envenenado? —La mano de Jong In plana contra la pared, sosteniendo su peso al sentir las rodillas débiles. Esto no estaba sucediendo. ¡Joder! ¿Cómo alguien había logrado entrar a su casa? Se sentó al lado de la cama, viendo al hombre dormido. Luhan estaba acostado de lado sus manos bajo su mejilla. Se veía tan pacifico, pero pálido.
─ Si tuviera que suponer, diría que fue en polvo. Debió haber sido espolvoreado en algo que él comió. Eso le tomaría un tiempo antes de tener el efecto deseado. —El doctor tomó sus cosas, apoyó una mano en el brazo de Jong In. ─ Él va a estar bien, con descanso y muchos líquidos para evitar la deshidratación.
Con eso, el doctor dejó a Jong In con su enferma pareja. El Alfa se acurrucó en la cama, acostándose de lado, pasó sus dedos por el vello en la cara de su pareja. Trazó la línea de su nariz, labios, mentón y cuello.
─ ¿Dices que fue veneno? —preguntó Chanyeol con asombro en la voz.
─ Si, veneno. Quiero que revisen la cocina. Toda la maldita casa. Quiero que todo el mundo sea interrogado. Encuéntralo, Chanyeol. —Jong In siseó.
Chanyeol inclinó la cabeza, dio media vuelta y salió.
─ ¿Necesitas algo? —Siwon estaba apoyado contra la pared, sus tobillos cruzados y las manos en el bolsillo. Jong In nunca había visto a su beta perder el control. Nunca.
─ No, Siwon. Gracias. —Jong In se giró hacia su pareja cuando la puerta se cerró. Sintió una opresión en el pecho al pensar que alguien quería lastimarlo. Apoyó la mano en la cadera de Luhan y frotaba con su pulgar arriba y abajo más para confortarse él mismo que a su pareja. Luhan gimió y dobló las rodillas. Jong In iba a matar al responsable.
Estaba corriendo en el bosque. Tenía que escapar. El lobo estaba alcanzándolo, sus dientes eran evidentes. Oyó un golpe detrás de él cuando saltó un árbol caído. Su corazón se aceleró, su cabeza dolía del bombeo de la adrenalina. El lobo estaba cerca ahora. Podía sentirlo. Sabía que si el lobo lo atrapaba, el no sobreviviría. Aumentó su ritmo, el lobo aulló mientras él tomaba aire, la saliva le escurría y las garras lo alcanzaban y...
Luhan se sentó gritando. Sus manos en su espalda tratando de sentir las marcas de garras en su espalda. Brazos lo agarraron y lo bajaron. Luhan movía la cabeza mientras trataba de alejar las manos.
Jong In.
Luhan presionó sus sienes con sus palmas. La cabeza se sentía como si hubiera sido golpeada al ritmo de una melodía. Sus ojos ardían debido a la luz en la lámpara al lado de su cama. Sentía su boca como un trapo que raspaba su lengua. ¿Tendría gripe?
─ Tranquilo, bebé. Acuéstate. Descansa.
─ Quiero orinar. —Luhan trató de moverse, pero su cabeza se cayó mientras el cuarto se inclinaba.
Luhan sintió que Jong In lo levantaba en sus brazos y caminaba por el cuarto. Cuando llegaron al cuarto de baño su pareja se sentó en el suelo sosteniéndolo.
Luhan se puso de pie, sus piernas estaban débiles, sus manos temblaban mientras trataba de sostenerse. Cuando su chorro fue hacia todos lados menos a su objetivo, Luhan comenzó a llorar. ─ Has que se vaya. Ya no quiero tener gripe.
Luhan se inclinó hacia adelante y vomitó sobre la parte de atrás del sanitario y un lado del lavabo. Hubiera colapsado en el suelo si no lo hubieran atrapado.
Su pareja humedeció una toalla y le limpió la boca a Luhan. Jon In jaló a Luhan de nuevo a sus brazos. Cerró la puerta del cuarto de baño debido al fuerte olor. Su pareja tomó la sabana de la cama, se sentó en la silla de la esquina del cuarto. Envolvió a Luhan hasta el cuello y lo acunó entre sus brazos.
─ ¿Hola?
─ Hola. Soy SEUNG RI del centro recreativo. ¿Esta Luhan disponible?
─ No en este momento. ¿Puedo ayudarlo? ─ Chanyeol se preguntaba por qué alguien del centro recreativo quería hablar con Luhan. Él era un voluntario. Faltar un viernes no era como faltar al trabajo.
─ Um, bueno, necesito hablar con él acerca de Baekhyun. —El tipo dudaba. A Chanyeol no le gustaba el tono. Con todo lo que estaba pasando, no iba a haber secretos. Y ¿Quién jodidos era Baekhyun?
─ Explícate.
─ Bueno, si puedes decirle que cuando él no apareció, Baekhyun se enojó mucho. Tuvo un ataque de ansiedad y tuvimos que llevarlo al hospital. Solo quería ver si él podía ir y calmar a Baekhyun. Él y Baek han comenzado a ser amigos y pensé que si nadie podía calmarlo quizás Luhan si pudiera.
A Chanyeol no le gustó eso. ¿Estaría Luhan engañando a Jong In? No, E.Den estaba ahí. E.Den no hubiera tolerado una pareja errante, ¿podría? No.
─ Le daré tu mensaje. — El tipo lo agradeció y renuente colgó.
Chanyeol tocó suavemente en la puerta de la recamara de Jong In. Cuando oyó la voz del Alfa decir que entrara, Chanyeol asomó la cabeza a través de la puerta.
─ ¿Cómo está? —Chanyeol lo sentía por la pequeña pareja.
─ Descansando. ¿Necesitas algo? —preguntó Jong In.
─ Un extraño acaba de preguntar por Luhan. Uno de los tipos del centro recreativo llamó debido a alguien llamado Baekhyun. Dice que cuando Luhan no se apareció, ese Baekhyun tuvo un ataque de ansiedad y necesitó ser hospitalizado.
─ Oh, dios. Tengo que ir. —Chanyeol vio como Luhan trató de enderezarse y como se puso verde. — Tengo que ayudar a Baek.
─ Acuéstate, bebé. ¿Quién es Baekhyun, y por qué él tuvo un ataque de ansiedad por tu ausencia? — El Alfa interrogó a su pequeña pareja.
─ Él tiene un ligero retraso. Comenzamos a ser amigos, y él se apoya en las rutinas. Yo la quebré al no presentarme, tengo que ir a ayudarlo. —Luhan le explicó.
─ Puedo ir y explicarle que estás enfermo. ¿Eso ayudaría? ─Chanyeol había imaginado al pequeño niño llorando y pidiendo por Luhan. Se sintió como un imbécil por ser tan frio con SEUNG RI al teléfono.
─ Por favor. ¿Puedes darle el número de mi teléfono y así podría hablar con él? Lleva a E.Den, él conoce a Baek. Ve a…
Chanyeol vio como Jong In levantaba a Luhan y corría al cuarto de baño, llegando justo a tiempo para que Luhan vomitara las galletas.
─ ¿Qué quieres decir con que trajo al chico aquí? Se suponía que Chanyeol le daría a Baekhyun el número de teléfono de Luhan, no que lo secuestraria. ─Jong In demandó. ¿En qué estaba pensando Chanyeol? Obviamente no estaba pensando. La familia de ese hombre se volvería loca cuando se dieran cuenta de que Baekhyun estaba perdido.
Jong In soltó el aire, pasó su mano por la cima de su cabeza. ─ Chanyeol debe tener una buena razón. Por favor dímela ─Jong In estaba de pie con los brazos cruzados sobre su pecho, esperándola respuesta del guerrero.
─ Porque, Baekhyun es su pareja, señor ─E.Den contestó.
─ Mierda ─dijo Jong In, pellizcándose el puente de la nariz. ─ Bueno, supongo que no tenemos elección solo defenderlo. Cuando él acomode a su pareja, dile que venga a verme. ─E.Den inclinó la cabeza y cerró la puerta detrás de él.
Jong In se sentó en la silla de cuero detrás del escritorio. Acarició su labio inferior con su pulgar, pensando profundamente. Sabía que Chanyeol defendería a Baekhyun a muerte. Jong In no se interpondría entre los dos y lo sentía por el tipo que lo intentara. Esto iba a ser un gran lio.
Jong In se recostó en la silla detrás de su escritorio. Se pellizcó el puente de su nariz y cerró los ojos. ¿Qué demonios estaba sucediendo? Su hogar había pasado de ser tedioso y aburrido a caótico. No es que se quejara de eso --su pareja había sido la única razón de su alegría-- pero ¿veneno y ahora secuestro?
El culpable de haber envenado a su pareja aún no había sido descubierto. Jong In veía a cada uno de los guerreros con sospecha. ¿Si no puedes confiar en tu manada en quién puedes?
Jong In inclinó la cabeza, viendo al techo. Encontró que había mucho qué hacer últimamente. Hombre, los candiles necesitaban limpiarse. Suspiró y pasó sus manos por el despeinado cabello.
Tocaron la puerta.
─ Voy a la ciudad ¿Se te ofrece algo? ─Baekho preguntó viendo a Jong In con compasión en su mirada.
Jong In movió la mano. ─ No ─le dijo─ Tráeme al responsable. Eso es lo que puedes traerme.
─ Desearía poder hacerlo. Me gustaría despellejarlo vivo.
Baekho palmeó el trasero de Ricky ─ Vamos, Rick ─le dijo con un grueso murmullo. ─ Apunta y lánzalo.
Ricky se rio, apuntó, y lanzó el dardo.
Al blanco.
Ricky enderezó su delgado cuerpo y levantó su brazo al aire. Baekho moviendo sus cejas se acercó a Ricky y lo jaló a una de las recamaras. Su aventura fue muy corta cuando alguien golpeó con el puño la puerta del frente.
─ Maldición. ─Baekho soltó la mano de Ricky. Será mejor que sea una emergencia de vida o muerte.
Abrió la puerta y vio a un hombre enojado con las manos en sus caderas lanzando dagas con la mirada. Baekho levantó la cabeza, respondiendo la mirada y preguntándose quien infiernos era ese imbécil.
─ Fui al hospital y me dijeron que mi hermano Baekhyun está aquí. Entréguenmelo. ─El tipo movió su dedo en el aire frente a la cara de Baekho.
Oh, demonios, no...
Baekho le cerró la puerta en su cara. El tipo comenzó a golpear de nuevo. ─ Iré con la policía si no me entregan a mi hermano, presentaré cargos por secuestro. ─Gritaba a través de la puerta cerrada.
Baekho giró los ojos, abrió la puerta de nuevo. Le señaló con el dedo un punto a la derecha de la entrada. ─ Espere justo ahí. ─Baekho cerró la puerta cuando el hombre hizo lo que se le dijo.
Baekho hizo una pausa lo suficientemente larga para darle un rápido beso a Ricky. ─ Ahora regreso. ─ Fue a buscar a su Alfa y lo encontró en la recamara sosteniéndole a Luhan una pajilla mientras Luhan bebía su caldo. Su ira desapareció al ver los gestos de Luhan ante el sabor. Luhan era su amigo. Él urgentemente quería encontrar a quien lo envenenó. El culpable moriría.