Taemin estaba sentado en los escalones del frente disfrutando el cálido clima. Corea era diferente. Encontró que había cosas aquí que realmente disfrutaba. Las personas en la casa en la que ahora vivía eran amables. Aún se estremecía cuando pensaba de lo que él y su primo habían escapado. Lo que había empezado como una pesadilla había tomado un camino diferente para la familia.
Cuando él y Ren fueron secuestrados rumbo al supermercado, Taemin pensó que su vida como la conocían había terminado. Por lo que había escuchado de los bandidos, el sexo era la única cosa que conocería el resto de su vida. Gracias a Dios por los amables extraños.
Ren había llorado, gritando que quería regresar a casa cuando los lobos evitaban a su primo. Ren había rogado regresar a la caja, le decía a Taemin que si podían regresar. Si solo las cosas fueran tan fáciles. Ahora su pareja estaba aquí. Ahora su hogar estaba aquí. La vida que vivía en Japón era dura, luchaban para sobrevivir después de la muerte de su madre.
Aunque su primo tendría momentos difíciles para adaptarse, Taemin sabía que su vida ahora era mejor para Ren y para él mismo.
— ¿Está todo bien, dragonfly?— Taemin se giró para ver a su pareja en el marco de la puerta, su mirada era triste. Estaba orgulloso de llamar a su lobo suyo. Minho era hermoso y gentil. Él había hecho que la primera experiencia de Taemin con el sexo fuera asombrosa. Ahora se sentía tonto por temerle tanto, pero se alegraba de haber esperado por su lobo.
— Solo odiaba ver a Ren tan deprimido. Desearía poderlo llevar a casa, pero ahora esta esa su casa. Se ajustará con el tiempo. —Taemin quería a Minho, quería hacerle el amor de nuevo. Aún era demasiado tímido para pedirlo directamente, o para ser seductor con su pareja. Entonces, ¿cómo iba a hacerle saber que quería que lo follara hasta sacarle el cerebro? ¿Agitando las pestañas? ¿Moviendo el cabello? ¿Riéndose graciosamente? No, eso era lo que hacían las mujeres. Él era un hombre. Entonces, ¿qué iba a hacer?
Siguió a Minho a su habitación, cerrando la puerta detrás de ellos y se sentó en el cojín junto a la ventana. «Solo dilo». ¿Por qué es tan difícil? Él fue directo cuando dijo que estaría arriba, ¿Por qué se mordía la lengua ahora?
— Um, Minho… ¿Qué hora es?— Ugh. Eso no debería de ser tan duro. Tomando una profunda respiración, Taemin lo soltó— Quieroquemefolles. —Está bien eso fue brillante.
— ¿Qué fue eso, Taemin?
Genial, ahora él tenía que repetirlo, lentamente. Quizás solo debería desnudarse. Eso tenía que funcionar. Taemin se giró de espaldas a Minho. Con temblorosos dedos, desabotonó la camisa, se la quitó y cuidadosamente la dobló arriba de la cómoda, palmeándola para asegurarse de que estaba bien. «Deja de demorarte». Sus manos alcanzaron el botón de sus pantalones de vestir, pero estaba temblando tanto que no lograba desabotonarlo.«Relájate. Lo has hecho antes, una vez. No es gran problema. Él es tu pareja, solo ve por ello».
Se quitó los zapatos, dejándolos juntos y asegurándose que ellos estuvieran acomodados derechos.
Taemin trató de nuevo de desabrocharse los pantalones y finalmente ellos cooperaron. Deslizó el cierre y vaciló. El aire frio rozó su trasero cuando sus pantalones de vestir cayeron a sus tobillos. «Sal de ellos tonto». Tomando una profunda respiración, Taemin sacó sus pies y se inclinó a levantarlos. Doblándolos y también palmeándolos. Está bien, los calcetines y la ropa interior eran lo último que le quedaba. Se quitó los calcetines, los formó en par y los dejó sobre los zapatos. No, ellos no deben de ir ahí. ¿Quizás debería llevarlos a la canasta? Después.
Está bien, solo le quedaba la ropa interior. Taemin tomó una profunda respiración, dejando salir una larga exhalación. Hundió los dedos en la pretina y…«no puedo hacerlo. Si, tú puedes. Está bien, ahí va…de nuevo».Taemin se los quitó, también los dobló y los palmeó dejándolos en su lugar.
«Da la vuelta. Al infierno que se iba a girar». Taemin comenzó a caminar hacia atrás a la cama, cubriendo su pene. Se sentó en la cama y tomó la oportunidad de ver a Minho.
Minho seguía de pie sonriéndole. «Está bien, ¿mi desnudez no le dice que quiero tener sexo? ¿Por qué él sigue parado ahí?»
— ¿Puedes repetir lo que dijiste?
Mierda. Minho iba a hacer que lo repitiera. Oh, hombre. Los labios de Taemin se movieron pero no salió nada. Quizás Minho podría leer el deseo en sus labios. Su pareja seguía de pie esperando.
— Yo, uh, quiero que tú…bueno, eso es lo que dije… ¿puedes?— Su, coreano quebrado, totalmente.
— ¿Puedo qué?
— Um, ¿hacerme el amor? — «Ahí lo tienes, lo hice. ¡Bravo por mí!»
— Todo lo que tenías que hacer era pedirlo. —Minho le sonrió cínicamente— Ven aquí, dragonfly. Desnuda a tu pareja.
Taemin se deslizó fuera de la cama y sus manos inseguras desabrocharon la mezclilla, lentamente bajaron el cierre, entonces lo tomó de la pretina y bajó los jeans hasta los tobillos. Se puso de rodillas, le quitó las botas, sacó los jeans de los tobillos y retiró los calcetines. Minho estaba desnudo de la cintura para abajo. Taemin se moría por darle una buena mirada al pene de su pareja. Se sentía enorme, pero ¿cómo se vería? Con piernas temblorosas se puso de pie. Su mirada lentamente bajó hacia el pene que le saludaba. ¡Santa mierda! ¿Eso había estado dentro de él? ¿Cómo?
— Muéstrame cómo complacer a tu pareja. —Guau. Taemin se palmeó mentalmente la espalda. Él había logrado ser audaz.
— Arrodíllate y toma mi pene dentro de tu boca. —Su lobo se quitó la camisa por la cabeza y la lanzó a un lado.
Taemin hizo lo que se le dijo. Abrió ampliamente la boca y tomó la esponjosa cabeza del pene. Nunca había hecho esto antes y esperaba complacer a Minho. Su lengua lamió alrededor de la bulbosa cabeza, saboreando por primera vez a su pareja. El sabor era delicioso, picante y dulce al mismo tiempo.
— Chupa la cabeza del pene, Taemin. —Minho le instruía entre dientes.
Taemin envolvió su mano alrededor de la base y comenzó a chupar la corona, lamiendo con su lengua el líquido claro que se escapaba de la ranura en la punta, Minho gimió y sus caderas se movieron ligeramente. Animado, Taemin tragó otro centímetro.
— No dije que tomaras más —Minho gruñó.
Taemin se apartó. Un almizcleño olor llenó su nariz. El pene de Minho se movía y Taemin chupaba tan duro sin tomar más.
— Eso es, dragonfly. Chúpalo. Acuna mis bolas en tus manos.
Levantando la mano, sintió el peso de las bolas de Minho en su palma. Las rodó y las levantó, entonces las bajó. Las caderas de Minho comenzaron a moverse, su pene se hundió más adentro. ¿Se suponía que tomara más? Minho se empujaba. Entonces debería de estar bien. Taemin se abrió aún más, permitiendo que el eje entrara más profundo.
— Chupa mi pene bebé. —Su pareja pasó su mano por el cabello de Taemin y una onda eléctrica lo recorrió ante el suave toque.
Taemin comenzó a bombear la cabeza, tomando tanto como podía. Saliva bajaba por su mentón. Él comenzó a ser más audaz, apretó sus bolas y relajó los músculos de su garganta. El pene de Minho se deslizó más profundamente. Las mejillas de Taemin se hundían chupando más duro y bombeando más rápido.
— Voy a correrme. —Minho dejó caer la cabeza hacia atrás, sus caderas se empujaron y sus puños se presionaron. Su pareja rugió cuando disparó su semen hacia la garganta de Taemin. Estaba tratando desesperadamente de tragar todo.
Minho levantó a Taemin, besándolo profundamente como un hombre desesperado.
— Watashi ni wa ookami no toriko ni sa seru. —Taemin gimió.
— Se oye hermoso. ¿Qué dijiste?
— Hazme el amor, lobo.
Su pareja gruñó acostando a Taemin en la cama. Taemin se deslizó para que se acomodara el gran lobo que subía sobre él.
— Colócate sobre tus manos y rodillas. —Minho le indicó.
Taemin se rodó, su cabello cayó hacia su cara cuando tembló ligeramente debido a la excitación y los nervios. Ellos lo habían hecho antes, pero aún se sentía nuevo en esto. En esta posición al menos. Su agujero temblaba cuando un dedo se empujó contra él. Sintió que separaban sus nalgas y entonces el dedo entró.
Su cabeza bajó, las sensaciones lo inundaban. Se tensó cuando un segundo dedo lo penetró.
— Relájate, dragonfly. Solo relájate. Te tengo. —La fuerte voz de Minho comenzaba a ser como un hechizo hipnótico en la mente de Taemin. Su cuerpo se relajó. Sus manos se abrieron. Dejó ir el miedo y permitió que las sensaciones fluyeran libremente a través de él.
— Eso es bebé.
Los hombros de Taemin tocaban el colchón, permitiendo a su trasero levantarse más. Él quería esto, quería sentir la sensación de expandirse, englobando otro dedo. — Más —jadeó con necesidad.
La cama se hundió cuando Minho se movió detrás de él. Una mano tocó el interior de su muslo, animándolo a abrirse más. Los ojos de Taemin se abrieron más cuando entró por segunda vez en su vida.
— Mío. —Minho lamió el hombro de Taemin. Taemin se fragmentaba, su semen hizo erupción cuando Minho se empujó más profundamente— Minho, por favor —Taemin gritó. Las sensaciones giraban fuera de control. Sentía como si estuviera dando tumbos con los brazos abiertos y nada a qué aferrarse— Es demasiado.
Minho envolvió a Taemin en sus poderosos brazos mientras Taemin gritaba. Minho mordió su hombro, sosteniéndolo en el lugar mientras veía cómo entraba y salía de Taemin.
— Necesito —Taemin rogó. No estaba seguro de que necesitaba, pero su cuerpo estaba en llamas. Un remolino de sensaciones y emociones lo asaltaban, abrumando su mente y su cuerpo.
Su pareja tomó su pene y bombeó rápidamente mientras Taemin gritaba su nombre. Minho estaba sobre Taemin, manteniendo la conexión tanto como le era posible, pero no fue suficiente. Taemin se retorcía cuando su corrida explotó en una dinámica tormenta de fuego y pasión.
Minho gruñó dentro del hombro de Taemin, su pelvis rápidamente bombeando. Taemin sabía que su pareja iba a correrse. Minho gimió aun con sus caninos dentro de la carne bebiendo de él.
Las manos de Taemin se aferraron a los antebrazos que envolvían su pecho. Sosteniéndose mientras jadeaba y regresaba a la tierra. Parpadeó varias veces para recuperar el foco.
— Mío. —Minho ronroneó esta vez. Lamiendo su cuello. Taemin cerró los ojos. Lo único que quería ahora era acurrucarse con su lobo y dormir.
Taemin y Minho estaban en la cocina. Taemin sentado en el regazo de Minho que lo alimentaba con cucharadas de helado, lamiendo el lado de su boca cuando las gotas amenazaban con bajar de los labios a su mentón.
— Ahora, así es como se come el helado. —Baekho se reía mientras tomaba una botella de agua del refrigerador y salía.
— ¿Por qué él esta tan triste, Minho? —Taemin abrió la boca para otra cucharada. Minho vio la pequeña lengua rosa salir y lamer el labio inferior. Él lo quería de nuevo.
— Es complicado. Él y Ricky han sido amantes por mucho tiempo pero no son pareja. Ricky recientemente descubrió a su pareja y Baekho está pasando momentos difíciles por eso. —Minho lo sentía por el guerrero, pero no había nada que pudiera hacer acerca de eso. Una vez que una pareja es encontrada, nadie interfiere. Baekho tendría que hacerse a un lado y permitir que Ricky esté con su pareja. El pelirrojo incluso se iría. Su pareja era el Alfa de la manada el Este, un alto y musculoso guerrero llamado Chang Jo. Él era uno de los lobos más grande que Minho hubiera visto.
— Es una lástima perder un amor. Espero que las cosas funcionen bien para Baekho. —Taemin pasó su mano por el cuello de Minho y acarició su cabello.
Minho se puso de pie y ayudó a Taemin a ponerse de pie mientras llevaba el tazón al fregadero. — Creo que deberíamos de pasar un día con los guerreros y las parejas, quizás ir a la ciudad, visitar Chinatown. Eso podría ayudar a Ren. Podría hablar con la gente de ahí, quizás eso le ayude con la nostalgia por su hogar.
— Esa es una excelente idea. —Taemin abrazó la cintura de Minho.
Minho jaló a su pareja más cerca. Haría lo que fuera por mantener la sonrisa en la cara de Taemin. Él lo amó desde el instante que puso los ojos en el pequeño hombre y entre más lo conocía más profundamente crecía su amor.
En ocasiones se sentía irreal que su pareja finalmente estuviera en su vida. Demasiados años preguntándose quién sería, o si incluso ya hubiera nacido. Minho, como cualquier otro shifter, buscaba a su pareja, él fue uno de los afortunados en encontrarla.
Con solo ver los hermosos ojos de Taemin recordaba ese hecho todo los días. Quería matar a los hombres que lo habían secuestrado e intentaron hacerle daño a su pequeña pareja, pero al mismo tiempo le alegraba que el horrible evento le hubiera traído a su pareja.
Minho se inclinó y besó la cima de la cabeza de Taemin inhalando su aroma, agradeciendo que ellos hubieran escapado del infierno que pudo haber sido su vida.
—Esto es asombroso —Taemin murmuró mientras su pareja salía de la camioneta— Casi se siente como si estuviéramos de regreso en casa, en Japón. —Los letreros y los olores eran familiares, haciendo que su corazón doliera por la tierra que nunca vería de nuevo.
Ren estaba a su lado burbujeando de emoción. Él corrió hacia uno de los locales, hablando con cualquiera que pudiera hablar su lengua nativa. Minho le había gritado que regresara en varias ocasiones cuando vagabundeaba más lejos. Taemin se reía graciosamente ante la emoción de su primo.
— ¿Dónde infiernos venderán esas correas para niños aquí? —Minho gruñó.
— Esto es cool. —Min Seok sonrió cuando él y Heechul llegaron a un local que vendían pan y pollo.
Ren le rogó a Minho que le comprara unos farolitos, una agenda e incluso un wok (N/T: sartén hondo chino). Taemin veía cómo Minho pagaba por todo lo que Ren tomaba.
Taemin se había asombrado antes de cómo su pareja le gritaba a los otros guerreros que se reían de su primo, diciéndoles que eso lastimaba los sentimientos de Ren. Claro, todos ellos se disculparon por eso. Dijeron que iban a dejar de evitar a Ren si Taemin y Minho prometían no tacharlos de pervertidos.
Taemin estaba feliz de que su primo fuera aceptado de nuevo pero aun así mantenía un ojo en los guerreros. La familia se supone que cuidan unos de otros. Y Ren necesitaba mucha vigilancia.
Eunhyuk finalmente se hizo cargo de estar híper alerta de Ren.
Taemin se rió cuando su primo arrastraba al gran guerrero por todos lados.
Las parejas charlaban acerca de los letreros y Taemin sin duda era el guía honorario, explicándoles las diferentes comidas y costumbres. Ellos compraron recuerdos y comieron en un pequeño restaurante en donde Baekhyun y Luhan ordenaron la mitad del menú. Los propietarios unieron tres grandes mesas para acomodar a todos los grandes guerreros.
Taemin vio cómo Baekhyun se reía graciosamente ante un plato llamado familia feliz. Ordenó todo lo que podía nombrar. Él estaba pegado a las palabras moo goo, pensando que era un nombre divertido. Baekhyun se apoyaba en Chanyeol y extendía sus labios para decir la frase. Chanyeol se agachaba en cada ocasión, permitiendo a su pareja que se divirtiera con eso.
— ¿Está mi pupu listo? —Luhan le preguntaba a la mesera cada vez que se acercaba. Después de la segunda vez que le dijo que no, ella solo rodaba los ojos. Taemin sabía cómo ella se sentía. Jong In jaló la manga de Luhan tratando de que guardara silencio, pero Luhan se estaba divirtiendo mucho.
Jaló a Minho hacia él, viéndolo fijamente a los ojos, nunca lo había visto tan feliz. — Watashi wa anata o aishite. —Besó a Minho en los labios.
— También te amo, dragonfly —Minho le murmuró en los labios.
Taemin estaba en shock por qué Minho le había entendido. Supuso que las palabras, sin importar el idioma, eran reconocidas cuando se decían de corazón.
— Conozco a esos tipos. Ellos nos tomaron —Ren señaló al otro lado del cuarto.
— Siéntate —Jong In le ordenó mientras los seis guerreros se giraron y gruñeron— No los alerten de que sabemos quiénes son. Quiero seguirlos y encontrar a los otros tres hombres.
— Yo voy. —Kang In se disculpó y se fue.
Minho apresuró a Taemin y Ren a entrar en la cocina, no quería que el tipo feo los viera. Ellos salieron por la puerta de atrás con Jonghyun y Kibum esperándolos en el vehículo.
— Los otros se reunirán con nosotros en la casa —Jonghyun les informó mientras se alejaban rápidamente.
Taemin sostenía a su tembloroso primo en sus brazos, tranquilizándolo y asegurándole que estaban a salvo. Ese fue el viaje más largo desde la ciudad, pero una vez que llegaron a la casa, los guerreros Minsoo y Chan Hee estaban afuera, revisando el área y apresurando a Taemin y Ren a entrar.
El resto del grupo llegó veinte minutos después, no querían advertirles al apresurarse y despertar sospechas. Jong In llamó a los guerreros a su oficina.
— ¿Estás bien? —Baekhyun preguntó sentándose al lado de Ren y entrelazando los dedos con los de Ren.
— Estoy bien, cabello de caramelo. —Ren le dio una débil sonrisa. Su primo se giró hacia él. — Todo lo que podía ver era la caja que nos trajo hasta aquí y al tipo feo obligándonos a subir a su bote. No quiero recordar eso. Estaba pasando un maravilloso día. ¿Perdí los regalos que ojos Stormy me compró?
— No, Heechul tomó nuestras bolsas. —Taemin le sonrió.
— Sé la cura para tus preocupaciones. —Luhan le puso un control en las manos a Taemin e inició el juego. La música empezó y todo el mundo gritaba y reía cuando Taemin vencía a Luhan al final de la línea. Taemin hizo su danza feliz cuando su carro cruzó la meta en primer lugar.
— Deberíamos de tener una fiesta —Luhan sugirió— Solo para parejas.
— Suena cool, ¿pero qué es lo que vamos a hacer ahora? —Min Seok preguntó tomando una botella de agua de debajo de la barra.
— No, deja la botella de agua. Pensaba en algo más fuerte.- Luhan tomó siete vasos de vidrio del otro lado de la barra y sirvió ron en todos ellos— Está bien, jugaremos el juego. El que tenga el carro perdedor toma dos tragos.
— ¿Va a hacer que nos castiguen de nuevo?— Heechul entrecerró los ojos y Luhan le dio una traviesa sonrisa— Porque si es así, estoy en esto. —Se rió y tomó el control.
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continuara...