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14. El Lobo de Jaejoong por dayanstyle

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Notas del capitulo:

este es el final de este fic... pero como yo los quiero les tengo una sorpresita a mis nenes lindos para comenzar el 2017 con mas sorpresas y fics que nos alegran el corazon...

      —¿Te gustaría sostener a uno?— Si su pareja se ponía más pálida sería un fantasma.

       Los ojos de Yunho se abrieron más ante la pregunta. —Oh no. lo quebraría. —Su pareja se apartó moviendo sus manos frenéticamente frente a él.

     Jaejoong ignoró eso y lEvantó a uno de los bebés y lo colocó en los brazos de su pareja, mostrándole cómo sostener la cabeza apropiadamente. Yunho se veía bien acunando al bebé.

      —Jaejoong, por favor. Voy a quebrarlo. —Yunho no movía ni un músculo. Eso era bastante cómico. Parecía una estatua sosteniendo un bebé dormido.

      —No, no lo harás. —Palmeó el brazo de su pareja mientras veía a Yunho.

       Chan Hee finalmente reaccionó gimiendo y poniéndose de pie. Se sostuvo la cabeza un momento entonces parpadeó varias veces.

       —Ah, el orgulloso papá finalmente despertó —Jaejoong bromeó. Se giró hacia su pareja y se puso de puntas besando su mejilla.

 

      Yunho sacudió la cabeza y tomó más fuerte al bebé en sus brazos. —Deja eso, pareja. Se me va a caer si me tocas.

      Jaejoong se rió. Él quería que Yunho experimentara esto, mostrarle que no era un monstruo ni un patito feo, era una persona real que tenía sentimientos reales y podía ser parte del grupo familiar, no solo quedarse sentado atrás viendo la vida pasar pero sin participar.

      Chan Hee caminó en trance viendo el bulto en los brazos de Yunho. Jaejoong suspiró, lección número dos: cuidado de infantes.

 

      Jaejoong lEvantó la vista cuando el doctor Bae Yong Joon  entraba al Centro médico. Él descubrió que el médico de los lobos tenía un nombre real. El buen doctor estaba tan acostumbrado a que se refirieran a él de esa manera que nunca corregía a nadie.

 

      —Hola, Doctor Bae Yong Joon . —Jaejoong estrechó la mano del doctor. Llevaba trabajando aquí dos meses. Dos gloriosos completos meses, y amaba cada minuto de eso. El temperamento de su padre había explotado, haciendo su mejor esfuerzo por llamar al Centro Médico y ensuciar su nombre, pero JongIn le había asegurado el trabajo. No tenía de qué preocuparse.

 

      Tenía un horario decente de trabajo, y pasaba cada noche en los brazos de su lobo y Yunho estaba haciendo progresos. No se escondía debajo de la ropa cuando estaba alrededor de Jaejoong. Aun se rehusaba a verse al espejo, pero solo podía esperar que diera más pasos con el tiempo.

—¿Hay algún lugar privado para que podamos hablar?      Jaejoong cerró el expediente en el que estaba trabajando haciendo notas. —Seguro, casi es mi descanso para comer. ¿Por qué no vamos al restaurante?

      Caminaron hacia el restaurante, era una hermosa tarde soleada.

      Cuando ellos entraron, la pareja Donghae les dijo que tomaran asiento. Jaejoong amaba la pequeña ciudad. Se sentía extraña de cierta manera, distintiva. Sabía que la manada tenía algunos negocios aquí. La pareja, Eli, tenía su propio taller, aunque Jaejoong no estaba seguro de que pudiera considerarse pareja. Él era humano, pero su lobo era más el sumiso. El guerrero, Baekho, era propietario del restaurante.

      El doctor Bae Yong Joon  eligió una mesa en una aislada esquina. Agradecieron a Donghae sus menús y ordenaron sus bebidas.

 

      —Tengo los resultados de la sangre de Nana —el doctor Bae Yong Joon  habló suavemente, mientras jugaba con un paquete de azúcar. Jaejoong se inclinó hacia adelante. —¿Y? —Hay una anormalidad en la sangre de ella.

      ¿Una anormalidad? Por alguna razón, eso causó un estremecimiento que recorrió la columna de Jaejoong. Ella era una dulce niña humana y se veía saludable. ¿Qué podía estar mal con ella? Ellos ordenaron su comida mientras el doctor Bae Yong Joon  guardaba silencio.

      Finalmente el doctor Bae Yong Joon  miró alrededor antes de bajar más la voz. —Necesitamos ver al Alfa JongIn. Él también necesita saber sobre esto. Eso puede explicar por qué los rebeldes no se alejan.

       A Jaejoong le habían advertido que los vampiros rebeldes y los lobos rebeldes seguían atacando el pequeño pueblo. A él incluso le advirtieron de los humanos que secuestraron a Byun y experimentaron con él. JongIn le había dicho que había algo que los estaba atrayendo y que los lobos Timber tenían que encontrar qué era. ¿Cómo una pequeña niña estaba en eso?

      Ellos se enderezaron cuando Donghae llegó con su comida. Comieron en silencio mientras más gente llenaba el pequeño restaurante. Jaejoong se moría por preguntar pero sabía que el médico de los lobos no se arriesgaría a que alguien lo escuchara.

Sonrió cuando Yunho entró al restaurante y lo vio, o debería decir que lo olió. Su lobo había aprendido a sonreír más a menudo y eso era hermoso.

     —Hey, bebé. —Yunho se inclinó y lo besó, el doctor Bae Yong Joon  sonrió.

—Hola a ti también, sexy. —Jaejoong le sonrió a su hermoso lobo.

     —Médico de los lobos —Yunho lo saludo inclinando la cabeza y se sentó al lado de su pareja.

—Hola, Yunho. Qué bueno verte afuera.

      Jaejoong se acurrucó cerca. Descubrió que hacía eso siempre que estaba alrededor de él. El hombre olía fuerte.

      —Te veré esta noche en la casa. —El doctor Bae Yong Joon  se despidió, lanzó un par de billetes a la mesa y se fue, dejando a la recién formada pareja disfrutando de su hora de comida.

—Aun me quedan treinta minutos. —Jaejoong movió sus cejas.

      —No vamos a desperdiciarlas —Yunho dijo y besó la piel detrás de su oreja.

      Yunho salió de la mesa, tomó las llaves de Baekho y jaló a Jaejoong escaleras arriba a un pequeño departamento arriba del restaurante. Estaba totalmente amueblado, así que tenía una cama apropiada.

      —¿Trajiste algunos juguetes?— Jaejoong jadeó mientras llegaba a la cama y veía a su pareja.

      —No podría dejar la casa sin ellos. —Yunho se rió y sacó el vibrador y el lubricante de su bolsillo.

      —Primero. —Jaejoong se arrodilló y bajó los pantalones de su niño bonito—. Te ves delicioso. —Jaejoong pasó su lengua a lo largo de la fuerte vena, tomando el presemen y gimiendo ante el sabor. Tragó a su pareja gimiendo y enrollando la lengua alrededor.

      —En la cama, tienes la maldita mejor boca, pero quiero correrme en tu culo. —Yunho tomó una profunda respiración.

       Jaejoong se rió mientras se quitaba su traje de cirugía, Yunho lo lanzó a la cama. Su boca se hacía agua mientras veía a Yunho quitarse la ropa. —Tan hermoso —dijo pasando sus manos por la piel de Yunho. —Gírate. Esto tiene que ser rápido.

 

      Jaejoong se colocó sobre sus manos y rodillas y separó las piernas para que su pareja lo lubricara, entonces deslizó su pene con el mini vibrador dentro de él. Maldición, su lobo era bueno en cuanto al sexo. Su cabeza se fue hacia adelante, siseando a través de sus dientes mientras Yunho se movía de adentro hacia afuera. Las vibraciones estimulaban su próstata enviándolo a otro mundo.

 

—¿Quieres más?

      ¿Qué más podía darle su lobo? Él ya tenía un pene y un vibrador en su culo. Jaejoong no creía que pudiera estirarse más.

Pero Jaejoong estaba lejos de ser tímido en cuanto al placer. — Más r13;gimió.

     Gimió cuando sintió que se abría más. ¿Qué estaba haciendo su lobo?

—¿Se siente bien?

       —Infiernos, sí. —Jaejoong arqueó la espalda como un gato estirándose, su mente se volvió en blanco ante las sensaciones que lo asaltaron.

 

      Yunho pasó sus manos sobre la suave piel de su pareja. Estremecimientos recorrieron su columna con la vista de él desnudo; para él, el verlo desnudo, era un infierno de vista.

       Sonrió mientras veía a su pareja. Su bebé se aferraba a las sábanas, gritando y gimiendo, justo como él quería verlo. Tomó la banda de cuero que estaba alrededor de la base de su pene y que sostenía al vibrador y al pequeño dildo en su lugar y los retiró de su eje. Tomó las caderas de su pareja, se empujó hacia adelante, viendo el estrellado agujero estirarse. Él no tenía suficiente de esa vista.

 

      Jaejoong era todo lo que podía querer de una pareja, un saludable bálsamo para su alma, un afrodisíaco para su líbido, y el palpitar de su corazón. Yunho era su pareja y él era el lobo de Jaejoong.

 

 

FIN

Notas finales:

uuuuu se acabuuuuu... T_T

pero no lloren nenes 

a continuacion.. 15. La Locura de Sungmin


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