Yongguk sacó un teléfono celular y se lo dio a Zelo.
—Es el mío. Todos los números están programados. Llámame o a cualquiera de nosotros que necesites. —Yongguk se acercó más—. O si solo quieres hablar.
—¿Por qué hermano? —Zelo tomó el teléfono de la mano de Yongguk y lo guardó en el bolsillo delantero de sus jeans. La cara de Yongguk era de dolor al igual que la de Zelo. Eso era tan jodido en todos los sentidos.
—Tenemos que irnos. —Yixing apresuró a Suho.
—¿Yixing?
Yixing se giró, Jongin estaba justo detrás de él. —Si cualquiera de los dos necesitan algo, todo lo que tienen que hacer es llamar. Uno de nosotros estará ahí en cuestión de minutos. Yixing asintió, agradeció y luego se fue después de Zelo.
—¿Cuál es nuestro plan?— Taemin preguntó, su cara llena de ira.
Luhan sacudió la cabeza mientras veía a los hermanos salir corriendo de la casa. —Ninguno, él tiene diecisiete. No podemos hacer nada hasta que sea mayor de edad.
—Bueno, eso apesta —dijo Key—. Yo llegué aquí cuando tenía diecisiete.
—Pero tu situación era diferente. Su madre sólo está actuando como una imbécil. No hay ley contra eso, aunque debería de haberla.
—Tenemos que ser capaces de hacer algo —Xiumin agregó.
—Él es uno de nosotros —Ren estableció.
—Lo se, ¿pero qué haremos?— Luhan les preguntó.
—Nosotros podemos darle algo de sentido común a su mamá. Zelo parece ser un chico realmente agradable —Heechul dio su opinión—. Realmente me agrada.
—No creo que ella escuche. Está siendo egoísta al alejarlo.
r13;DongHae sacudió la cabeza.
—Podemos secuestrarlo y dejarle una nota de rescate. —Todo mundo se giró a ver a Baekhyun—. ¿Qué? No me miren así. Ustedes también lo pensaron. Sólo fui el primero en decirlo.
—Nosotros podemos poner un muñeco en la cama para que ella crea que es él —Niel sugirió—. Eso puede funcionar, puede.
—O podría aparecérmele esta noche —Jiyoung ofreció—. Un hombre vampiro y embarazado debe asustarla para darle algo de sentido común. —Jiyoung sacudió la cabeza—. Si eso le causa un ataque al corazón, no me molestaría.
—Especialmente si entras en labor en su porche del frente.
r13;Leeteuk se reía mientras apretaba el hombro de Jiyoung—. Pero es una maldita buena idea, amigo.
Rasa sonrió. —No lo es.
—¿Y Seung hyun se volvería loco? No quiero que lance un cohete a la casa de Zelo. —Kevin giró los ojos.
—Puedo darle al gran hombre un sedante —Jaejoong ofreció.
—O puedo plantar drogas en su casa y arrestarla —Leeteuk intervino de nuevo. Todos en el cuarto se giraron a verlo.
—¿Qué? Es mejor que una nota de rescate.
Baekhyun bufó. —No creo eso.
—Puedo sacarlo desapareciéndolo cada noche, cuando ella duerme. —Tao le sonrió traviesamente—. Y entonces lo regreso en la mañana. Ella nunca lo sabría. —Les dio un guiño.
—O podemos esperar a que cumpla dieciocho años.
r13;Sungmin estableció lo obvio y la solución más sensata—. Realmente no es tanto.
Luhan sabía que estar lejos de su pareja era una tortura. Yongguk y Zelo sufrirían por eso, pero incluso con todas las ridículas sugerencias, sabía que la de Sungmin era la mejor.
En ese momento tenían las manos atadas y ellos no podían salir a rescatar a la pareja. Eso real y verdaderamente apestaba.
Yixing junto con su hermano llegaron a las motocicletas, Zelo y Yongguk estaban en una acalorada discusión. Él quería darle algo de privacidad, pero ellos tenían algo de tiempo. Yongguk tomó ambas manos de Zelo entre las suyas con una expresión de dolor en su rostro.
La cara de Zelo mostró la ira mientras apartaba las manos de Yongguk.
—Nos tenemos que ir —Zelo le gruñó a Yongguk. Pareja o no pareja, ese era su hermanito. Él ya estaba enojado como el infierno.
Yongguk asintió, subió a la motocicleta y la encendió, Zelo con renuencia subió en la parte de atrás.
Suho encendió la suya, y Yixing subió. Si sólo pudiera decirle a su mamá que se habían retardado a causa de una shifter o un jodido hada, y claro… algo de caliente sexo por el culo. Pero ella no escuchaba, nunca lo había hecho antes.
Yixing se sostuvo fuerte mientras Suho se dirigía a su departamento. De nuevo se hundió en la depresión, y la expresión de ira y dolor en la cara de Zelo lo hacía peor.
No solamente dejaban la Casa, él iba a sacar a Zelo de su casa y llevarlo al lugar del que desesperadamente quería alejarse. Incluso aunque la tardanza no hubiera sido su culpa, Yixing aun se sentía culpable como el infierno por tener que regresar a Zelo con ella.
Ellos llegaron a su departamento, Zelo bajó de la motocicleta y subió corriendo las escaleras. Yixing sentía como si la más jodida miseria estuviera sobre Zelo.
Yongguk subió para ayudar a Zelo a empacar. Yixing no podía evitar ver el dolor en la cara de Yongguk o la ira en la de Zelo.
—Esto funcionará al final, unicornio —Suho trató de confortarlo mientras salían.
Eso no funcionó. Yixing miró hacia la estación de policía, preguntándose si alguien saldría para arrestarlo. Ellos estaban muy cerca. Se limpió la garganta por el nudo que se había formado cuando Zelo salió, Yongguk detrás de él llevando las cosas de su hermano.
Yixing señaló su carro y Yongguk dejó todo ahí. Zelo ignoró a Yongguk y se dirigió hacia la puerta del pasajero y subió. —Te llamaré.
—Yixing besó a Suho, sintiéndose que se desgarraba.
—Recuérdalo o iré a buscarte. —La expresión de Suho causó en Yixing sentimientos de tristeza y pérdida.
Yixing sonrió débilmente y subió al asiento del conductor. Yixing se alejó, miró por el espejo retrovisor, viendo la destrucción en la cara de Yongguk. Él vería a Suho pronto, pero esos dos tendrían que esperar cinco semanas.
Eso realmente apestaba. Con lo mucho que no le gustaba la idea de que Yongguk y Zelo estuvieran juntos, nadie debería de alejarlos de esa manera. No era que Yongguk no le agradara, pero Zelo era su hermano. Nadie era suficientemente bueno para él.
Salió de la autopista y tomó el terreno de tierra hacia la granja de su mamá, su hermano no dijo ni una palabra durante el viaje. —Zelo, sabes que yo no quiero esto. Zelo suspiró.
—Lo sé. Es sólo que ahora estoy muy enojado.
—Trataré de hablar con ella para sacarte de esto. Quizás, ella finalmente me escuchará.
—No sostendré la respiración. —Zelo veía por la ventana del pasajero, la tristeza escrita en toda su cara.
—¿Lo extrañarás? Su hermano se encogió de hombros.
—Lo verás de nuevo. Te va a esperar. —Yixing apretó el hombro de Zelo, saliendo del carro y subiendo los escalones del frente. Nunca había odiado a su madre antes, incluso cuando ella era de lo peor, pero justo ahora, él estaba muy cerca de hacerlo y no volver a hablarle de nuevo.
La puerta se abrió. —Ya era tiempo —ella gruñó.
—Sé razonable. No hacíamos nada malo. ¿Por qué castigas a Zelo? —Yixing dio un paso hacia atrás cuando su madre caminó hacia él, la rabia marcaba sus rasgos.
—Eres un degenerado. Estás con un grupo de maricas, ¿se supone que me quede sentada y vea como dañas su cabeza? Es ya muy malo que haya sido indulgente con tus actos homosexuales. ¡Ahora quieres empujar a mi bebé dentro de eso!— Yixing se salió del camino de su mamá, cuando ella trató de agarrarlo—. Te mantendré muy lejos de él mientras pueda. Mi niño no es gay, no importa cuánto lo desees.
—Él tendrá dieciocho años en cinco semanas. No lo podrás mantener bajo tu prejuicioso pulgar eternamente.
—Veremos eso. —Ella le gritó a Zelo que tomara sus cosas y entrara. Su hermano sacó las cosas de la cajuela y entró con una asesina expresión.
Yixing salió del porche, ayudando a Zelo con sus cosas.
r13;Llámame. Quiero decir, si ella se vuelve imposible, te esconderé hasta que cumplas la mayoría de edad.
—No quiero meterte en problemas. Estaré bien. Dile a Yongguk… —Zelo tomó su bolsa e iba a alejarse.
Yixing tomó su brazo. —¿Decirle qué?
—No sé, ahora estoy confundido. Me siento divertido cuando estoy junto a él, casi como si él… —Zelo se encogió de hombros y se alejó. Yixing deseó que su hermano hubiera terminado sus pensamientos. Podía trasmitirle el mensaje a Yongguk, darle al hombre algo en qué sostenerse.
Cerró la cajuela hasta que vio desaparecer a su hermano detrás de la puerta y subió a su carro. Todo lo que Yixing quería era ir a casa, enterrarse bajo los cobertores y no salir hasta que Zelo cumpliera dieciocho.
Ya lo extrañaba.
Yixing llegó al estacionamiento al lado de su edificio, sintiéndose totalmente deprimido. Cerró la puerta con ira y se dirigió a las escaleras.
No podía creer que su mamá hubiera sacado a Zelo de su vida. ¿Ella realmente era una perra? Ninguno de ellos había hecho nada malo que justificara su ira.
Le había dolido como el infierno cuando ella reclamaba a Zelo como su hijo pero no decía nada acerca de él. Ella nunca había estado tan enojada antes, y Yixing no podía imaginar ni por su vida por qué ella era tan mala.
Sí, él era gay, gran jodido problema. Él era feliz con Suho, eso debería ser lo único que debería de importarle.
Yixing subió los escalones a su departamento, sintiéndose triste como el infierno al saber que Zelo no estaba ahí. Cinco semanas no era mucho para algunas personas, pero se sentía una eternidad para quien era separado de la persona a la que amaba.
Yixing entró a su departamento. Todas las luces estaban apagadas, entró en la oscuridad. No necesitaba la luz. Sabía exactamente dónde estaban todas las cosas.
Yixing se detuvo y revisó el interior de su departamento. Algo se sentía extraño y no era el hecho de que Zelo no estuviera aquí, era algo diferente. Sólo que no podía decir qué era.
Sacó su teléfono celular, no le gustaba la sensación que tenía. Yixing marcó el número, viendo alrededor. —¿Suho?
—¿Sucede algo malo, unicornio?— Suho debió de haber oído el ligero pánico en su voz. Después de lo que había sucedido hoy, Yixing no estaba seguro de qué esperar.
Yixing revisó en la sala, no vio nada. Quizás estaba teniendo una crisis emocional por el atemorizador día que había tenido.
r13;Probablemente nada. Voy a la cama. Trabajo temprano mañana.
—¿Quieres que vaya a visitarte?
Yixing abrió la boca y dijo que no cuando su cuello se sentía como en el fuego. Gritó y dejó caer el teléfono, su brazo estaba siendo girado detrás de la espalda y su hombro parecía ser desgarrado. —Hueles como ella —alguien bufó en su oído.
Se retorció y luchó, pero quien fuera lo tenía sostenido con fuerza. Sólo pensaba en Suho y en Zelo, esperaba sobrevivir para verlos de nuevo.
—¡Yixing!— Suho gritó al teléfono. Corrió a las escaleras y vio a Kris en el estudio con Tao.
—Tao, te necesito.- Kris empezó a gruñir hasta que él vio el pánico en la cara de Suho. —¿Qué sucede?
—Es Yixing. Necesito a Tao para que aparezca en su departamento y llegue a él por mí, por favor —Suho rogó mientras las lagrimas llenaban sus ojos. Había oído la lucha, su pareja gritaba. Suho estaba enloqueciendo por llegar con él.
—Ve con él. No quiero que mi pareja vaya solo. —Suho asintió. Por alguna razón, Tao no podía desaparecer con Kris, algo acerca de que las parejas se cancelaban. Afortunadamente Kris aun podía cambiar. Aunque Kris le había dicho que ellos lo habían hecho una o dos veces.
—¿Listo? —Tao preguntó tomando el hombro de Suho.
—Apúrate. —Suho pensó en el departamento de Yixing, y entonces estaban ahí. Él corrió hasta que chocó con un bulto en el suelo. Suho se arrodilló frente al cuerpo ensangrentado de su pareja. Yixing estaba inconsciente, acostado en un gran charco de sangre.
—Oh Dios —sollozaba mientras se sentía como un imbécil. Parecía como si alguien hubiera literalmente tratado de desgarrarle el cuello.
—Tócalo —Tao dijo con prisa en su voz—. Tenemos que llevarlo con Jaejoong.
Suho se acercó a través de la sangre de su pareja y lo tomó en sus brazos. Tao tocó el hombro de Suho y entonces ellos estaban de regreso en el vestíbulo. Todos los guerreros y sus parejas estaban reunidos.
—No me aparecí en la clínica porque no estaba seguro si había alguien ahí —dijo Tao, pero Suho no le escuchó.
Cargando el flácido cuerpo de Yixing corrió para subir las escaleras. Todo lo que podía ver era la preciosa sonrisa de Yixing cada vez que provocaba a Suho, pero todo lo que podía sentir era que su unicornio estaba flácido en sus brazos.
Suho lo acostó en la mesa de operaciones de los cuartos que Jongin había equipado sin escatimar en costos. Corrió hacia el lavado, tomó algunas toallas y las humedeció.
Suho hizo su mejor esfuerzo por limpiarle la sangre. —Por favor, unicornio, no me dejes solo. —Presionó las toallas en el cuello de Yixing, haciendo su mejor esfuerzo para detener el sangrado. Limpió la sangre de su mano y tocó su cara, limpiándose las lágrimas que afectaban su vista—. Eres el único que realmente me entiende
r13;murmuró mientras un sollozo salía de su pecho—. No puedo seguir sin ti.
—Muévete. —Jaejoong lo empujó hacia un lado, para atender a su pareja. Suho se apartó, cubriendo su cara con las manos y lloró. Él no podría vivir en un mundo sin Yixing. El hombre hacía que su corazón latiera, sus pulmones respiraran, y cada día valía la pena vivir desde que él lo conoció.
—Joder —Jaejoong gritó.
A Suho no le dio tranquilidad esa palabra. Se dejó caer al suelo y lloró por su pareja. Key y Kris entraron, lavados y listos para ayudar.
—No puedo detener el sangrado —Jaejoong les gritó—. Ha perdido demasiada sangre.
Suho se arrastró por el suelo, tomando la camisa que Jaejoong cortaba del cuerpo de Yixing, la sostenía en su cara como si todo su cuerpo estuviera entumecido y se mecía de adelante a atrás, sosteniendo la camisa como si fuera su pareja, inhalando el aroma y recordando la hermosa sonrisa que su pareja tenía cada vez que Suho lo veía.
Veía aturdido cómo Tao aparecía con el príncipe Jae Hyo, el vampiro movió a Jaejoong a un lado. Suho veía todo como si fuera película, la aparición de Jae Hyo, Jae Hyo movió al doctor a un lado, Jae Hyo retiró las gasas del cuello de Yixing y Jae Hyo mordió a su pareja en el cuello.
Suho veía todo rojo. Cambió en el quirófano, Jongin entró en el último segundo y lo agarró. Las garras encajadas en el frio linóleum, tratando de encontrar de dónde aferrarse mientras gruñía y luchaba para llegar al vampiro. Jongin lo sostenía del cuello, apartándolo. Suho luchó para alcanzar a su pareja, se giró hacia los brazos de Jongin tratando de alcanzar su libertad.
—Déjalo trabajar en Yixing —Jongin le gritó.
Suho no podía encontrar la razón o el sentido a eso. Todo lo que veía era a otro mordiendo a su pareja. Algo que él era el único con el privilegio para hacer. Gruñía y luchaba con mayor violencia, la saliva bajaba por su hocico mientras trataba de alcanzar al vampiro y desgarrarlo a la mitad.
Jae Hyo se enderezó e inclinó la cabeza hacia Suho, y entonces Tao desapareció con él. Suho gimió cambiando en los brazos de Jongin. —¡Joder, déjame ir!
Jongin lo liberó, Suho corrió hacia su pálida pareja. —¿Qué es lo que le hicieron?— Sus manos recorrían el cuerpo de Yixing, su mirada fija en la fresca marca de la mordida sobre la herida original.
—Salvarlo —Jongin le informó a Suho—. Me explicó lo que tenía que hacerse, y le di el permiso.- Suho se colocó frente a la cara de Jongin. La rabia que lo consumía era algo como nunca había sentido antes. —¿Y qué con el permiso de Yixing o mi permiso? ¿Qué infiernos le hicieron?
—Tu mente no estaba en condiciones para tomar decisiones. Tenía que llamarle. Hacer lo que considerara lo mejor para tu pareja.
—¿Qué. Le. Has. Hecho. A. Él?
—Lo convertí.
Suho rugió. Volcó todo lo que estaba en el mostrador y tumbó algunas máquinas, viendo al Alfa. —¡No tenías derecho!
—Si él no lo hacía, ¡Yixing podría estar muerto ahora!— Jongin le gritó a la cara a Suho—. Se acabó, está hecho. Ayuda a tu pareja a ajustarse a su nueva vida en lugar de culpar a todo el mundo.
Suho se sentía aturdido, su cuerpo en tensión mientras regresaba a su pareja. Yixing se veía tan pacífico acostado ahí. Repentinamente Yixing se levantó, tomó a Suho del cuello y lo mordió. Suho envolvió sus brazos alrededor de su pareja mientras Yixing bebía profundamente de él.
—Él necesitará beber más de lo usual en su primera vez
r13;Jongin le informó.
Suho permitió que su pareja tomara lo que necesitaba. Después de un momento, él comenzó a marearse ligeramente. Jongin pellizcó la nariz de Yixing y lo apartó de su pareja, Kris se adelantó y ofreció su muñeca.
—¿Qué estás haciendo?— Suho le gruñó.
—Él ha tomado demasiado de ti. ¿Prefieres que sacie su sed con uno de tus hermanos o con uno de nosotros?— Jongin le preguntó.
Suho odiaba el hecho de que Yixing se alimentara de Kris, pero lo prefería a que fuera con cualquiera de los otros guerreros de la casa. Sostuvo a su pareja mientras Yixing bebía profundamente de Kris. Jongin le pellizcó la nariz de nuevo y Yongguk se adelantó.
Su hermano menor veía a Suho lamentándolo, ofreció su muñeca a Yixing. Su pareja gimió, presionándose hacia Suho mientras bebía. Yongguk tuvo la decencia de girar la cabeza. Los demás dejaron el cuarto cuando la excitación de Yixing era demasiado aparente. Los únicos que quedaron fueron Jongin y Yongguk.
Yixing liberó a Yongguk, su hermano salió rápidamente. —Buena suerte —dijo Jongin cerrando la puerta tras él.
Yixing le quitó los jeans a Suho con una fuerza más allá de su capacidad humana, empujando las piernas de Suho hacia atrás y empujándose hacia él.
—Joder, lubricante, hombre.
Yixing sacudió la cabeza como si con eso la aclarara. Suho vio alrededor hasta que encontró algo que pudiera usar y lubricó su propio agujero, Yixing estaba demasiado perdido para oírlo. El dolor fácilmente se convirtió en placer, y Suho comenzó a perderse en el acto sexual. Suho gimió cuando Yixing mordía su cuello de nuevo, la erótica lujuria explotó mientras se corría.
—Yixing —Suho jadeó. Su pareja se empujó dentro de él, llevando a Suho a un mayor orgasmo.
Su pareja dio un bajo gruñido mientras se corría, finalmente liberó el cuello de Suho. Yixing cayó en el pecho de Suho. —¿Qué está mal conmigo?
—Pronto, te explicaré todo pronto, unicornio.
Yixing veía alrededor mientras se acostaba en el pecho de Suho. Él estaba tratando de recordar cómo había llegado aquí. Lo último que recordaba era estar en el departamento hablando con Suho. Imágenes de alguien atacándolo le llegaron y Yixing gimió, tomando a su pareja con frenesí. ¡Alguien estaba tratando de desgarrar su garganta!
—Te tengo, unicornio. —Suho le frotaba la espalda. Yixing se tensó cuando otro recuerdo le llegó. Arrugó la nariz, al pensar que bebió sangre de Kris y Yongguk…Qué asco.
—¿Soy un vampiro ahora, verdad?
—Sí, unicornio. —Su pareja envolvió sus grandes y fuertes brazos, sosteniéndolo más cerca—. Aun así te amo.
Yixing se acurrucó más cerca, no entendía todo lo que le había sucedido. Él se aferró a Suho, la única cosa en su mundo vuelto al revés que tenía sentido en ese momento. —Estoy asustado.
—Lo sé. Encontraremos cómo salir de esto juntos. —Yixing cerró los ojos, agradecido de que Suho hubiera entrado en su vida.
Claro, su vida nunca había sido tan excitante o bizarra antes de conocer a este hombre. —Hay otro vampiro viviendo aquí. Le pediré que te ayude con cualquier duda que tengas.
—Está bien. —Hablando acerca de un viaje a otro reino. Yixing no se sorprendería si Dorothy y Toto del Mago de Oz llegaran corriendo en cualquier momento. Infiernos, él podía seguir al espanta unicornios para encontrar otro cerebro porque el suyo aparentemente estaba funcionando mal—. Lamento haber sido tan rudo.
Suho tomó una profunda respiración y se rió seductoramente.
—No hay problema, disfruté eso. —Yixing se quedó sin saber qué decir. Ahora, ¿cómo iba a trabajar? ¿Los vampiros ardían si salían al sol? Estaban en verano.
Comenzó a enojarse con lo que le habían hecho. Se enderezó del pecho de Suho y miró alrededor del cuarto. —¿Quién me hizo esto?
—El príncipe Jae Hyo. Jongin le llamó y te convirtió.
—¡Él no tenía derecho! —Yixing gritó mientras su cerebro se inundaba.
Suho asintió. —Le dije lo mismo, unicornio.
Yixing vio lágrimas inundar los ojos de su pareja. ¿Cómo podía estar enojado si aun tenía a Suho? Esto estaba hecho, ahora él tenía que ajustarse a lo que implicaba ser un vampiro. Aun así tenía a Suho.
—Gracias. —Yixing se inclinó y abrazó a Suho, agradecido de tener al hombre en sus brazos. Enojado o no, aun tenía a Suho.
—Vamos, unicornio. Hablemos con el Alfa y obtengamos algunas respuestas.
Yixing se levantó del pecho de Suho, y el pánico lo inundó.
r13;¿Pero qué sucede con el sol?
—Afuera está oscuro, estás a salvo.
Yixing se estremeció cuando vio los pantalones de Suho en el suelo en pedazos. —Lo lamento. Suho tomó su mentón y le levantó la cara así él podría ver esos hermosos ojos grises. —No te preocupes.
Yixing tragó saliva varias veces, luchando contra las lágrimas mientras asentía. Se levantó los pantalones, cruzó los brazos sobre su desnudo pecho.
—Voy a conseguir algo que ponerme. —Suho se asomó por la puerta y le hizo señas a Yixing para que lo siguiera. Ellos corrieron hacia el cuarto de Suho, Yixing realmente se carcajeó mientras su pareja corría por el pasillo.
—Lo hicimos —Suho se carcajeó.
—Woo-hoo —Yixing lo animó, saltando de arriba abajo. Sentía la fuerza vigorizándolo. Caminó hacia el espejo, medio esperaba no ver su reflejo, pero ahí estaba—. No me veo diferente.
—No, sigues teniendo un muy lindo trasero. Yixing rodó los ojos. —Quiero decir mi cara.
—Eso, también —Suho le sonrió.
Yixing aceptó la camisa extra grande que Suho le dio, poniéndosela mientras Suho tomaba unos jeans. —Si vas a desgarrar mi ropa muy a menudo, tendremos que ir de compras.
—Lo lamento.
—¿No te dije que estaba bien? Sólo bromeo, quizás, esperaba que lo hicieras de nuevo. —Suho movió sus cejas y Yixing se carcajeó.
—Si eso te enciende, entonces lo haremos.
—Sólo el estar alrededor de ti me enciende, unicornio. —Ah infiernos, ¿qué mas podría un hombre pedir? Yixing se sentía de tres metros alrededor de su pareja. El hombre constantemente levantaba su ego.
—Sólo por decir eso yo desgarraría ese buen culo tuyo.
Wow, Suho realmente se ruborizó. Cool. —Entonces hazlo.
r13;Yixing quería bailar una danza feliz. Tenía a un hombre que se sentía cómodo al estar con él. ¿Qué jodidamente asombroso era eso? Tenía que ajustarse a su nuevo él, pero las cosas aun parecían ser las mismas entre él y el hombre que amaba.
—Quiero que te mudes aquí conmigo. Tu departamento no es seguro ahora.
Yixing estaba de acuerdo con su pareja al cien por ciento, aunque no le gustaba que la decisión se hubiera salido de sus manos. —¿Por qué el vampiro dijo que olía como ella? ¿Quién es ella?
—Nana. Ella es una Fey, su aroma y el de Tao vuelve locos a los vampiros. —Suho se sentó en una silla y le señaló a Yixing que se sentara en su regazo—. Cuándo el medio vampiro se emparejó a Seung hyun, él se volvía loco con ella, trató de morderla. Aparentemente el aroma de los elf es muy dulce para ellos, y dado que tú estuviste alrededor de ella…
—Yo tenía el olor de ella —Yixing terminó, y Suho asintió. Los ojos de Yixing estaban bien abiertos—. Zelo también estuvo alrededor.
—Joder. —Suho tomó su teléfono—. Yongguk, necesitas revisar a Zelo. Él estuvo alrededor de Nana… —Suho vio el teléfono.
—¿Qué sucedió?
—Él colgó.
Suho se sentó a escuchar al príncipe Jae Hyo por el alta voz del teléfono. —Normalmente un vampiro no puede ser hecho, pero siendo quien soy, tengo ese poder.
—¿Entonces qué sucederá ahora? —Yixing preguntó.
—Bueno, básicamente eres mi hijo, en teoría. Tú necesitarás beber una vez a la semana, mantente lejos del sol. No vas a arder en llamas, pero dolerá como una perra, y… —Jae Hyo se limpió la garganta—. Uh, pregúntale a Jiyoung acerca del otro don.
r13;Jae Hyo colgó.
—¿Qué don? —Yixing se giró hacia Suho que tenía la boca abierta.
—Puedes embarazarte —Jongin dijo sonriendo.
—¡Oh infiernos no! No soy una jodida chica.
Suho estaba impactado. Yixing ahora era la tercera persona en esa casa que podía concebir. ¿Qué infiernos estaba mal con su mundo? Todo lo que sabía era acerca de crecer con shifters. Ahora había vampiros, hadas, hombres embarazados, locos doctores que convertían a un perfectamente buen hombre en una máquina de hacer bebés. ¿Qué jodidos?
Se sentía al borde del colapso nervioso. Eso era demasiado. ¿Su unicornio, embarazado? Oh, Dios. Necesitaba un trago, y la capacidad de emborracharse. Empezó a respirar fuertemente y comenzó a sentirse mareado.
—Respira, maldición. —Yixing tomó el frente de su camisa y lo sacudió—. Soy yo quien se supone que tenga el ataque de pánico, no tú.
—Yo no puedo…no puedo… —Suho se apartó de Yixing y acomodó la cabeza entre sus piernas tomando gran cantidad de aire. No estaba listo para ser padre, ¿lo estaba? Oh mierda. Suho se cayó de la silla cuando la oscuridad lo inundó.
continuara...