Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

ATRACCIÓN OBSESIVA por Melyoan

[Reviews - 23]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Buenas a todos mis queridos lectores, volví con los siguientes 5 capítulos, espero les guste y muchas gracias por tomarse el tiempo de leer, cuídense mucho, hasta mañana!!!

Había pasado solo un par de días después de la confesión de Tsumori, la cual era por más inesperada para Nowaki, ya lo sospechaba pero no la esperaba tan pronto, aunque el ojiazul comprendía que si no era ahora entonces cuándo?, pero se sentía un poco feliz al saber de la honestidad de su amigo y más al pensar que no le faltaba mucho por terminar es curso que si le ayudaba mucho a crecer en su carrera pero que al mismo tiempo lo había alejado de su amado niño.

Nowaki había sido el cursante con el mejor desempeño de ese curso y Sachiko la segunda, ambos por sugerencia de uno de los docentes fueron invitados a participar de una residencia completa en el Hospital central, sin duda una oferta difícil de rechazar para cualquiera, cualquiera que no estuviera tan enamorado como Nowaki, por eso la tuvo que rechazar, ya que apenas pudo sobrevivir un mes sin su amado, le sería prácticamente imposible vivir dos años o incluso más, si se extendía, lejos de Hiroki.

Por otro lado Sachiko no dudó en aceptar y lo hizo gustosa, aunque le extraño la respuesta de Nowaki decidió no insistir, porque estaba enterada de la posición del ojiazul, ya que en una de esas en las que la perlimarrón lo atrapó en una de sus conversaciones con el menor y no paró de insistirle hasta que le contara, por lo que no tuvo más remedio o si no la tendría encima hasta más no poder; es por eso defendió al pelinegro en cuanto los doctores empezaron a atacarle a modo que aceptara la oferta.

-es increíble!!! -expresa asombrada Sachiko, mientras ella y Nowaki van saliendo del hospital- se ve que ellos se mueren porque trabajes aquí, te atacaron como lobos hambrientos! ja, ja... -ríe al recordar la escena- no quise insistirte en ese momento pero... -tornando una expresión seria- en serio no aceptarás para nada?

-no Sachiko y sabes muy bien la razón, además estar aquí por tanto tiempo ya es mucho para mi, además no quisiera tentar a mi suerte -le responde sonriendo, refiriéndose al avance que había tenido con Hiroki-

-mhh eres raro, -lo mira por el rabillo su ojo-  pero me agradas je, je, aunque sabes, podrías traerlo contigo no? la oferta no es de hoy para mañana, de seguro te darían un tiempo para que arregles tus cosas en Japón

-es probable, pero no quisiera obligarlo a tener que acompañarme, pese a que no tiene ningún familiar no creo que quiera salir de Japón así de la nada, además sabes muy bien que él aún no es mi pareja, así menos tendría la obligación de seguirme a todas partes -dice sin despegar la vista de en frente-

-bueno si, pero la verdad no creo que tarde en enamorase de ti -dándole leves codazos al ojiazul-

-pese a eso, tampoco quisiera que los doctores tengan que esperar una respuesta positiva que quizá nunca llegue, en lugar de dar ese lugar a alguien que sí tiene la seguridad de aceptarlo y que si se lo merece

-si que eres muy noble Nowaki, eso es lo que más me agrada de ti, ojalá que encuentre a alguien así como tú, eso me haría feliz -le dice sonriente- créeme que si no estarías tan enamorado de tu Hiro chan no descansaría hasta que fueras mío

-ja, ja que graciosa eres Sachiko!! -le dice con una gotita de sudor cayendo por su frente-

-no era broma, pero ya te lo dije, tú ya estás copado ja, ja, ja… bien yo me quedo aquí, nos vemos mañana! -sale apresurada-

-hasta mañana y muchas gracias por ayudarme a justificarme! -se despide haciendo un ademán-

...

Mientras tanto en Japón... la relación entre Tsumori y Hiroki ya se había normalizado, hablaban sin evadirse pero el mayor no desaprovechaba ninguna oportunidad para tratar de enamorar al castaño, le decía cosas tiernas y cursis, cada que podía le hacía regalos sutiles e incluso hacía lo posible por acortar la distancia apenas tenían una conversación, eso incomodaba a Hiroki de sobremanera, pero no sabía cómo alejarlo, ya lo había rechazado una vez y creía que con eso el rubio dejaría de atosigarlo, pero no!, incluso fue más insistente, por eso el castaño lo estaba dejando pasar, evitando claro que ciertos actos avancen más de lo debido; y por si fuera poco cada que hablaba con Nowaki, este no paraba de confesarle su amor, sin duda estaba en una situación muy difícil y tan solo a sus 16 años lo dejaban incluso más confundido de lo que esa edad por si sola lo confunde; pero aunque se sentía atosigado por ambos médicos la verdad era que sentía mucha tranquilidad al hablar con el ojiazul al que tampoco le daba una respuesta clara de sus sentimientos y es que ni él lo tenía claro, no quería dañarlo diciendo algo que no era, tampoco quería dañar Tsumori si aceptaba a Nowaki ya que por el que también sentía algo que aún no lo definía muy bien, además el rubio le ayudaba en todo, incluso lo acababa de ayudar a realizar un proyecto que por suerte para el rubio tenía un tema del área del galeno por lo que Hiroki lo hizo de maravilla siendo así una acontecimiento conveniente para celebrar.

-ten, -el rubio le da una lata de jugo al castaño- como aún eres muy joven como para beber cerveza, celebrarás con jugo de frutas -se sienta en el sillón al lado del menor- felicidades por tu gran logro!! salud -hace chocar ambas latas-

-salud y muchas gracias Tsumori san -sonriente empieza a beber el jugo- pero es todo gracias a ti, sin tu ayuda no me hubiese ido tan bien

-lo hice con gusto, para mí es un placer ayudarte, además si es en mi área con mayor razón –le sonríe-

-de todos modos te agradezco mucho -vuelve a tomar el jugo siendo remedado por el mayor-

-Hiroki… -llama la atención del menor- ya estoy enterado que has estado hablando con Nowaki desde hace mucho...

-ah?!... -se pone nervioso- yo no, eso, es que...

-descuida, no te estoy reprochando por ello, tranquilo, Nowaki me dijo que fue él, el te pidió que no me lo dijeras, pero me hubiese gustado que tengas más confianza en mi

-yo lo siento Tsumori san, no quise ofenderte -se entristece-

-calma, ya te dije que no pasa nada, mejor olvida lo que dije... el día en que te confesé la existencia de Nowaki hablé también con él, me dijo que le contaste todo desde que despertaste, lo que te dije y todo sobre ti, incluso me dijo que él también te confesó sus sentimientos -el menor lo ve con ojos de asombro y un pequeño sonrojo tiñendo sus mejillas-

-... –Hiroki callado ya que no sabía qué decir-

-viendo tu reacción supongo que es cierto, puedo saber qué le respondiste?... -el menor sigue en silencio- es que acaso te gusta Nowaki? –pregunta con una expresión triste-

-no le dije nada, no supe qué responderle...  yo quiero mucho a Nowaki san, así como te quiero a ti Tsumori san, solo eso -dice con la mirada hacia sus rodillas-

-jump –sonríe por las esperanzadoras palabras del menor- bueno entonces se puede decir que Nowaki y yo estamos empatados, no? -más que una pregunta sonó como una afirmación- eso me alegra mucho -dirige una de sus manos a la rodilla del menor y empieza a acariciarle- me pregunto quién ganará?

-disculpa iré a la cocina por un vaso de agua -sale huyendo hacia la cocina-

-ahh... supongo que lo asusté, bueno será mejor que me tome las cosas con más calma –piensa mientras termina el contenido de la lata- eh, Hiroki!

-si Tsumori san? -pregunta desde dentro de la cocina-

-me traes otra cerveza, por favor? –arrojando la lata vacía en el bote de basura-

-claro -responde y segundos después sale con las dos bebidas- aquí tienes -le alcanza la lata al mayor- pero no es bueno que bebas tanto Tsumori san, mañana tienes que ir muy temprano al hospital verdad?

-descuida, he bebido más de cinco cervezas en un día sin que me perjudique en mi trabajo del día siguiente -abre la lata y comienza a beber-

-Tsumori san -llama la atención del rubio mientras toma asiento en el sillón de frente- sabes cuándo regresará Nowaki san?

-mhh?.. -lo mira extrañado- pues si no lo sabes tú, aún menos yo, no hablo mucho con él tanto como tú, a decir verdad, pensé que ya lo sabrías

-no lo sé, solo me dijo que pronto –dice algo decepcionado-

-tan impaciente estas por verlo? -se pone de pie para ir a sentarse a lado del castaño nuevamente- pues se supone que ya tendría que estar aquí,  pero creo que se alargó el curso como siempre, eso suele ocurrir con frecuencia en ese tipo de cursos, aunque este se alargó más de lo normal

-debe serlo, yo no conozco mucho de eso -se ponía nuevamente nervioso, le incomodaban mucho los acosos del rubio-

-sí, los horarios de los médicos son muy inconstantes, es por eso que es muy difícil encontrar a alguien que nos entienda... pero encontrar a esa persona ideal es una dicha -pasa su brazo por detrás de Hiroki para agarrar su hombro y atraerlo hacia si- serías esa persona especial para mi Hiroki?

-yo, -se pone nervioso- Tsumori san yo no... -se sentía atrapado, no le salían las palabras-

-Hiroki te amo, -acaricia el rostro del castaño con su otra mano haciendo que lo mirara- acepta mis sentimientos te lo suplico -se acerca lentamente al castaño con intenciones de robarle un beso-

-eso si que no!, -interrumpe retirando el brazo del rubio que envolvía al menor- no permitiré que senpai siga haciendo trampa! -dice enojado un ojiazul que había entrado al departamento sin hacer ningún ruido-

-tsk -chista- en serio... ahora?... tú sí que sabes en que momento aparecer -dice molesto-

-Nowaki san?!... -veía muy asombrado al ojiazul, era prácticamente la primera vez que lo veía en persona-

-ya estoy en casa Hiro chan, no me darás un abrazo de bienvenida? -le pregunta al menor mostrándole una encantadora sonrisa-

-Nowaki san!! -se levanta rápidamente del sofá para lazarse a los brazos del ojiazul, el cual lo envuelve en sus brazos- me alegra mucho el verte al fin!

-por qué no avisaste que llegarías hoy? -dice molesto interrumpiendo la encantadora escena de los menores-

-quería que fuera una sorpresa y fue una sorpresa para mi encontrarme con semejante escena... no puedo creer que estés en ese estado senpai! cómo se te ocurre embriagarte en compañía de un menor de edad-lo reprocha sin levantar mucho la voz-

-calma Nowaki, si solo me tome un par de cervezas, además Hiroki no tomó nada verdad? -el menor asiente inocentemente- además solo festejábamos el que Hiroki consiguiera la mejor nota en su proyecto

-en serio Hiro chan?! -lo aparta un poco para preguntarle asombrado-

-si -se sonroja a más no poder por ser nuevamente el centro de atención-

-Woow Hiro chan eres increíble!! -lo abraza nuevamente- muchas felicidades!!

-Gracias Nowaki san, pero todo fue con la ayuda de Tsumori san... –apenas se le oye por estar atrapado en el pecho del ojiazul-

-ah... ya veo, buen trabajo a ti también senpai –le dice sonriente sin intenciones de separar al menor de sus brazos-

-jump –ríe- para que veas que también le ayudo en todo aspecto y no solo hablándole bonito

-entonces ahora es mi turno de ayudarte Hiro chan!!

-qué?! No por favor, no te molestes con eso, no es necesario Nowaki san –se separa a duras penas del ojiazul-

-nada de eso, para eso ya estoy aquí, te ayudaré gustoso en lo que quieras

-fufh está bien, -acepta rendido- muchas gracias Nowaki san –le sonríe tiernamente-

-ah! Por cierto –toma delicadamente del mentón al menor quien lo observa extrañado, a lo que el ojiazul no tarda en darle un tierno beso en los labios, frente a la vista de un atónito rubio- ahora si ya estamos a mano senpai –dice siendo observado por los otros en un estado de shock-

-Nowaki que demonios!!! –reacciona gritando- como te atreves a hacer eso frente a mí tan descaradamente!!! –se acerca molesto a los otros dos-

-corre Hiro chan que senpai querrá cobrársela contigo! –le dice riendo y le da un leve empujoncito para que el castaño se fuera y este sin saber por qué?, obedeció de inmediato y fue apresurado a encerrase a su habitación-

-hey no!, espera Hiroki!! –tratando de detener al menor pero ya era demasiado tarde-

-ya es tarde senpai, es mejor que vaya a descansar y tú también, mañana tienes turno verdad? Y yo iré contigo, quiero reportarme lo más antes posible para retomar mi trabajo –coge su maleta y se encamina hacia su habitación- ahora si todo  será más justo, no crees senpai?! –dice sonriente- hasta mañana, que descanses bien! –cierra la puerta-

-Nowaki!! –lo persigue pero solo recibe el portazo- Ahh!! –protesta- ok, pero verás que el que ríe último ríe mejor! –resignado de no poner los puntos sobre la íes al ojiazul y no poder hacer su avance con el castaño, se va a dormir pensando en cual sería su siguiente jugada en la batalla para así poder ganar el corazón del menor-

Mientras tanto en una de las habitaciones se encontraba un castaño recostado en su cama sin poder conciliar su sueño.

-no puedo ser!!, Nowaki san me besó y en frente de Tsumori san!! –pensaba con las mejillas encendidas- aunque ese beso me hizo estremecer, nunca había tenido esta clase de sensaciones, mi corazón late tan fuerte que quiere salirse de mi pecho, ese beso se sintió tan bien, incluso por alguna extraña razón no quería que terminara… -cayendo en cuenta en lo que había divagado- pero que rayos estoy pensado!!! –se reprocha mentalmente jalándose de los pelos- esto por todo lado que lo vea es una situación muy extraña, no solo por el hecho que los tres seamos hombres, si no también que ellos dos son grandes amigos, y no, no quiero que terminen peleados por mi culpa, pero entonces qué es lo que puedo hacer?, me siento acosado por los dos, no es que me desagrade tanto tener tanta atención, además ya me estoy acostumbrando, solo me siento incómodo estar al medio de todo y lo más extraño es que no hice nada para terminar así, bueno no es como si me hubiese gustado hacer algo para terminar así…. Arggg rayos ya ni sé lo que digo! Creo que pienso mucho las cosas, quizá solo debo tranquilizarme y dejar que todo siga como hasta ahora, si eso debo hacer… -se cubre totalmente con la frazada y con esa conclusión el castaño cayó por fin rendido en un profundo sueño-

Pero darle rienda suelta a los sucesos sin darles mucha importancia no sería tan fácil, como Hiroki creía, ya lo había dicho, estaba en el medio, en medio de dos personas que no lo dejarían en paz hasta que uno se ganara su corazón.

Los galenos se despertaron muy temprano, a la rápida se alistaron como si de una carrera al que salga primero se tratara, con las intenciones de preparar un delicioso desayuno para el menor el cual era el objetivo de ambos. Salieron cada uno de su habitación casi al mismo tiempo, dándose una mirada afilada para después seguirle una sonrisa.

-buenos días senpai, es extraño verte despierto tan temprano –le dice irónico-

-pues en este último tiempo me he vuelto muy madrugador –le sonríe- y que me dices de ti, por qué te despertaste tan temprano? La verdad pensé que después de tan largo viaje estarías muerto del cansancio y saldrías pasado al medio día, qué? Quieres preparar el desayuno para Hiroki y ganar créditos con él verdad? –lo mira seriamente-

-al igual que tú senpai –sin quitar su sonrisa- ah… -siente un aroma diferente en el ambiente- aunque creo que alguien ya se nos adelantó –ambos mayores se dirigen a la cocina en la cual ya se encontraba Hiroki preparando el desayuno-

-buenos días Nowaki san, Tsumori san -saluda dándose cuenta de la presencia de los mayores- en unos minutos estará listo el desayuno –dice con una hermosa sonrisa-

-Buenos días Hiro chan, esta será la primera vez que probaré una comida hecha por ti, de seguro será deliciosa

-pues sí lo son, te perdiste de mucho Nowaki, Hiroki cocina como todo un chef profesional –alardeando gustoso-

-entonces si fue así y para que sea más justo solo yo debería comer la comida que prepara Hiro san desde ahora, no crees senpai?

-qué?!! Ni lo sueñes, si te perdiste de eso no fue mi culpa, además no puedes prohibirme nada! –le dice enojado-

-por favor no discutan, yo no cocine con intenciones de que luego discutan por ello –dice el castaño sintiéndose mal por ser el causante de esa discusión-

-ÉL EMPEZÓ!! –dicen los dos mayores al mismo tiempo señalándose el uno al otro-

-eso no es cierto él estaba alardeando –reclama el ojiazul-

-ya te lo dije tú te lo perdiste! –contraataca el rubio-

-suficiente!!, -deja de servir la comida- si siguen así ya no cocinaré nada más!! –se cruza de brazos enfadado-

-no Hiro chan, no digas eso, está bien, dejemos de lado esto senpai, por mi parte no iniciaré una discusión delante de Hiro chan

-ok, yo también –apoya el mayor de los tres- ya tendremos tiempo suficiente para discutir a solas

-pero – el ojimiel intenta reclamar pero desiste- será mejor que desayunen de prisa o se retrasarán –colocando los platos sobre la mesa– Dios dame fuerzas por favor! –pedía en su interior-

-oh!, casi lo olvido Hiroki –dice con la boca llena- tengo un regalo para ti – se limpia la boca y busca en sus bolsillos su objetivo- mira lo que tengo! –mostrando dos entradas para el cine-

-ah! Eso es… -responde totalmente feliz-

-sí, son para la película que tanto querías ver, quise decírtelo ayer, pero con el ajetreo que provocó Nowaki no hubo oportunidad, -sonríe satisfecho por conseguir la reacción que quería- es un premio por tu buen desempeño en tu proyecto

-pero cómo las conseguiste Tsumori san, mis compañeros estaban desilusionados por no conseguirlas ya que estaban agotadas

-tengo mis contactos, son para mañana –le entrega las entradas a Hiroki- guárdalas –el menor asiente sin dejar de mirar maravillados las entradas, mientras ambos médicos terminan de desayunar-

-muchas gracias Tsumori san, esperaré ansioso… -seguía ilusionado, pero de pronto su expresión cambió- pero, y Nowaki san? –preguntó triste porque solo eran dos entradas-

-pues solo conseguí dos entradas, quizá si Nowaki me hubiese dicho que llegaría hubiese conseguido tres

-si “quizá” lo hubieras hecho senpai, -dice el ojiazul sarcástico ya que de seguro aunque le hubiese informado de su regreso no hubiese movido un solo dedo para conseguir otra entrada-

-pero… -intenta hablar-

-tranquilo Hiroki, Nowaki nos acompañará en la siguiente, de acuerdo? –el menor de los tres asiente algo triste-

-así será –el ojiazul se adelanta en responder- bien será mejor que nos apresuremos senpai –se para- muchas gracias por la comida Hiro san, estuvo muy deliciosa –le dice sonriendo al menor-

-sí, fue exquisita como siempre –complementa el rubio, guiñándole un ojo-

-de nada, me alegra que les haya gustado –los mayores se dirigen hacia la puerta- que les vaya muy bien Tsumori san, Nowaki san! –los despide cariñosamente-

-nos vemos!! –responden ambos médicos-

-buena jugada Tsumori senpai, pero bueno ya me tocará a mí –le dice en susurro y en forma de reto, mientras caminan hacia la salida-

-veamos qué preparas? –responde también susurrando-

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).