Las noticias que Fuyuhiko había dado ese día fueron contundentes para Hiroki, si bien estaba feliz porque su padre al fin había decidido internarse en una clínica para poder recuperarse por completo, la otra noticia lo aterraba hasta los huesos, estaba esperanzado en que ese viaje no se realizara, pero todo se derrumbó con el delirio que tuvo su padre, porque una de las razones para mandar lejos a Hiroki fue el que no quería que ese incidente ocurriese de nuevo, por nada del mundo se perdonaría si volvería a suceder y claro que Haruhiko estaba más que satisfecho con esa decisión.
Los días pararon y tal como Fuyuhiko dijo se internó en una clínica en la cual se estaba recuperando satisfactoriamente, a lo que el pelinegro se recriminó el no haber hecho caso a sus hijos desde el principio y todo por no querer dejar solo a Hiroki ya que aún estaba sentido por su secuestro, no deseaba pasar por esa situación una vez más, pero comprendió que su paranoia era injustificada y que quizás sí estaba exagerando un poco, porque era muy difícil que eso volviera a ocurrir. Ya llevaba casi un mes en la clínica y estaba a nada de salir, lo malo de estar recluido en aquel lugar y en constante observación era que no podría asistir a la graduación de su hijo menor, aunque sabía que este apenas recibiera su diploma iría corriendo a verlo, pero le dolía no acompañarlo en el momento crucial y lo peor era que por algunas complicaciones en el tratamiento de Misaki, Akihiko tampoco podría llegar a tiempo, es más le comunicó a su padre y a Hiroki que tenían que alargar un paso de su tratamiento por unos días más, solo rogaban llegar a tiempo para el cumpleaños número 17 de Hiroki que ya estaba a nada de llegar.
En tanto, para Hiroki ese tiempo sin que su padre ni su querido hermano estuvieran en casa y en especial por las noches, eran todo un calvario, ya que no hubo día en que Haruhiko lo dejara en paz, aún no sabía cómo había logrado salir como primero de su clase con todos esos obstáculos que tuvo que afrontar, ya que prácticamente todos los días andaba con un cansancio extremo por todo lo que Haruhiko le hacía a diario. Y así el día de su graduación había llegado y por mala fortuna ninguno de sus seres queridos lo acompañarían directamente, solo estaba presente su verdugo y eso no hacía más que ponerlo más nervioso de lo que estaba.
Por fortuna la ceremonia pasó en un tris, Hiroki no quería compartir con ninguno de sus, compañeros los cuales se habían portado de lo más malvados con él, incluso hasta el final que cuando lo llamaron para recibir la condecoración por ser el mejor de todos los alumnos en su graduación, no dejaron de cuchichear e insultarlo de la envidia que sentían, inclusive lo empujaron apenas llegó a su lugar, por eso le alegraba mucho el ya no tener que pasar tiempo con ellos. A penas terminó la ceremonia tenía pensado ir corriendo a enseñarle sus méritos a su padre, pero como siempre Haruhiko deshizo sus intenciones.
-ey! A dónde crees que vas –tomando con mucha fuerza el brazo de Hiroki, evitando que salga de la institución-
-ah!! –grita del susto- ni san… iré al hospital, quiero mostrarle a padre… -es interrumpido por el mayor-
-eso puede esperar, ahora ven conmigo –lo jala nuevamente hacia dentro del establecimiento, específicamente a un lugar un tanto apartado-
-ni san a dónde vamos? –pregunta un tanto temeroso, pero no recibe respuesta- ni san por favor! –suplica casi al borde de las lágrimas, estaba verdaderamente nervioso-
-ni se te ocurra llorar, solo quiero que tengas un buen recuerdo de nosotros aquí –se detiene en un sitio en el cual creía que nadie los podía molestar- aquí está bien –menciona acorralando al menor contra la pared- sabes?, este traje te sienta muy bien, sería una lástima que se ensuciara –tomando el rostro del castaño-
-por favor ni san aquí no–se le escapan algunas lágrimas-
-tsk… -suelta molesto, no sabía qué le ocurría, pero cada vez que Hiroki les suplicaba de esa manera algo se removía en su interior y le hacía desistir, claro que eso no pasaba siempre y dejando de lado esa sensación, pero esta vez si había funcionado, tenía planeado tomar a Hiroki como una despedida a esa institución en ese mismo lugar, pero esa expresión no le ayudaba, así que decidió ceder- está bien, pero me he de cobrar en la noche –le dice con una seriedad implacable-
-gracias ni sa mmhg… -es cortado porque el mayor asalta de forma brusca sus labios-
-me la debes, no llegaré hasta el final así que se agradecido –vuelve a devorar los labios del castaño intensificando el beso y comenzando a acaricias la cintura y el trasero de Hiroki, estrujándolo sin pudor-
-mhgg ni san! –logra recuperar el aire tras separarse a duras penas del mayor-
-está bien, es suficiente, vamos donde papá que ya deseo que llegar a casa –vuelve a tomar del brazo de Hiroki para arrastrarlo fuera del lugar hasta llegar a su coche-
Pero el lugar en el que Haruhiko había acorralado a Hiroki no estaba vacío y alguien había disfrutado de tan descarada escena.
-wow así que lo decías en serio Haruhihiko, -menciona Shinoda que había disfrutado del espectáculo en primera fila- creí que solo estabas alardeando, pero parece que en serio te tiras a tu hermanito y vaya que se vio más sexy de lo habitual que hasta a mí me dejó todo caliente, -se relame los labios- tal vez algún día te pida que me lo prestes, si no es que lo tomo sin tu permiso –sonríe perversamente, para luego solo alejarse del lugar-
…
Hiroki tuvo que tranquilizarse todo el camino, no quería que su padre se preocupara, aunque se mantenía temeroso de lo que Haruhiko tenía planeado hacerle esa noche, pero pensar en que tal vez ya le había hecho de todo y que no habría nada nuevo, lo calmaba un poco. Pese a que intentó igual su padre, este lo notó un tanto extraño y solo le quedó excusarse con que habría deseado que él y Akihiko hubiesen estado presentes en su graduación y que por eso el de su tristeza, así que Fuyuhiko le creyó y solo atinó a abrazarlo con mucho amor, brindándole todo su cariño y haciéndole saber lo orgulloso que estaba de él y que en unos días estaría de vuelta en casa todo recuperado.
Pasaron todo el horario de visitas hablando de cosas triviales, Hiroki no quería irse, quería estar al lado de su padre y no solo para no estar a solas con Haruhiko, sino porque de verdad extrañaba la compañía diaria de su padre; pero lastimosamente el horario de visitas terminó y tuvo que marcharse, o más bien Haruhiko se lo llevó.
El camino de regreso a casa no fue para nada tranquilo para Hiroki y es que la sonrisa que tenía Haruhiko y la cual no se había borrado desde que salieron del hospital, lo ponía más que nervioso, apenas llegaron Haruhiko salió y Hiroki sin siquiera esperar una orden del mayor lo siguió, con lo que el de lentes estaba más que satisfecho, pero el sonido del teléfono los detuvo, el mayor tenía la sospecha de quién sería y con la servidumbre de vacaciones sabía que el teléfono no dejaría de sonar hasta que alguien contestara.
-contesta de una vez, tengo una idea de quien se trata –suelta dirigiéndose a su habitación- en cuanto termines con la llamada vienes de inmediato –ordena al castaño el cual solo asiente asustado-
-haa fufh –suspira para calmarse y poder contestar- aló?
-Felicidades Hiroki!! –escucha un grito alegre desde el otro lado de la línea, su querido hermano y cuñado le alegraron un tanto su horrible noche- felicidades por terminar la secundaria hermanito, cómo estás, cómo te fue?
-Akihiko estoy tan feliz de que me llamaras, me fue muy bien! Salí como el primero de mi clase –responde muy feliz-
-ja, ja, ja lo sabía, no hay nadie mejor que mi hermanito, bien hecho, seguro padre está tan orgulloso como yo
-si lo está, además ya está mucho mejor y pronto saldrá del hospital… te extraño Akihiko
-y yo a ti hermanito, lamento no haber estado presente en este día tan importante para ti, pero te prometo estar para tu cumpleaños y pasaremos todo el día divirtiéndonos
-lo estaré esperando ansioso, gracias Akihiko
-no tienes que agradecer Hiroki , sabes que te quiero mucho, no?... bueno te dejo, me están llamando, que tengas un sueño reparador, no vemos pronto! –se despide sin saber que Hiroki estaba lejos de tener un sueño reparador-
-hasta pronto Akihiko –suelta un tanto feliz, pero se desanima al saber que debía ir con Haruhiko y apenas llegó el mayor sacó un par de bolsas de compras de su armario y una se la extiende hacia Hiroki-
-ten, este es tu regalo –le entrega la bolsa con una sonrisa perversa- aunque creo que yo la disfrutaré más que tú, ve al baño a cambiarte! –le ordena levantando la voz, a lo que el castaño obedece de inmediato- ja, ja, ja nunca dejará de parecer un conejito asustado, pero no será un conejito completo sin eso –sacando de la otra bolsa un plug con una cola de conejo- al menos no podrá decir que no me preocupo por él –sacando también un frasco- con esto sin duda terminará disfrutándolo tanto como yo
En el baño Hiroki se sentía muy avergonzado, en serio no podía creer que Haruhiko quería que usara ese atuendo, más bien esa lencería, con razón dijo que él sería el que lo disfrutaría; se trataba de un mini disfraz de conejo, muy revelador ya que la tela era prácticamente transparente y no dejaba nada a la imaginación.
-no puede ser… -menciona el castaño ya una vez cambiado y mirándose en el espejo- no quiero no quiero salir vestido así –se sentía totalmente humillado y aún faltaba lo que Haruhiko le obligaría a hacer, en sí no sabía cuál era el objetivo de comprarle semejante disfraz- en serio no quiero salir, pero si no lo hago sé que será peor –menciona resignado- esto es ridículo –dice tomando lo último que había en la bolsa lo cual era una vincha delgada con largas orejas de conejo las cuales estaban caídas- no pienso usar esto –decide no colocárselas y ya una vez tomado el valor necesario sale del baño ocultando tras de sí las orejitas-
-vaya! Sí que tengo un muy buen gusto –menciona el pelinegro apenas vio a Hiroki salir del baño- te ves realmente exquisito –se relame los labios mientras devora con la mirada al menor, el cual solo atina a ladear su rostro, no podía mirar a Haruhiko o se derrumbaría nuevamente a llorar- acércate! –demanda autoritario y complacido al ver que lo obedecen, pero frunce el ceño al darse cuenta que le falta algo al atuendo- y por qué no te pusiste las orejas?! –pregunta un tanto enfadado-
-yo no quiero usar esto, por favor ni sa… -recordando algo importante- por favor Haruhiko –pide suplicante-
-pero si te queda a la perfección –jala a al menor hasta ponerlo sobre sus piernas- deberías ser más agradecido Hiroki –quitándole con brusquedad la vincha de las manos y colocándosela donde se debe- bueno como a ti te encanta portarte mal pues tendré que castigarte –suelta dando la vuelta a Hiroki haciendo que se eche de panza sobre sus piernas, sujeta con una de sus manos las dos del castaño para que no pueda escapar y con la otra comienza a darle fuertes nalgadas-
-ahh!! –grita asustado y adolorido- no, por favor detente, me duele!! –comienza a llorar y con justa razón ya que Haruhiko no se medía y aplicaba mucha fuerza, a tal punto que las nalgas de Hiroki ya estaban rojas desde la primer palmeada-
-sabes muy bien que desobedecerme tiene sus consecuencias hermanito y aun así sigues haciéndome enfadar, así que ahora te aguantas –siguiendo con los golpes-
-ya no más, te lo suplico –pide entre lágrimas, a lo que el mayor deja de pegarle-
-está bien, creo que ya es suficiente, bueno, a lo que sigue –tomando el frasco que había comprado- esto te gustará mucho Hiroki, además hace falta completar el traje –vertiendo parte del contenido del frasco en la entrada del ojimiel-
-ahh! –se asusta- que es eso? –pregunta inquieto y tratando de removerse-
-quieto!! –demanda- ya te dije que es algo para hacerte sentir bien –introduciendo uno de sus dedos en el interior de Hiroki el cual entró con una facilidad como nunca- wow esto es magnífico –sin esperar mucho introduce el segundo dedo- de haber sabido que con eso sería mucho más fácil lo hubiera comprado desde hace mucho –menciona moviendo sus dedos con velocidad a lo que al menor le era imposible no jadear- parece que te gusta verdad Hiroki?
-ah, ah, umm ya… ya no! –suplicaba ya que se sentía muy extraño, no quería tener esa sensación y menos con Haruhiko, pero al menos no le dolía como siempre-
-ok, es hora de usar esto, seguro te será familiar, recuerdas el juguetito que te regalé hace tiempo? –sin esperar la respuesta del menor continúa hablando- este es un poco más pequeño pero te hará recordar el que se siente –agarra el plug y se lo clava de golpe al menor, a lo cual este solo atina a sobresaltarse- pero si sigues lloriqueando esta vez cumpliré mi amenaza y te pondré el mío sin sacarte este –lo amenaza como de costumbre-
-es que… se siente muy… extraño –habla entrecortadamente tratando de calmarse-
-eso es por la loción que te apliqué y es que tiene un componente afrodisíaco, no me vas a decir que no se siente bien verdad? –empieza a masajear las nalgas de Hiroki estrujándolas de tanto en tanto, logrando que el menor jareara- eso Hiroki, solo disfrútalo
-umm, ahhh por favor ni san!! –suplica-
-te dije que me llamaras por mi nombre!! –increpa asentándole una nalgada al menor-
-ahh –suelta un alarido-
-será mejor continuar –ayuda al castaño a ponerse de rodillas frente a él- y he decidido que este día tu mi querido Hiroki serás quien me atienda de principio a fin –acaricia los labios del menor-
-qué?... –pregunta el castaño un tanto confundido y atontado por todo lo que estaba sucediendo-
-aprenderás a usar esta boquita de la manera más placentera posible –menciona mientras se quita sus últimas prendas para quedar totalmente desnudo, mostrando su prominente erección- yo creo que sabes muy bien a que me refiero –a lo que el menor solo niega- vamos Hiroki no creo que quieras ser castigado de nuevo con el fuete, verdad? –pregunta viendo el terror que había provocado en el castaño- entonces debes obedecerme sin chistar, de acuerdo? –Hiroki solo baja la mirada y asiente quedamente- de acuerdo y más te vale no morderme porque no te la acabarás! –menciona en tono amenazante- ahora abre bien esa linda boquita
-… -Hiroki detestaba que Haruhiko lo tratara así, siempre humillándolo y abusando de él, no soportaba el hecho de estar prácticamente en sus manos, no podía desobedecer aunque lo deseara, no solo porque recibiría un castigo si no lo más importante, no permitiría que Nowaki saliera mal parado de todo esto, así que solo le quedó dejar todo su orgullo de lado y nuevamente ceder obedientemente; temblando se acercó y tomó entre sus manos el miembro palpitante del pelinegro y comenzó a sobarlo lentamente, lo cual molestó al de lentes que jaló a Hiroki del cabello para hacer que lo mirara-
-dije que usaras tu boca!! –menciona furioso restregando la cara del menor sobre su miembro- ahora ábrela bien y saca la lengua –Hiroki obedece de inmediato ya que le dolía el cuero cabelludo por el jalón- muy bien –y sin compasión mete su pene por completo dentro de la boca del menor haciendo que este se atragante, le daban muchas náuseas y le dolía, era la primera vez que hacía un felación y Haruhiko no estaba siendo nada delicado, Hiroki tenía mucho miedo de lastimar a Haruhiko en el acto o de vomitar ya que estaba seguro que el mayor no dudaría en castigarlo de la manera más humillante posible- ahhh eso Hiroki, me encanta esa boquita, sabía que con esto sentiría esta clase de placer –guiando la cabeza de Hiroki sin soltarlo del pelo y cada tanto aumentando la velocidad- mmm, ahh de verdad me fascinas Hiroki
-mmmhh –Hiroki estaba cansado, su boca y su garganta le dolían mucho, deseaba que eso terminara pronto y gracias al cielo así fue- cof, cof, cof –tose al saberse liberado, expulsaba mucha saliva acumulada que hora mojaba el suelo alfombrado, mientras se frotaba la garganta la cual le ardía-
-eso es suficiente, no quiero correrme en ningún otro lugar que no sea tu interior –se incorpora y jala al castaño de una mano para guiarlo hasta a un lado de la cama- tal y como dije hoy tú serás quien me de placer de principio a fi y si Hiroki, esto aún no termina- se recuesta en la cama, apoyando su cabeza sobre sus manos cruzadas y colocándose en una posición como de descanso, ahora ven aquí mi niño y móntame –ordena sonriendo despectivamente-
-qué? –pregunta Hiroki incrédulo, no podía creer lo que había escuchado, eso sin duda dejaba muy atrás el haberle hecho una felación al mayor y es que ser él mismo el que se empalara el pene del mayor no solo lo humillaba aún más, también era como si aceptara pertenecerle a Haruhiko- yo no…
-en serio quieres desobedecer habiendo llegado tan lejos –pregunta afilando la mirada, a lo que Hiroki todo tembloroso decidió obedecer una vez más- eso es, sube aquí –palmea uno de sus mulos esperando impaciente a que el menor se posicionara sobre él- y por favor deja de llorar que eso no es muy diferente de lo que hemos hecho hasta ahora –menciona sin remordimiento, logrando que el menor terminara de posicionarse sobre él- eso es, supongo que por obedecer sin hacer tanto drama no seré tan cruel, retiremos esto –quita el plug con cola de conejo del interior del castaño a lo que se sobresalta un poco- continúa o regresaré esto a su lugar y será peor para ti
-umm –Hiroki con temor bajaba lentamente empalándose el mismo el miembro de Haruhiko llegando a tenerlo dentro suyo por completo- ah, ah…
-muy bien ahora muévete –se relame los labios, nunca pensó en tener esa imagen frente a él, así que lo desfrutaría al máximo- eso es ahh –Hiroki se movía lentamente lo cual al mayor le parecía un fastidio, pero a la vez disfrutaba cada segundo hasta que no aguantó más y decidió ser el quien lleve el ritmo, sujetó con fuerza a Hiroki de la cadera y aumento la velocidad del movimiento-
-ahhhh –grita ya que el brusco movimiento lo había asustado- nooo, despacio por favor! –sentía un calor inmenso cada vez que el pelinegro arremetía contra él, sentía que todo su cuerpo estaba en llamas y su miembro ya erecto no paraba de gotear, no había tenido esa sensación desde hacía mucho, la única vez que sintió algo similar fue cuando había hecho el amor con Nowaki y ahora ni remotamente era lo mismo, no era que odiase a Haruhiko, ya que el odio hacia alguien no cabía en su corazón, pero tampoco lo amaba, por eso aborrecía tener esa sensación en ese momento, pero sabía que no era su culpa ya que Haruhiko le dijo que ese gel que había usado en él contenía un afrodisíaco, que sin duda eso era lo que causaba estragos en su cuerpo-
-asi ahh –gemía el pelinegro reforzando su agarre en la cadera del menor- ese gel es de lo mejor, desde ahora nuestros encuentros serán de lo más candentes –se relame los labios y acelera las estocadas hasta por fin correrse dentro de Hiroki, el cual a causa de la droga tardó un poco más en venirse-
Esa noche Haruhiko disfrutó más que nunca del cuerpo de Hiroki quien ya no tenía el dominio de su cuerpo, hace mucho que había perdido la voluntad y se dejó hacer cuanto quiso el mayor; esa sería una de muchas veces en las que el mayor aprovecharía de su beneficiosa compra.
…
En tanto en Tokio, la relación de Tsumori y Kazuki iba viento en popa, como el sentimiento era mutuo no había manera de poder ocultar su amor frente al mundo entero, pero sentían la necesidad de no ser tan afectivos frente a Nowaki, aunque ya el ojiazul cada vez se encontraba menos afligido con respecto al tema de Hiroki, siempre mantenía la esperanza de recuperar a su amado y Tsumori siempre lo apoyaría.
-ja, ja, ja –Tsumori ingresaba a su departamento teniendo a su amado novio agarrado de la cintura- ese si fue bueno ja, ja
-vaya!, parece que se divirtieron mucho –anuncia Nowaki al ver tan felices a sus compañeros de departamento- supongo que les fue de maravilla en su cita
-sí que lo fue Nowaki san, el festival estuvo maravilloso, hay tantas cosas que ver, jugar y comer, me hubiese gustado que fueras
-si hubiera ido ya no sería una cita, además no me gusta hacer mal tercio y también pedí un turno extra para así cubrir mi horarios y tener un par de días libres –responde el ojiazul sonriente-
-y por qué tan afanado en tener un par de días libres –pregunta el rubio algo intrigado- qué planeas?
-un viaje –responde a medias-
-viajarás? A dónde Nowaki san? –pregunta curioso el menor-
-a Osaka –suelta sin más-
-en serio? –pregunta Tsumori un tanto preocupado- quieres buscar otra vez a Hiroki?
-sí, quiero buscarlo y tengo el presentimiento de que esta vez sí lo encontraré –responde optimista-
-y que lo hace de diferente a otras ocasiones? –suelta un tanto curioso el rubio-
-porque sé que Hiro chan no dejará de visitar la tumba de sus padres en su cumpleaños, -su senpai lo mira como preguntando de donde obtuvo esa información- se lo pregunté en una de tantas llamadas que le hice cuando estaba en Londres y desde ahí no se me borró, mañana es el día, mañana Hiroki cumple 17 años y lo encontraré para felicitarlo y hacerle saber cuánto lo amo, hoy hable con el doctor Yoshida y ya pedí el permiso para mañana y pasado, -le sonríe a su senpai- partiré a primera hora, deséame suerte amigo –estira su mano hacia el rubio-
-claro que si amigo –toma la mano y lo jala para abrazarlo y palmearle la espalda animándolo- encontrarás a Hiroki –le sonríe tomándolo por los hombros-