La noche había pasado lenta y torturante para Hiroki, aún resonaban las palabras llenas de amor que Haruhiko le dedicaba cada vez que se encontraba cerca de su oído, para luego lamerlo; Hiroki no ponía resistencia pero no podía evitar sentir la misma repulsión de siempre, odiaba que Haruhiko lo tomara cuando quisiese, pero más odiaba que no le haga daño al hacerlo ya que lo confundía mucho, no entendía por qué lo trataba de manera tan dulce después de todo lo que le había hecho, si tan solo hubiera sido dulce con él desde que llegó a su vida, si tan solo lo hubiera tratado con el cariño que todo hermano menor merece, pero no!, lo torturó desde que llegó, lo sodomizó desde que pudo, lo amenazaba y seguí teniendo amenazado, pero aún así ahí estaba, tratándole con toda la delicadeza del mundo, como si fuera una delicada flor; Hiroki se odiaba por eso, por tolerar todo eso, ya que fuera del hecho que lo hacía para proteger a su amado y su amigo, también dejaba de lado el odio que debía de tenerle a ese ser despiadado solo por un poco de cariño de su parte, del cariño que siempre quiso de ese hermano mayor.
Por otro lado estaba Haruhiko, disfrutando cada segundo de su noche de bodas, se había propuesto enamorar a Hiroki y para ello debía demostrarle ese loco amor que sentía por él, se dio el tiempo de probar y profanar cada parte del cuerpo del menor, no quería dejar ninguna parte sin marcar, se dedicó a atenderlo y logró que acabara muchas veces para así agotarlo y que estuviera muy relajado para cuando él entrara y lo logró!, eso lo sabía muy bien cuando pudo deleitarse con los suaves gemidos que emitía, pero él quería más, quería que Hiroki gritara de locura ido por el placer, pero sabía que para eso debía ser paciente; por eso debía controlarse, en especial controlar sus celos ya que muchas veces a causa de ellos había lastimado al castaño y ahora estaban demás, ya que ahora era suyo por completo y no iba a dejar que nadie se lo quitara.
Esa noche para Haruhiko fue la mejor de su vida, no pudo evitar parar hasta el amaneces, incluso Hiroki no había aguantado tanto y había caído inconsciente a media faena, pero para el mayor no era suficiente así que continuó solo, complaciéndose con el cuerpo del castaño, tal vez esa era una de las pocas cosas que le sería difícil cambiar.
Ya eran las 10 de la mañana y la luz del día había llegado hasta el rostro de Hiroki despertándolo, quería seguir durmiendo, su cuerpo estaba entumido, pese a que Haruhiko no lo había lastimado se sentía desecho, su mente lo dominaba, se encontraba muy triste y confundido, pero sobre todo preocupado, no quería hacerse ese tratamiento y menos quería darle un hijo a Haruhiko, pero no podía quedarse con él por cinco años así como así, solo le quedaba pedir por un milagro, el milagro de no quedar encinta en ese año o que el tratamiento durase tanto que no le diera tiempo al mayor para no lograr embarazarlo; pero si quedaba embarazado no creía tener corazón para dejarle a su hijo a Haruhiko, sin duda sabía que esa era una gran trampa del pelinegro, pero estaba entre la espada y la pared y pensándolo mejor había elegido la mejor opción.
En ese instante sus pensamientos fueron interrumpidos por Haruhiko quién entro de lo más radiante con una bandeja en las manos, en ella había un exquisito desayuno, se sorprendió mucho al verlo así, parecía otra persona, nunca lo había visto con tal expresión, era tan feliz y pacífica, no como la típica mirada de superioridad que poseía, pese a eso sabía que bajar la guardia significaría un gran problema.
-cómo amaneciste mi amor, sabía que tardarías en despertar, pero me alegra mucho que lo hayas echo a tiempo para que podamos desayunar juntos –acercándose al menor con una enorme sonrisa, deja la bandeja sobre las piernas del menor, para luego darle un beso en la cabeza-
-gracias… -dice algo incómodo ya que aún se encontraba desnudo y solo con una sábana que lo cubría-
-sabes, me dio tiempo de hace que mi abogado hiciera el nuevo contrato con todos lo puntos establecidos, ya que aceptaste hacerte el tratamiento no hubo muchas modificaciones, pero hay algo más… -menciona tranquilo sentándose cerca del menor para luego tomar algo de fruta de la bandeja y comerla- sé que te cuesta mucho aceptar nuestra relación y todo, pero no me gusta que estés con esa expresión triste todo el tiempo, es algo frustrante y temo perder el control si sigues así, por eso necesito que la cambies, luce menos triste por favor, sé que no quieres que me enfade, verdad? –pregunta sujetando del mentón del castaño para que lo viera directamente, por lo que el menor solo asiente quedamente-
-entiendo… -responde muy despacio- haré mi mejor esfuerzo
-de acuerdo, entonces es hora de cambiar esa cara, quiero verte feliz, por eso te traje el desayuno y de verdad quiero que las cosas cambien entre nosotros, que se apacigüen –toma nuevamente un trozo de fruta pero esta vez se lo da a Hiroki en la boca- por eso quiero que en esta nuestra luna de miel lo pasemos muy bien, no será tan larga como planee y es porque quiero regresar lo más pronto posible para de una vez empezar el tratamiento, por eso solo nos quedaremos aquí una semana –con una sonrisa sigue comiendo- vamos Hiroki come, que luego nos iremos de paseo, hice un cronograma de todos los lugares que quiero que conozcas, amarás parís, tanto que desearás volver
Sin mencionar mucho Hiroki continuó comiendo, pensaba que Haruhiko estaba más loco de lo que creía, ahora resultaba que tenía que fingir ser feliz incluso estando con él, porque sabía que, si tenía que aparentar que era feliz frente a todo el mundo, pero ahora incluso con él, la verdad no sabía si iba a lograrlo, pero debía hacer su mayor esfuerzo.
…
Mientras tanto en Tokio; para fortuna de todos Misaki aceptó reunirse con Shinobu y Miyagi, yendo este solo con su beba ya que su esposo tenía trabajo pendiente, ese era otro golpe de suerte ya que creían que involucrar a más personas sería peligroso, pero si Misaki no daba indicios de saber algo más tampoco lo involucrarían, solo inventarían algo para que los ayudase a reunirse con Hiroki.
-ja, ja, ja de verdad? –pregunta Shinobu riéndose- me sorprende mucho que tu esposo hiciera algo así, con razón es tan conocido allá, pero fue genial, creo que cada uno de los hermanos se dio a conocer por algo y eso es bueno, seguro que Usami san está muy orgulloso de sus hijos
-si lo está, lo dice muy seguido y aunque no lo dijera, se le nota –menciona sonriente- y quiere mucho a su nieta
-Hiromi es hermosa, me alegro mucho que le hayan puesto ese nombre, cuando Hiroki me lo contó parecía tan feliz
-sí, incluso lloró
-Hiroki es muy emocional –acota Miyagi- además parece que le gustan los niños, lo digo por como habló de Hiromi
-cuando a él le toque ser mamá seguro le pone lo mimará todos los días y le pondrá un hermoso nombre también –menciona tocando la cabecita de la bebé- me pregunto si esos dos planean hacerse el tratamiento que te hiciste
-lo dudo mucho… -respondes en un susurro que no pudo ser escuchado por ninguno de los otros dos, pero estaba seguro en lo que había dicho, ya que sabía que ese matrimonio solo era una farsa- tú lo harías
-claro que sí, quiero tener unos pequeños Miyagis corriendo por toda mi casa, pero aún estoy muy joven… -de pronto Shinobu se pone un poco serio- cambiando de tema, Hiroki tiene otros amigos a parte de nosotros, sabías?, ayer no pudieron llegar a tiempo para verlo y pues como no son de aquí les es difícil saber cuándo volverá, Miyagi y yo hablamos con ellos, Miyagi conoce a uno y creo que la persona indicada para darles esa información eres tú, podrías ayudarlos a saber cuando regresa Hiroki?
-sus amigos?, pero Hiroki nunca habló de nadie más que ustedes, tú sabes algo?
-Hiroki me contó muchas cosas y no creo que me corresponda contártelo, pero quizás hablando con ellos te ayude a ti también, incluso puedes lograr que Hiroki se habrá más contigo, yo no sé mucho, pero me parece triste que sus amigos hayan venido en vano
-habla con ellos por favor Misaki, de verdad son buenos chicos
-supongo que no solo me llamaron para despedirse, está bien, hablaré con ellos, aunque no creo poder ayudarlos mucho
-gracias por eso Misaki, bueno será mejor que nos vayamos, Shinobu tiene una reunión familiar y estamos obligado a asistir –menciona Miyagi con una sonrisa burlona- seguro que me volverán a comer por robarme a su pequeño angelito
-no exageres, que sabes que ellos te quieren… Misaki, me encantó conocerte, sin duda si nos quedáramos aquí, seríamos los mejores amigos, por favor nos despides de Akihiko –se levantan para despedirse, a lo que los médicos al ver la señal se acercan a la mesa-
-Misaki, ellos son Kusama Nowaki y Tsumori Yatsushi –Miyagi presenta a los médicos y luego se dirige a estos- chicos él es Takahashi Misaki el cuñado de Hiroki, -los mencionados se presentan- bueno nosotros nos retiramos, suerte chicos, adiós Misaki, cuídate mucho
-adiós, buen viaje –los despide con la mano y luego toma nuevamente asiento- entonces, ustedes son amigos de Hiroki? –pregunta un tanto incrédulo- y dónde se conocieron?
-si somos muy buenos amigos de Hiroki, de verdad no tienes de qué desconfiar Takahashi san, lo que menos queremos es hacerle daño a Hiroki
-pues si quieren saber cuándo vuelve, solo puedo decirles que Haruhiko dijo que estarían un mes en París, podría avisarles en cuanto vuelva
-me alegra saberlo –menciona Tsumori- por como desconfías de nosotros supongo que Hiroki nunca te contó de nosotros verdad? –el castaño asiente- entonces creo que no debemos decir nada más, gracias por tu ayuda
-solo una cosa más, -suelta Nowaki, necesitaba una prueba para saber si Misaki podía será más que solo un informante, necesitaban saber si podían confiarle más información- que piensas de que Hiroki se haya casado con su hermano, crees que él aceptó porque se aman
-por qué preguntan eso?, saben ustedes algo del trato? –pregunta un tanto intrigado, Hiroki le había mencionado poco del por qué Haruhiko lo había obligado a casarse con él y ahora aparecen dos supuestos amigos de Hiroki que insinuaban cosas que solo su familia sospechaba, eso lo confundía, pero no debía dejarlos ir sin saber algo más-
-tú lo sabes? –pregunta sorprendido Nowaki, sin duda esa era la prueba que indicaba que podían seguir hablando- sabes que Hiroki no ama a su esposo y que…
-lo obligó a casarse con él bajo una amenaza?, -completa Misaki- si lo sé, pero ustedes cómo lo saben y si lo saben por qué no evitaron que lo hiciera?
-nos enteramos ayer, nos enteramos de todo; aparte de eso sabes te algo más?
-no lo hiso, por más que se lo pedí, dijo que sería peligroso y me hiso prometer no decírselo ni a Akihiko ni a su padre, pero yo sí quiero saber por qué aceptó así de fácil una amenaza?, quiero saber por qué Hiroki siempre parecía asustado y triste, sé que pasó por un secuestro difícil pero sé que ay algo más oculto ahí, ya que cambió desde que Haruhiko lo rescató
-es que Hiroki no fue secuestrado –revela Tsumori-
-qué?, cómo de que no fue secuestrado, pero él desapareció y Haruhiko estaba herido y pasó mucho tiempo hasta que Haruhiko regresara con él –menciona un tanto alterado, evitando gritar o ser muy brusco para evitar que su hija se despertara ya que tenía un tiempo dormida-
-te contaremos todo, podemos confiar en ti, solo queremos ayudar a Hiroki, solo eso
-pueden hacer, yo también quiero ayudar a Hiroki –suelta seguro el castaño-
-está bien, solo no se lo digas a nadie más, Hiroki quiere cumplir ese trato para luego ser libre, pero si algo hace incumplir ese trato puede que su libertad tarde más en llegar, aunque eso no creo que sea seguro, pero Hiroki confía en que si –menciona Tsumori-
-está bien, ahora díganme como es eso de que Hiroki no fue secuestrado
-es que no fue un secuestro, fue Haruhiko quien lo hiso ver como tal, solo para ocultar todo lo que le hacía a Hiroki, Hiroki huyó de su casa porque provocó que Haruhiko cayera por las escalera, creyó que lo había matado y huyó, llegó hasta Tokio y fue ahí donde nosotros lo encontramos y cuidamos, ahí lo conocimos como Kamijou Hiroki, nunca nos dijo nada acerca de los Usami, solo de su anterior familia y de como se quedó solo, por eso lo acogimos, fue muy feliz esos meses, pero de repente un día desapareció
-fue cuando Haruhiko lo trajo de regreso? –pregunta Misaki a lo que los médicos solo asienten-
-el lo obligó a volver con la amenaza de que nos meterían a la cárcel por secuestro si se negaba a hacer lo que él quería, Hiroki nos tomó mucho cariño y nosotros nos enamoramos de él –menciona el rubio sorprendiendo a Misaki- pero Hiroki se decidió por Nowaki y yo decidí ser solo su amigo-
-fuimos novios, de verdad nos amábamos, sé que está mal ya que Hiroki era solo un niño de 16 años, pero fue inevitable, vinimos un par de veces a visitar la tumba de sus padres y él siempre lucía rebosante de alegría, yo lo amo con todas mis fuerzas y sé que él también a mí, sino no hubiera aceptado casarse, pero ahora piensa que lo odio y seguro está sufriendo por ello
-por qué crees que piensa eso?
-porque Haruhiko lo obligó a echarme de su boda a como diera lugar y pues, lo hiso y yo como tonto le creí y hui, pero Hiroki no aguantó más y le dijo todo a Tsumori, tardó en encontrarnos y por eso no llegamos a tiempo
-Haruhiko no solo trataba mal a Hiroki, verdad? –pregunta temeroso de la respuesta que ya sospechaba-
-él lo violó muchas veces, Hiroki no lo soportó y por eso quiso huir
-ahh –suelta un sollozo Misaki tapándose la boca de inmediato-no puede ser, no puedo creer que Haruhiko haya sido capaz de tanto, pero Hiroki debió hablar!, lo que ese maldito le hizo es un delito, podría liberarse de él ya que lo meterían a la cárcel
-así es, pero todo se complicó, ahora están casados y ya de por sí no sería tan un delito, además Hiroki me dijo que Haruhiko es muy peligroso, sé que sabe algo y por eso no se arriesga a denunciarlo, eso y por nosotros
-por eso necesitamos que nos ayudes Takahashi san, quiero que Hiroki sepa que no lo odio, que lo amo con toda mi alma y que no lo dejaré solo
-lo haré, les ayudaré, pero será muy difícil para ustedes ir y venir cada vez
-pensamos lo mismo, por eso decidí que pediría un traspaso en el lugar donde trabajo, quiero estar lo más cerca de Hiroki, -suelta Nowaki animado- pero debemos evitar que Haruhiko lo descubra
-si está conmigo, no creo que lo haga, -menciona seguro Misaki- solo hay que hacer un buen plan para hacer que se reencuentren
-muchas gracias Takahashi san, sin tu ayuda no creo que siquiera podríamos tener oportunidad
-es lo mínimo que podría hacer por mi mejor amigo
Nowaki y Tsumori había encontrado el mejor aliado de todos, ahora Nowaki podría encontrarse con Hiroki y sabía que nunca más lo dejaría solo.
Se despidieron teniendo una nueva esperanza y volvieron a Tokio, Nowaki pidió el traspaso el cual a duras penas se lo darían para cuando lo pidiese, ahora solo esperaría la llamada de Misaki para partir y encontrar la oportunidad para volver a ver a su amado; sin saber que ese día estaba más pronto de lo que imaginaba.
En París Haruhiko había cumplido todo lo que dijo, llevó a Hiroki a conocer todos los mejores lugares de esa hermosa ciudad, sin duda tenía una excelente planificación, y Hiroki también puso mucho esfuerzo para cumplir su parte, por lo que Haruhiko estaba más que complacido, pero en el fondo sabía que Hiroki aparentaba muy bien, solo esperaba que muy pronto no solo lo aparentara si no también lo sintiera.
En cuanto a las noches, siendo su luna de miel, no había día en el que Haruhiko no poseyera el cuerpo de Hiroki, en las cuales el menor solo se dejaba hacer, rogando que el mayor no lo lastimara, pero para su sorpresa y también tranquilidad, eso ya no ocurría, sin duda el pelinegro lo trataba mejor que antes, eso le daba más esperanzas de que Haruhiko cumpliría el contrato, por lo que él decidió también cumplirlo para evitar nuevas modificaciones.
El tiempo voló y Haruhiko ya estaba ansioso de volver, además que se había presentado un asunto del que tenía que hacerse cargo personalmente, apenas habían informado de su regreso y alistaron todas sus cosas para volver.
El viaje de regreso duró el mismo tiempo, pero esta vez Hiroki estaba ansioso por llegar, necesitaba de su familia y en especial de los abrazos de Misaki para consolarlo, si bien Haruhiko esta vez no lo torturó, Hiroki se sentía muy mal, ya que había accedido a que profanaran su cuerpo sin oponerse, nadie entendería el cómo se siente, pero al menos el ojiesmeralda sabía que Hiroki no amaba a su esposo por lo que era muy duro entregarse a él, por eso necesitaba el consuelo de su querido amigo.
Por otro lado, a penas Misaki se enteró que la luna de miel de los nuevos esposos se había acortado, informó a Nowaki, esperando que este llegase a tiempo para echar a andar su plan lo antes posible, estaba seguro de ayudar a su cuñado, no dejaría por nada que Hiroki perdiera al amor de su vida.
Contunuará...