Jongin estaba sentado en su oficina, viendo a Jae Hyo, que estaba sentado en la silla frente a su escritorio, ChangJo estaba sentado al lado de Jae Hyo en la otra silla. Him Chan estaba sentado en el sofá, tomando el sofá entero, Eric Moon estaba apoyado contra la pared, viendo a todos los hombres en la habitación.
Seung Ho junto a su padre, sus ojos estudiando a todo el mundo. El hijo parecía que no quería estar aquí, como si el cuarto estuviera lleno de enemigos. Jongin suponía que si su pareja, Luhan, hubiera pasado por un cambio tan violento y nadie supiera por qué, también estaría enojado como el infierno.
—Tuve una larga conversación con el doctor Bae Yong Joon—comenzó a Jongin. —¿Dices que un vampiro atacó a tu pareja?
Seung Ho asintió con seriedad.
Jongin suspiró. Él realmente no quería tener esta charla, pero no sólo Seung Ho necesitaba saber lo que le pasó a su pareja sino que los líderes necesitaban saber que las reglas del juego habían cambiado. —Él estaba drogado con Liquid Wrath cuando atacó a tu pareja.
—¿Va a ser un híbrido? —Seung Ho preguntó, la angustia y la ira sopesando sus palabras.
Jongin negó con la cabeza. —No.
—Entonces, ¿qué? —Eric le preguntó.
—Al parecer la droga está mutando —respondió Jongin. La sala quedó en un silencio mortal, mientras los líderes se le quedaban viendo. Him Chan se inclinó hacia adelante, ya no se veía desinteresado.
—¿Cómo ha mutando? —Him Chan preguntó con cuidado. Jongin sacó una carpeta del escritorio, con un suspiro.
Seung Ho se emparejó con G.O, mordiéndolo. Después del ataque del vampiro, el anticoagulante que aun estaba en G.O, con el ADN de Seung Ho, mutó también.
—Sólo dime lo que sucede. —Seung Ho gruñó y luego miró hacia el suelo, colocando sus manos en su espalda—. Lo siento, Alfa.
—Básicamente —dijo Jongin, tratando de mantener su ira por la falta de respeto bajo control—. Tu le diste su propio oso.
Seung Ho levantó la cabeza abriendo más los ojos. —¿Yo le hice esto? —Seung Ho murmuró la pregunta. El dolor cruzó por su cara mientras veía a Jongin, viéndolo como si quiera que Jongin aliviara su carga, la culpa de lo que había hecho. Demasiado mal que Seung Ho hubiera dado en el blanco.
—¿Qué significa esto para los vampiros? —preguntó.
Jae Hyo salvó a Jongin de decirle a Seung Ho que sí.
—No estoy seguro, pero si un shifter puede convertir a su pareja, entonces pienso, junto con el doctor, que un ser humano puede convertirse en un vampiro. —Jongin vio a Him Chan—. O en un demonio.
—Oh, infiernos —dijo ChangJo, sentándose más adelante y frotándose la cara—. Así que, básicamente, ¿si alguien que tiene esa droga en su sistema muerde a alguien, la siguiente persona que muerda al humano lo puede convertir?
Jongin asintió. —En teoría.
La habitación quedó en silencio de nuevo, todos se veían como si estuvieran pensando las cosas, con el peso de las implicaciones.
—¿Pero G.O va a estar bien? ¿Esto es permanente y es un shifter oso ahora? —Seung Ho preguntó.
—Él es un shifter oso ahora, Seung Ho. El médico no pudo encontrar nada malo en G.O o en su sangre. Tu pareja va estar bien —respondió Jongin.
—Entonces, ¿puedo ir con él, o aun me necesitan aquí?-Seung Ho preguntó.
Jongin negó con la cabeza. —Tu parte está hecha. Ve con tu pareja, Seung Ho.
Jongin vio como Seung Ho veía a su padre, algo pasaba entre los dos hombres, y luego Seung Ho se fue.
—Pensé que tu nuevo hijo tenía la cura —dijo Jae Hyo girándose hacia Eric.
—¡Nadie lo usará! —Eric gruñó en voz alta.
—Cálmate oso —dijo Jae Hyo mientras se ponía de pie. Jongin no quería una pelea en su oficina. Podía ver las defensas de Eric aumentar ante el Príncipe de los Vampiros—. Simplemente estaba preguntando si aún tenía la cura. Porque si la droga se ha transformado, creo que ahora está a salvo.
Parte de la tensión dejó a Eric, pero aún se veía en guardia. —Voy a pedirle al médico que le saque algo de sangre a Yoo Geun, para comprobar, pero si él todavía lleva la cura...-Eric se fue apagando.
—Entonces, ni aun así nadie lo tocará. Él está bajo la protección de mi manada —dijo Jongin, poniéndose de pie—. Todos los cachorros están protegidos. Y eso incluye a tu hijo, Jae Hyo.
Jae Hyo asintió. —Agradezco la oferta, y te llamaré si es necesario, pero no preveo ser incapaz de proteger a mi propio hijo. —Jae Hyo no lo había dicho a la defensiva, pero Jongin comprendió lo que el vampiro decía. A ningún padre, ni a ningún hombre, le gustaba que le dijeran que no podía hacerse cargo de su propio hijo.
—Advierte a tu manada, ChangJo —Jongin le dijo al Alfa de los lobos grises.
—Las cosas parecen girar más y más fuera de control últimamente —comentó ChangJo poniéndose de pie para irse-. ¿Cómo esta tu primo y su pareja?
Jongin sonrió. ChangJo no sólo se convirtió en un buen aliado con los años sino en un buen amigo. Era bueno escuchar a ChangJo preguntar por su familia en medio de esta revelación.
—El testigo de repente no puede recordar lo que pasó o porqué culpó a Yesung. El fiscal no tenía suficiente para levantarle cargos a Yesung, así que lo dejaron ir.
—¿Él está en casa ahora?
Jongin asintió. —Él está en casa con Ryeowook, tratando de dejar la experiencia atrás. —Yesung se encontraba en casa tratando de joder a Ryeowook en el sótano, pero esa no era información que Jongin compartiera. Yesung no sólo estaba volviendo a familiarizarse con su pareja. Sino que le dijo a Jongin que joder a Ryeowook hasta que sus ojos se cruzaran era su manera de castigar a su pareja por casi lograr que lo encerraran. Ryeowook había ido a la cárcel en la ciudad donde Yesung estaba encerrado, formando un infierno y estuvo malditamente cerca de lograr que lo arrojaran a la cárcel. Si Ryeowook hubiera estado encerrado al amanecer, el imbécil se hubiera freído. Yesung no tomó la noticia muy bien. Pero tenía la sensación de que su primo tenía las cosas bajo control.
—Ambos deben dejar que su gente se entere —dijo Jongin a Jae Hyo y Him Chan, dejando pasar el tema de su primo y Ryeowook —. Deben saber lo que podría suceder si sus parejas son mordidas.
—¿Es sólo entre parejas? —Him Chan preguntó.
—Honestamente, no lo sé. G.O es el primero, y Seung Ho se limitó a reclamarlo antes del ataque. Vamos a tener que mantener un ojo en todo el mundo y ver.
—Ese plan apesta —dijo Eric, cuando se dirigía hacia la puerta—. Me gustaría poder encontrar a la persona que creó esa maldita droga. Lo mataría con mis propias manos.
Jongin sabía quién creó la droga, pero eso solo serviría para que los líderes lo enfrentaran. —Ve a tu casa con tu familia, Eric. Vamos a resolver esto.
Eric asintió, dándole a Jongin una seria sonrisa antes de salir de la oficina. Him Chan entró en una sombra, saliendo de la oficina de Jongin, y entonces ChangJo y Jae Hyo se fueron.
Jongin fue en busca de su pareja, necesitaba sostenerlo y se preguntaba cuánto más iba a pasar antes que el mundo se enterara de que los shifter existían. Como las cosas estaban cambiando iba a ser un difícil infierno seguir ocultando su existencia por más tiempo.
Seung Ho estaba sentado en su cama, viendo como su pareja G.O se paseaba por la habitación. G.O no parecía muy contento. Parecía francamente molesto y preocupado.
—¿Así que esto es permanente? —Dejó de caminar para preguntar.
—Eso es lo que me dicen.
G.O hizo un gruñido pequeño y luego se puso a caminar de nuevo. Seung Ho pensaba que el pequeño gruñido era sexy como el infierno, pero no creía que G.O quisiera saber eso en estos momentos. Su pareja se veía suficientemente estresado.
—No puedo lograr que mi cabeza entienda el hecho de que ahora soy un shifter —dijo G.O cuando se detuvo junto a la ventana, viendo a Seung Ho—. Puedo sentirlo dentro de mí, recordándome que está ahí, pero... —G.O alejó la vista de Seung Ho y vio hacia afuera por la ventana.
Seung Ho se levantó y caminó hacia G.O. Agarró a su pareja por la cintura, jalándolo a sus brazos. —Estoy aquí para ti, G.O. Nunca quise transmitirte el virus. Yo haría cualquier cosa para deshacer esto, pero no puedo.
G.O se giró en los brazos de Seung Ho, mirándolo. Una pequeña sonrisa se formó en los labios de G.O. —Mentiroso, Amas el hecho de que ahora sea un oso. ¡Admítelo!
Seung Ho se encogió de hombros. ¿Qué podía decir? Amaba el hecho de que G.O ahora era un oso. Eso lo hacía sentirse más cerca de su pareja. Sentía un vínculo más fuerte entre ellos, y que no cambiaría por nada del mundo. —¿Vas a enojarte conmigo si te dijo que amo que ahora seas uno de nosotros?
G.O suspiró. —No, pero me molesta que me mintieras hace un momento con lo que dijiste acerca de cambiarme si pudieras. No puedes mentirme si esto va a funcionar, Seung Ho.
Seung Ho sintió que su corazón se aceleraba. —¿Estás bien con ser un shifter?
G.O asintió con una ligera inclinación de cabeza, parecía muy cansado en este momento. —No puedo cambiar, así que porqué preocuparme por eso. Todo lo que puedo hacer es tratar con eso ahora.
—¿Quién eres y dónde está G.O? —Seung Ho preguntó—. El G.O que conozco discutiría, se quebraría y huiría.
—¿Realmente fui un enorme dolor en el culo?
—Sí —respondió Seung Ho. Cuando G.O lo vio, Seung Ho se acercó más—. Querías honestidad.
G.O torció los labios mientras miraba el pecho de Seung Ho, pasando las manos por la camisa de Seung Ho. —La quiero, ¿verdad?
—Entonces —Seung Ho se aventuró—. ¿Ahora te vas a mudar?
G.O se salió de los brazos de Seung Ho. Eso no era una buena señal. Vio a su pareja mirar de nuevo hacia la ventana, se giró y vio a Seung Ho. —Creo que debería.
Esa no era la respuesta que Seung Ho pensaba que iba a decir.
—Quiero decir, no sólo por que necesito ayuda para aprender esa cosa del oso, sino que no puedo vivir lejos del hombre que amo, ¿puedo?
Seung Ho se quedó ahí por un momento, preguntándose si había oído correctamente a G.O. —¿Me amas?
G.O jaló a Seung Ho de los hombros para poder verlo directamente a los ojos. —Tú eres mi hogar, Seung Ho. No sólo hueles a hogar para mí, sino que nunca me había sentido seguro en ninguna parte, como en tus brazos.
—Puedo ayudarte con eso —dijo Seung Ho mientras se acercaba más a G.O y acariciaba su cuello—. También te amo, mi dulce bocado.
G.O se río entre dientes mientras le daba un ligero beso a Seung Ho. —Pero quiero que me prometas algo, Seung Ho.
—Cualquier cosa, bebé. Todo lo que tengo es tuyo. Cualquier cosa que quieras te la ofrezco.
G.O sonrió. —Gracias, pero eso no es lo que te estoy pidiendo.
Seung Ho se quedó perplejo, por lo que G.O continúo.
-;Prométeme que en esta apasionante vida que llevaré no habrá nada más loco que esto. Dime que se reducirá la velocidad.
—Me pediste que no mintiera, G.O. —Seung Ho deseaba poder prometerle a su pareja una vida mundana, pero la vida en el mundo paranormal, era cualquier cosa menos mundana. Deseaba poder ahuyentar toda la locura, pero Seung Ho sabía que no podía. La vida era lo que era, pero sabía que G.O iba a sobrevivir, como todo el mundo.
—Entonces dime la verdad —dijo G.O cuando empezó a besar el cuello de Seung Ho, los suaves besos a lo largo de su piel, hicieron que Seung Ho se estremeciera mientras sostenía a su pareja. No quería que su pareja nunca saliera de su abrazo. G.O podía pensar que él era su hogar pero su pareja no tenía ni idea de lo que era para Seung Ho tener en sus brazos a G.O.
G.O podía estar en el hogar, pero Seung Ho se sentía completo en todas las formas posibles cuando G.O estaba cerca de él, haciéndole saber lo mucho que significaba para G.O.
—La verdad es que no puedo hacerte promesas sobre un futuro que no puedo ver, pero te puedo dar seguridad y amor, G.O. Puedo prometerte que todas las mañanas cuando te despiertes, nunca te arrepentirás de estar conmigo.
G.O sonrió, y Seung Ho sintió que finalmente podría colgar su sombrero y levantar los pies, porque G.O no era solo una casa era todo un maldito rancho.
Fin...