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77. Al filo del control (16) por dayanstyle

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Con un suave gemido, Won Ho abrió lentamente los ojos. Su cabeza se sentía como si alguien estuviera perforando un agujero a través de su cerebro. Latia con un pulso fuerte hacendo el dolor más fuerte. ¿Qué demonios le había pasado?

 

"Es sorprendente lo que los seres humanos hacen por el precio correcto."

 

Correcto. Yonghyeon. Won Ho había sido un idiota para pensar que había estado a salvo del hombre. Yonghyeon estaba auto-inflado y bastante ignorante para seguir viniendo detrás de él.

 

Won Ho puso a su lado y trató de empujar a sí mismo, pero estaba mareado, y lo más que podía manejar era apoyarse en sus codos. Las ramitas se clavaron en su piel, pero Won Ho ignoró la incomodidad.

 

Yonghyeon apareció ante él y luego se puso en cuclillas. "Vamos a jugar un pequeño juego, zorro. Voy a darte un buen comienzo, y luego me voy a cazarte y matarte."

 

Won Ho finalmente comenzó a centrarse. Él estaba en el bosque. Peor aún, ese collar temido estaba de vuelta alrededor de su cuello. Sintió el peso de la misma como una soga. Él cerró los dedos alrededor del cuero grueso y tiró, a sabiendas de que la medida era inútil.

 

Yonghyeon sonrió mientras golpeaba la mano de Won Ho a distancia y luego dio unos golpecitos en el cuello. "¿Crees que te daría cualquier tipo de ventaja?" Yonghyeon negó con la cabeza. "Te subestimé una vez antes. No va a suceder de nuevo. "

 

El hombre se paró. "Tienes diez minutos. Le sugiero que use cada segundo."

 

Won Ho se sorprendió al ver que Yonghyeon comenzaba a desnudarse. Esto no puede estar pasando. No era real. No había manera de que estaba a punto de ser cazados por un perro rabioso. Won Ho le resultaba difícil respirar. Las palabras de Yonghyeon estaban teniendo dificultades para registrarse.

 

"Estás perdiendo el tiempo." Yonghyeon agarró Won Ho bajo el brazo y tiró de él a sus pies. "Corre, pequeño zorro... ahora."

 

Won Ho se tambaleó hacia delante, con los ojos rebotando por todos lados, tratando de orientarse. No estaba seguro de si él todavía estaba en Villa Kim o si Yonghyeon lo había llevado a otro lugar. Sus pasos vacilaron mientras trataba de correr. Su cabeza todavía le latía ferozmente mientras trataba de encontrar una salida de esto.

 

La luna cortó un camino a través de los árboles, los grillos cantaban en voz alta, y Won Ho oyó un pájaro o dos a lo lejos. Nunca había pensado que el bosque podia ser tan siniestro como se sentían en este momento. Se dio la vuelta en círculos, buscando. Las lágrimas brotaron de sus ojos, y él sabía que no iba a sobrevivir a esta noche.

 

Won Ho se congeló cuando oyó un aullido sobre el dosel de los árboles. Su corazón latía a gran velocidad. Se limpió los ojos y trató una vez más intentando sacarse el collar de su cuello, pero el pestillo estaba unido por un pequeño candado, y no tenía tiempo para luchar.

 

Él se echó a correr.

 

El pecho de Won Ho empezó a doler, y su garganta estaba creciendo en sequedad más rápido corría. No estaba acostumbrado a correr en su forma humana, no así. No tan lejos. Y definitivamente no tan rápido. Won Ho estaba aterrorizado, pero enojado como el infierno, también.

 

Esto era una locura. ¿ Cómo puede un hombre ser tan vengativo por haber sido menospreciado? Won Ho entiende completamente mostrar respeto a un alfa. Tenía apoyos para Jongin. Won Ho incluso respetaba a Changjo. Había visto la alfa del lobo gris en la Manacle una o dos veces. Pero ser perseguido sin descanso, se metió en una especie de combate a muerte, aturdia la mente de Won Ho.

 

Quería parar y gritar que ya no quería hacer esto. Pero no pudo. Yonghyeon no le haria caso, y la vida de Won Ho estaba en la línea. Incluso el hombre había desafiado al Ultionem. Won Ho nunca había conocido a alguien con un ego más inflado y una sensación de injusticia.

 

Corriendo tan rápido como pudo, Won Ho silbó cuando una rama de un árbol le dio una bofetada en la cara, haciendo que su piel se queme. Su cuerpo estaba cubierto de sudor mientras se agachaba y esquivaba alrededor de los árboles y se rompió a través de las malas hierbas gruesas y en exceso de maleza.

 

¿Por qué demonios no se habia quedado en la oficina de Takuya? Won Ho le pegaria a sí mismo por su falta de sentido común, pero estaba a punto de pagar el precio más alto.

 

Echando un vistazo por encima del hombro, Won Ho no vio Yonghyeon, todavía podía sentir al lobo acercándose a  él. Parecía como si todo a su alrededor contuviera la  respiración colectiva. El viento se quedó inmóvil, las criaturas de la noche silenciosa. Ni siquiera podía oír los grillos por más tiempo. Todo sabía que Won Ho estaba a punto de morir.

 

Tropezó, cayó, y luego maldijo mientras él se puso de pie. Miró a su alrededor una vez m ás mientras trataba de decidir qué dirección debería seguir. Nada parecía familiar. Su pecho subía y bajaba a un ritmo rápido cuando Won Ho coloca la palma de su mano en la frente y respiró tembloroso.

 

Su rasgo facial recogido en una mueca de dolor mientras giraba en un círculo una y otra vez. No quería morir. Won Ho no quería ser destrozado. Se lamió los labios secos antes de que  él se fuera, una vez más.

 

Yonghyeon aulló, y el sonido estaba cerca. Demasiado cerca. El lobo iba a alcanzarlo en cuestión de minutos, segundos. Una sombra tiro a su derecha. Won Ho cambió de rumbo y corrió a su izquierda. Podía oír gruñidos bajos y el sonido de las ramas.

 

Él estaba siendo dirigido al claro. No había manera de Won Ho podría mantener este ritmo mucho más tiempo. Sus músculos estaban ardiendo, así como sus pulmones.

 

Algo se estrelló a través de los árboles, y Won Ho no tenía idea de lo que era. No tuvo tiempo para detenerse y entender las cosas. Si tan sólo pudiera encontrar un camino, entonces tal vez él encontrar a alguien. Pero el bosque parecía extenderse y sigue sin final a la vista.

 

Corrió a través de unos arbustos crecidos, las espinas raspado contra su piel, y se encontró en un claro. La luna brillaba intensamente, actúa como centro de atención, sus rayos bañan el campo en el que Won Ho destacaba.

 

Apenas había llegado a la mitad del claro cuando Yonghyeon apareció. El gran lobo se acercaba, la cabeza hacia abajo, colmillos desnudos. Won Ho caminó hacia atrás, con el corazón a punto de estallar en su pecho. Se había acabado. Yonghyeon le había atrapado.

 

El alfa cambió de nuevo a su forma humana y acortó la distancia, sus zancadas llenas de arrogancia, su sonrisa triunfante. Won Ho trató de recuperar el aliento, su pecho subía y bajaba rápidamente mientras continuaba tomar pasos hacia atrás. Pero no importa lo lejos que trató de ir. Yonghyeon comia la distancia hasta que el hombre estaba de pie un pie delante de él.

 

"Juego. Acabado." Yonghyeon lo alcanzo, sus garras extendidas. Envolvió sus dedos alrededor de la garganta de Won Ho, apretando. Won Ho le arañola piel del hombre, luchando por conseguir la mano de Yonghyeon fuera de él, desesperado por aire. Sintió que la sangre que se está atrapado en su cabeza, palpitando, los fectos mareantes de ser estrangulado.

 

El aire se agito alrededor de ellos. Yonghyeon miró a su alrededor, con los ojos en busca de... algo. Won Ho trató de averiguar lo que tenía al hombre asustado, pero él estaba demasiado ocupado luchando por respirar.

 

"Ponlo en libertad."

 

El agarre de Yonghyeon aflojó un poco, lo suficiente para que Won Ho tomara un poco de aire en sus pulmones. Pero no fue suficiente. Su visión se fue oscureciendo.

 

Takuya no podía creer lo que estaba viendo. Quería arrancarle la garganta a Yonghyeon, pero Jongin alzó una mano, manteniéndolo a raya. Takuya gruñó mientras aplanaba sus orejas, lista para atacar. El Ultionem estaba aquí, y él estaba muy seguro de que no le dejarían desgarrar la garganta de Yonghyeon.

 

"Quédate atrás, o lo mato", Yonghyeon, dijo mientras sus ojos saltaban sobre cada miembro.

 

"Usted ha desafiado las leyes", dijo Jaehyo. "Está prohibido interferir en el apareamiento. Le advirtieron, y sin embargo, regresó a perseguir su venganza."

 

Las garras del Yonghyeon estaban demasiado cerca de la yugular de Won Ho. Un movimiento en falso y la garganta de Won Ho serían arrancada. La ira cantó a través de Takuya en la impotencia que sentía. ¿Cómo podrían siete, no, ocho hombres rodean uno y seguir siendo inútil? Tenían al alfa enjaulado desde todos lados, un círculo de la muerte a la espera de exigir su justicia. Aún así, Yonghyeon siguió teniando la vida de Won Ho en la mano.

 

"¡Tengo derecho a castigarlo!" Las facciones de Yonghyeon se contorsionaron en una máscara de furia. "Me insultó delante de mi manada"

 

"Entonces debes de tomarla con nosotros", dijo Changjo.

 

La risa de Yonghyeon era burlosa. "¿Hubo algun otro alfa que veniera a ti por la justicia? No. Ustedes ejecutan sus manadas por sus reglas. ¿Por qué debería ser diferente? ¿Por qué debería correr a ustedes, cuando estoy en mi derecho?"

 

"Porque Won Ho está en el medio de apareamiento ", dijo Nam Joon.

 

"Él no lo estaba cuando me insultó ," Yonghyeon señaló . "Eso triunfa sobre su apareamiento."

 

"Nada", dijo Junjin en un gruñido bajo, "triunfa sobre el apareamiento. Usted es un alfa cruel que piensa que no tiene que seguir las reglas. ¿Crees que no sabemos acerca de sus pequeñas aventuras? Won Ho no es el primer hombre que ha intentado forzar. El honor no está en su ADN. Usted usa su estado para intimidar y coaccionar a los hombres en su cama. Sólo por eso se le ha encontrado culpable y será condenado a muerte".

 

"¡Demuéstralo!" El miedo finalmente brillaba en los ojos de la alfa. Yonghyeon sabía que no tenía manera de salir de esta. Ya sea que matara a Won Ho o no, el hombre no iba a sobrevivir a la noche.

 

Pero Takuya iba a asegurarse de que su compañero lo hiciera. Takuya miró mientras cruzaba Him Chan el campo, sus zancadas amenazantes, su expresión nacia de las profundidades del infierno. Takuya tenía algún extraño sentido de que el hombre era más que un guerrero demonio, más que un líder. Había oído rumores de que Him Chan era padre de Jaehyo. No estaba seguro de cómo eso pudiera ser verdad. Sin embargo, la musculatura del hombre era intimidante, incluso aterradora. "Su beta canto como una muy pequeña marioneta una vez que llego a nuestras manos. Él nos dijo todo lo que necesitábamos saber, con la esperanza de cerrar un trato con nosotros." El líder demonio sacudió la cabeza. "Él no nos dio algo que valga la pena de salvar su vida."

 

"Pero él fue recompensado por cooperar ", dijo Kiseop. "Lo mataremos rápidamente."

 

"Algo que no va a sucederte a ti," Jongin declaró. Todo sucedió tan rápido y sin embargo la escena juega en una especie de extraña cámara lenta.

 

Nam Joon voló detrás de Yonghyeon y arrebató Won Ho de las garras de la alfa.

 

Jaehyo se trasladó a la velocidad del rayo, cortando sus garras sobre el pecho de Yonghyeon. Antes de que la sangre pudiera gotear de las heridas, Changjo estaba conduciendo un puño fuerte en la espalda del Yonghyeon, entre los omóplatos.

 

Junjin siguió rápidamente el movimiento golpenadolo en sus piernas, conduciendo Yonghyeon al suelo antes de que  él condujera su codo en el ojo izquierdo del hombre.

 

Yonghyeon gritó.

 

Kiseop tiró del hombre a sus pies y luego golpeó con su pie en la rodilla de Yonghyeon. Takuya oyó el chasquido fuerte cuando Yonghyeon perdio.

 

Cada líder se movió rápidamente, haciendole  algún tipo de daño a Yonghyeon. Cuando el hombre estaba tendido en el suelo, con sangre, respirando con dificultad, los siete hombres dieron varios pasos hacia atrás.

 

Jongin se volvió hacia Takuya. "Acaba con él."

 

Le tomó sólo un vistazo a los moretones que se formaban en el cuello de Won Ho, las cicatrices que se formaron en toda la espalda de su compañero. Takuya cambió a su forma humana y se acercó a Won Ho antes de arrodillarse al lado de su compañero. "El castigo de Yonghyeon te pertenece a ti.”

 

Won Ho miró a Takuya, sus ojos verdes se llenaron de lágrimas. "No, no es así. El castigo le pertenece al Ultionem, para todos los hombres que desmoralizo Yonghyeon. Tuve suerte y me alejé. Esos otros hombres sufrieron un destino mucho peor que ser azotado."

 

Takuya tiro a Won Ho a sus brazos y levantó a su compañero de la hierba, manteniendo el pequeño zorro cerca de su pecho. Se volvió hacia los hombres reunidos alrededor de Yonghyeon. "Es todo suyo."

 

Takuya se alejó a los sonidos de gritos, y luego todo quedó en silencio.

 

 

Continuara...

 


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