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84. Reclamado por un puma (20) por dayanstyle

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—Gracias por ayudarme—, dijo Sang Min mientras buscaba en los armarios algo para cocinar. Su dieta consistía principalmente de los alimentos pre-envasados que podía echar en el microondas o la comida ocasional de Jungkook o el sándwich shop-cuando Kiseok se lo traía.

 

 

Aunque Changjo estaba pagando la cuenta por su alquiler y sus facturas, Sang Min estaba siempre sin dinero. No le había molestado antes, no hasta que conoció a Se Young. Tal vez él fue entrenado lo suficiente para interactuar con el público sobre una base diaria. Tal vez incluso podría conseguir un trabajo. Iba a preguntar a Kiseok cuando viera al tipo.

 

 

—No hay problema. — Min Hyuk bajó una caja de espaguetis. —Por lo menos ahora sé por qué has estado actuando tan extraño. Deberías haberme hablado de ti y Se Young.

 

 

Sang Min encontró un frasco de salsa en la parte posterior del armario. Él la puso sobre el mostrador y luego enfrentó a Min Hyuk. —Eso es porque  yo estaba tratando de alejarlo.

 

 

Agarrando una olla, Min Hyuk la enjuagó y luego lo llenó de agua. — ¿Por qué harías eso?

 

 

Sang Min todavía estaba tratando de acostumbrarse al pelo corto de su mejor amigo. Min Hyuk había amado su larga cabellera, pero su padre un hombre enfermo, corto el cabello de su hijo cuando se reveló que el padre de Min Hyuk estaba fuera de sus cabales. Su pecho se apretaba aun cuando pensaba en lo cerca que su mejor amigo había estado de morir.

 

 

Sang Min no tenía a mucha gente que podía llamar amigo, y aquellos que pudo él estaba dispuesto a defender con uñas y dientes. No había nada que no haría por Min Hyuk.

 

 

—Así que, — Min Hyuk dijo mientras se sentaba en la mesa, —dime por qué seguiste empujando a tu pareja lejos.

 

 

Sang Min se quedó mirando la olla de agua en la estufa cuando la verdad salió a la superficie. Min Hyuk nunca había dicho cómo verdaderamente se sentía respecto a lo que era. — ¿Cómo me ves, Min Hyuk?

 

 

— ¿Con mis ojos? — Min Hyuk sonaba perplejo. —Creo que no entiendo la pregunta.

 

 

Sang Min  se  volvió  y  agitó  una  mano  hacia  arriba  y  abajo  de  su pecho.

—   ¿Qué ves cuando me miras? ¿Qué piensas?

 

—   ¿A qué viene esto? — Min Hyuk preguntó mientras se metió las piernas debajo de él. —Quiero decir, ¿por qué estás preguntando lo que pienso de ti?

—      Min Hyuk  frunció  el  ceño.  —No  estas  tratando  de  conectar       conmigo, ¿verdad? Eres guapo, pero Yong Hwa tiene mi corazón.

 

—Lo digo en serio. — Sang Min se mordió el labio inferior, preguntándose si Min Hyuk estaba estancando. ¿Tenía su amigo miedo de él? ¿Por eso no respondería?

 

 

—Yo sólo te veo, — contestó Min Hyuk. —Creo que tienes un gran corazón cuando se trata de aquellos que consideras un amigo. Eres un buen chico, Sang Min. También eres guapo, inteligente, y hay una parte de ti que tiene miedo de que si la gente se enterara de lo que puedes hacer, te traten como a un bicho raro.

 

 

Sang Min ladeó un poco la cabeza cuando él frunció el ceño. ¿Cómo sabia Min Hyuk la última parte? Nunca había confesó sus temores a su amigo antes.

Min Hyuk se encogió de hombros. —Lo veo en tus ojos—, dijo.

 

— ¿Por qué no tienes miedo de mí? —, Preguntó Sang Min.

 

—Debido a que llegué a conocerte antes de que supiera lo que podría hacer. Yo sólo te veo como Sang Min, no un mutante derritiendo mentes con una gran joroba en la espalda. —Min Hyuk miró Sang Min derecho en sus ojos. —Pero tú te ves de esa manera, ¿verdad?

 

Sin responder Min Hyuk, Sang Min vertió los fideos secos en el agua burbujeante. Abrió el frasco de salsa y lo tiró en una pequeña olla antes de encender el fuego debajo de la olla. — ¿No te verías a ti mismo de esa manera si hicieras algo que la gente se ponga inquieta a tu alrededor?

 

 

—  ¿Quién exactamente  se  incomodó  frente a  ti?—,  Preguntó Min Hyuk.

—   ¿Alguien te ha dicho algo?

 

—Tú no lo entiendes. — Sang Min podía decir que su amigo no lo entendía. 

Min Hyuk resopló mientras se levantaba y se trasladó al lado de Sang Min.

—   ¿No lo entiendo? Mi piel es azul si no lo has notado. No puedo ir a pasear por el pueblo como tú lo haces. Tengo que tener mucho cuidado a donde voy y quien me ve. ¿Crees que eres un bicho raro? ¿Sabes cuánto tiempo he soñado con ver un juego de pelota o ir de compras en el centro comercial? Hay un montón de cosas que me gustaría hacer, pero no puedo. Así que no te quedes ahí y me digas que tienes el mundo en tus hombros. Al menos puedes entrar en una tienda de comestibles sin todos los ojos girando hacia ti o alguien llamándote con algunos nombres bastante terribles

 

—  ¿Fuiste a una tienda? —, Preguntó Sang Min.

 

—Probé una vez. Después de la experiencia desagradable, no dejaba  los pantanos y bosques. Voy a alguna parte donde no voy a ser mirado como si fuera un extraterrestre. — Min Hyuk cruzó su brazo sobre el pecho. —Los seres humanos pueden ser francamente crueles a veces.

 

 

—Siento mucho que lo te paso—, Sang Min lo decía en serio. Deseó haber estado con Min Hyuk cuando sucedió. Él habría maldecido hasta la última persona. Le enfureció saber que alguien había sido cruel con su dulce amigo.

 

 

—Y yo siento mucho que tú pienses que no puedes encajar—, dijo Min Hyuk. — ¿Acaso Se Young dijo algo acerca de lo que puedes hacer?

 

 

Sang Min agitó la salsa, evitando la mirada de sondeo de Min Hyuk. —No exactamente.

 

 

—Continua, — dijo Min Hyuk.

 

 

—Está bien, él dijo que no le importaba lo que yo puedo hacer—, dijo Sang Min con aspereza. —Eso no significa que una parte de él no tiene miedo de mí.

 

 

—No tienes remedio—, dijo Min Hyuk. —Si yo no lo supiera mejor, diría que estabas utilizando tu habilidad como excusa. ¿Cuál es la verdadera razón por la que empujaste a Se Young lejos? — Su amigo se tocó la barbilla, y luego sus ojos se abrieron como platos. —Dime que no tienes un cierto crecimiento

 

Sang Min miró Min Hyuk con incredulidad. —No, mi cuerpo está  perfectamente bien. — Mejor que bien después de Se Young me reclamó. Sang Min estaba ansioso por esta noche. Quizás Se Young le haría el amor de nuevo.

 

 

Uno sólo podía esperar.

 

 

Ambos hombres se volvieron cuando alguien llamó a la puerta de atrás. Sang Min miró el reloj en la estufa y sabía que era demasiado pronto para Se Young. Él no había programado para practicar con Kiseok hoy tampoco. En ocasiones, uno de los hombres de Changjo se detenía a ver cómo estaba, pero Sang Min raramente tenido visitantes.

 

 

—Mezcla la salsa por mí—, dijo a Min Hyuk mientras cruzaba la cocina y abría la puerta.

 

 

El olor de los cigarrillos y colonia barata lo golpeó antes de ver al  hombre de la cicatriz sonriéndole malévolamente.

 

 

Se Young paso el cepillo por su pelo mientras permanecía de pie ante el espejo del vestuario en la estación de bomberos. Acababa de salir de la  ducha y no tenía nada más que una toalla envuelta alrededor de su cintura.

 

 

— ¿poniéndote bonito para Sang Min? — Yeon Soo preguntó cuándo entró en el vestuario. Se apoyó en la fila de armarios, con una sonrisa de comemierda en su rostro. —Sabía que no ibas a darle la espalda.

 

 

—Y si te ofreces para llevártelo lejos de mis manos otra vez, voy a darte más que un codazo—, dijo Se Young.

 

 

—No fue mi intención decir aquello.

 

 

Se Young dio Yeon Soo una expresión dudosa.

 

 

—De acuerdo, en su mayoría. Pero yo solo estaba tratando hacer un movimiento,  para  que  reclamaras  al  chico  como  tuyo.  Porque  tú  solo te quedaste allí como si su pareja estuviera hablando otro idioma

 

 

— ¿Desde cuándo te convertiste en un consejero de apareamiento? — Se Young preguntó mientras seguía a cepillándose el pelo.

 

 

Yeon Soo se sentó en el banco detrás de Se Young. —Yo no lo soy. Pero sé que tú has estado teniendo un momento difícil cuando se trata de Sang Min.

 

 

—Sang Min  es...  complicado.  —  En  forma  más  de  las  que  podía contar.

Infierno, en más de un sentido Se Young entiende.

 

— ¿Demasiado complicado? — Yeon Soo preguntó mientras arqueaba   una ceja.

 —No, por supuesto- — Se Young suspiró profundamente mientras bajaba el peine. —No sé—, admitió con sinceridad. —Creo que es maravilloso. Es inteligente y hermoso, y me hace reír. Pero tiene algunas serias obsesiones. Quiero decir, como lo altas y bajas, y no estoy seguro de que pueda seguir tomando el ser rechazado por él.

 

 

Su corazón estaba recibiendo una paliza, y él estaba empezando a preguntarse si podría recuperarse de ello. Él sabía que Sang Min tenía problemas, y quería ayudar a su pareja con esas cuestiones. Él quería estar al lado  de Sang Min y apoyarlo. Pero incluso el hombre más fuerte se doblaba después de un tiempo, y  Se Young  estaba seriamente empezando a  dudar de  que     él fuera tan fuerte.

 

La frente de Yeon Soo estaba fruncida. —Pensé que cenarían juntos esta noche

 —Lo haremos, pero cada maldita vez que hemos estamos juntos, él me rechazado de alguna manera. Un hombre sólo tiene que ser pateado a la acera tantas veces antes de que finalmente le comience a llegar el mensaje.  Si él me rechaza de nuevo esta noche, sólo que no sé que tengo en mí a-

La mandíbula de Se Young cayó como alguien brilló en el baño detrás de Yeon Soo. Su pareja estaba acunado en los brazos de un hombre de piel azul. Ropa de Sang Min fueron rasgadas, su cuerpo ensangrentado y golpeado. Parecía como si hubiera sido atacado por un animal salvaje.

 

 

Los caninos de Se Young descendieron cuando una furia enrojeció su mirada. El cepillo cayo de su mano al suelo antes de que curvara sus manos en apretados puños s. —Tienes cinco segundos para explicarme lo que le hiciste a mi pareja, — gruñó mientras avanzaba hacia el hombre azul.

 

 

—Hey, yo no hice esto, — el chico dijo mientras lanzaba una mirada a Se Young. —Alguien lo atacó en la casa, y yo no pude llegar a él lo suficientemente rápido. — Hubo una fuerte cantidad de culpa en esa declaración. —Yo iba a llevarlo a mi pareja, pero él seguía   preguntando por ti.

 

 

Algo de la furia de Se Young se desvaneció mientras se arrodillaba frente a los dos hombres. El rostro de Sang Min era un desastre, un largo corte irregular bajaba por un pómulo hinchado. Alargó la mano hacia Sang Min, su pecho dolía por el pequeño gemido que salió de sus labios mientras el hombre  azul coloco a Sang Min en los brazos de Se Young.

 

—   ¿Quién hizo esto? — Se Young inhaló bruscamente cuando vio un corte que  iba  desde  la  manzana  de  Adán  de  Sang Min  a  un  lado  de  su  cuello. — ¿Alguien trató de cortarle la garganta?

 

—Yo... — ¿Podría un hombre azul ponerse pálido? ¿Eso era azul pálido?

 

—   ¿Cuál es tu nombre? — Sabía que este tipo era un elfo de las sombras por el color de su piel. Pero si el hombre estaba mintiendo, Se Young quería un nombre así él sabría a quién cazar y matar.

 

 

—Min Hyuk—, dijo el chico. —Estoy acoplado a Yong Hwa.

—  ¿El tipo que trabaja en el rancho Moon?

 

Min Hyuk asintió vigorosamente.

 

Se Young sacudió la cabeza y volvió a mirar a su amigo. —Necesito mi bolsa, Yeon Soo. — Se Young había estado siempre orgulloso del hecho de que él era un paramédico, pero nunca tanto como hoy. Se Young sabía que Sang Min no era del todo humano, pero era lo suficientemente humano para desangrarse si sus lesiones no fueran tratadas, y eso era algo que Se Young quería evitar a toda costa.

 

—   ¿Quién hizo esto? —, Preguntó de nuevo cuando él puso suavemente en el suelo del vestuario a Sang Min. Agarró su camisa limpia desde el banquillo y luego lo utilizó para limpiar la sangre de la garganta de Sang Min. Su corazón se sentía como si comenzara a latir de nuevo cuando limpió la sangre lo suficiente para ver que la herida no era profunda. Simplemente sangró mucho.

 

—    ¿Quieres que traiga la camilla? — Yeon Soo preguntó mientras dejaba caer una bolsa de trauma junto a Se Young.

 

—Dame un minuto para examinarlo. — No quería llevar a Sang Min al hospital a menos que fuera necesario.

 

—Creo que tengo que llamar a Kiseok—, dijo Min Hyuk. —Él sabrá qué hacer.

 

 

Se Young disparó al elfo una mirada. —No veo ninguna razón para llamar  a ese hombre. — Todavía no estaba seguro de lo que sentía por el mentor de Sang Min  más  allá  del  hecho  de  que  no  le  gustaba  que  el  chico     estuviera alrededor de su pareja. Había algo en la forma en que Kiseok miró a Sang Min que le puso los pelos de punta a Se Young al final. —Pero es posible que desees pensar en llamar al Dr. Jaejoong. Podemos necesitarlo si no puedo conseguir que este sangrado se detenga.

 

 

Y Se Young estaba aterrorizado de que él no sería capaz de hacerlo. El  flujo se había desacelerado, pero no era un médico. Podría hacerle mucho peor daño que no podía ver, como lesiones internas o huesos rotos o trauma cerebral o-Se Young gimió y agarró el costado de su cabeza mientras miraba a Yeon Soo.

 

El chico le había golpeado en la parte posterior de la cabeza. — ¿Qué  has hecho?

 

—Puedes entrar en pánico después de que trates a tu pareja.

 

—Correcto. — Se Young parpadeó rápidamente por un momento y luego volvió al trabajo, él limpio el corte más a profundo en la garganta de Sang Min. También limpió la herida en el rostro de Sang Min lo mejor que pudo. Después  de que dejó de sangrar, Se Young fue capaz de obtener una mejor visión. Por mucho que no le gustaba la idea, la herida iba a necesitar un par de puntos de sutura. Era demasiado profundo e irregular para sanar por sí solo.

 

 

Hizo  una  mueca  mientras  miraba  a  Yeon Soo.  —Vamos  a  necesitar     el médico para esto.

 

Yeon Soo sacó más gasa de la bolsa de trauma y se lo entregó a Se Young.

— ¿Es tan malo?

 —Yo podría hacerlo—, Se Young, dijo mientras miraba el rostro herido de Sang Min. —Pero me sentiría mejor si el doc lo cose. Yo preferiría un profesional que dejaría menos de una cicatriz.

 

—Bueno, — dijo una voz familiar, —por lo menos uno de ustedes están utilizando su cabeza.

 

 Se Young dio la vuelta para ver a Min Hyuk parado allí con el Dr. Jaejoong. No se había fijado el tipo había brillado fuera.

 

—Mi pareja ha sido herido. — Se Young se recostó para que el médico pueda ver las lesiones de Sang Min. —Él necesita puntos de sutura.

 

El Dr. Jaejoong se adelantó y se arrodilló junto a Sang Min. —Ciertamente eso parece, ¿no es así?

 

El corazón de Se Young dejó de latir cuando Sang Min gimió, arrugando su rostro como si estuviera en una gran cantidad de dolor. —Él vuelve en sí,

 

Doc. — El pánico cundió en —Haga algo.

 

 

— ¿Te gustaría que le noquee de nuevo? — Una sonrisa apareció en el rostro guapo del Dr. Jaejoong.

 

 

Se Young gruñó.

 

Continuara...

 


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