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Fugitivos II: ¿Una razón para vivir? por diidi1897

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Notas del capitulo:

¡Hola! <3

 

Narra Claudio

-¡UNO!-Tom gritó con emoción mientras elevaba al aire su última carta-¡Estoy a nada de ganarles!-sentenció

-Cállate-Lucy le dijo mientras colocaba su antepenúltima carta sobre el mazo que ya llevaba varias veces de ser destruido y reconstruido. Esa era la partida más larga que estaban teniendo y nadie podía con los nervios a flor de piel.

En verdad, todos eran unos adictos a la competencia por muy mínimo que fuera el juego

-Perdóname Dany-dijo Maxim mientras tiraba la carta que le servía para continuar solo con 3 cartas en el juego

-¿Cuál puedo tirar?-Dany me preguntó mientras me mostraba de nueva cuenta su “colección” de cartas

-Ninguna te sirve Dany, debes tomar 2 cartas-le respondí con lástima al ver que la carta que Maxim le había tirado era un “Toma dos”

-Oh…-murmuró desganado mientras Tom le entregaba dos cartas más para su colección y en medio de un suspiro de derrota, Dany se dedicó en acomodar las nuevas cartas por colores.

Era jueves y todos nos encontrábamos reunidos en la sala jugando UNO. Lucy, James, Ben y Tom habían llegado desde la hora del almuerzo para visitarnos y después de que almorzamos algo muy simple junto a Dany, quien comió muy poco, Tom había sacado el mazo del juego UNO. El resto era historia porque todos, a excepción de Sean, Ben y mía, estaban jugando como si de ello dependiera su vida.

Dany y yo estábamos sentados en el mismo sofá mientras que los demás se encontraba sentados en el piso alrededor de la mesa de la sala. Yo ayudaba a Dany porque, aunque él ya había jugado UNO anteriormente junto a los demás, no recordaba muy bien las reglas.

Mientras tanto, Sean se encontraba haciendo otras actividades al igual que Johann, a quien solo veía de vez en cuando acomodar algunas cosas por aquí y por allá.

Ben volvió a reír y aplaudir con emoción mientras Lucy le hacía muecas graciosas. Ben estaba sentado sobre mis piernas y él se entretenía con los dedos de sus pies o viendo a todos jugar con emoción. Por supuesto que Lucy o Tom se encargaban de darle algunas cartas para que las examinara con curiosidad

-Se siente muy bien estar todos reunidos-mencionó Tom mientras sonreía-Ya me hacía falta una buena competencia-

-Faltan Sergei y Heinz-dijo Maxim-Dany todavía no los conoce, pero le he platicado de ellos ¿Verdad Dany?-preguntó mientras observaba a Dany que solo asintió distraídamente porque continuaba prestando atención a su, literal, mazo personal de cartas

-¿Y Heinz va a regresar pronto?-le preguntó James mientras tiraba su penúltima carta-¡UNO!-gritó

-Me dijo que volvió a China, pero espera estar aquí el mes que viene-respondió Maxim con una sonrisa.

El juego transcurrió y nadie se esperó el siguiente comentario por parte de Dany

-También faltan Ana y August-dijo mientras tiraba su carta.

Fue demasiado notable que todos nos quedamos inmóviles y en silencio, pero afortunadamente, antes de que Dany se percatara del incómodo silencio, Maxim salió al rescate de todos

-Ellos decidieron irse a otra parte por su cuenta, pero esperamos que pronto se reúnan con nosotros ¿Verdad?-sonrió como si nada y me impresioné de sus capacidades para mentir en el momento más oportuno.

Nos había salvado el pellejo. Suspiré con calma.

Observé a Dany de reojo y lo encontré observándome. Le sonreí, pero él no me regresó la sonrisa.

Suspiré incómodo.

Maxim y yo ya llevábamos 4 días de visita y cada día que pasaba, notaba un comportamiento diferente en Dany hacia nosotros. Al parecer, ya no le estaba gustando que Maxim o yo estuviéramos junto a ellos. Ya no quería jugar Monopoly con nosotros porque prefería quedarse en su habitación o ver televisión en la sala, pero cuando Maxim o yo le proponíamos ver una película junto a él, casi al instante decía que ya estaba cansado y Johann, quien ahora permanecía a su lado la mayoría del tiempo, lo llevaba de vuelta a su habitación para que durmiera. Pero eso de “dormir” no me lo creía porque a Dany se le notaban más las ojeras y el cansancio.

Las únicas ocasiones en las que podíamos ver un poco más a Dany era cuando almorzábamos algo demasiado saludable para mi gusto como, por ejemplo, ensaladas o zumos. Y aunque en esos escasos minutos conseguíamos reunirnos, Dany se mantenía en silencio mientras Maxim o yo intentábamos involucrarlo a nuestras conversaciones, pero él nos ignoraba por completo o solo hablaba cuando Sean le hacía alguna pregunta, pero sus respuestas siempre rondaban el “si”, “no”, “tal vez” y “no lo sé”.

Por supuesto que Sean se encontraba preocupado por el comportamiento de Dany, pero por ahora, las pláticas sobre el tema se mantenían entre él y Johann, porque ni Maxim ni yo sabíamos de qué manera podríamos mejorar la extraña situación, así que preferíamos mantenernos al margen. Una noche atrás, cuando fui a la cocina por un vaso con agua durante la madrugada, había visto a Sean entrar a la habitación de Dany y no salió hasta el día siguiente en la mañana; mientras que Dany salió hasta que dieron las 3 de la tarde, pero solo comió junto a Johann en la cocina y después regresó a su habitación sin darnos una sola mirada.

A Maxim se le había ocurrido que todos nos reuniéramos para que Dany se viera “obligado” en salir de su habitación para convivir un poco más con nosotros y al parecer, el plan empezó funcionando, pero después de ese comentario por parte de Dany que no traía oculta ninguna mala intención, el agradable ambiente se había desecho por completo.

El juego continuó y Tom utilizó sus poderes para decirnos que lo mejor era terminar con la partida antes de que Dany diera inicio a la tanda de preguntas.

Y entre todos saboteamos el juego para que Tom, quien continuaba solo con una carta, ganara.

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-Nos vemos, Dany-Lucy se despidió de Dany con un beso en la mejilla-Vendremos el sábado ¿Te parece?-con su pulgar le frotó la mejilla porque había quedado un poco de su labial rojo

-Sí…-Dany murmuró sin elevar su mirada

-Cuídate-Lucy le sonrió y después lo observó en silencio durante un momento-Come bien y descansa, por favor-Dany asintió-Bien…-Lucy sonrió y volteó a verme con los brazos extendidos. Le entregué a Ben que hace escasos minutos se había quedado dormido sobre mi regazo-Gracias-acomodó a Ben entre sus brazos y James se encargó de cubrirlo con una manta esponjosa de color verde-Tienes la nariz roja, no vayas a pescar un resfriado, he- Lucy me dijo mientras me levantaba del sofá

-No te preocupes, pero gracias. Hoy hace más frío que otros días-me froté ambos brazos y observé hacia la ventana. El día estaba espantoso porque parecía que la lluvia no quería cesar

-Sí, tápate bien-Lucy me sonrió y le devolví la sonrisa.

James y Tom también se despidieron de nosotros y al poco tiempo, la casa volvió a quedarse silenciosa.

Tomé asiento en el otro sofá junto a Maxim y empezamos a acomodar los accesorios del Monopoly dentro de la caja mientras que Dany se quedó ensimismado observando sus cartas del juego hasta que se las pedí para poder guardarlas en la caja. Él me las entregó y se quedó casi inmóvil en un pequeño rincón del otro sofá mientras nos observaba.

El momento fue un tanto extraño y solo hasta que la tapa del Monopoly fue acomodada por Maxim, el ambiente se sintió un poco más extraño, pero Maxim se aclaró la garganta

-Creo que hoy no vamos a poder dar un paseo-dijo con un suspiro de por medio

-No, tengo mucho frío-volví a frotar mis brazos y estornudé. Maxim se refería a nuestros paseos que se habían vuelto una mini rutina, solo dábamos unas cuantas vueltas por el residencial cuando la lluvia cesaba o el cielo se despejaba a lo largo del día; en esos paseos habíamos ido al parque Westfriedhof y otros parques que resultaron ser excelentes para que Maxim y yo tuviéramos pláticas que nos permitieron acercarnos un poco más de forma menos carnal.

Maxim frotó mi espalda y observé a Dany. Él apartó su mirada casi de inmediato y tuve una idea-Pero podríamos… ir al cine-mencioné

-¿Al cine?-preguntó Maxim y asentí varias veces

-¡Sí! Y…-observé a Dany quien ahora se veía un poco interesado-Dany podría venir con nosotros-sonreí

-¿Yo?-preguntó mientras llevaba sus dedos encogidos hacia su pecho y asentí-¿Y qué es el cine?-

-Te va a encantar-me levanté del sofá que estaba compartiendo con Maxim para volver a tomar asiento a un lado de Dany-Es un lugar enorme en donde venden dulces, palomitas, chocolates y refresco de todos los sabores para que puedas comerlos dentro de una sala en donde proyectan una película nueva ¡Y la pantalla es enorme!-mis manos hicieron la figura de algo enorme.

La boca de Dany se convirtió en una “o” y después sonrió. Sus ojos también sonrieron

-¿Te gustaría ir?-le pregunté con emoción y Dany asintió varias veces

-Sí…-

-Pero Claudio-Maxim interrumpió-Dany no puede comer nada de eso-

-Bueno, no comerá tanto, tampoco abusaremos con las golosinas ¿Verdad?-le sonreí a Dany y le cerré un ojo para hacerlo mi cómplice. Él solo soltó una risita

-Y no creo que el clima esté apto para que Dany salga de casa, también debemos preguntarle al enfermero o a Sean ¿No?-continuó Maxim y mi plan se fue al caño al escuchar todos los contras que teníamos respecto a esa salida

-Bueno, podríamos convencerlos de que… tal vez no sea hoy, pero a lo mejor cuando el día esté mejor ¿O no?-propuse a un Dany que continuaba sonriendo con emoción

-No, que sea hoy-respondió mientras se levantaba del sofá con mucho esfuerzo-Preguntémosle a Sean-estuvo a nada de empezar a caminar, pero lo detuve al tomarle de su hombro, el cual sentí demasiado delgado

-Espera, yo iré por él, pero Dany... tal vez Maxim tiene razón con lo del clima-observé hacia el ventanal que había en la sala. Dany también observó hacia el exterior

-Me pongo varios suéteres y utilizamos sombrillas-dijo todavía con emoción y le sonreí con menos seguridad

-Pero Dany…-relamí mis labios-El cine no está cerca…-expuse, aunque no sabía si eso era verdad, pero lo suponía porque estábamos en una zona residencial y no cerca del centro

-Podemos ir en el auto de Sean, y que él también vaya con nosotros-Dany respondió como si nada y me sentí menos seguro con la idea que había propuesto

-Dany…-

-Ve por Sean-Dany me animó-Para que vaya con nosotros-dio un muy ligero brinquito mientras me tomaba del brazo

-Daniel ¿De qué quieres tu papilla?-Johann ingresó a la sala con otra cesta de ropa, al parecer había lavado las cortinas del cuarto de Dany

-Hoy no porque vamos al cine-le respondió y volteó a verme-¿Verdad?-me quedé sin palabras y poco a poco la expresión alegre de Dany fue menguando-¿Verdad?-sus cejas se deformaron

-¿Ir al cine?-Johann preguntó con inseguridad. Lo observé y él me observó a mí y a Maxim con las cejas fruncidas en señal de reproche

-Sí… ahí hay… hay palomitas y chocolate-Dany regresó su mirada a Johann-Prometo no comer mucho mientras vemos la película en la pantalla enorme…-el tono de voz de Dany fue disminuyendo

-Pero está lloviendo-Johann se acercó a la ventana-Y los cines no abren cuando el clima está así-

-¿Qué? ¿En serio?-ahora la expresión de Dany fue de desánimo total. Había caído completamente en esa gran mentira-Pero siempre está lloviendo…-

-Bueno, aquí en Alemania nos gusta más el cine en casa, también no es como que prefiramos salir con éste clima-Johann continuó con la mentira de una manera muy natural

-¿Cine en casa?-y Dany continuó interesado

-El cine es solo el ambiente-Johann le sonrió-Podemos colocar algunas cortinas gruesas para que la sala quede a oscuras y puedo conseguir un proyector del hospital para que tengamos nuestra gran pantalla-

-¿Y los chocolates? ¿Y las palomitas?-a Dany no se le escapó ni el más “mínimo” detalle

-Los chocolates podemos comprarlos y las palomitas te las puedo preparar, pero eso sí, no puedes comer tanto ¿Bien?-

-Está bien-Dany sonrió

Johann le dio una solución bastante atractiva y se lo agradecí mentalmente porque me había sacado de un gran problema en el que yo mismo me había metido.

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-No puede ser…-fue lo primero que dije al ver el día soleado que había en Munich después de varios días con lluvia-Esto es muy mala suerte-estornudé un par de veces y después sufrí por culpa de un escalofrío que me recorrió por completo

-Y creo que te resfriaste-Maxim se colocó detrás de mí y pasó sus brazos alrededor de mi abdomen

-Agg-me quejé y volví a estornudar-Olvida el resfriado-giré para quedar de frente a Maxim-Ayer Johann tuvo que mentirle a Dany para que no saliera de la casa por mi estúpida idea de ir al cine-

-A mí me pareció una buena idea-besó mis mejillas-Tal vez con éste clima podamos ir con Dany al cine y tu idea ya no será tan descabellada-

-Maxim, tarde o temprano Dany va a descubrir la mentira y se disgustará con Johann-volví a quejarme

-Si quieres solucionarlo, entonces tendrás que darle una muy buena explicación a Dany-elevó ambos hombros-Pero hoy intentaremos convencer a Sean de que Dany vaya con nosotros al cine-

-No creo que Sean sea el problema ¿Viste la mirada que el enfermero nos dió?-

-Su trabajo es cuidar profesionalmente de la salud de Dany-Maxim elevó ambos hombros-Me parece normal-me abrazó por completo y yo coloqué mis brazos sobre su cuello-Hablaremos con los dos e intentaremos convencerlos-asentí y volví a estornudar 4 veces seguidas

-Vamos a desayunar, ya no me digas nada-evité que mencionara el tema de mi posible resfriado y lo tomé de la mano para emprender nuestro camino rumbo a la cocina. A mitad de las escaleras, vimos que Dany y Sean estaban platicando en la sala. Johann se encontraba a un lado de Dany

-Pero ya no está lloviendo-dijo Dany con tono lastimero

-Daniel, entiende que todavía no puedes exponerte a la intemperie-Sean se pellizco el tabique nasal y presentí que esa discusión ya llevaba varios minutos porque parecía que Sean estaba perdiendo la paciencia

-Pero solo sería el tiempo en que lleguemos al lugar ¿O no?-Dany observó hacia Johann y después su mirada regresó a Sean-Dentro del cine no estaría expuesto-murmuró y Sean negó

-Una salida al cine toma 3 o 4 horas. Físicamente no vas a poder soportarlo-la mandíbula de Sean se tensó en cuando elevó su mirada y se percató de que Maxim y yo estábamos presenciando la discusión

-¿Por qué solo me respondes con excusas?-un ligero sollozo provino de Dany y mi corazón se detuvo ante la incertidumbre-Quiero salir un poco…-llevó sus puños hacia sus párpados porque al parecer estaba intentando retener su llanto-Pero tu…-gimoteó-No me dejas-volvió a gimotear y su llanto aumentó

-Daniel-Sean suspiró-Solo quiero que entiendas…-

-Lo entiendo-Dany gimoteó-Pero no entiendo por qué…-se atragantó un poco con su llanto-Por qué me sacaste del laboratorio si aquí también estoy encerrado-sollozó con más fuerza al terminar de hablar y como acto de reflejo escondió su rostro en el pecho de Johann quien solo pasó un brazo sobre sus hombros y, al frotar la espalda de Dany, el llanto y los gimoteos incrementaron.

El rostro de Sean se transformó en algo que jamás esperé ver en él. Tenía un rostro herido. No físicamente, pero sí sentimentalmente. Al parecer esas pocas palabras por parte de Dany lo habían calado profundamente.

Sean se alejó de la escena y empezó a subir los escalones con la mirada baja. Pasó por nuestro lado sin darnos una mirada de recriminación o de enojo y se encerró en su estudio.

Dany continuó llorando en el pecho de Johann hasta que Johann le murmuró algo que lo hizo regresar a su habitación.

Observé con pánico total a Maxim

-¿Qué hice?-

-No creo que…-empecé a negar

-Provoqué que Dany y Sean discutieran-no pude evitar jalar un poco mis cabellos ante el resultado de lo que mis ojos habían presenciado-Y ninguno tiene la culpa, Maxim…-me lamenté

-Tranquilo-colocó sus manos sobre mis hombros que estaban más tensos que mi futuro en esa casa

-No, Maxim-negué-Necesito arreglar esto cuanto antes-mordí con nerviosismo la uña de mi pulgar-Pero no sé cómo debería hacerlo-

-Primero, platiquemos con Sean, él recibió el reproche de Daniel porque es verdad que no le permite salir. A mi parecer, las medidas del enfermero y de Sean son exageradas. Intentemos hacer que Sean entienda esa parte y ya veremos que más pasa-mi atención se centró en Maxim

-¿Lo crees?-

-Claro-sonrió-Si no estuvieran hostigando a Dany con los cuidados, desde un principio no se habría esguinzado el tobillo y para estos días ya estaría dando paseos junto a nosotros-elevó ambos hombros

-Pero todo lo hacen por su salud. Es para que esté mejor-murmuré-El enfermero es alguien profesional-

-Entonces no les está funcionando la estrategia porque yo no veo mejoría en Dany. No lo conozco por completo, pero su personalidad me parece extraña. No es solo timidez como nos dijo Johann-observé en silencio a Maxim y asentí. Estaba muy de acuerdo con lo que mencionaba, la timidez de Dany era extraña y hasta cierto punto un poco fatigosa-Platiquemos con Sean, por ahora creo que Dany está siendo reconfortado por el enfermero-asentí y regresamos sobre nuestros pasos rumbo al estudio de Sean.

Maxim se encargó de tocar la puerta

-¿Sean? ¿Puedo pasar?-no escuchamos respuesta, así que Maxim abrió la puerta como si nada. Yo ingresé detrás de él.

Vimos a Sean sentado frente a sus computadoras. Me pareció que no parpadeaba y sus dedos se movían con agilidad sobre el teclado. Su rostro ya no se veía herido, pero sí lo noté más serio de lo que había estado en días anteriores

-¿Qué quieren?-nos preguntó sin dejar de teclear y de observar directamente hacia las pantallas

-¿Qué pasó con Dany?-Maxim preguntó mientras se acercaba unos cuantos pasos hacia el escritorio. Yo preferí quedarme en el rincón-¿Por qué discutieron?-Sean dejó de teclear y observó a Maxim para después verme a mí

-Fueron ustedes los que le dieron la fantástica idea de la salida al cine y me preguntas del ¿Por qué discutimos?-su mandíbula se tensó

-Bueno, sí, fue nuestra idea, pero nunca creímos que iba a desencadenarse un problema mayor-Maxim se mostró totalmente relajado. Incluso sonrió un poco de lado-Le hubieras dicho que aceptabas, le ponías tus condiciones y lo llevábamos a un lugar cualquiera que encontráramos cerrado, le inventaríamos algo y listo, premio doble. Sale un momento y regresa sano y salvo-quise golpear a Maxim. Él era de esas personas que no tenían tacto con nada. Él creía que las cosas se solucionaban fácilmente, pero muchas veces no era así.

Sean negó con incredulidad y después de suspirar, retomó su trabajo

-Si eso es todo, largo-

-¿Y qué opinas sobre mi idea?-

-Es una idea estúpida-gracias Sean-Admito que le he ocultado información a Daniel, pero nunca le he mentido y no empezaré solo por éste motivo que no tiene sentido-

-Ese es el problema, Sean-el tono de voz que Maxim utilizó, tuvo un cambio radical. Ahora era mucho más serio-Puede que para ti no tenga sentido, pero ponte en el lugar de Dany. Estuvo 8 meses encerrado en ese espantoso lugar, oscuro y completamente maloliente-Maxim y Sean mantuvieron contacto visual-Y luego estuvo en el hospital luchando contra la muerte día y noche, rodeado por personas desconocidas para después llegar a ésta casa que no conoce de nada y de la que no ha salido más que 3 o 4 veces. Ni siquiera se ha sentado por un momento en el jardín-sonrió con incredulidad-Déjame decirte que el clima es una excusa de idiotas y que Daniel extraña la fábrica, la extraña demasiado, como no tenemos ni idea-Sean por fin apartó la mirada-Sé que quieres guardarlo en una caja de cristal junto a todas las comodidades posibles para que nada ni nadie más le haga daño, pero no se trata de eso-Sean relamió sus labios-Cuida a Dany, pero no intervengas en la libertad que tanto ansía. Platica con él-Maxim dio media vuelta y salió del estudio.

Le seguí sin dar otra mirada a Sean, porque por ahora, él también necesitaba su espacio para pensar mejor las cosas.

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-¿Qué estás pensando?-Maxim me preguntó, pero yo continué jugando con la mermelada que había sobre mis panqueques

-Estoy pensando… en regresar a Positano-me sinceré

-¿Por qué? Habíamos quedado que nos quedaríamos 2 semanas, solo llevamos una-

-Sí, pero…-suspiré y dejé a un lado el tenedor para recargar mis antebrazos sobre la mesa del restaurante.

Después del sermón que Maxim le había dado a Sean, decidimos salir e ir al centro de la ciudad para desayunar algo más que solo fruta. También porque no quisimos estar en medio del silencio que se había hecho en la casa

-Siento que ya no debo interferir en nada de lo que está sucediendo o sucederá entre Dany y Sean-observé a Maxim-Y, además, puede que digas que el asunto del clima es para idiotas, pero yo ya extraño el calor de Positano-froté mis brazos y observé hacia el exterior del restaurante-No me termina de convencer la lluvia-regresé mi mirada a Maxim-Perdón-bajé la mirada-Sé que quieres que pasemos más tiempo juntos para conocernos, pero…-empecé a negar y Maxim tomó mi mano

-Está bien, te entiendo-lo observé y me sonrió. Le devolví la sonrisa

-Antes de irme quiero platicar con Dany-Maxim asintió-E invitarlo a que cuando se recupere, le exija a Sean que lo lleve a Positano-sonreí-Porque ambos y todo mundo deben conocer mi pueblo-me reí y Maxim también.

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Toqué tres veces a la puerta de la habitación de Dany y esperé con paciencia. A los pocos segundos, Johann me abrió

-¿Dany ya está despierto?-pregunté. Ayer había sido la discusión entre Dany y Sean y durante el resto del día, no volví a ver a ninguno de los dos

-Sí, pero no se siente bien-el enfermero hizo una mueca-Le duele un poco la cabeza-

-Solo vengo a despedirme-justifiqué de manera rápida. El enfermero entreabrió su boca

-Oh, bueno, creo que no te tomará mucho tiempo-el enfermero se hizo a un lado e ingresé a la habitación. Lo primero que vi fue a Dany enroscado en el sofá individual que antes se mantenía acomodado a un lado de la cama y ahora estaba de frente a la ventana de la habitación-Voy a preparar su desayuno-asentí y Johann salió por completo de la habitación mientras cerraba la puerta a sus espaldas. Me acerqué a Dany

-Hola Dany, buenos días-saludé. Él solo me observó de reojo y después su mirada volvió a colocarse en el piso a pesar de que tenía una buena vista del exterior gracias a la ventana. Relamí mis labios y me recargué en la pared que había a un lado de la ventana para así tener a Dany casi de frente-Vengo a despedirme-dije, pero Dany no me dio otra mirada. Me aclaré la garganta-Maxim dice que yo no provoqué esa discusión que tuviste con Sean, pero quiero decirte que lo siento-su boca se entreabrió y sus cejas se fruncieron un poco-Di una idea apresurada y terminé desilusionándote-sus gestos se relajaron un poco. Esperé alguna palabra de su parte, pero nada brotó-Hoy es mi último día aquí porque voy a regresar a Positano, es…-dudé un poco-El lugar en donde vivo-aclaré-Me gustaría que algún día vayas a visitarme-sonreí cuando Dany me dio una mirada de reojo-Va a gustarte mucho-su mirada volvió a bajar y dejé de sonreír-De verdad Dany, espero que me perdones y que vayas a visitarme. Me alegraría mucho-noté un muy pequeño suspiro de su parte-Bueno…-di unos cuantos pasos lejos de la pared mientras sacaba un papel del bolsillo de mi pantalón-Aquí te dejo el teléfono de mi casa, mi dirección y mi correo para que me mandes todos los mensajes que quieras, voy a responderte cada uno de ellos-dejé el papel sobre su mesita de noche-Puedes escribirme y llamarme todo lo que quieras ¿Bien?-Dany continuó sin voltear a verme. Suspiré. No iba a conseguir nada-Cuídate Dany, no te des por vencido que vendrá lo mejor-continuó sin mencionar nada.

Y salí de la habitación, pero no sin antes tener la impresión de que el sofá estaba engullendo a Dany.

Notas finales:

¡Muchas gracias por leer! <3


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