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~*~¿Casado con mi Principe?~*~[TEMPORALMENTE PARADO] por Gabiru

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Notas del capitulo:

El cap 6 es raro... eso creo yo ¬(°-°¬)

estoy tan cansada, me iré a dormir pronto (-v-)

Por Favor lean y diviertanse con el cap de hoy

Gracias por sus reviews, me dan fuerza para seguir (/_°)/

y especialmente a Hopi, eres tan dulce (YvY)

Aquí les dejo mi humilde fanfic, por favor diviertanse (~'v')~***

####CAPITULO VI####

 

 

Ya han pasado dos semanas desde la llegada de Sed y Jun al hogar de la Sra. Rahim y su hijo Soe que, por alguna razón, habían “adoptado” a Jun como la “hija de la familia”, ayudando a la Sra. Rahim y haciéndole compañía en particular, por otro lado… Sed, era más bien el “mozo” de Soe.

-¡Apresúrate chico!, quiero terminar antes del almuerzo — gritaba Soe mientras hacía sus labores propias de la granja, mientras el pobre de Sed yacía medio muerto en el suelo.

Originalmente la misión de Sed era descargar unos sacos de arena de la camioneta de Soe, sin embargo, y considerando que Sed en su vida había hecho un total de 0 trabajo manual, su cuerpo no pudo resistir y colapso… Soe lo observaba desde lejos sin ninguna preocupación con respecto a si Sed seguía vivo o qué, siguió allí medio inconsciente bajo el sol por un largo rato hasta que Soe fue por él, lo quitó del camino como quien aparta un bulto estorboso y terminó la tarea que Sed dejó a medias.

 

 

-Te lo digo mamá, este chico es un completo fracaso, me pregunto ¿cómo ha sobrevivido sin hacer nada toda su vida? Qué triste— se quejó Soe con su madre, por otro lado Sed estaba recostado en el Sofá con la cabeza apoyada en las piernas de Jun.

-No te preocupes hijo, estoy segura que con el tiempo aprenderá— lo excusaba, mientras la madre y el hijo discutían acerca de la inutilidad de Sed, éste miraba como Jun se reía sutilmente mientras le acariciaba el cabello.

-Anda búrlate… no tengo problema con eso— le decía haciendo puchero.

-je je, yo no he dicho nada ¿o sí? —se defendía risueño.

-pero lo pensaste.

-Ay, bueno… sí, es que es muy cómico verte así, eres un completo inútil  jejeje.

-¿Y qué esperabas?, no estoy acostumbrado a este tipo de trabajo— puchero de nuevo.

-¿Y a cuál estás acostumbrado? ¿Al diplomático?

-Exacto, pero [*shh*] no le digas a nadie— dijo resignado.

Mientras la discusión por ambas partes se desarrollaba, el ruido de alguien tocando la puerta de enfrente interrumpió los debates, preguntándose quién será el que toca la puerta si no estaban esperando a nadie, Soe fue a atender, pero cuando vio de quién se trataba su semblante cambio de inmediato de “muy hospitalario” a “claramente molesto”.

-¿Qué quiere aquí? — Soe frunció el ceño, el que estaba al otro lado del pórtico hizo ademán de entrar pero Soe se interpuso en su camino.

-¿Es esa manera de tratar a un invitado? —respondió la voz quejosa de afuera, se oía que era la voz de alguien joven.

-Tú no estás invitado— le respondió cortante, el otro se asomó hacia dentro de la casa por sobre el hombro de Soe y pudo ver a Sed y Jun observando cuál era el alboroto, Soe también volteó como por reflejo y el visitante aprovecho la oportunidad para escabullirse al interior.

-¡Tía! ♥

Como de rayo el intruso fue a abrazar fuertemente a la Sra. Rahim quien no se molestó al respecto, pero los desconcertados eran Sed y Jun, no entendían que diablos pasaba, ¿Por qué el chico ese le decía tía? ¿Y por qué Soe se miraba como si hubiera chupado un limón?

-♥¡Tía estoy tan feliz de verte de nuevo! ♥ ¡No tienes idea de cómo te he extrañado, me he sentido tan solo!♥… —hizo una pausa para ver a los chicos que también le observaban con ojos de puntito— ¿Quiénes son estos tía? —preguntó con cara inocente.

La señora Rahim le dio unas palmaditas indicándole que la soltara y éste lo hizo.

-Déjame presentarte hijo, ellos son Sed y Jun, se están quedando con nosotros [*ahora se dirigía a los chicos*] este es mi sobrino Luca— el joven muchacho de no más de veinte años saludo juguetonamente a los chicos, era delgado y bajito, con los ojos y el pelo obscuro, pudieron notar un pequeño arete en el lóbulo de su oreja izquierda.

-Hola, que lindo conocerlos.

-Bien ya saludaste, ahora puedes seguir tu camino— le dijo Soe enojado.

-¡Tía Dile algo! ¡Él es Taaaan Cruel! — se quejó infantilmente.

- Mamá, ¿no dejarás que se salga con la suya cierto? —respondió el otro.

-¡No sé a lo que te refieres!

-Siempre haces lo mismo, ¡vienes luego que tus descabellados planes fracasen, armas revuelo y te quedas aquí hasta que se te ocurra algún otro plan para conseguir vivir a costa de otros y luego te vas dejándonos en la ruina!

-¡No es Cierto!

-¡Si es Cierto!

-¡Que No!

-¡Sí!

-¡No!

-¡Sí!

-¡No, Mil Veces!

Los otros observaban algo preocupados la situación, la discusión no llevaba a ningún lado, pero debían admitir que se veían cómicos discutiendo en esa forma, La Sra. Rahim decidió que había sido suficiente y dio un grito aterrador, como solo una madre sabe hacerlo, haciendo que se detuvieran quedando con cara de regañados.

-¡CALLENSE YA! —Sed esbozó una sonrisa por ver la cara con la que quedaron esos dos, pero a Luca no le hizo gracia.

-¡¿Y tú de qué te ríes?!

-¿eh? [*Gota en la cien*]

-Luca ya basta—reprendió la Sra. Rahim.

- Ha, te lo mereces— blofeó, pero se le paso cuando su madre le lanzo una mirada reprendedora también.

-Soe, ya es tiempo de que vuelvas al trabajo aún hay mucho que hacer por hoy.

-Si mamá [*Regañado*] Tú, Sed ven conmigo, aún tenemos que desherbar la tierra.

-¡¿Eh?! P- Pero si ni siquiera hemos comido todavía… — se quejó tristemente, pero viendo que Soe no le ponía atención a sus reclamos no le quedó más que seguirle a fuera y resignarse.

-Luca ve con ellos— dijo la Sra. Rahim.

-Ay… ¿Por qué yo…?

-Porque yo lo digo y punto.

-Está bien… — dijo resignado, arrastrando los pasos siguió a Sed y a Soe hacia donde estaba el trabajo.

Jun estaba impresionado por la maternal manera de la Sra. Rahim para resolver los conflictos.

 

 

Más tarde esa noche…

-¡¡Ay…!! Estoy rendido…— Se quejaba Sed postrado en la cama que compartía con Jun, éste le miraba divertido desde su posición, sentado en la cama a su lado — creo que mi cuerpo no resistirá por micho, colapsaré en cualquier momento…

-No seas ridículo, solo tienes que convertirte en un hombre de verdad y hacerte fuerte.

-¿A qué te refieres con eso? —le miro con cara de: “no es gracioso”

-Sabes a lo que me refiero, por muy consentido que fueras, ningún hombre puede ser taaan inútil como tú— le dijo burlón, Sed se puso de rodillas en la cama justo frente a Jun con cara no muy contenta.

-Soy Tan Hombre Como Cualquiera.

-¿No me digas? ¡Debilucho! —desafió Jun, ante esto Sed sonrió macabramente y tumbó a Jun de espaldas en la cama sujetándolo fuerte de las muñecas.

Jun se sorprendió por esa reacción y solo frunció el ceño y le dijo que no era divertido, pero antes de recibir respuesta su cuello fue brutalmente atacado por los dientes de Sed que parecía un vampiro hambriento, Jun Forcejeó pero los escalofríos de los labios de Sed ahora devorando desde su clavícula hasta el lóbulo de su oreja mermaron sus fuerzas y solo pudo quejarse y retorcer su cuerpo por los estremecimientos.

-¡Ba- Basta!

-Te voy a demostrar qué tan hombre soy… — le susurró maliciosamente en la oreja, Jun abrió los ojos como platos ante lo que acababa de oír, pero no pudo pronunciar protesta alguna pues sus labios fueron tapados por un agresivo beso.

Comenzó por lamer la boca medio abierta de Jun y sin demora introducir su lengua en la cavidad ajena, succionó sus labios y su lengua con fuerza, mientras exploraba cada milímetro de la boca de Jun con su lengua apenas dejando espacio para que salieran los leves quejidos de placer del sometido, mientras el beso se profundizaba cada vez más Sed presiono su entrepierna con la de Jun que ya presentaba signos de excitación.

Sus labios finalmente se separaron por la molesta falta de oxígeno, de inmediato Sed juntó las muñecas de Jun y sujetó ambas con su mano izquierda, mientras que con la derecha subió la camisa de Jun hasta dejar descubierto su pecho y con él esos exquisitos pezones que ya estaban duros rogando ser estimulados.

Sed no se hizo de rogar y atrapó entre sus labios uno de esos deliciosos botones rosas mientras que su mano libre bajaba por todo el abdomen de Jun hasta llegar a su entrepierna para comenzar a masajearla lenta y tortuosamente.

Con su boca succionaba y con su lengua dibujaba círculos imaginarios alrededor de su endurecido pezón, Jun se retorcía de placer y pequeños gemidos se escapaban de su garganta, su vista se nublaba cada vez más, estaba tan sumergido en la atmósfera que no se dio cuenta cuando Sed soltó sus manos y le quitó la ropa dejando su piel a su merced.

-¡Ah…! ¡Sed… pa- para!

Sed bajó por el cuerpo de Jun dejando a su paso un camino de marcas rojas y chupones.

Pronto llegó a la cadera de Jun y allí observo por un instante el erecto miembro de éste—Mmm… está muy duro, que erótico—

 Luego lo tomó en su mano derecha y llevárselo a la boca, le dio un par de lamidas y lo succionó fuertemente, mientras seguía degustando el miembro de Jun, con sus manos acariciaban sus caderas, luego sus nalgas y luego, en un movimiento audaz, sus dedos comenzaron a acariciar ese lugar prohibido.

Su virginal trasero era tocado de esa manera por primera vez y no se sentía mal, así que Jun dejó continuar  a Sed hasta que éste, nuevamente siendo audaz, introdujo uno de sus dedos que previamente había mojado con su saliva, esto hizo volver casi de inmediato el sentido al cuerpo de Jun.

-¡BASTA! —por reflejo lanzó un rodillazo a las costillas de Sed.

-¡Ouh! —se quejó por el golpe, calló postrado en la cama sujetándose la parte golpeada, y casi en posición fetal.

De prisa Jun cubrió su cuerpo con la sábana y luego, cuando recobró la calma, se asomó apenado a ver si Sed aún respiraba.

-¡¿Por- Por qué rayos hiciste eso?! — se quejó aun jadeando por el dolor.

-Lo- Lo siento… ¡Fue-Fue tu culpa! ¡¿Qué crees que hacías?! —alzó la voz levemente ya que aún estaba consiente que ya era tarde en la noche.

-¡¿De qué demonios hablas?! ¡Hace un rato lo estabas disfrutando! —respondió ya recuperando el aliento.

-¡Hablo de “eso”!

-¿”eso”? ¿Te refieres a “hacerte el amor”?

-¡¿Hacer qué cosa?! ¡Estabas tocando de más! —le dijo molesto—Estabas tratando de meterlo  esas cosas no… [*Ack*]—

Hizo una pausa, se acababa de dar cuenta de algo, ¡estaba a punto de tener sexo con Sed!, y no solo eso, a pesar que él es mucho más fuerte que Sed, era el “de abajo” y él no estaba preparado para algo como eso ¡de ninguna manera!, tenía que idear algo ¡algo que literalmente le salvara el trasero!

-No Puedes hacer algo como eso porque…—De repente en su cabeza el foquito se le prendió, rápidamente puso un semblante de falsa seguridad y como si él tibiera las de ganar, ni él se lo creía— ¡Porque La Apuesta Aun está en Pie! —bingo, he ahí su salvación.

-¿La Apuesta? —Sed no se lo creía, según él eso ya había quedado en el olvido y ahora esa mierda le venía a atormentar.

-Sí, ¿recuerdas? no haremos nada como esto hasta que la apuesta se termine [*nervioso*] — Sed tronó su lengua por la molestia que le causaba.

-¿No podemos dejar eso atrás y seguir adelante? Creí que eso se había anulado desde que te confesé mi amor…—dijo confundido— ¿acaso mi amor no es suficiente para ti?

-N-No es eso… pero [*el nerviosismo regresa*] ¡T-Tú trataste de meter tu dedo! y-y ¡Dolió y No quiero eso si duele! — se quedó jadeando por la aceleración que le causo esa situación en su cabeza, luego de recuperar el aliento volvió a ver a Sed que ahora le miraba como si estuviera procesando los datos en su cabeza, de repente el sonido de la campanita de “listo” sonó y Sed por fin reaccionó.

-¿Estás diciendo que porque te dolió es todo el problema y no la apuesta? Entonces ¿Está bien si no te duele? Es eso ¿cierto?

-¡¿EH?! ¡N-No! ¡Lo entendiste mal! —Jun agitaba sus manos como para dispersar ese pensamiento de la cabeza de Sed, pero éste parecía estar muy seguro de su conclusión e incluso se veía contento, tanto que abrazó a Jun y juntos cayeron nuevamente en la cama.

-Muy bien entonces, esperaré a que estés listo y lo haremos lento para que se sienta bien ¿ok?

-¿Eh…? —Jun se había quedado sin las fuerzas suficientes como para responder, “este idiota no lo entenderá nunca” pensó.

Y así se quedaron abrazados hasta caer dormidos.

 

 

El Día siguiente…

 

-Sra. Rahim, ¿estarán bien? —Preguntó Jun sentado en el sillón viendo hacia el exterior, refiriéndose a Los muchachos (específicamente a Sed)

-¿Por qué preguntas? — le respondió despreocupada la mujer mayor.

-No comieron, deben estar cansados.

En efecto debían estarlo, ya pasaban de las 2 pm, esa mañana el ganado de uno de los vecinos destrozó por completo la cerca del campo de trigo (N/A: no sé si en la cultura hindú cosechan trigo, eso lo invente, ustedes entienden XD) y por ende los tres muchachos, Soe, Sed y ahora también Luca; han estado trabajando sin parar para evitar que el ganado se coma los jóvenes retoños, tanto así que no habían regresado a almorzar y eso tenía preocupado a Jun.

-iré a visitar a mi amiga al pueblo, volveré en un par de horas— dicho esto la Sra. Rahim se cubrió la cabeza con un sari (N/A: especie de velo) y salió por la puerta dejando a Jun solo que no parecía prestarle atención, o siquiera darse cuenta de que ya estaba solo.

-Les llevaré algo de comer… — dicho esto fue a la cocina a preparar la merienda que les llevaría.

Preparó 3 meriendas, las puso en una pequeña canasta y salió en busca de los trabajadores chicos. Los encontró a las orillas de la cerca de alambre donde había un gran y viejo árbol de Higo, allí encontró a Soe cortando hierba que había crecido sobre la cerca, no encontró por ningún lado al llamado Luca, pero quien si estaba era Sed.

Estaba clavando nuevo alambre a las partes deterioradas de la cerca, había estado bajo el sol todo el día y estaba sudando, su camisa entera estaba mojada en sudor y también su cabello, por un segundo Jun lo observó manejando torpemente el pesado martillo y secando el sudor de su frente se veía tan sexy… entró nuevamente en la realidad y luego de reprenderse a sí mismo por pensar que Sed se veía “sexy” fue a hacer lo que había ido a hacer.

-¡Buenas! —saludó alegremente.

-Jun… ¿Qué pasó, mi madre quiere algo? —preguntó Soe parando la labor, también lo hizo Sed.

-No, no es nada de eso, Como no pudieron comer les traje algo para que no mueran de inanición.

-Ya veo… Bien, Creo que nos tomaremos un descanso— dicho esto Jun le entregó el recipiente con una de las meriendas que había preparado y Soe se retiró feliz mente a comer dentro de la camioneta que no estaba muy lejos.

Antes que Soe se fuera Jun sacó otro de los recipientes le preguntó dónde estaba el otro chico, Luca, Soe no le pudo responder y le dijo que se lo diera a él y se encargaría, y así lo hiso. Sacando la tercera y última merienda de la canasta Jun sintió como unas manos húmedas le agarraban de la cintura, y por supuesto que sabía quién era.

-Sed… suéltame…— dijo serio, el otro no le hizo caso y en vez de eso pegó más su cuerpo al de Jun y descansó su barbilla en el hombro de éste— ¡Déjame estas todo sudado!

-No me importa, estoy feliz porque te molestaste en traerme algo de comer, eres tan dulce ♥ —lo abrazó fuerte pero como Jun es más fuerte lo apartó sin problema— eres tan dulce como siempre ♥

-Solo vine a dejarte esto y me iré— dijo Jun un poco sonrojado entregándole a Sed su merienda, éste la tomo y se quedó viéndola con cara de puntito por un instante.

-pero… no puedo comerla.

-¡¿Eh?! ¿Por qué rayos no? —se había esforzado tanto, no era posible que sus esfuerzos no sean tomados en cuenta.

-es que [*Sed Chibi*] tengo las manos sucias.

-¡ese no es problema! Allí hay cubiertos, no uses tus manos y ya.

-Aliméntame— pidió tiernamente, Jun se quedó sin palabras y solo se dio la vuelta para irse, pero apenas dio un paso y Sed le detuvo del brazo.

-Si no me alimentas no comeré.

-Pues eres tú el perjudicado ¿no? —Sed tiro del brazo de Jun arrastrándolo hasta quedar bajo el árbol de Higo, Jun se Resistió pero como su equilibrio estaba comprometido se dejó llevar, estando allí Sed Puso el recipiente de la merienda en suelo y con sus manos agarró a Jun por las caderas y lo hizo caer sentado entre sus piernas, lo abrazó fuerte para que esté no se lastimara ni intentara escapar, Jun Sonrojado le pidió explicaciones.

-Ahora tendrás que alimentarme porque no puedo usar mis manos.

-¿q-qué? ¿Por qué no puedes?

-Porque si te suelto te iras y me vas a dejar solito.

-Ya estás grande come solo—Sed beso el hombro de Jun haciendo que este se sonroje y su corazón se acelere a mil por hora.

-Quiero comer junto a la persona que amo — le susurró, el rostro de Jun se tiñó de carmín y dejó de forcejear, luego de un momento estiró su mano y tomó el recipiente del suelo, lo abrió y con el tenedor cogió uno de los vegetales cosidos y se lo asomó al rostro a Sed, este le miró con cara de incrédulo, el rostro de jun no podía estar más rojo.

-¿Q- Qué esperas? ¡Se me va a caer! —le dijo con el ceño fruncido y viendo hacia otro lado, A Sed esto le pareció tan lindo que era hasta gracioso, abrió la boca y atrapó el vegetal del tenedor y lo comió de o más feliz…

 

 

Ya después de la comida (de hecho Jun no alimentó por completo a Sed, solo hasta que éste trató de conseguir un “postre” de Jun, recibió un golpe en la cabeza y terminó de comer solo) los “amantes” (aun no con su mutuo consentimiento) estaban sentados descansando a la sombra del árbol, como Soe no había regresado todavía podían tomárselo con calma, estaban conversando de cosas cualquiera hasta que los llegaron a interrumpir.

-AH, ¡Qué Cansancio! —Se quejó Luca cayendo sentado muy cera de Sed y Jun, que por alguna razón aún seguían sentados muy juntitos.

-¡¿Cansancio?! — dijo Sed con mirada acusadora— pero si te mandaron a traer alambre desde hacer como 3 horas y nunca volviste.

-Como sea— evadió despreocupado— ¿Qué hay de comer para mí? —Alegremente pregunto, Jun le respondió que le había entregado su parte a Soe para que se la diera, este se quedó serio— ¿A Soe? De seguro ya se lo comió todo el solo.

-No creo que él haga eso— Dijo Jun, pero Luca no pensaba lo mismo y rápido le planto un teatrito.

-El seguro dijo [*Mueca*] “Ese perezoso no se merece comer, mejor me lo como yo solo y me haré más fuerte JAJAJA” t ahora debe estar dormidote en su camioneta.

(Por otro lado en la camioneta: - ¡AH… CHUH!, ah… que raro, me despertó el estornudo ¿Qué será?)

-Deberá tener buenas razones para odiarte tanto— dijo sed sarcástico— yo apenas te conozco y ya me caes mal.

-Oye ten cuidado de lo que dices.

- ¿O Qué? —le respondió hostil.

-No estás en posición de cuestionarme, si mi tía se entera que la desafortunada pareja de “amantes furtivos” son solo un Debilucho cobarde y un marica travestido.

-¡¿Qué has dicho?! — ¡Escucharon bien!, Este tipo con la sonrisa macabra y la cara de niño sabia su secreto ¿Cómo era posible?, Jun estaba Asustado y a la Vez Molesto ¿lo llamo “marica travestido”?

-¡¿Cómo…?!

-que cómo me di cuenta… ¿además de la falta de pechos y la voz? Vamos, no se sorprendan tanto, puede que mi tía y el idiota de Soe no se dieran cuenta por tu cara de niña, pero yo sé de estas cosas, y es difícil que me trague una historia como la suya— dijo con malicia y mirada de villano, ¿ahora qué harían Sed y Jun?

Sed se quedó mirando al amenazante personaje frente a él, sabía que no sería nada bueno, decidió ir al grano.

-¿Qué quieres? — dijo completamente serio, Jun le miro algo sorprendido por la energía que le transmitía.

-¿Yo? No quiero nada… a menos que — se quedó pensando un segundo— ¡AH! Ya sé, quiero esos aretes— señaló los brillantes pendientes que colgaban de las orejas de Jun, éste se sorprendió y sus ojos se pasmaron por un instante, luego puso una expresión de enojo y le respondió.

-[*enojado*] De ninguna manera.

-Bien si no es eso… entonces creo que los delataré…

-¡Espera! —interrumpió Sed— cualquier otra cosa menos eso.

-*Ché…* entonces creo que quiero… mmm…— de repente una atmósfera aterradora le rodeó— quiero un cogida.

-¡¿EH?!

-¡¿ESTÁS LOCO?! — Sed gritaba Molesto, ¿Qué era lo que estaba escuchando? —¡¡DE NINGUNA MANERA JUN HARÁ UNA COSA ASÍ!!

-¡Oye, oye! Cálmate ¿ok?, no quiero nada con el travestido este.

-¡NO JUEGUES CONMIGO LOCO! ¡QUE DEMONIOS TIENES EN MENTE! — cuestionó Sed.

-Dije que quería una cogida, pero la quiero contigo.

-[*Simultáneo*] ¡¿QUÉEE?!

Notas finales:

Bien, este fue el cap de Hoy /(°.°)/

AL principio el cap parecía no ir a ningún lado, bloqueo creativo "ON", pero luego leí uno de los rewiews (esa persona sabe a quién es) y mi foco se prendió: "Sed debe tener un rival!!"

Pero luego pasaron algunas cosas y todo tomó un rumbo extraño ¿(°-°)7

Y ahora las cosas se ven complejas... (esa era la idea?? :/ )

Eso me pasa por escribir mientras me drogo con doritos y nutrela (U_U)"

En Fin, actualizaré pronto, con suerte,... y gomen por dejar las cosas como están(todo parece tan conflictivo que no quiero ni ver (/^)...

¿Reviews? ***(/°v°)/***


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