Harry vio partir a Severus, le había agradado escuchar que su profesor no había deseado ser mortifago y que no lo era n verdad, pero aun así se sentía intrigado ante el cambio de deseos del hombre de mirada negra, pero sabía que tendría que esperar hasta su retorno para saber la continuación de la historia
--Huj
--¿Si amo Harry?
--Quiero unos refrigerios por favor, me quedare aquí a leer un poco
--Claro amo Harry
Así Harry se levantó para encontrar algo que leer, había varios libros de temas diversos e incluso había algunos muggle, así que tomo un libro que le llamo y comenzó a leer, estaba tan sumido en su lectura, que solo una caricia le saco de la lectura.
--Hola pequeño—saludo Riddle con una sonrisa--¿Cómo te sientes?
--Muy bien, hoy estuve en el jardín, además Hedwing regreso
--Me alegro escuchar eso, ¿y Severus?
--Salió por una llamada del director, dijo que regresara más tarde
--Entiendo—exclamo mientras se sentaba junto a Harry y toaba un libro—Huj wiski de fuego y después un café
--¿Toma?
--Solo una o dos cuando Severus no está o en ocasiones especiales, ¿Por qué lo preguntas?
--Es que como el profesor me conto un poco de su pasado y me dijo de su papa
--Ya veo ¿y por qué te conto de su pasado?
--Es que quería saber cómo es que terminaron casado y me conto de su primer encuentro
--Así, cuando Severus lanzaba el sectusempra, un hechizo bastante oscuro según el ministerio
--Nunca lo había escuchado o que me hablaran de él, solo del cruciatus
--Eso se debe es que solo el príncipe, la identidad que usa Severus entre los mortifagos, y yo lo usamos, aquel que lo usa sin nuestro consentimiento es torturado y oblibiatado, es un hechizo muy especial para nosotros, por eso muy pocos son los elegidos para usarlo
--Ya veo
--¿Quieres saber lo demás?
--Me… ¿me lo contaras?
--Claro, después de mi encuentro con Severus, decidí investigar en ese momento me interesaba utilizar sus habilidades como mi mortifago, así que use mis contactos en el colegio, Abrax Malfoy era mi único amigo, y su hijo Lucius aún estaba en el colegio así que él fue quien me dio la verdadera identidad del príncipe, ya con saber que era Severus Snape comencé a investigar, así supe que su madre estaba muy mal, prácticamente le quedaban pocos días de vida y bueno Tobías Snape era alguien que me hacía odiar más a los muggle, así continúe investigando hasta que supe de la muerte de Eileen Prince, por regla en Hogwarts se permite a los alumnos ir a ver a sus familiares, pero…Severus fue la excepción o eso seria
*******Flash back*****
Abrax Malfoy la mano derecha de lord Voldemort y uno de los jefes escolares caminaba al lado del jefe de la casa de Slytherin, uno bastante idiota al parecer del lord Malfoy, así llegaron a la sala de Slytherin donde todos los alumnos se encontraban
--Padre—fue el saludo de Lucius al ver a su padre ahí, cosa que le extraño por lo regular le avisaba de sus visitas
--Hola Lucius, prepárate para salir—exclamo mirando a su hijo y después mirar al chico que se encontraba en el rincón, según el recuerdo que había visto de su amigo, así se acercó a el—Severus Snape—el joven alzo la mirada para ver quien le hablaba—sube a cambiarte, necesito que me acompañes
Severus iba a decir algo, pero después de pensarlo por unos minutos subió a su habitación a ponerse la mejor ropa que tenía.
Así ante la extrañeza de Lucius y los demás, Severus se hallaba en una carroza camino a Hogsmade
Ya en las tres escobas usaron la red flu para llegar al caldero chorreante, ahí Severus pensaba en hacer efectivo su plan, mas al retroceder, choco con alguien
--Nos volvemos a ver—Severus volteo para encontrarse con Tom quien le sonreía, pero este frunció el ceño—hay que mejorar un poco tu aspecto
Y con un pase de su varita la ropa muggle que llevaba se viera nueva, cuando Abrax asintió, supo que era lo correcto
--Bien, ahora vamos—dijo Tom tomando la mano de Severus, quien estaba sorprendido y al ver la acción del desconocido se sonrojo
Fueron a un callejón donde Abrax sujeto a su hijo y Tom a Severus, en unos instantes llegaron al cementerio. Al ver el lugar miro a los dos adultos
--Fuimos compañeros de tu madre—exclamo Abrax ante la interrogante de Severus—nos enteramos que murió y decidimos venir a acompañarte
--Pero…mi madre fue exiliada de su familia
--¿Y?—pegunto Tom—entremos
Así durante unos minutos estuvieron en silencio mirando el entierro de Eileen Prince. Después de estar ahí se dirigieron al caldero chorreante donde comerían y después estarían un rato en el callejón diagon.
Ahí Severus entro a la librería a hojear el libro que quería, pero que debido a su costo le era imposible tener y al ser nuevo no podía encontrarlo en segunda mano, después fue a comprar un poco de tinta, una pluma y solo un metro de pergamino, en aquella tienda de segunda mano, después fue a la botica a comparar gramos de algunos ingredientes que le faltaban todo ante la atenta mirada de Tom.
--¿Por qué has comprado en la tienda de segunda mano?, esas cosas no están en las mejores condiciones
--Eso a usted no le importa
--Gramos de ingredientes, tendrás de comparar más después
--Mire, le agradezco que me sacara del colegio para ver el funeral de mi madre, pero eso no le da motivo a meterse en mi ida
--Solo quiero ayudarte—exclamo, él sabía lo que era tener que usar esas cosas, pero su investigación le había indicado que Eileen tenía una cuenta que su hijo debería usar, pero ni la mujer ni el chico lo usaban, quería saber por qué—si quieres ser un gran pocionista deberías compara más ingredientes para inventar tus propias recetas
Severus fulmino con la mirada a Tom, el sabia eso, además había logrado mejorar todas las pociones de su libro y ahorrado algunos ingredientes, pero aun así tenía que comprar materiales para las demás clases, se sentí humillado por esos ricachones, si tal vez su madre había sido compañero de ellos, pero no les daba ningún derecho de hacerle sentir aún más miserable de lo que su propia casa le hacía sentir.
Tom pronto se dio cuenta de su error al ver aquellos ónix brillantes debido a la furia
--Si tanto le interesa, no tengo dinero, lo poco que tenía lo acabo de usar—dijo intentando controlar su voz, que se había cortado, debido a su furia
Tom tomo la mano de Severus y se lo llevo a un área donde estaría oculto de las miradas indiscretas de los demás y para sorpresa del joven se vio entre los brazos del desconocido.
Severus entonces se dio cuenta de lo mucho que necesitaba ese sencillo consuelo y sin poder soportarlo más permito a sus lágrimas caer. Lloraba por que su padre lo odiaba, lloraba por el maltrato que su madre había recibido para protegerle, lloraba por las miradas de lastima y asco había recibido en la infancia, lloro por la separación de casas, de no poder integrarse bien a Slytherin, de las humillaciones que le daban esos cuatro, de la amistad perdida, de su madre muerta. Lloro por la soledad que sentía, porque nadie lo comprendía, porque con tan solo dieciséis años creía que su vida sería solitaria.
Tom mantuvo al joven entre sus brazos, escuchando los sollozos, sintiendo aquellas gotas mojarle la ropa y presiono un poco más el abrazo, dándole a entender que estaba ahí, que no lo soltaría.
Cuando Severus por fin se calmó mantuvo la mirada baja y un susurro que entendió como gracias salieron a encontrarse con los Malfoy.
--Es hora que regresen al colegio-exclamo Abrax mientras miraba al chico de cabello negro, había hablado con su hijo y noto lo mucho que ese joven se parecía en algunas acciones y situaciones a su amigo, la diferencia es que la autoestima de este se encontraba por los suelos, mientras que su amigo siempre mantuvo su autoestima alta
Así como lo hicieran en un principio, fueron al caldero chorreante, de ahí por flu a las tres escobas y ambos adultos acompañaron a los jóvenes a la entrada del colegio
--Aquí me quedo—dijo Tom bajando del carruaje—Severus lamento tu perdida, cuídate mucho príncipe
Severus solo asintió con la cabeza sin mirarlo
Al llegar al colegio Severus agradeció y entro al colegio a encerrarse en su habitación
--Lucius
--Padre
--Cuida a ese joven, el Lord lo quiere con él y necesitamos que este sano y salvo
--Si padre—Lucius sabía que no debía contra decir a su padre, así que obedeció la orden
Lucius Malfoy había creído que acercarse a Severus Snape sería fácil, pero se encontró una gran barrea, pero aun así se pudo acercar lo suficiente para que el pelinegro lo llamara amigo y dicha amistad se mantuviera hasta esos días
Tom decidió esperara a Abrax para hablar y en cuanto apareció
--Necesitas levantarle la autoestima Tom, ese chico puede
--No lo digas—exclamo con furia Tom y permitió, solo por unos instantes que Voldemort apareciera—ese chico será mi mortifago.
Una semana después en el gran comedor, todos esperaban que el correo llegara. Severus solo levantaba la vista por que le gustaba ver tantas lechuzas en el lugar, porque él no recibía nada, cosa que provocaba burla en aquel cuarteto. Bajo la mirada para volver a su desayuno y tener que escuchar algunas estupidez de esos cuatro, más no llego, pero no le importo
--Severus la lechuza parece molesta—exclamo Lucius, aun no entendí el porqué del cambio de Malfoy pero alzo la vista para ver una magnifica lechuza parda, mirarle
Extrañado desato el paquete que tenía la ave, tomo un pedazo de tocino y se lo dio al ave que se lo comió, si la ave no se iba, significaba que esperaba respuesta. Tomo la carta y comenzó a leerla.
“Mi estimado Príncipe Severus:
He estado practicando el magnífico hechizo que te vi lanzar, mas por algún motivo su belleza aun me queda lejana, así que si no es mucho pedir y no tienes nada que hacer, me gustaría que este fin de semana que es tu salida al pueblo, nos encontremos en el mismo lugar que nos conocimos para que me digas el secreto para ver aquella belleza. Claro que te pagare por tus asesorías
Espero no molestarte con mi petición, ni con mi desfachatez de mandarte algunas cosas, para que el poco dinero que tienes lo guardes y lo uses para cómprate algunas cosas para ti, algunos gustos.
Atte. Tm Riddle
P.D. Espero su respuesta positiva y el paquete tiene un pequeño hechizo de no devolver”
Severus termino de leer y se fijó en el paquete, lo tomo para poder irse, antes de que los Gryffindor que lo molestaban quisieran hacer algo con sus cosas, siendo seguido de cerca por la lechuza.
Cuando llego a su habitación abrió el paquete, para encontrarse varias plumas, metros de pergaminos, tinta e ingredientes para pociones.
Tomo un poco de su pergamino y tinta y mando la respuesta con lechuza quien estaba esperando y que al tenerla se fue. De no ser por el hechizo ese paquete iría de vuelta. Miro la carta nuevamente y esta vez sus mejillas se sonrojaron al leer con más detenimiento el saludo, su corazón que había empezado a cubrirse con una capa, latió de forma cálida.
Severus había estado feliz, no sabía por qué pero aquella carta le había levantado el ánimo, mas este se vio destruido ante una broma en la que se vio involucrado y como siempre él fue el único que termino castigado y los verdaderos culpables no…le habían prohibido las salidas al pueblo por un mes, técnicamente no saldría del colegio hasta casi terminadas las vacaciones de invierno. Había sido tan grande que olvido avisarle a Tom.
Tom estaba furioso Severus había faltado a su cita, había torturado a unos cuantos y destruido un par de veces su oficina.
--Maldito mocoso, vas a saber que Voldemort no se juega
--Tom
--¿Qué quieres Malfoy?
--Sí que estas molesto, te traigo noticias de tu príncipe
--¿Cómo si me importara?
--Bueno, entonces no te interesara saber el motivo, del por qué falto a su cita—ante eso Tom lo miro—me retiro
--Abrax—exclamo y el patriarca de aquella familia libero un suspiro
--El chico fue castigado, por una broma que no hizo, le quitaron el permiso de salir al pueblo
--¿Y por qué no me aviso?
--Según Lucius, el chico había ignorado a sus verdugos personales, cuando le llego tu paquete, que toda Slytherin estaba sorprendido al ver el siempre rostro ceñudo, tranquilo, feliz, así esos Gryffindor lo tomaron a mal, le hicieron una broma pesada, que lo humillo enfrente de toda la escuela, y después le culparon de una broma, el chico como siempre fulminó a su jefe de casa que se hizo el desentendido y se encerró en su habitación, de donde solo sale a las clases
--Dime que está comiendo, dime que no se ha desentendido de eso—exclamo con una extraña preocupación Tom
--Lucius dice que hay un elfo, un tal Huj, que se encarga de llevarle siempre un poco de comida, desde que llego al colegio se ha hecho cargo de él. Severus debió haber olvidado la cita, debido a su decepción
--¿Salió alguien herido en la broma?
--A parte del orgullo y dignidad del joven, no solo unos cuantos chicos idiotas que sufrieron rasguños
--¿Quién es el jefe de la casa?
--Un caza fortunas de nombre Horace Slughorn
--¿Ese viejo idiota sigue en el puesto?...ahora veo por qué Severus se siente tan perdido—susurro y después una sonrisa se formó en sus labios
--¿Qué tramas Tom?—pregunto Abrax al ver la sonrisa de travesura
--Oh, algo bastante interesante, has que Lucius saque a Severus, debe ver eso y saber que hay alguien que lo cuida
Abrax asintió mientras salía
/Hay Tom…ese chico es el indicado/
Severus iba al gran comedor, Lucius lo había amenazado para que fuera ahí, así que ahora se encontraba sentado junto a él y con varias miradas en su persona, algunas de curiosidad y otras ¿preocupación? Negó con la cabeza, ¿Por qué alguien se preocuparía por un mestizo pobretón?
Así el correo llego y Severus sonrió ante las lechuzas, había decidido salir semanas antes, pero recordó que había faltado a su cita con Tom y que no le había avisado, mandarle una nota en ese momento era impensable, el hombre nunca aceptaría una disculpa de él.
Los murmullos comenzaron y miro a la mesa de profesores, su jefe de casa había recibido una howler, nunca se había visto eso.
“Horace Slughorn…
Un Slytherin apoya a otro, aunque sea joven, un Slytherin siempre protegerá a su compañero, un Slytherin es astuto…tú no eres un Slytherin has fallado a muchos de los principios que Salazar impuso…no eres digno de ser el jefe de la casa de las serpientes.
Jóvenes Slytherin si este hombre vuelve a fallarles, no duden en acusarlo con sus padres o tutores…yo me encargare de que sufra las consecuencias de sus acciones y del darle la lección de su vida.
Atte. Un Slytherin real”
Toda la escuela estaba sorprendido y la cara del profesor roja, de la vergüenza.
La lechuza que había dejado el howler, estaba enfrente de Severus, lo que llamo la atención de los observadores, aquella lechuza parda le picoteo
--Auch, lo siento—exclamo sacando la nota
“Mi querido príncipe Severus:
No verte y no saber de ti me puso furioso, fue Abrax quien me dijo lo que había sucedido, la verdad es que me hubiera gustado saberlo por ti y no por terceros, sé que no confías en mí, nuestra primera reunión fue poco ortodoxa, pero de algo estoy seguro es que quiero que sepas que puedo ser tu apoyo.
Para la próxima que tengas algún problema, avísame a mí, hare todo lo posible para que te pueda ayudar o si solo quieres hablar, te escuchare.
Cuídate príncipe, nos veremos en tu próxima salida.
Atte. Tom Riddle”
Severus sonrió y escribió su respuesta.
Después de aquello las cartas de Severus a Tom y viceversa comenzaron, las citas para aprender el sectusempra y otros hechizos oscuros afianzo la extraña amistad de ambos.
Las reuniones que habían iniciado para practicar un hechizo, pasaron a ser reuniones para hablar del pasado, del futuro, de los deseos y en algunas ocasiones para que Tom le propusiera ser mortifago, Severus se negaba indicándole que su mayor deseo era abandonar Londres, sin saber por qué esas palabras le dolían al heredero de Slytherin.
Severus había estado feliz de tener un amigo, si bien considera a Lucius ya como tal, se sentía cómodo con Tom, le agradaba su compañía, pero el final del curso hizo que la alegría que Severus tuviera desapareciera
--Pequeño ¿Qué te pasa?—pregunto Tom al ver la expresión de tristeza en el joven de mirada negra
--Nada
--Severus, por favor, que te pasa
--Nada, solo pensaba que pronto terminara la escuela y hay que volver a casa
Aquello fue suficiente para que Tom comprendiera, se acercó y acaricio con ternura el rostro de Severus
--Todo saldrá bien, no te preocupes pequeño
--Gracias Tom.
Las clases terminaron y Severus al igual que sus compañeros salieron a King Cross, Severus suspiro mientras comenzaba a dirigirse al infierno que serían sus vacaciones, más una mano en su hombro hizo mirara al desconocido que le llamaba.
--Hola Severus
--Tom, ¿Qué haces aquí?
--Vine por ti, no iba dejarte pasar las vacaciones con ese hombre vamos a mi casa
Severus sonrió y se fue con él.
Durante el verano Severus y Tom se conocieron mejor y poco a poco la amistad dejo de existir para convertirse en amor y cada uno se había impuesto obstáculos tontos en pensamientos de Abrax quien se había dado cuenta.
El retorno a clases fue duro para Severus, más porque había tomado una decisión completamente diferente a sus deseos originales.
Mientras tanto Tom, pensaba en cómo habían cambiado sus deseos, deseaba a Severus Snape, su príncipe mestizo a su lado, no como mortifago, sino como su pareja, su compañero. Pero el joven no deseaba tener esa vida y el ya no se veía capaz de arrebatarle sus deseos al joven de mirada negra.
Así durante todo el ciclo escolar continuaron con su amistad y reprimiendo los deseos de besarse y pertenecer al otro.”
--Amo Tom disculpe la interrupción, pero la cena ya está servida—dijo Rin
--Gracias Rin, sube a lavarte Harry para que cenemos
--¿Y el profesor?
--Esperaremos a que llegue, pero aun así ve
--Si, en la cena ¿continuaras el relato?
--Si así lo deseas, lo hare
Harry asintió y corrió escaleras arriba a lavarse, cuando bajo las escaleras se acercó a Tom y se sentaron en sus lugares.
--Tú y el profesor se enamoraron con la convivencia
--Si, así es, cuando convives con alguien, llegas a saber muchas cosas de esa persona, mientras vivimos juntos en vacaciones, descubrí que me gustaba su risa y su sonrisa y que podía pasar toda la vida mirándolo
--Es increíble, pero ¿Cómo es que terminaron juntos? El profesor se iría de Londres
--Cambie de opinión—exclamo Severus entrando y acercándose a ambos—la convivencia con Tom, me hizo ver que ya no quería irme, así que sin que lo supiera había decido convertirme en mortifago, solo Lucius lo sabía y el me convenció en hablar con Tom
“Las clases se acercaban a su fin, cuando Severus recibió la carta de quien se convirtiera en su confidente de algunas cosas, como su amor por Tom Riddle.
“Severus:
No hagas una estupidez, cítalo, dile que harás, me has contado que el ya no menciona el hecho de que quiere que seas mortifago, sé que deseas estar a su lado, pero Severus, tú no eres de matar, no te veo torturando, la ves que hicimos el cruciatus, solo yo supe que enfermaste…pequeño habla con Tom, dile que pretendes hacer, no hagas ninguna tontería
Atte. Lucius”
Severus se mordió el labio decirle al hombre su decisión, sabía que tenía derecho a saberla.
Mientras tanto Tom, quien preparaba la iniciación se vio interrumpido por Abrax
--Ve a ver a Severus este fin de semana, me hare cago yo de los detalles faltantes
--¿Por qué?
--Solo hazlo
Lucius le había indicado la decisión del joven de mirada negra a su padre, preocupado porque el chico al que había comenzado a querer como un hermano le pasara algo como tortura o aun peor la muerte.
--Bien iré a verlo
Así se reunieron en ese fin de semana en su lugar secreto, ahí Tom vio que Severus estaba un poco intranquilo
--Pequeño ¿qué pasa?
--Nada—exclamo mientras respiraba profundamente—Me convertiré en mortifago
--Jajajajaja—comenzó a reírse—buena broma Severus
--No es una broma Tom, seré un mortifago
--No, no lo serás, no tienes madera para eso
--Claro que la tengo
--No, no la tienes, ahora dime ¿por qué vas a ser mortifago?
--Por qué deseo lo que me ofrecen, poder
--Tu no estas interesado en el poder—exclamo el joven--¿Cuál es la verdad Severus?—dijo tomando los hombros del chico
--Por qué es la única forma de estar a su lado Lord Voldemort
--¿De…desde cuando lo sabes?
--Desde agosto—dijo con la mirada baja—quiero…quiero darle mis conocimientos en pociones, en hechizos, daría mi vida por ti—exclamo mirándolo—por eso quiero ser mortifago
--No—exclamo separándose de el—no te aparezcas en la iniciación
--Por favor—dijo tomando su brazo—por favor déjame ser tu mortifago, déjame estar a tu lado de esa forma, te amo y solo así me veo a su lado
Ante esas palabras Tom se detuvo y sintió como la mano de Severus se aflojaba, volteo para ver que el chico en cuestión comenzaba a hincarse.
--No—exclamo mientras lo detenía—no debes hincarte ante nadie, ni siquiera ante mí, mi príncipe, mi pareja, nunca se hincara ante nadie
Después de aquellas palabras probo por fin los labios de su príncipe…
Aquel día la iniciación se daba, por lo regular iban pocos mortifago, pero esta vez el lord había pedido que todos estuvieran, después de haber marcado a los nuevos.
--Bien mis queridos mortifago, quiero presentarles a mi igual, mi querido esposo—exclamo el lord haciendo una señal para que el desconocido se acercara, ahí apreciaron a un hombre vestido con una túnica de color negra con borde de plata y oro y su rostro era cubierto por una máscara de color blanca con algunos detalles verdes—él es mi príncipe y deberá ser obedecido por ustedes, Lucius Malfoy, Regulus Black y Severus Snape serán sus guardianes”