Albus había decidido investigar sobre lo sucedido con los demás directores y libros que tenían, mientras que Minerva se preparaba para hablar con su casa.
Los leones estaban en su mesa, en espera de noticas, cuando la puerta se abrió dejando ver a un Minerva MacGonagall más vieja de lo que era realmente.
La mujer miro a todos los chicos, los de primer año sentados cerca de Harry Potter, los gemelos Weasley, Neville Longbottom y otros chicos que variaban de grado, ellos sentados de forma que quedaban cerca de la mesa de Ravenclaw, mientras que lo demás estaban del lado de la pared.
Sir Nicolás apareció y los gemidos de sorpresa no se hicieron esperar al ver al fantasma con colores opacos.
--Profesora ¿ya podemos regresar a la sala?—cuestiono un primer año que estaba pegado al joven Longbottom
--Si, pueden regresar, pero me temo que no se pudo arreglar la situación de la sala, el director está investigando la situación
Varias preguntas comenzaron a lanzarse, Minerva no sabía que decir, no tenía respuestas más allá a lo dicho por el fantasma, pero ¿Cómo explicarle a los niños aquello?
Más cuando ella tampoco lo entendía.
--Hay una leyenda—exclamo el fantasma al ver el silencio de la mujer—se dice que Godric lanzó una advertencia sobre la perdida de los valores de las casas, cuando eso sucediera se iniciaría lo que se dio a conocer como la purga, esto funcionaria con cualquier casa
--¿Por qué sucede Sir Nicolás?—cuestiono una chica de tercero
El fantasma le sonrió a la chica, era la única que le llamaba por su nombre y no por ese maldito apodo, y si estuviera vivo, estaba seguro que habría sentido calidez al verla del lado correcto
--Las casas al igual que el colegio tienen esencia de los fundadores, así que se podría decir que tienen conciencia, resulta que si dicha esencia no ve con buenos ojos a la casa, puedo bloquear, por decirlo de una forma, la magia de la casa afectando todo lo referente a la casa
--¿De quién es la culpa?—pregunto un chico que reconoció como MacLaggen
--De ustedes, de generaciones pasadas, de los jefes de casa, ellos son los culpables, nunca podrás culpar a otra casa de tus errores
Minerva se había encogido ante lo dicho por el fantasma, aunque no lo había dicho, él le culpaba de la situación actual, pero ella nunca fue mala, ella fue excelente jefa de casa
No fue así
No supo de donde vino la voz, pero el tono la hizo sentirse aún más mal de lo que ya se sentía.
--Por ahora deberán regresar a la sala, como dije el director ya está investigado
Todos aun con dudas regresaron a la fría sala
--No debe darle esperanzas a todos, no todos podrán recuperar el calor de la sala
--Mis chicos fueron elegidos por el sombrero, mismo que le perteneció a Godric Gryffindor esto
--No todos fueron valientes profesora—dijo el fantasma mirándole con tristeza—recuerdo a un grupo en especial, el cual tenía un cobarde entre ellos, he visto más valentía en una joven serpiente defendiéndose solo de cuatro bravucones, son pocos los que recuperar la buena voluntad de Godric
Minerva se quedó sola en el gran comedor, la referencia de los merodeadores muy presente en ella…
Lo sucedido en casa de Gryffindor fue de conocimiento general, a la hora de la cena debido a que todos los estandartes eran de tonos opacos o de plano eran negros con blancos. Eso sin contar que la propia mesa se veía claramente desgastada. Pero no sabían que había provocado la situación
Los profesores miraban a la líder de los leones en búsqueda de una respuesta al millón de preguntas que nacían, pero la mujer no contesto.
Tom no dijo nada, el simplemente se dedicó a disfrutar de su cena, Severus ya le había contado sobre la situación, el recordaba a la mujer como alguien digna, una estudiante que representaba todo lo que un Gryffindor debía ser, ella no debería perder el “calor de Godric”, mas su pensamiento tomo otro rumbo al recordar que ella había sido líder y subdirectora cuando su príncipe estaba en el castillo.
Ella permitió también el maltrato de las serpientes, con el ceño fruncido se preguntó si eso también debía afectarle.
Albus no sabía que pensar de la situación en la que se encontraba, había buscado la información en los libros y nada, no había obtenido nada que indicara la situación, además estaba la burla de Phineas Black, el sabía algo
Soy fiel al colegio y a mi familia, no a ti Dumbledore, si quieres respuesta a la situación busca en lo que has prohibido, pero te aseguro que nada cambiara la situación de los leones, prepárate para tu juicio
Un juicio ¿Quién se atrevería a realizarle un juicio?
Han pasado algunos días desde aquello, la predicción de Salazar se hizo real algunos de los primeros estaban recuperando el calor de la sala, era mínimo y no apreciado de forma correcta, pero ellos eran la esperanza de Godric.
Peeves se había encargado de esparcir el porqué de la situación de la casa de Gryffindor, por orden del barón quien a su había recibido la orden del propio fundador Godric
Así que los cuervos comenzaron a investigar, los tejones se unieron más y las serpientes, las serpientes siguieron como si nada, incluso dejaron de burlarse de los leones, lo que había tensado más a estos.
La situación en la sala común era muy tensa y las peleas con las serpientes les quietaban el estrés, habían esperado burlas e incluso comentarios hirientes sobre la situación, más lo único que habían obtenido por parte de las serpientes fue una fría indiferencia, lo que les molesto.
La situación también había salido ya de Hogwarts, todos los leones graduados e indignos habían visto con extrañeza como sus preciados objetos que representaban la casa del valor habían perdido su color, algunos los tiraron sin pensar en que era realmente lo que pasaba.
Minerva estaba cansada, había investigado y había encontrado una ligera anotación en un libro de la sección prohibida, solo era una notación simple, “cuando una casa pierda sus valores, perderá su calor, así la purga iniciara, eso fue dicho por Godric”, era todo lo que decía lo que había encontrado, no más.
Nunca espero que la casa hubiera perdido los valores, estos estaban en alto, había esperado algo así pero en otras casa, en la de Filius, pero no en la suya.
Cansada emocionalmente decidió irse a dormir, mañana buscaría otra solución.
No sabía por qué el elfo la había despertado, ni tampoco el por qué le había pedido que se vistiera con su mejor túnica, pero estaba nerviosa.
Durante el trayecto al gran comedor, sus nervios aumentaron, no había nadie.
Las armaduras le sorprendieron al abrirle la puerta del lugar y acompañarle, ahí supo que algo extraño estaba pasando.
El rostro de varios exalumnos estaban ahí, al igual que de algunos alumnos, estos estaban sentados en filas mientras ella caminaba al centro donde frete a ella, habían tres personajes más dos mujeres y hombre.
--Minerva MacGonagall, profesora de transformaciones, jefa de la casa de Gryffindor, subdirectora de Hogwarts, está aquí para iniciar su juicio