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Amor por nezalxuchitl

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Notas del fanfic:

Esta es una idea que se me ocurrio cuando iba a presentar mi examen de admisión. Estaba un poco sensible, y llovia sobre los bastos campos, y en el bus estaban pasando Warhorse, con Loki y... esta idea vino a mi. Y casi la perdi porque no tenia manera de escribir en el bus.

Pero hace unos dias la recupere y me gusto y aqui esta.

Notas del capitulo:

Come, confort me in you


youg love most


live twice only for us. - Come cover me, Nightwish 

Gruesos goterones escurrían por la aguja del pino; podía verlos a pesar de su mirada empañada. Gruesos goterones caían y el bosque estaba frío, húmedo, por la lluvia caída. Cada embestida de Jack lo hundía mas en el fango y no podía sino aferrarse a su calidez, a su firmeza, a lo único que le quedaba.

-Sam está muerta. – sollozó, pero Jack solo le contestó con un gruñido. O tal vez no fuera una respuesta en absoluto, sólo un gruñido debido a la actividad que estaba realizando. - ¡Muerta! – repitió, estrujando la chaqueta de su uniforme en sus manos.

Jack lo besó con pasión. Con más pasión que la primera vez, con más pasión que nunca. Dani luchó contra él. ¿Cómo podía, cómo podía? Pero pronto sus puños cerrados, golpeando, se convirtieron en puños cerrados, aferrando. Necesitaba a Jack, con locura, con insania; sobre él, protegiéndolo, rodeándolo, cubriéndolo con su amor.

Sus labios se separaron y el vaho de sus alientos fue visible en la fría penumbra del bosque, en aquel planeta a miles de años luz del que su amiga no regresaría.

Todo había sucedido tan rápido. Jack apenas tuvo un milisegundo para decidir qué vida salvar y eligió a Daniel. Por supuesto que a Daniel. Siempre a Daniel, por encima de su propia vida.

Pero dar la vida de un amigo por la persona que amas no era tan fácil. No lo era, maldita fuera, con el dolor y la culpa bullendo, quemando en su pecho: o le disparaba al jaffa que iba a dispararle a Carter desde la espalda o le disparaba al que iba a dispararle a Dani. Por más que movió rápido la ráfaga de su ametralladora fue demasiado tarde para Carter. La vio caer, con esos ojos abiertos y sorprendidos que había visto demasiadas veces en demasiados colegas. Ella aún no tocaba el suelo cuando la ráfaga de su ametralladora barrió al compañero del que ella había aniquilado, al frente. Daniel eliminó al último de la patrulla, no antes de que este le disparara a Jack. Jack lo vio venir y se tiró al suelo, disparando aun. Carter aun no acababa de caer, maldita fuera, estaba sobre sus rodillas y su ráfaga fue lo que finalmente la hizo dar con el rostro en el fango.

-¡Jack!

-¡¿Estas bien!?

Había verdadero pánico en sus dos voces.

-¡Jack, estás herido!

-No es nada. - apenas un rozón de la corona del disparo del arma báculo: había chamuscado su ropa y su antebrazo y escocia, pero nada más - ¿Estás bien? – repitió su pregunta asiéndolo por el brazo, asegurándose de que estaba en perfecto estado de salud.

-Sí, Jack. – tras las gafas, sus asustados ojos azules hacían el mismo reconocimiento - ¡Oh dios, Sam! – Dani se acercó a ella y le dio la vuelta – Creo que esta…

-¡Por supuesto que está muerta!  - gritó Jack. Si no por el arma báculo, por su propia maldita ráfaga de ametralladora - ¡Aléjate de ella!

Dani tenía los dedos sobre su inerte yugular. Menos mal que el fango había cubierto su cara, para que Daniel no la viera, no así, no traumándose.

Lo agarró con firmeza del brazo y lo arrastró entre los árboles. No sabía a donde ir, no creía que hubiera más peligro. Necesitaba alejarse de ahí, alejar a Daniel de ahí. El no había estimado realmente a Kowalsky; era la primera vez que veía caer a un compañero de armas, a un amigo.

-Jack, ¡Jack!

Daniel estaba llorando. Lo sabía a pesar de que la tormenta caía a cubetadas sobre ellos.

Lo abrazó.

-¡Jack!

Lo besó. Recorrió sus brazos con ardor, el arma homicida entre ellos. Daniel estaba bien, estaba vivo, estaba a salvo, tan a salvo, al menos, como él lo podía mantener.

-¡Jack!

Lloraba como un bebé. Más aun que cuando murió su esposa. Se echó el arma a la espalda (no podía soltarla; tenía que protegerlo) y lo abrazó. Su rubio cabello, apelmazado por la lluvia, bajo su mejilla. La calidez que vencía la inclemencia de los elementos de sus cuerpos al juntarse.

-Daniel.

Sus dedos hurgaban en su nuca con la mano sobre su espalda lo apretaba fuertemente contra su pecho.

-Pudiste haberla salvado.

-No sin dejarte morir a ti.

-Jack, no quiero vivir sabiendo que costé la vida a alguien más.

Jack agarró su rostro entre ambas manos, con fuerza.

-Escúchame, escúchame bien: tú estas vivo y ella muerta y nada va a cambiar eso. Nada. Tienes que seguir adelante, por ella, incluso.

Lloraba como un bebé.

-¿Cómo puedes vivir con esto?

-Es difícil.

-Es horrible.

-Te amo.

-¿Por qué no la salvaste a ella?

-¡Porque no la amo! – gritó por encima del trueno - ¡Porque te amo a ti, a ti y a ti! ¡Mil veces que eligiera salvar una vida te elegiría a ti!

-¡Para Jack! ¡Es horrible!

-¡Lo sé! ¡Pero te amo! Y me sacrificaría a mí mismo, sacrificaría a cualquiera, con tal de salvarte.

Daniel negaba con la cabeza y trataba de retroceder, pero él lo tenía bien sujeto. Lo besó con fiereza, y él gimoteaba. Lo tiró sobre el fango, bajo la lluvia, y comenzó a tomarlo, casi sin prepararlo, casi sin que consintiera, pero lo necesitaba tan desesperadamente.

Tan desesperadamente; devorando su boca, sintiendo su cuerpo, su calidez, su vida. Poseyéndolo de una manera que más bien lo hacía perderse dentro de Dani. Solo en él encontraba consuelo y refugio. Se le había entregado totalmente. Lo amaba más de lo que soñó que pudiera amarse, y Daniel le correspondía y era el sentimiento más maravilloso que hubiera.

Cada embestida empujaba más a Dani dentro del fango; cada embestida lo acercaba al lugar de perfecto alivio, donde no existía el dolor ni la culpa ni tan siquiera el amor. Al momento maravilloso en que un hombre existe solo para sí mismo, libre, totalmente libre.

Por primera vez se corrió sin tener idea de si Daniel había llegado.

 

Jack se quedó encima de él y se lo agradeció. Necesitaba tanto sentirse así, sentirlo así. Sobaba con ternura sus mangas empapadas, incluso sobre la herida. Le había hecho una nueva cicatriz a Jack, pensó mientras se la sobaba. ¿Le escocería? No le importaba. Estaba sobre él, a salvo, tan vivo. Si Jack tenía ánimo para follar, todo estaba bien. Lo abrazó, hundiendo su rostro en su cuello.

La tormenta había amainado; solo caían chispitas. Los arroyitos corrían casi extintos y el fango calaba hasta los huesos.

Todo era perfecto.

Hasta que Jack habló.

-El segundo en el que creí que morirías…

-Shhh…

-…me di cuenta que eres lo único que importa.

¿Esa que cayó sobre su mejilla era una lagrima? ¿De Jack?

-Shhh…

-¿Sabes? Aquí, ahora… todo lo que importa eres tú.

-Jack…

-Hemos sido tontos… pensando en si esto era gay, o ilícito… preocupándonos por cómo definir nuestra relación… enojándonos por cosas que no valían la pena…

-Jack…

-Realmente hemos hecho todo lo posible por arruinarlo y aún lo tenemos. – Jack se incorporó sin dejar de apretarlo para mirarlo a los ojos – Aún lo tenemos. Tú me salvaste y seré tuyo para siempre.

-Oh Jack – Dani se apretó contra su pecho. Había perdido la cuenta de cuantas veces Jack  lo había salvado.

Jack besó su sien, justo por encima de la pata de sus gafas.

-¿Sabes qué? No me importa si Carter muere o si la galaxia cae o si me echan del ejército. Solo me importas tú. Y es terrible, pero es verdad. Sólo me importas tú.

-No digas eso – Daniel abrazaba su cabeza.

-Es la verdad.

-No lo digas, porque tú eres lo único que me importa a mí. – lo obligó a mirarlo – No mueras por mí, porque te necesito vivo. Te necesito Jack.

Se besaron desesperadamente, renunciando finalmente a todo salvo a lo que sentían el uno por el otro. Un soldado no más; un estudioso no más. Sólo un par de enamorados que se ha dado cuenta que lo que tienen es lo más maravilloso, avasallante, perfecto, que puede existir. Que es infinitamente más raro que el oro y que en toda la historia de la humanidad solo se han producido unos cuantos casos.

 

***

 

Teal’c y el SG-13 reconocieron el planeta tan pronto como Teal’c regresó de Dakara. Una reunión con el alto consejo de los jaffa libres le había impedido ir con el resto del SG-1 al planeta. O’Neill dijo que irían sin él; el planeta se veía pacífico, aburrido, boscoso. Sin rastros de civilización hasta donde la sonda alcanzaba a escanear.

Pero el SG-1 no había vuelto a tiempo y el general Hammond envió al SG-13 en su busca cuando no respondieron a su llamado.

El coronel Dixon había encontrado los cadáveres de 5 jaffas de Ba’al y el de la mayor Carter. Pero no había rastro de el coronel O’Neill ni del doctor Jackson. Había llovido mucho, de hecho, briznaba mientras reconocían, y Dixon había sido incapaz de encontrar un rastro. El jaffa, mucho más adiestrado, encontró las huellas que se alejaban del lugar de la masacre.

Tal vez estaban heridos, pensó al notar el profundo hueco donde ambos debieron yacer.

-¿Qué opinas? – preguntó Dixon, hurgando en el hoyo con el cañón de su ametralladora.

-Creo que permanecieron aquí largo rato. Y luego subieron la colina en esta dirección.

El jaffa y el coronel subieron y bajaron del otro lado de la colina. Un arroyo serpenteaba del otro lado. El coronel Dixon lo cruzó, siguiendo el sendero más viable entre los árboles, pero Teal’c permaneció mirando algo que brillaba entre los guijarros del río.

Eran las chapas de identificación de O’Neill, colocadas cuidadosamente entre dos piedras. Y al lado estaba la pequeña grabadora digital de voz de Daniel Jackson.

Un dulce sentimiento de duelo embargo al jaffa y cerro los ojos, evocando en su recuerdo a sus amigos.

-Nada. – bufó Dixon – Solo árboles y lagos y árboles hasta donde la vista alcanza. ¿Tienes idea de que rayos ha pasado?

-Sin duda. – respondió el jaffa.

El coronel lo invitó a expresarse con un gesto bastante parecido al de O’Neill, pero Teal’c solo sonrió enigmático y dio media vuelta.

Dixon maldijo y avanzó tras él, de regreso a la puerta.

Sin duda sabía lo que había pasado ahí.

Amor.

 

 

 

Notas finales:

Creo que el hamor de verdad deberia ir con h, como lo ponen en la frikipedia, porque, entre otras cosas, compromete tu sentido del lenjuage.

Un hermoso fanart

http://i1026.photobucket.com/albums/y326/NezalXuchitl/DanielyJack_zps430be9a5.png

y una hermosa melodia

https://www.youtube.com/watch?v=5CTWdJr6oOQ

Por ultimo, si me permiten recomendarles algo tan escaso como el buen gusto, los buenos fics slash de Stargate, aqui una excelente autora, en ingles

http://www.area52hkh.net/author.php?name=The+Grrrl

Dare to breathe es hermoso y Laying Open fue premiado. Waiting for pie les hara el dia, garantizado.

Ahora si, kiitos!

Pd: por fin se me hara ver a Epica en vivo!


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