Para cuando Inuyasha llegó a su escuela, sus amigos ya lo esperaban paciente mente en la entrada de esta. Bueno no todos esperaban tan paciente mente.
-¡Hola Inu!- gritó una niña de cabellos negros, y hermosa sonrisa, al verlo desde lejos, el nombre de esa niña era Kagome. Mientras el resto de sus amigos a diferencia de kagome esperaron hasta que llegará hasta donde ellos para saludarlo.
-Hola chicos- dijo el pequeño Inuyasha, mientras hacia un gesto de saludo con su mano cuando finalmente llegó hasta donde ellos.
Después del saludo empezaron a hablar de cosas triviales. Bueno hasta que alguien los interrumpiera.
- ¡Hola enanos!- dijo un chico de cabellos negros, mientras sonreía. Su nombre era Miroku- ¿Que hacen aquí? Ya es hora de ir a clase.-
Una pequeña y sorprendida Zango, se giro notando solo a Miroku. La niña suspiro de alivio. - ah, eres solo tu.-
- ¿como que solo yo? ¡Respeta a los mayores, enana!- dijo un ofendido Miroku con muchas venas en su frente.
- ¿Como están chicos? - hablo el recién llegado, quien era nada mas y nada menos que koga.
- Hola Koga ¿oye? ¿Donde esta sesh y kikyo?- preguntó Miroku, rápidamente olvidándose por completo de Kagome, Inuyasha, y Zango.
-¿No té enterarte?- preguntó koga, a lo que Miroku negó con la cabeza. Inuayasha escuchaba atentamente a lo que aquellos dos amigos hablaban.
- pues parece que Sesshomaru finalmente aceptó ser el novio de la linda kykyo.- término contando koga.
-Escuchaste Kagome, tu hermana es la novia de Sheshumaru.- susurro emocionada zango quien al parecer también había estado escuchando la conversación de aquellos dos.
Inuyasha lo había escuchando, y algo adentro de el pareció romperse causándole dolor.
Así que mi hermano tiene una novia, pensó el pequeño con tristeza. Miroku fue el único en notar como Inuyasha se deprimía, y solo pudo brindarles unas palma ditas en el hombro para consolarlo.
En eso la campana sonó avisado la hora de la entrada.
-Se nos hace tarde, Inu, vamos- hablo kagome, antes que ella y el resto de los chicos empezaban a correr hasta sus respectivas clases. Miroku y koga a la secundaria y zango, kagome y Inuyasha al la primaria.
Al llegar a su aula, el pequeño Inuyasha se sentó en su asiento asignado. Rápidamente empezando prestar atención a la clase o es lo que quería aparentar. Él resto de la clase el pequeño no dijo si quiera una palabra, ni siquiera cuando sus amigos trataron de hablarle. Parecía como si Inuyasha estuviera en otro mundo. En la hora del almuerzo, el pequeño, comió silenciosa mente, y así continuó el ciclo hasta la hora de la salida.
Kagome había notado el comportamiento de su amigo en todo el día. Y se había preocupado por el, y un que este siempre la ignoraba cada vez que trataba de preguntar, estaba decidida a tratar de ayudarlo y saber que era lo que le preocupaba a su amigo.
-¿Inu?- llamó la niña, a su distraído amigo. Pero como lo esperaba este no le respondió.- ¿Inuyasha?- intento una vez más.
-¿Que?- respondió con fastidió Inuyasha al llamado de su amiga. Quien había interrumpido sus pensamientos.
-¿Que te pasa? As estado distraído todo el día ¿Té sientes mal?- preguntó la chica.
- No me pasa nada. - respondió seca mente a las preguntas.
La chica se quedó en silencio por un segundo, pensando que fue lo que pudo haber puesto a su amigo triste mente, y fue que recordó que tan triste se había puesto al enterarse de que Sesshomaru salía con su hermana.
-¿Acaso te molesta que mi hermana salga con tu hermano?- preguntó kagome.
-Claro que me molesta.- respondió el chico con enojo sin medir sus palabras. Kagome se sorprendió por las palabras y el tono de Inuyasha.
El chico se dio cuenta de lo que había dicho sin pensar, y rápidamente trato de corregirlo.
- ¡No!....¡Espera! Yo...yo..no quise decir eso....lo que quise decir era.. era que..que..- Inuyasha no quiso y no pudo continuar hablando, ya que si lo hacia le contaría a Kagome lo que sentían por su hermano.
Kagome sonrió. - ah, ya entiendo. Tu no quieres que Sesshomaru-sempai se aleje de ti.-
Inuyasha no supo que decir porque no entendía lo que su amiga trataba de decir.
-Escucha, Inu, tu hermano no dejara de quererte aunque salga con mi hermana.- comentó Kagome.
En ese instante los ojos de Imuyasha parecieron iluminar se con felicidad y esperanza.
-vámonos chicos, o se nos hará tarde.- aviso Zango, mientras pasaba por su lado, segundos después los tres amigos se dirijan a sus respectivas casas.
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Inuyasha se encontraba jugando en su habitación cuando escucho la voz de su hermano, avisar que ya había llegado, para después escuchar como este último se encerraba en su habitación.
Inuyasha sonrió, antes de pararse y sin pensarlo dos veces se dirijo a la habitación de su hermano mayor. Al llegar a la puerta la miro por unos momentos antes de tocar la puerta. Después de unos segundos se escuchó un: "Pase" del otro lado. Inuyasha abrió la puerta cerrando la después de entrar.
-¿Que se te ofrece?-
Sesshomaru se encontraba sentado en su escritorio unos libros y cuadernos a su lado. El pequeño se sentó en su cama. Pensando unos segundo en como decirle a su hermano lo que quería decirle. Finalmente se decidió por la forma directa y rápida.
- Hermano... te quiero, mucho.- soltó el pequeño con sus mejillas tornándose un color rojo que lo hacia ver totalmente adorable.
Todo movimiento que Sesshomaru estuvo haciendo se detuvo de momento. Sesshomaru estaba mas que sorprendido por las palabras de su hermanito.
-yo te amo.- confesó Inuyasha con vergüenza, el rojo de sus mejillas incrementando.
Sesshomaru solo se limitó en girar su asiento, miraba a su pequeño y avergonzado hermano detenidamente como si tratara de descifrar un mapa. El ambiente se volvió tenso.
- Inuyasha- dijo Sesshomaru rompiendo el silencio que se había formado.- no digas esas palabras en vano, si no sabes la diferencia entre el amor y el querer.- término el hermano mayor con frialdad en su voz.
-¿Cual es la diferencia?- preguntó Inuyasha totalmente confundido por lo que había dicho su niisan.
Continuara....