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¿Que clase de persona se cree que es ese tal Choi? Se preguntaba una y otra vez Ji Yong. Por otra parte la liga Kentucky no estaba tan molesta con Ji por haber perdido, al contrario estaban felices porque Ji jugó contra el mejor de Corea, ya que eso le daba más prestigio a la liga. Así que, en agradecimiento, dejaron a su jinete descansar y disfrutar los lugares turísticos de Corea.
Sea como sea esa persona, Ji no era tonto y supo que lo que sintió al momento de hablar con Seung fue atracción e iba a investigar cual de las tres personalidades que demostró el "joven Choi" es la honesta, a menos que, Seung sufra del síndrome de personalidad múltiple, pero eso no es seguro.
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Decidido el joven Ji Yong fue al encuentro del jinete, y preguntando a más de una persona, le dijeron, la ubicación de Seung, en el mejor establo de la ciudad. Después de pedir permiso al señor Lee de entrar al establo, entro sigilosamente para hablar con Seung, pero al acercarse escucho una plática algo...extraña.
-Kelly voy a salir...mnh... ¿no? bueno, está bien me quedo... ¿sabes? Me siento culpable de que no puedas caminar, pero, si no es contigo no puedo hacerlo...tu, eres única para mi, así que, realmente lamento mucho el que ya no puedas caminar, mucho menos correr, no me imagino tu dolor...pero, lo más seguro para ti es que estés así durante una semana no mas, no fue tan duro ¿o sí? ...mejor salgo...vendré a verte y, prometo no hacer nada hasta que puedas andar...-toda esta plática estuvo completamente interrumpida por gemidos.
El rubio no podía creer lo que oía, acaso... ¿acaso Seung dejo invalida a una mujer? ¿Que clase de bestia (literal) dejaba invalida a una mujer? Con todo el nerviosismo del mundo trato de salir de ese lugar pero por más que buscaba no encontraba la salida, el nerviosismo lo tenia así, nunca debió escuchar eso... ¿o sí?
Sin saber a dónde ir corrió como si en lugar de Seung se tratara de un asesino en serie, sin embargo la presa corrió hacia su atacante…
-¡¡Au!!-se escucho un quejido cuando Ji Yong choco contra algo…mas bien, alguien.
-¡Oh! P…per…perdón. Yo ya me iba.
-¿Por qué tienes esa cara de espanto? ¿Estas bien?
-Si, yo solo…yo solo busco la salida.
-A está hacia allá-dijo el más alto apuntando con la mano hacia la derecha.
-Gracias- y en el momento en el que Ji avanzo hacia la salida fue apresado de su brazo, ya podía oler la libertad ahí pero lo detuvieron.
-¿Qué hacías aquí?
-Yo…yo solo pasaba.
-¿En serio? Yo creo que me estas mintiendo-A Seung parecía agradarle y divertirle el que Ji Yong se pusiera nervioso con su presencia, porque eso era ¿no?
-Venía a hablar contigo, pero…
-¿Pero que?
-Pero estabas en intimi…-no término de hablar porque vio detrás de Seung a una hermosa yegua y pensó lo peor.
– ¿Mi intimidad? Pero si yo solo estaba con mi yegua.
–Si pero…-Seung al notar que Ji estaba nervioso supo de los pensamientos pervertidos de él.
– ¿Pero que?
–Yo…
–Pensaste que…lo hice con Kelly ¿No?-Dijo mientras caminaba hacia el arrinconándolo de a poco contra la pared
–Yo…
– ¿Tu que? Yonguie- El rubio se asusto nunca nadie le había llamado así y el hecho de que un depravado que había tenido relaciones con una yegua no le emocionaba mucho.
–Y…y-o creo que tú eres un pervertido
– ¿Yo? T fuste el que escuchaste Yonguie, y tú fuiste el que imaginaste.
–Entonces…no lo hiciste con la yegua ¿Verdad?
–mmmm…veamos, tal vez y si ¿Cómo piensas que lo hice?
– ¿eh?- fue el único sonido que salió de su boca, Seung lo tenía acorralado entre la pared y él, aparte del aroma y voz de Seung, tenían fuera de su mente a Ji y esas preguntitas no ayudaban.
– ¿Cómo piensas que lo hice con la yegua Yonguie?...la toque así despacio, suavemente… ¿Así o te gusta rudo?- todo eso lo decía mientras tocaba por encima del pantalón el miembro de Ji que solo podía negar con la cabeza y apretar los labios para que ningún sonido saliera de ellos, disfrutaba en gran manera el toque de Seung en el, ya que con el mas mínimo toque sentía desvanecerse.
–mnh- fue lo único que salió de sus labios por la tortura que le daba Seung, y este gemido fue la luz verde para Seung quien tratando de no asustarlo suavemente empezó a acariciar su torso por debajo de su camisa, explorando con sus dedos la suave piel del mas bajo no dejando ni un centímetro sin recorrer hasta que encontró lo que estaba buscando, tomo el pezón de Ji entre sus dedos y empezó a frotarlo con ellos.
La tortura y el placer de Ji eran demasiadas que se retorcía de placer.
–¿Te gusta Yonguie?-pregunto T.O.P chocando su aliento con el aliento de Ji, a lo que este solo asintió con su cabeza y buscaba con sus ojos los ojos de Seung, ambos tenían los ojos obscuros por el deseo pero Seung pudo ver una pizca de miedo en los ojos ajenos.–vamos a parar aquí.- dijo Seung, soltando su agarre de Ji –no quiero asustarte- ya con ambas manos libres, dijo esto mientras acariciaba el cabello rubio y el rostro de Ji –No quiero que me tengas miedo- susurro esto último mientras se alejaba lentamente de Ji.
–No…no te tengo miedo, si tuviera miedo hubiera corrido mientras me decías que lo hiciste con esa yegua pero algo me detuvo-confeso mientras se aferraba de la camisa de Seung como si de eso dependiera su vida.
– ¿Aun crees que lo hice con la yegua? ¿Tan pervertido me veo?
–Tú…me confundes
–Por eso es mejor que lo paremos aquí para que (interrumpido)
– ¡No! yo quiero terminar esto.
– ¿Seguro?
–Si es contigo si quiero.
No era necesario nada mas, Seung lo tomo de la mano y lo guio hacia una cabaña cerca el establo, ahí el se quedaba a dormir para estar más libre de la presión de la casa y para estar más cerca de Kelly. Llegaron a la recamara y lo primero que hizo fue recostar a Ji sobre la cama mientras lo besaba, era un beso necesitado, ambos lo querían, lo necesitaban, sus bocas estaban a la medida exacta como hechas solo para ellos y eso hacía que el beso fuera tan delicioso para ellos. Cuando se separaron del beso por la falta de oxigeno buscaron automáticamente los ojos ajenos ya que los ojos de Choi, siempre fríos y altaneros, Ji los veía llenos de cariño, y los ojos retadores color avellana de Ji, Seung solo los veía como un cielo de avellanas, pero Seung volvió a notar algo en los ojos de Ji, eran pequeñas gotas queriendo salir de sus ojos amenazando con empezar un sin número de lagrimas más.
– ¿Qué pasa Ji? ¿Por qué lloras?- se podía notar la preocupación en su voz.
–Me…me duele
– ¿Qué te duele?- ¿Lo había lastimado? Con un beso no pudo ¿o sí?
–Me duele aquí-dijo señalando su miembro que se veía dolorosamente apretado en el pantalón, Seung entendió que Ji estaba muy excitado y necesitaba ayuda.
– ¿Aquí?- dijo tocando solo con la punta del dedo la erección ajena.
–Mnh…si ahí
–Bueno, vamos a quitarte el dolor Ji.
Seung bajo su rostro por todo el cuerpo de Ji, aun con ropa, pero eso no le durara mucho. Llego hasta el miembro de Ji y desabrocho el pantalón, pensaba excitarlo aun más lambiendo por sobre la ropa interior pero giro la cabeza para ver a Ji y se notaba que estaba sufriendo ¿Cómo puede ser tan lindo aun en esa situación? Bajo todo de un jalón y ante él, el miembro completamente erecto de Ji, jamás pensó que en su vida haría esto, de hecho el toda la vida se considero hetero, pero…pero con Ji las cosas son diferentes. Tomo con su mano el miembro de Ji y empezó a presionarlo con ella, mientras que la otra mano tocaba los testículos de Ji, este no cabía de placer con ese simple tacto y casi se muere de placer cuando empieza a lamber su miembro mientras que con su mano daba toques entre el ano y los testículos, haciéndolo gritar maldiciones en ingles. Ya sabía que su gusto no le iba a durar mucho pues estaba soltando su liquido pre seminal cuando de pronto Seung se lo lleva hacia la boca, chupando y succionando el miembro de Ji como si un hubiera un mañana, jugaba con el glande de Ji con sus dientes haciendo que Ji viera las merititas estrellas cuando de pronto soltó su semilla en la boca de Seung quien no lo trago todo porque le daría otro uso. Ji aun tenía la vista nublada de aquella felación que había recibido, no era consciente de su mundo hasta que sintió algo en su parte trasera. Cuando pudo al fin ver con claridad noto que Seung estaba muy entretenido viéndole el rostro, pero lo miraba con una ternura infinita, bajo más su mirada y vio que Seung ya tenía tres dedos dentro de el, estaban cubiertos con semen y supuso que era su semen ya que Seung todavía tenía ropa.
–E-espera –al parecer no se había recuperado por completo del orgasmo.
– ¿Que pasa?- Pregunto extrañado Seung- ¿Te duele?
–No, solo que…aun tenemos ropa.
–Oh es cierto…déjame ver tu piel.
Esto último hizo sonrojar a Ji, pero igual lo hizo, con Seung se sentía seguro, sabía que nada malo le podía pasar con él.
El abdomen de Ji estaba marcado, no tan exagerado como muchos pero era perfecto, un poco más y era exagerado un poco menos y estaría solo plano, el era perfecto a los ojos de Seung y su piel blanca que lo incitaba a dejarle marcas por todos lados para que sepan que le pertenece ahora a Choi Seung Hyun, pero de eso se encargaría después. Era el turno de Ji de observar a Seung que ha pasado mucho tiempo observándolo con la mirada, si no fuera porque está desnudo juraría que Seung lo desvestía con la mirada.
Cuando Seung quedo sin ropa Ji pudo afirmar su teoría, tremendos cuadros que tenia marcados ¿Cómo no iba a confundir ese torso tan firme como una roca con un muro? El rostro de Seung completamente perfecto todo a la perfección. Ambos perfectos a la vista del otro, como hechos a su gusto.
El miembro de Seung tanteaba la entrada de Ji, no era para desesperar a Ji, al contrario no estaba seguro si le dolería o no y esa era su preocupación.
–Seung…
– ¿Si?
–Métemela.
Ji entendió que lo que le preocupaba a Seung era si él sentía dolor pero con eso lo tranquilizaba, entro de una de lleno contra la próstata de Ji que de nuevo juraba ver estrellas.
–Ahh…Ahh…Ahh…ahí Seung ahí
–Mnh… ¿Aquí?
–Si si ¡SI! Ahí…Ahh Ahh
–Ahh…Yonguie eres tan estrecho.
–Seung más rápido, más rápido.
–Tú lo pediste.
Y automáticamente empezó las embestidas como un poseso, no puedo decir cuántas posiciones hicieron…perdí la cuenta, solo sé que ambos parecían uno solo, dándose todo el amor que tienen demostrándoselo preocupándose el uno por el otro en esta actividad en donde los dos reciben placer puro.
–Ahh…Ahh…Ahhh… ¡Seung!
–Ahhh… ¡Yonguie!
Ambos terminaron gritando el nombre del otro. Seung salió cuidadosamente de Ji y lo cubrió con una sabana. No supieron cuando pero ambos terminaron abrazándose con miedo a que el otro se fuera.
–Seung ¿Si lo hiciste con la yegua?
–Jaja No.
–Seung ¿Por qué no me buscaste al acabar la carrera?
–Si te busque, pero te trate mal en la carrera…tenia vergüenza.
–Seung ¿Quién era al que abrasaste? ¿Yo solo soy el amante?
–Ji, si eres mi amante, pero eres el único, el era mi hermano.
–Pues no parecían, lo abrasaste y le dijiste algo ¿Qué le dijiste?
–Que Kelly está enferma, y que no podrá correr otra vez.
–Seung
– ¿Si?
–Me quiero quedar contigo para siempre…no me quiero ir.
–No pensaba dejarte ir.
– ¿En serio?
–Si.
–Seung…Te amo.
De pronto Seung soltó el abrazo y se puso sobre Ji
–Yo te amo mas- y dicho eso lo beso.