-Lo extrañabas, lo sé.- reí levemente levantándome de la cama, el baño sigue estando dentro de aquí así que no caminé mucho, sólo tomé la perilla de la puerta me detuve. –No me abroché los tenis.- susurré sorprendido, volteé a ver a Minho, le sonreí, luego me agaché manteniendo el ángulo de noventa grados, dejando que mirara un poco más mi cuerpo.
-Es.- susurró cuando me erguí. –Eres.-
-¿Un adolescente hormonado?- entré al baño. –Quizá.- reí. Al salir del baño Minho estaba recostado en la cama, así que caminé hacia él, tomé su mano haciendo que me mirara.
-¿Ya todo está bien?- asentí lento, pero tiré de su mano haciendo que se levantara.
-Tenemos una escena del Titanic que me prometiste.- Minho asintió y se terminó de levantar de la cama, le pasé su chaqueta para que no tuviera frio y luego salimos del camarote. –Y aun hay algo que quiero decirte. Es sobre Niel.-
-¿Es algo bueno?- preguntó mientras llagábamos a la barandilla de protección, me recargué y al mirar hacia el mar me acordé de la Sirena.
-Es relativo.- contesté riendo, tomando su mano para que se acercara más. –¿Te da vértigo?- puede que por eso esté guardando distancia.
-No, ya he estado cerca con Key.- blablá. –¿Cómo era en el Titanic?- preguntó, tomé sus dos manos y lo jalé hasta que chocó contra mi cuerpo, reí por eso. –¿Así era?- preguntó mientras acomodaba sus manos en mi cadera.
-Así me gusta más.- susurré recargando mi cabeza en su hombro. –Lo que te voy a contar pasó cuando fui a Jeju con Donghyun hyung.- susurré mirando el mar, las estrellas comenzaban a reflejarse en él.
-¿Qué pasó?- escuché su voz y su aliento en mi cabello.
-Recuerdo haber estado en la playa, jugando en las olas con los chicos. Hyung nos había pedido que no nos metiéramos al mar porque sería peligroso. Pero cada paso que daba el agua se tornaba más caliente, así que seguía caminando, adentrándome un poco más cada vez.- suspiré recordando el agua caliente y la arena bajo mis pies.
-¿Y qué pasó?
-Niel fue conmigo, Kai luego me confesó que él le pidió que fuera por mí, tenía miedo a que algo pasara y sabía que Niel era lo suficientemente fuerte y grande para traerme de regreso. “Abusé un poco de tus sentimientos por Niel con la esperanza de que no siguieras caminando hacia el fondo marino”.- por eso fue él quien tomó mi mano y Jeongmin, KwangMin y Kai quienes se quedaron en la costa.
-Vaya.-
-Luego Kai comenzó a gritar “ola, ola” y Niel y yo los volteamos a ver también los saludamos, luego recuerdo un golpe violento y cuando desperté estaba en la arena con Niel.- Niel lloraba, Niel no llora.
-Fue lo que dijiste en la cena.- asentí lentamente.
-Cuando me senté le pregunté si estaba bien y dijo “te estabas muriendo ¿y me preguntas que si estoy bien?” parecía molesto.-
-Yo también me molestaría.- negué lentamente.
-Niel… lo conozco desde hace tiempo y nunca lo había visto tan… vulnerable.- parecía que también tenía un corazón, uno frágil por cierto. –Me dijo que estaba celoso, pero no de ti, sino de YoungMin, “¿por qué si ambos te lastimamos eres más su amigo que el mío?” le dije que era porque él no se lo permitía. Le dije “ellos me pidieron perdón y yo los he perdonado”.- sonreí nostálgico, las estrellas en el mar se movían por las ondas del crucero.
-Eso fue tierno.- sentí uno de sus besitos en mi cabello.
-Yo sé que te molesta cuando hablo de él, incluso ahora mismo, estás hermético y levemente molesto. Lo sé porque te conozco, te siento y escuchó tu respiración.- reí nervioso y asustado. –Pero sé que lo habías manejado hasta donde yo lo he permitido.-
-Me molesta porque te lastimó bastante pero parece que sólo ignoras la herida.- quizá no sólo la evadía, sino que yo mismo la abría.
-Le conté cuando me recogiste de la Casa de la Cultura, me llevaste a comprar ropa y a los videojuegos, luego Carta Mágica.- susurré. –Y le conté que te había dicho que no porque él me había llamado.- escuché que la respiración de Minho se entrecortó, se está molestando bastante. –Le dije que te negué porque aun lo amaba.- volteé a ver a Minho a los ojos. –Yo aun amaba a Niel.-
-Una vez, tu mamá me dijo “Taemin sólo ha amado a una persona” creí que esa persona no era yo y no estaba en lo incorrecto.-
-Niel me preguntó “¿En verdad me amabas?” le contesté “con locura” entonces él dijo “perdóname”.- suspiré al ver que sus cejas se alzaron, luego volví a mirar hacia el mar. –Le conté que cuando terminó la cena me llevaste a casa, hiciste que bajara el auto y sólo te marchaste. Tú estabas llorando y eso me asustó, podrías tener un accidente y eso no me lo perdonaría.- negué lento, sentí un par de lagrimas caer por mis mejillas.
Sorbí mi nariz y tallé mis ojos.
-Corrí tras tu auto pero eras muy rápido. Regresé a mi casa, me quité la ropa que me compraste porque no la merecía. Mis papás se despertaron y me decían que era muy tarde para volver a salir, pero en mi cabeza sólo estabas tú. Cuando llegué a tu casa las luces estaban apagadas, subí por tu ventana y entré a tu habitación.- susurré pero fue inevitable reír ligeramente.
-¿Entraste a mi habitación?- asentí y lo volteé a ver, sentí que mi cabello se friccionó contra su pecho.