-No, dile a Joe que le compre algo a tu chica también.- Minsoo se lo arrebató para irse hacia su habitación. –Gracias chicos, son los mejores.-
-¿Me comprarías algo también?- preguntó Changjo sirviéndose también un vaso con leche, ya es algo tarde.
-Claro.- contestó Joe un tanto sarcástico. –Sólo dime qué le gustaría y te lo conseguiré.- L. Joe entró a la cocina pero antes de que pudiera defender mi vaso con leche él ya lo tenía en sus manos.
-Gracias, iré a ver qué.- Changjo tomó una banana y se fue hacia su habitación.
-¿En serio le vas a comprar algo?- pregunté sentándome en mi silla del comedor.
-¿Por qué no?- preguntó Joe tomando una banana también. –Es la primera novia de Changjo y está bien apoyarlo.-
-¿Crees que ellos duren algo?- pregunté levantándome de mi silla para ir por un vaso más, pero antes de siquiera completarlo Joe me lo regresó.
-No lo sé.- se levantó de su silla y caminó hacia atrás de mí, supongo que va al refrigerador.
-¿Te digo una cosa?- pregunté riendo.
-Dime.-
-No hay forma masculina de comer una banana.- lo miré sonriendo.
Joe también me sonrió, acercó la banana a su boca, sonreí algo excitado pero ¡se me bajó cuando la mordió! Arrancó un trozo de la banana, la que mascó y escupió en el fregadero.
-¿A qué no hay forma masculina de comer una banana?- me preguntó regresando a la mesa.
-No.- contesté riendo, juntando mis rodillas algo nervioso. –Porque no la comiste, sólo la mordiste y escupiste.-
-¡Chicos!- ambos volteamos hacia la puerta principal, entró primero el perro y luego Ricky. –Chicos, ¿qué creen?-
-¿Qué cosa?- pregunté saliendo de la cocina seguido de L. Joe.
-¡Viene el tío de Niel subiendo las escaleras!- no entiendo por qué todos se asustan, es sólo mi tío Andy.
-¿Cómo supiste?- preguntó Minsoo en el pasillo de la biblioteca.
-Iba a tomar el elevador pero a Thunder le da vértigo, así que tomé las escaleras, y mientras veníamos vi al tío Andy.- cerró la puerta incluso con el seguro, eso me ofendió.
-¿Qué hay de malo con mi familia?- pregunté, porque cuando vino mi mamá también se pusieron así.
-Nada.- contestó Minsoo.
-Es muy bonis que venga tu familia a visitarnos.- esta vez fue L. Joe, así que afilé mi mirada.
-Creemos que toda tu familia está un poco loca.- ¡Ah! Eso sí lo creo. –A Yui le gustaría esto.- Changjo se acercó a nosotros.
-¿Dónde está Chunji?- caminé hacia Minsoo, tenía un libro en sus manos y si quiero ser alguien más culto, debería de robar sus libros para leerlos.
-¿A penas te das cuenta?- pregunté leyendo la portada del libro. –No está desde la mañana.-
-¿Y a dónde se fue?- me miró y notó que estaba leyéndolo, así que lo cerró para entregármelo. –Aun no lo termino de leer.- me sonrió y dejó el libro en mis manos luego se fue. –¿Creen que haya venido con nosotros?- preguntó CAP, me encogí de hombros pero el ding hizo que todos se callaran.
-Changjo.- susurró Minsoo, Changjo asintió y caminó hacia la puerta. Los miré, Joe intentaba parecer normal sirviéndose café, Minsoo estaba a un lado de Changjo y éste abrió por completo.
-Hola.-
-¡Tío Andy!- me levanté del sofá, dejé el libro de CAP en el suelo porque se me cayó, pero corrí hacia mi tío para saludarlo.
-¿Cómo han estado, chicos?-
-¿Nosotros?- preguntó Minsoo. –Bien, ¿usted?- Changjo cerró la puerta tras de Andy y nos condujo hasta la mesa del comedor. Alcé una ceja extrañado cuando L. Joe le sirvió la taza de café a mi tío.
-Bueno, vamos, he estado bien.- contestó mi tío tomando la taza de café. –¿Han visto a mi chico? Hoy presentó una canción diferente.-
-Escuché algo sobre eso.- dijo Ricky entrando también a la cocina. –Pero eso lo hizo más famoso, ¿no es así?- todos miramos a mi tío.
-Hasta cierto punto.- contestó bajando la taza a la mesa. –La gente siempre dirá cosas buenas y malas, y en esas dos, está mi chico.-
…
-¿Y eso?- pregunté subiendo mi pantalón de pijama.
-¿Eso qué?- preguntó Joe leyendo el libro de Minsoo, además de mi plan de ser alguien más culto, es que Joe me dijo que últimamente Minsoo está comprando muchos libros interesantes y que si le podía traficar algunos estaría bien.
-¿Crees que no vi que le serviste café a mi tío?- pregunté abriendo la cobija para meterme a la cama.