Volví a sentarme en su pelvis pero ahora dándole la espalda. Kris flexionó sus rodillas así que en ella me recargué. Comencé de nuevo con un vaivén que él continuó, haciendo embestidas rápidas y certeras, dándome justo en mi próstata.
Eché la cabeza hacia atrás, su semen lubricó bastante bien, su glande llega aun más adentro y siento que estoy enloqueciendo.
-Espera.- detuve mi cadera y él su pelvis. Me acomodé mejor, inclinándome hacia la cama poniéndome a cuatro para Yifan, que no había salido de mi cuerpo, sus manos fueron a mi cadera para seguir embistiéndome por alguna razón ahora las sentía más fuertes y profundas.
-¡Ah~! ¡Ah! ¡Ah~! ¡Yifan~!-
Veía el movimiento de la cama y oía el golpeteo de sus testículos contra mí.
-Ah~ BumKey~- sentí que sus manos se aferraron a mi cadera e hicieron que elevará mis piernas, basándome en las plantas de mis pies. Seguía embistiéndome e incluso en una embestida hizo que me levantara de la cama.
Estaba parado sólo sosteniéndome de las manos de Yifan que estaban en mi cadera, sintiendo como me embestía más rápido y profundo.
Entonces toqué el cielo.
Nos quedamos inmóviles, sentí mi miembro disparar un poco de más semen y el de Yifan inundándome de nuevo, noté la lucecita roja frente a nosotros, en mi tocador, cerré los ojos y sentía un par de lágrimas caer.
Pasé saliva, Yifan salió de mi cuerpo sintiendo su semen escurrir de nuevo por mis muslos, no tenía fuerzas en las piernas así que sólo me dejé caer de rodillas en mi cama, mi pecho se movía aun rápido igual que los latidos de mi corazón.
Sentí que Kris también se acostó en la cama, pasé saliva de nuevo y abrí mis piernas mirándolo.
-Aun no terminamos.- susurré sonriendo, Yifan negó riendo pero igual se posó entre mis piernas, direccionó su glande a mi entrada y volvió a penetrarme. Pasé mis brazos por su cuello para aferrarme a él.
Sus embestidas eran más lentas, o era porque estaba cansado.
-No me dejes.- susurré dejando de sentir mis piernas. –Ni me olvides… Jonghyun.-
…
Fruncí el entrecejo, ¿qué pasó? Suspiré mientras estiraba mis piernas y brazos, diablos, está húmeda la cobija.
Me senté en la cama y tallé mis ojos.
-¿Cómo estás?- ¿qué cosa? Volteé hacia mi derecha, ahí estaba Yifan.
-Oh.- ¿dormimos juntos? ¿Qué hora es? –Bien, ¿tú cómo estás?- despeiné mi cabello.
-¿Aun lo amas?- susurró mirándome, alcé una ceja.
-¿A quién? ¿De qué hablas?- me destapé con la cobija, noté que tenía puesto mis bóxer.
-De él.- susurró Yifan. –Del chico que hablaste en la primera cita.-
-Oh.- Jonghyun. –¿Por qué?- me levanté para ir por mi pantalón o meterme a bañar.
-Si aun lo amas tienes que hacer algo al respecto.- negué riendo levemente.
-Él…- sentí un nudo en mi garganta. –Yo a él ya no le importo.- susurré bajando la mirada.
-Pero si la mitad te un corazón aun late…-
-No quiero analogías.- susurré molesto subiéndome el pantalón.
-Yo puedo estar contigo, iríamos a comer a cenar, en mi trabajo, hacer nuestros pasamientos pero sabes que no lo disfrutarías como con él.-
-Escúchame.- me giré para mirarlo. –Él dijo que daría la vuelta a la página y comenzaría un nuevo capítulo con alguien más.-
-¿Y tú quieres darle la vuelta a la hoja?- preguntó mirándome. –De alguna manera, los dos sabemos que…-
-Déjame pensar un momento.- susurré para no escucharlo decir lo que no quiero oír. –Bésame una última vez.- sonreí acercándome a él. –Y luego pensaré con claridad.- tomé sus mejillas y sentí de nuevo sus labios.
End Pov’s Key
Pov’s Minho
Suspiré cuando bajé del auto de la mamá de Taemin para ayudarle a bajar la maleta.
-Se ve que tienes sueño.- asentí agarrando la maleta. –Vamos a llevarte a casa.- iba detrás de la mamá de Taemin, abrió la puerta de su casa y la dejé recién en la entrada, luego regresé al auto para bajar a Taemin.
Que se quedó completamente dormido a los minutos de entrar al auto.
-No se preocupe, cuando llegue a mi casa seguro dormiré.- me siento muy casando también.
Le quité el cinturón de seguridad a Taemin, lo cargué en mis brazos y así pude sacarlo del auto.
-Gracias hijo, eres muy amable.- miré a la mamá de Taemin pero negué sonriendo.
-Lo hago con mucho gusto.- contesté cuidando de no despertar a Taemin. –Lo llevaré hasta su habitación.- entré a su casa, se sintió bien hacerlo, es como “estamos de regreso”.